Que mirada...

Este es mi primer relato espero les guste...

Era otro día en el restaurante llegando debía empezar a limpiar y acomodar, como no era la única mesera solía compartir responsabilidades como platicas con sus compañeros, estando todo listo abrieron el local.

Lucia es una chica de 22 años, su estatura es de 1.58 cm, 50 kg, tiene su cabello corto y rubio, con unos enormes ojos verdes como esmeraldas, sus facciones son bonitas y delicadas de una manera que puede ser considerada infantil, su pecho en comparación de su complexión es grande y redondo con una bien definida cintura, suele hacer deporte desde pequeña por lo que mantiene un vientre plano sin estrías, piernas definidas con una cadera que no es muy ancha pero con volumen hacia atrás.

Entre chisme y chisme del trabajo, platicaba con su amigo Manuel, pasando el rato tedioso que puede haber en un restaurante claro que cuando llega cierta hora a todos les faltan manos y pies para salir el día, ellos hablaban de algo que compartían pues solo unos cuantos días atrás se confesaron su homosexualidad. Manuel es de tez canela, alto 1.75 cm, físicamente sobresale por su melena china teñida de rojo oscuro.

Fue un día durante el trabajo cuando un cliente le pregunto si él era gay, a lo que respondió que sí, el cliente le pidió su número de teléfono y como Manuel lo negó, el cliente se ofendió y lo acuso con el gerente por pésimo servicio del local después de terminar la jornada Manuel fue llamado a la oficina y solo se defendió diciendo la verdad, comprendieron la situación y no paso a mayores, después de ese día sus gustos fueron expuestos entre los demás compañeros pero Manuel se volvió más seguro y fue eso lo que impulso a Lucia a decirle que ella era lesbiana. Desde entonces se contaban todo, encontraban un consuelo mutuo, ambos gay y buscando pareja, eso debía encontrar pero no en su trabajo ya que ocasionaría problemas y eso debían evitarlo pero se propusieron ayudarse.

Volviendo al presente, ya habían pasado una horas en el restaurante todo iba bien con excepción de que Manuel confundió un platillo de cierta clienta que no tenía tacto y reclamo de manera grosera pero todo normal, Lucia no vio el accidente ni a la fiera mujer solo compadeció a su amigo, ella se encontraba en otra sala en ese momento, esto se lo conto él mismo cuando descansaban 10 min fuera del restaurante mientras compartían un cigarro.

“Y así te digo, me dijo que era un incompetente, que sino escuchaba bien lo que se me ordenaba, y yo no sabía que pasaba cuando me grito tales cosas después comprendí que me había equivocado en su pedido, pero porque no solo lo dijo para su mesa no todo el local” lo decía mientras fumaba un poco.

“ya sabes cómo es la gente aquí, se creen superiores a todos, no te preocupes ahora te toco a ti mañana a alguien más” solo espero que a mí no pensó lucia mientras palmeaba la espalda de su amigo.

“Si eso espero” con la mirada triste recordando el momento.

Lucia le empezó a contar cómo le iba en su escuela y lo próximo que estaba su graduación. Para eso Manuel le daba ánimos para que disfrutara de todos esos momentos pero ambos sabían que después ella dejaría su trabajo temporal de mesera para buscar uno de verdad.

Termino el día y todos para sus casas. Lucia no vivía lejos del trabajo por lo que se volvía caminando a pesar de la hora en que solían salir 11:00 pm, no tenía carro y vivía en un departamento sola, ya estaba acostumbrada a su estilo de vida. Estudia la universidad desde hacía 4 años dejando la casa de sus padres ella solo trabaja fines de semana porque no quería cargarle la mano a sus padres con tantos gastos y en el trabajo entendían que como estudiante no podía trabajar más de 3 días  como también que ella tendría que dejar su puesto de mesera terminando la escuela para laborar en lo que era, una futura LAE.

