Que Me Quedes Tu 10

Continuación

Chic@s probablemente este episodio no sea totalmente de su agrado, pero es algo que pasó en realidad y no lo puedo cambiar, a veces el amor puede ser tan complicado.

Recuerden que las relaciones e historias de amor no son  perfectas , solo las más fuertes prevalecen ;) un saudo a todos!!

Algunos meses pasaron, 6 para ser exactos la relación entre Vanessa y yo estaba relativamente bien, había discusiones, enojos, celos, lo normal en una pareja, así como también momentos muy felices, buen sexo, risas, ocurrencias, sorpresas etc.

Ya había acabado la universidad, solamente me faltaba terminar de hacer mis prácticas para poder graduarme. En cuanto a mi chaparrita empezaba ya su último semestre de arquitectura.

Casi no teníamos oportunidad de vernos y cuando lo hacíamos tratábamos de pasarla bien. Había una chica en la empresa donde yo hacía mis prácticas que constantemente me llamaba, y me invitaba a salir, a comer, y yo accedía, la verdad es que esa chica me caía bastante bien, era simpática y muy inteligente por lo general siempre nos ponían a las dos como equipo ya que hacíamos un excelente trabajo.

Vanessa no estaba de acuerdo y esto desataba una serie de enfrentamientos entre ella y yo, las últimas semanas incluso se ponía muy agresiva e insoportable por lo que las horas de visita se limitaban solamente a una hora máxima. A los días me llegaron rumores de que mi niña había vuelto a consumir, no quería creerlo, y le pregunté directamente:

Tanairy: quiero preguntarte algo

Vanessa: -comiendo- (últimamente no hacía más que comer) dime princesa

Tanairy: ¿has vuelto a consumir? - seria-

Vanessa: ¿de dónde sacas eso? –nerviosa-

Tanairy: solo contesta Vanessa

Vanessa: contesta tu primero ¿de donde sacas eso, quien te lo ha dicho?

Tanairy: no importa quién lo haya dicho, contéstame

Vanessa: estás insoportable Tanny, ¡¡me tienes harta!! –Levantándose de la mesa- no se puede hablar contigo –tirando el plato-

Tanairy: ¿Qué te pasa? Solo fue una pregunta y aunque no me respondiste creo que ya se la respuesta. ¡Lárgate de mi casa!

Vanessa: ash como quieras, dile a tu amiguita que tiene el camino libre contigo –exaltada- ¿era lo que querías  no? Me hubieras dicho que no querías seguir conmigo –gritando- (estaba completamente fuera de sus cabales)

Tanairy: ¿te estas escuchando? Estas diciendo puras estupideces, seguro vienes con los efectos de las drogas. ¡¡Vete de aquí Vanessa, no quiero que despiertes a mi mamá y a mi hermano!!

A empujones logré sacarla, después de eso comencé a llorar, me preguntaba ¿desde cuando Vanessa volvió a consumir?, se suponía que las cosas estaban bien. Totalmente devastada me dirigí a mi habitación donde no deje de llorar en toda la noche.

Al día siguiente les llamé a las chicas (Jessica y Karla) para contarles lo sucedido, necesitaba desahogarme con alguien.

Karla: te dije amiga, los adictos suelen recaer, y mientras ella no acepte ese problema no hay nada que puedas hacer.

Tanairy: no es exactamente lo que quiero escuchar Karla, oigan chicas tengo que irme, tengo que ir a la empresa. Hablamos luego ¿ok? Gracias por venir –saliendo de la cafetería donde las había citado-

Al llegar a la oficina me encontré con Kathia, mi compañera de las prácticas, al verme con la cara descompuesta corrió a abrazarme y sucedió lo que creí que pasaba únicamente en las telenovelas..

Vanessa: que rápido buscaste consuelo Tanairy.. –Con un ramo de rosas en sus manos-

Tanairy: -apartándome del abrazo- ¿Qué haces aquí? –sorprendida-

Vanessa: no            quería que dejáramos las cosas así, pero veo que tomaste en cuenta mi consejo. –Tirando las flores en la basura- ¡eres una golfa!

