Que noche

Me encontraba sentado en sala donde vivó, con la que ahora es mi pareja, nos encontrábamos viendo uno de esos programas en los que la gente "común" va arreglar sus problemas de índole familiar, cuando se dejó escuchar el sonido que anunciaba una llamada, acto seguido mi pareja corre a contestar pero afortunadamente era para mi, esa llamada me cambio la vida, era mi gran amigo Rodrigo, desde hace 10 años y para todo problema estábamos juntos.

Rodrigo es un chavo que nunca entenderá que las mujeres no solo son un objeto sexual en el cual puedes satisfacer hasta tus sueños más bizarros, les decía conteste la llamada que mas que para saludarme era para invitarme a una de sus ya muy conocidas fiestas, donde se podía hacer de todo con quien se te antojara, pero yo como todo buen hombre de casa me hice del rogar hasta que fue tanta su insistencia que cedí a sus peticiones con la condición de que no existiera tanta lujuria ya que estaba dispuesto a llevar a mi pareja, a lo cual accedió sin prometerme nada.

Después de tanto pedirle a mi pareja que me acompañara para así poder salir temprano de dicho compromiso me dijo que fuera solo ya que era mi mejor amigo y era mejor darle tiempo a el que ella que la tenia a diario. Ya muy resignado a tener una gran resaca al día siguiente me fui a ver que me esperaba para esta noche.

Llegando a la puerta se escuchaba en tremendo relajo con el cual supuse que ya tenia tiempo de haber empezado la fiesta así que entre ya que la puerta estaba abierta, al entrar salio mi gran amigo que enseguida me presento a unas amigas que según el había conocido en una convención de no se que tema a si que yo hice lo propio y comencé a conversar con ellas de diversos temas, uno de esos temas por supuesto fue el de si teníamos a alguien a quien demostrar nuestro amor, así que yo sin mas dije que si, no se en que tono lo habré dicho ya que ellas comenzaron a reír de una forma maliciosa.

Ya entrada la madrugada y con algunas copas encima, no pude disimular ya la lujuria que había entrado en mi ya que Lorena y Jazmín llevaban puesta una falda, no muy larga y no muy corta, que dejaba ver cada que ellas se daban la vuelta una gran parte de sus muy bien formados glúteos ellas al ver que las miraba se agacharon y dieron la vuelta para ver mi reacción que no fue si no la de darles una gran ovación, yo ya estaba cada vez mas ansiado por probar a cada una de mis nuevas amigas a si que sin mas les tendí la mano y les dije que si no querían acompañarme a un lugar más tranquilo para poder conversar a l cual accedieron sin pensar.

Saliendo de la casa de mi amigo subimos al carro y fuimos a un hotel digno de cualquier mujer que le guste la buena vida, entrando a la habitación Lorena se dejo caer en la cama como si hubiera estado muerta, mientras Jazmín y yo nos quedamos en el sofá que antecedía a dicha cama, mientras nos decíamos cosas en extremo sexuales ella comenzó a desabotonarse la blusa y dejo ver unos senos muy bien formados dignos de hacer con ellos lo que me diera en gana en ese momento, yo al ver eso me le deje ir encima besándole todo el cuerpo desde se muy suave boca hasta sus bien arreglados pies, de pronto escuche como se levantaba esta Lorena y en lugar de retirarse se acerco de tal forma que mi pene en ese momento ya se encontraba al punto de meterse en cualquier lado.

Estando sentado en el sofá Jazmín se levanto y le cedió el lugar a Lorena que sin mas se sentó sobre mi mientras Jazmín me tomaba del cabello y me besaba de tal forma que sentía como su lengua y la mía se rozaban, cuando me dejo libre pude observar que la mujer que estaba frente a mi ya no llevaba nada encima y estaban totalmente descubiertos sus no muy grandes senos pero que si se me antojaban. De pronto entre las dos comienzan a quitarme toda la ropa que llevaba encima de tal forma que con cada tacto que teníamos mi pene crecía aún más y al estar totalmente desnudo entre las dos comenzaron a darme el mejor sexo oral de toda mi vida, yo simplemente gozaba viendo como dos mujeres recorrían mi miembro con sus lenguas, como mientras una lo metía a su boca la otra saboreaba mis testículos de tal forma que no aguante más y tome a Lorena y la levanta hasta que su coño quedara justo frente a mi, ese coñito ya se sentía demasiado húmedo aun con la pequeña braguita que llevaba encima comencé a besárselo mientras veía como Jazmín se despojaba de lo poco de ropa que le quedaba y comenzaba a montar mi pene de tal forma que al ritmo deslizaba su coño por mi miembro yo metía y sacaba parte de mi lengua del muy apretado hoyo de Lorena que suplicaba que no dejara de hacerlo ya que ella al igual que yo se encontraba tan cerca del orgasmo mientras jazmín seguía en su rutina de sube y baja decidí hacer un cambio y probar el coñito que me estaba comiendo con tanta dulzura que ya tenía toda la cara húmeda de los líquidos orgásmicos de Lorena.

Ya teniendo a Lorena frente a mi se rehusaba mientras entraba en contacto sus labios junto con los de su amiga Jazmín que le decía que se dejara ya que era algo que le iba a gustar tanto que ya no podría vivir sin ello cuando se voltea y me dice "si lo vas a hacer hazlo con mucho temple ya que es mi primera vez con un hombre" al terminar de decir eso escucho decir a esta Jazmín que la cuidara mucho y lo hiciera de tal forma que no le doliera mucho a si que yo sin mas le deje ir solo la cabeza mientras ella gemía de un dolor placentero que Jazmín disfrutaba al la par de nosotros teniendo frente a mi la imagen de cómo se masturba y se venía esta Jazmín decido dejar ir toda mi leche no sin antes voltear a Lorena y soltarla sobre sus muy pequeños pero bien formados pechos en ese momento se incorporaron las dos haciendo mueca de cuanto habían disfrutado mientras absorbían a succiones la última gota que me quedara dentro. Después de eso nos recostados un rato a que se pasara toda la adrenalina que habíamos sudado en ese momento.

Rato después mientras nos vestíamos los pregunte si podíamos volver a vernos a lo que ellas contestaron que sería un gusto y un placer pero que era difícil ya que yo tenía a mi pareja y a ellas a un no terminaban de estudiar la secundaria y era muy raro que las dejaran salir si no era acompañadas de primo, a lo cual yo dije que si ese era el problema le decía a mi amigo Rodrigo que nos acompañara y llevara a unas amigas para su primo, a lo que ellas contestaron que el problema era ese que su primo era Rodrigo.

Desde ese día no quise volver a saber nada de las ideas y perversiones de mi gran "amigo" Rodrigo, sin embargo esa noche la recuerdo como el día que me revolqué con dos colegias muy sabrosas.