Que hizo ella para merecer todo esto.??? (17.)

La Ex-mujer hija de puta de Pedro ha vuelto, debería darle tiempo para encular a su hijita, o la mala puta notará algo?.

Taconeaba por la terminal arrastrando el carrito vacío, las maletas seguían encerradas en la tripa del avión mientras los pasajeros dormitaban en la desierta terminal, aun siendo las 4,30 de la madrugada el cabreo resonaba en cada una de las pisadas de sus tacones de 13 cm, solo un par de metros detrás de ellas dos figuras yacían acurrucadas en unos de los sillones del páramo desierto del aeropuerto.

Susana paseaba arriba y abajo mascullando maldiciones, no podía creerse su mala suerte, ella que por fin pensaba dar con el chollo de su vida, se encontraba con aquello.

Renegó sin apartar la vista de las dos figuras. Al final, después de todo el príncipe había salido rana, ella creía conocer a los hombres, de hecho los calaba incluso antes de que abriesen la boca, nunca hasta entonces le había fallado su brújula.

De hecho desde que con 13 años su madre la había pillado en casa tirándose a su padrastro, sabia perfectamente lo que podía esperarse de ellos.

Recostada sobre el carrito, descanso su dolorido trasero como pudo.

Había pasado una eternidad desde aquel domingo. Ese, en el que su madre la había agarrado del pelo y la había echado de casa.

La muy arpía dejo que el cabronazo siguiera calentándole la cama, mientras ella tenia que refugiarse en la casa de la madre de Elena su mejor amiga.

De hecho , le hizo el mayor favor de su vida.

Aparentaba 17 si se pintaba y se colocaba una mini elástica , el top muy cortito casi como un cinturón , pasar perfectamente por una de las muchas chicas que servían copas en la barra del “Matracagirl” el bareto donde trabajaba Conchita la madre de Elena.

Y que, si se sacaba algunos extras tras las cortinas. Muchos de aquellos perdedores no dudaban en pagar pasta gansa cuando después de lanzar los condones les enseñaba su carnet de menor de edad.

Bueno, a ella le gustaba joder, y a ellos también. Era idiota si no sacaba algo de provecho-- tal como decía Conchita , tras 1 año de clientes fieles tenia dinero para comprar a medias el bar .De ella fue la idea, de convertirlo en un club stripper . Que cojones, si incluso su padrastro seguía visitándola regularmente.

Se rió con sorna de aquello.-- La mojigata de su madre bien que se lo merecía-- Y bien contento y suave que lo dejaba.

Aquello se le daba bien, las chicas eran el mejor de los reclamos y solo de vez en cuando..., se decidía a recorrer la hilera de taburetes donde la mayoría de sus clientes se la pelaban.

Que tiempos!-- suspiro para si nostálgica--. Nada enturbiaba su maravillosa vida, ningun pequeño desliz la habia parado, suerte del viejales doctor Garcia,-- uno de sus mas antiguos clientes--. Regentaba su negocio religiosamente, pagando las cuotas como mejor sabia; su coño.

Reservado al policía de turno que se acercaba puntualmente cada primero de mes.

Quien a los 15 tenia un club exclusivo, dinero en el banco y todo el sexo que le apeteciese cuando quisiera, solo Ella.

Siempre habría tipos con dinero en el bolsillo para ver un par de tetas firmes, ni crisis , ni ostias. Los polvos de lujo habían conseguido pagarles un apartamentito decente, un par de coches y mantener ese tren de vida costaba.

Conchi se rajo con lo de ampliar el negocio, pero no ella. Decidida y con el dinero en mano , compro un terreno vacío junto a la estación, allí era donde pensaba edificar el mejor putiferio de la ciudad.

Pero siempre falla algo en los grandes sueños, y el talón de Aquiles fue don Rogelio Garcia regidor de urbanidad del ayuntamiento. De la noche a la mañana se vio con el terreno vacío y sin poder edificar, con una mano delante y otra atrás.

No le quedaba nada, todo se lo habia fundido la compra del terreno, Con lo que a los 25 años, tuvo que ceñirse la falda de lycra otra vez.

Hacer la calle no era para ella, así que arreglo un apaño con Carlos el barman de un disco bar donde cazaba a sus clientes todas las noches.

Así conoció al polla firme de su ex. – torció el gesto cuando recordó al gilipollas perdedor que había conseguido enredarla, eso y el maldito condón rajado.-- Un puto perdedor, eso era lo que era!. Si no hubiese estado tan patéticamente desesperada no se habría largado a su casa.

El muy gilipollas pensaba sacarla de la calle, estudiaba para policía, y si no hubiera sido por lo jodidamente bien que follaba le hubiera dado la patada. Que podía esperar? , la iban a echar de su pisito, tenia 257 pesetas en el banco y pese a no estar muy segura llevaba demasiado tiempo sin usar condones para que la decena de tipos que la habían jodido toda la semana no la hubieran dejado un regalito.

Desesperada..., esa era la palabra..., así que metiéndose en el cuarto de baño del pringado, uso su lima de uñas para rajar el condón con el que la había follado.

Sobrevivir era lo primero, – se dijo , no era una sentimental y necesitaba un tiempo para recuperarse, sablear a Pedro y salir pitando con algo de pasta.

Al pardillo la vena moral le pudo, e insistió en pasar por el altar..., con un vestido prestado de Conchita se casaron en el juzgado, entre chorizos y maleantes.