Tanairy: estas confundiendo las cosas Vanessa, ella solamente me estab… -interrumpiendo-

Vanessa: no te molestes en darme explicaciones –riendo- y tu zorra –dirigiéndose a Kathia- disfruta mis sobras.

Se escuchó únicamente un “pass” era la primera vez que le daba una cachetada, estaba tan furiosa, no sé en qué momento perdí el control cuando caí en cuenta era demasiado tarde, Vanessa ya estaba con su mano en su mejilla viéndome con esa carita tan dulce y sus ojitos llenos de lágrimas, me partía el alma verla así y más aún haberla golpeado. Sin más se dio media vuelta y se dirigió a la salida, la vi marcharse, perdí la fuerza en mis piernas y me deje caer el piso, llorando como niña pequeña.

Kathia en silencio se limitaba a abrazarme, su contacto me daba cierta paz dentro de todo ese infierno que estaba viviendo.

Cuando terminó la jornada intente llamar a Vanessa, pero su celular estaba apagado, necesitaba hablar con ella, disculparme por lo que había pasado y decirle que todo estaría bien entre nosotras, que solamente era una mala racha la cual superaríamos como muchas otras.

Fui a su casa esperando encontrarla ahí, toque la puerta pero me abrió su mamá

Suegra: que se te ofrece –altanera-

Tanairy: estoy buscando a Vanessa, ¿se encuentra?

Suegra: ¿Vanessa? –se hecho a reír- tiene más de dos semanas que no llega a esta casa.

Tanairy: -confundida- ¿cómo que no ha venido? ¿Ha estado ocupada en tareas supongo?

Suegra: no niña, Vanessa es una maldita drogadicta, que creíste, ¿que la harías cambiar? Ese es su destino, como el de su padre, ahora si no te molesta déjame en paz. –Cerrando la puerta-

Es inconcebible que su propia madre no se preocupara por el bienestar de su hija, estaba irritada por lo que me había dicho la señora, Vanessa tenía días sin llegar, ¿dónde demonios se quedaba? En eso veo su coche estacionarse y corro hacia ella

Vanessa: -drogada- valla, ¿vienes a pegarme otra vez? –riendo-

Tanairy: no Vanessa, quería disculparme por eso –decepcionada al verla así-

Vanessa: no te preocupes, no eres la única que lo ha hecho.

Tanairy: ¿Dónde te has estado quedando?

Vanessa: aquí en casa

Tanairy: no hay necesidad de mentir, acabo de hablar con tu madre –gritando- quiero que hablemos bien Vanessa

Vanessa: mmm ya te fue con el chisme jajaja

Tanairy: ¿con quien te has estado quedando?

Vanessa: con Estefanía, ¿contenta?

Tanairy: ¿estás hablando enserio? –Enojada- ¿y han tenido sexo? Pues claro, es obvio, sucedió como la otra vez ¿no? El pretexto de que ambas estaban drogadas.

Vanessa: así es –no dejaba de sonreír-

Tanairy: soy tan estúpida, todo este tiempo jugabas conmigo y no me di cuenta –golpeando el coche-

Vanessa: -derramo un par de lágrimas- siento mucho decepcionarte Tanny, todos tienen razón, no mereces a una persona como yo, -subiendo sus manos a su cabeza- yo soy la estúpida que no supo valorarte, perdóname –hincándose-

Tanairy: no hagas eso –tratando de levantarla- creí en ti Vanessa, pensé que habías dejado por completo de consumir, si tan solo hubieses hablado conmigo las cosas serían diferentes, te hubiese apoyado y te acompañaría a otro centro de rehabilitación.

Vanessa: no es tu culpa bonita, como dice mi madre, está en mi destino acabar como mi padre –llorando-

Tanairy: no es así, tu destino no tiene por qué ser el mismo, la cuestión es que de verdad lo desees, tienes que dejarlo por ti misma no por complacerme a mi u otras personas.