Llego a su departamento que no era grande, constaba de una pequeña cocina, un cuarto y un baño pero para ella era suficiente y cómodo, decidió tomar una ducha con agua caliente se puso su pijama y fue a dormir.

Todo fue normal en su escuela siento el último semestre se veía poco con sus amigas y amigos ya que cada quien residía en una empresa prestando servicio ¨gratis¨ como requisito de la universidad.

Hablando con sus amigas sobre la futura ceremonia y la graduación se les paso el rato alegremente, entonces empezaron a ponerse de acuerdo para salir en eso días

“hay que organizar una salida a un bar antes de salir”

“si porque luego no habrá muchos momentos porque trabajaremos”

Pero debido al trabajo Lucia ya no salía con tanta frecuencia a bares o antros con sus amigas como antes y sabía que en su casa se lo agradecían ya que estaban pasando por una mala racha económica y ella no quería dar problemas.

“yo lo siento estos fines los tengo ocupados” se disculpó con ellas por no sumarse al plan que organizaban y guardo silencio mientras la charla seguía su curso normal.

“¡hay mujer, ya no sales para nada con nosotras! pero comprendemos y prometemos tomar una a tú salud” rieron todas.

Después de un rato se despidieron y Lucia sin nada que hacer decidió salir a correr para quitar tenciones, fue mientras corría la segunda vuelta en un parque grande que estaba cerca de su departamento que se percató de una mujer que corría en el sentido contrario al suyo, la primera vuelta que dio solo vio la silueta por ir pensando en mil cosas pero en la segunda vuelta la silueta tomo forma… y que forma era una chica alta, con un cuerpo muy bien conservado, todo firme y bien puesto en su lugar, que le daba una apariencia jovial, piel blanca, cabello negro largo e impecable, unos ojos azules oscuro acompañados de una mirada fría y despectiva, unos senos duros y grandes, que le hacían un juego perfecto, con ese par de nalgas que se cargaba, redondas, duras y paraditas. Lucia no pudo quitarle la vista de encima aun cuando paso a su lado tuvo que girar por inercia, después de ese fugaz momento volvió a lo que hacía  -correr-  y esperar topar con ese monumento de mujer una vez más. Por desgracias no volvió a ocurrir este agradable encuentro. Volvió a casa y tomo un baño pero no se quitaba la imagen de la chica del parque y se descubrió riendo en cada momento que eso pasaba y fue solo el recuerdo de esa tarde como se generaba.

Intento ir al parque al siguiente día a la misma hora que la vez anterior pero no vio a la ojoazul por los alrededores y decidió volver a casa desilusionada ya que tenía tarea que terminar, escuchaba música de su iPod mini y se relajaba, escuchar música es uno de sus pasatiempos preferidos pero por los audífonos y el volumen muy alto no prestaba mucha atención al camino y su alrededor. Compro una bebida en una tienda cercana y fue directo a casa. El resto de la semana curso normal para Lucia y así llego el día de presentarse al trabajo nuevamente.

Antes de empezar su día Lucia decidió hablar con el gerente, ya qué tenía fecha fija para su graduación y debía notificar que su puesto estaría vacante próximamente, agradecerles por la oportunidad que le dieron y salir en buenos términos con sus compañeros. Salió de la oficina y fue directamente con Manuel para darle la noticia.

“Buenas tardes chicos, ¿han visto a Manuel?” buscando en todas direcciones.

“No” decían unos, “creo que aún no ha llegado” escucho de otros y decidió empezar a trabajo mientras llegaba.

Aun no terminaba cuando escucho la voz de su amigo entrando al lugar pero después se perdió en dirección a la oficina del gerente y no vio motivo para buscarlo ya lo haría cuando saliera. Ya estaba todo listo, solo esperaban que diera la hora para abrir el local cuando se abrió la oficina del gerente y salieron 3 personas del pasillo; él gerente, Manuel y la ojoazul del parque detrás de ellos.

¨Como es mi primer relato espero comenten que les pareció para publicar la continuación¨