Vanessa: no quiero perderte bonita, dame una oportunidad más por favor, te voy a demostrar que sola puedo dejar las drogas –llorando con más fuerza, apenas y podía hablar-

Tanairy: lo siento Vanne, hasta que no estés recuperada no puedo volver contigo –marchándome-

Vanessa: ¿es por esa verdad? ¿La amas?

Tanairy: no seas tonta, ¿que no te das cuenta? Te amo a ti –abrazándola- (sabía que sería la última vez) te amo Vanessa y eres una tonta tonta, -golpeándola despacio- quería pasar el resto de mi vida contigo pero lo arruinaste –llorando-

Vanessa se limitaba a abrazarme y llorar junto conmigo, y repetía constantemente la palabra “perdón”

Tanairy: -gritando- tu perdón no resuelve nada, un solo motivo, dame solo uno para no irme de aquí y olvidarme de lo que hubo entre nosotras –llorando- por favor mi niña, solo uno –cayendo al piso, abrazándome de sus pies-

Vanessa: no puedo princesa –agachándose al piso conmigo- no te merezco, perdóname, voy a ir a un centro de rehabilitación y  cuando esté completamente recuperada te voy a buscar y si aún estas disponible nos reuniremos para jamás separarnos –tomando mi cara- te amo princesa, nunca lo olvides –levantándose- (me besó, pero era un beso con sabor a despedida, amargo y carente de pasión)

Así sin más Vanessa se subió a su coche y arrancó a toda velocidad, me quedé tirada ahí por un par de minutos, ya era tarde me subí coche y de manera automática comencé a conducir, mi vista estaba hacia el frente pero no estaba en este planeta, supongo que cruce algunos semáforos en rojo y la verdad es que no me importaba perder la vida allí mismo, pues Vanessa se había ido con ella, se llevó mis ilusiones, mi corazón y mi alma.

La amaba a pesar de todo, recordé en forma de película la primera vez que me hablo por whatsapp, el primer encuentro, el primer beso, el maravilloso día en el que hicimos el amor, los momentos especiales que pasábamos cada que cumplíamos meses etc. No sé cómo llegue a casa, tuve mucha suerte, subí a mi habitación, mi madre ya estaba dormida y no quise despertarla pero deseaba hablar con alguien, la soledad sin duda no es mi mejor compañía. Venían a mi mente los recuerdos vividos con ella, su hermosa sonrisa no se apartaba de mi cabeza, eran recuerdos que me estaban torturando, golpee la cama un par de ocasiones  tratando de sacar el coraje de alguna forma, pero era en vano.

Un rayo de luz me indicaba que ya había amanecido, me levante directo al baño pues sabía que tenía que continuar con las prácticas, me aliste y me vi al espejo, tenía unas enormes ojeras, producto de la mala noche. Llegué a la oficina y Kathia solamente me miró pero no dijo nada, pues ya se imaginaba lo que había pasado.

No podía concentrarme, le pedía ayuda constantemente a mi compañera.

Kathia: si quieres irte a casa Tanairy, yo me encargo de todo aquí

Tanairy: no, está bien.. Sirve que me distraigo un poco, no quiero estar sola en casa

Ocasionalmente derramaba un par de lágrimas, mojando todo el teclado del computador.

Kathia: ya casi acaba la jornada Tanny, ¿quieres ir a mi casa? Y vemos una película o lo que tú quieras

Tanairy: si está bien, no quiero ir a casa y que mi mamá me esté preguntando por Vanessa.

Al decir su nombre nuevamente rompo en llanto.

Tanairy: no creo que pueda olvidarla jamás, ¡¡maldición!! se metió en cada célula de mi cuerpo. –triste-

Kathia: el tiempo te ayudara a sobre llevar esa situación, solo ten paciencia –abrazándome-

Fuimos a su casa y nos pusimos a ver una película, comimos el típico helado de chocolate, (solución al mal de amores) la pasamos muy bien, a veces me ponía melancólica pero ella buscaba la manera de distraer mi mente, cocinamos juntas y jugamos cartas, a media noche me llevó a casa, evadía completamente a mi madre, de nuevo volví a mi realidad, sola en mi habitación recordando, así pasaron varios meses, Kathia se había convertido en un sostén, me ayudaba en los momentos más difíciles hasta que poco a poco dejaba de doler.

Cada cierto tiempo tenía que ir a la universidad a firmar unos documentos que constaban que estaba yendo a mis prácticas en eso me encuentro a las chicas

Jessica: hola amiga ¿cómo has estado? (trataba de evadir el tema de Vanessa)

Tanairy: bien y tú, ¿cómo te va en las prácticas?

Jessica: pues ahí vamos Karla y yo jajaja la verdad es que nos haces falta, a veces tenemos problemas con eso de programación y no estas para ayudarnos –poniendo cara triste-

Karla: -acercándose- bebeeeeee –gritando- te extraño ¿cómo estás? –abrazándome-

Tanairy: me da gusto verlas chicas –correspondiendo  su abrazo-

Karla: tenemos que salir, y no acepto un no Tanny –mirándome seria-

Tanairy: pues ya que jaja, ¿puedo invitar a alguien?

Jessica: epaaa ¿a quién? –sorprendida-

Tanairy: Kathia mi compañera de prácticas

Karla: claro que si amiga.

Tanairy: chicas, ¿no saben nada de Vanessa? Ustedes han venido más seguido a la uni

Karla: ay amiga, hace un tiempo que se dio de baja, se veía fatal, incluso sus amistades decían que estaba peor, ya hasta se inyectaba cosas.

Tanairy: La extraño mucho –empecé a llorar-

Las chicas me abrazaron, cuando estaba un poco más tranquila organizamos la salida y la dejamos pendiente para el fin de semana.

Los siguientes días se fueron bastante rápido, trataba de ocupar mi mente en otras cosas, por lo que me metí a un gimnasio específicamente en el área de King Boxing, ahí sentía que podía sacar gran parte de mis sentimientos y frustraciones.

=VIERNES=

Tanairy: hola Kathia –saludándola de beso-

Kathia: se te ve de muy buen humor, me alegra –riendo-

Tanairy: sip, hoy voy a salir de fiesta con unas amigas

Kathia: -seria- a muy bien me da gusto

Tanairy: me preguntaba si querías acompañarme

Kathia: ¿enserio? Si por supuesto –alegre-

Tanairy: pues es esta noche así que te pones más guapa de lo que estas –abrazándola-

La tarde estuvo muy ocupada, hubo mucho trabajo que hacer, a pesar de que Vanessa estaba en mi pensamiento ya no me dolía tanto su recuerdo.

Kathia: ¿estas lista?

Tanairy: dame un minuto, apago la pc y te alcanzo ¿va?

De pronto mi celular suena, era un número desconocido, dude en responder pero al final lo hice.

Tanairy: ¿alo?

Voz: hola Tanny

Tanairy: ¿Vanessa?

Vanessa: creí que ya habías olvidado mi voz, van más de ocho meses sin saber de ti, casi te gradúas ¿cierto?

Tanairy: si –seria- ¿Por qué me llamas?

Vanessa: quería saber de ti.. Pero al parecer te molesta.

Kathia: Tannyy –gritando- se nos hace tarde apresúrate

Vanessa: -voz triste- por lo visto estas ocupada, que estés muy bien Tanairy me dio gusto escucharte y saber que al menos tú estabas bien.

Tanairy: no estoy ocupada (interrumpiendo) LLAMADA FINALIZADA

Tanto tiempo sin saber de ella, intentando recuperarme y sentía que se habían ido a la basura en esos pocos segundos que duró la llamada, Kathia se percató de eso

Kathia: ¿quieres que cancelemos la salida? –seria-

Tanairy: no, no te preocupes.. Se lo prometí a las chicas –animándome- he logrado mucho este tiempo y no voy a apagarme como antes- sonriendo-

Kathia: eso guapa –abrazándome-

Fui a mi casa a cambiarme y en un par de horas ya estaba lista, hacía bastante tiempo que no iba de antro. Quede de pasar por Kathia, llegue a su casa y toque la puerta

Kathia: hola Tanny, te ves hermosa –nerviosa-

Tanairy: pero tuuuuu, woow mírate nada más, estas divina (tanto tiempo con ella y apenas darme cuenta lo bella que es esta chica)

Kathia: ¿te lo parezco?

Tanairy: pues claro mujer, anda vámonos que ya nos están esperando

Salimos de su casa y Kathia no apartaba su vista de mí, estaba poniéndome un tanto nerviosa. Al llegar al antro buscamos a las chicas y fuimos hacia la mesa donde estaban, ambas estaban acompañadas de un par de chicos muy atractivos.

Ellas estaban bebiendo mientras que Kathia y yo bebíamos solamente refresco jaja a ella tampoco le gusta el alcohol, la noche estaba muy entretenida la música era bastante buena, las chicas se fueron a bailar y nos quedamos nosotras en la mesa.

Entre bromas e insinuaciones por parte de Kathia fuimos a bailar, la verdad es que no me desagradaba el hecho que me estuviese coqueteando. Llegamos a la pista y ella estaba bailando, movía sus caderas de manera provocativa, se acercaba peligrosamente a mí, por un momento me sentí culpable, sentía que le estaba faltando  a Vanessa, la aparté sutilmente y me dirigí al baño.

Tenía varios minutos ahí y Kathia fue a buscarme

Kathia: hola, ¿te incomodo mi baile?

Tanairy: no linda, para nada no es eso, -tomando su mejilla-

Kathia: me gustas –nerviosa-

Tanairy: me he dado cuenta, tus atenciones conmigo son diferentes a las de los demás, te seré sincera, en este momento no estoy lista para empezar nada, eres una chica divina –tomándole el mentón- cualquiera se volvería loca por ti

Kathia: (interrumpiendo) excepto tu -.triste-

Tanairy: no estés tan segura –sonriéndole-

Kathia: dame una oportunidad –mirándome directo a los ojos-

Tanairy: vamos despacio, a ver si surge algo ¿va? Sin presiones

Kathia: me parece bien –sonriendo- vamos afuera, quiero bailar contigo

Pasaron un par de canciones movidas de las cuales Kathia no desaprovechaba la oportunidad de rozar su piel con la mía, después pusieron canciones más lentas y románticas, la tomé por la cintura y ella se aferraba a mi cuello con un poco de dificultad (ella también es chaparrita).

La noche llegaba a su fin, yo la verdad moría de sueño así que me despedí de las chicas.

Tanairy: Kathi ya me voy, ¿te quieres quedar con las chicas?

Kathia: no, la verdad es que ya estoy cansada, al parecer las chicas van para largo jeje

Nos marchamos y nos subimos a mi coche, la música tenía volumen ligero, íbamos en silencio. Después de varios minutos llegamos a su casa.

Kathia: ¿quieres pasar?

Tanairy: no, gracias, tengo mucho sueño y quiero descansar –sonriendo-

Kathia: ok guapa, -mirándome a los ojos- entonces.. ¿Nos vemos el lunes?

Tanairy: ¿te parece si te invito a comer mañana?

Kathia: sii sii está bien –feliz-

Se acercó lentamente a mi boca, no hice movimiento alguno, y ella se acercaba más como esperando mi reacción, yo simplemente no apartaba la mirada de sus ojos deseando el contacto. Un poco temerosa se quedó estática esperando  que yo diera el siguiente paso y así lo hice, terminé con la distancia de nuestros labios.

Apenas y rozamos los labios y sentí un choque eléctrico, me gustaba lo que estaba sintiendo, Kathia abrió la boca permitiendo el paso a mi labio inferior, le dio una pequeña mordida y posteriormente se limitó a chuparlo, esta acción sin duda me excito un poco, despertó mis ganas

Kathia: ¿segura que no quieres pasar?

Tanairy: pues ya no estoy tan segura –tomando su rostro con  mis dos manos-

Estaba buscando nuevamente el contacto de nuestros labios, el beso se estaba volviendo intenso.

Kathia: vamos a mi habitación –con la respiración entre cortada-