Luego solo fue cuestión de aguantarlo..., aquello si que fue jodido, era peor que su madre, todo el día con lo de Donde has estado?, llegas tarde, no?, no hay nada en la nevera!--.

Para acabar de fastidiarla, el regalito de sus clientes empezó a crecerle en la tripa, y el gilipollas se volvió aun mas insoportable.

Puede que el padre fuese el tipo de los ordenadores , o su devoto padrastro o puede que el dentista guarrillo, o el mismísimo Carlos el barman, no tenia ni idea, ante todos... Pedro era el papaito feliz. Solo cuando al fin echo al maldito alíen, la dejo tranquila.

Ya en el hospital, tramo el siguiente paso a seguir, había ahorrado algo ,no mucho. Lo suficiente para largarse, el alíen lloroso podía quedarse con su madre y luego si las cosas funcionaban empaquetarselo.

Puede que, si jugaba bien sus cartas sacara una pensión para las dos, su ex ya era un jodido policía..., así que...

Agarro a la niña y se largo a casa de su madre. Tal como esperaba, su madre la recibió con los brazos abiertos. Le soltó una historia lacrimogena con la que habría ganada un Oscar y se preparo para vivir del cuento.

Pedro trago con la separación y lo tenia cogido por los huevos con la niña... así que volvió su vida de pendoneo..., esta vez en un club un poco mas selecto.

El sitio donde tropezó con el feo tipejo que tenia durmiendo delante de sus narices.

  • Joooder ,-- se dijo contemplando la rizada cabeza de Omar – como sorteria aquel jodido lío.-- se mordió el labio enfurecida. – Un puto crío,-- como cojones iba a cargar con el jodido niño,-- Acaso Nelson pensaba, que se quedaría en casa cocinando y haciendo de mamaita.-- Nooooo, eso no estaba echo para ella.

Podía pasar lo de los 4 almacenes perdidos de la mano de dios en el culo del mundo , un lugar en el que no se acercaría si no fuera cargada de un fusil de asalto, de las 13 lavanderías que parecían caerse a pedazos , e incluso podía aceptar lo de la “hacienda colonial” que regentaba la momia de su suegra.

A ella le gustaba el cuero, el cromo, el confortable terciopelo rozando su culo, todo lo que olía a nuevo , no aquellas sillas decrepitas a punto de venirse abajo, allá adoraban los muebles coloniales que parecían a punto desintegrarse al mínimo esfuerzo.

Al menos podía contar con la veintena de clubs de España, porque si no se hubieran muerto de hambre.

  • Susana se estiro, dejando que sus vertebras estiraran el bajo escote de su pequeñisiño vestido azul, – por el rabillo del ojo contemplo a las cabezas dormidas , llevándose uno de sus largos mechones azabaches detrás de la oreja.-- El tipo fornido de seguridad no dejaba de comérsela con los ojos, a la vista estaba que no todos dormían en la terminal.

Ella, estaba cabreada, frustrada y tremendamente caliente , de hecho. A penas había podido tener a Nelson un par de horas para ella sola, siempre pendiente de su inagotable horda de familiares zumbando alrededor . Sola y frustrada, como no iba a ser mala?

Bebió hasta hartarse, al menos el bar de aquel sitio si estaba bien surtido...-- pensó volteándose y estirándose el bajo de su ceñido vestido. – Gozaba poniendo cachondo al personal, y mostrarles aquel culo redondo y prieto que no podría follarse, sin duda empalmaría un poco mas el paquete del uniforme del tío de seguridad.

Se relamía perversamente, poniéndose aquellos biquinis escandalosamente pequeños. Es mas, cuanto mas escuchaba refunfuñar a su suegra mas satisfecha se sentía.

Tumbada bajo la tumbona frente a la piscina, podía pasarse horas.

Y si no hubiese sido por la jauría de perras que ataban en corto a los salidos de sus maridos, hubiera conseguido tirarse alguno de aquello bombones de caramelo.

Mmmmm...., joder se ponía caliente con solo recordar las enormes pollas bajo los bañadores, que rabia....

Tras leer alguna revista, subía a la habitación y se duchaba para compartir la comida con su maridito, si había sido un día provechoso para Nelson solían acabar los postres follando sobre el suelo, dejando volar la imaginación imaginaba la acogedora casita del centro, solo así soportaba los gruñidos de cerdo de Nelson corriéndose al segundo, dejándola a solas y frustrada para gozar de Castor... su enorme consolador... si no , aquello hubiera sido insoportable.

Pero parecía, que desde que llegaron al departamento de Chocó todo comenzara a torcerse , siempre agotado, siempre ocupado..., como cojones conseguía ponerlo a tono si con una simple mamada se quedaba muerto y sin ganas de nada.

Los mosquitos eran como elefantes, el calor la agobiaba, y por si fuera poco, notaba como Nelson parecía ocultarle algo.

Algo se llevaba entre manos, lo presentía, y por lo visto estaba en San Jose del Palmar, el lugar de donde procedían los abuelos de Nelson.

Se lo notaba, su oscura piel chocolate enrojecía, los ojos chispeaban y la rehuían, solo hablaba y hablaba de la casa de su infancia.

El chasco la esperaba allí.

Omar, así era como se llamaba la sorpresa.

El hijo de puta de su marido había olvidado expresamente hablarle de su hijito, un crió de piel chocolate con los ojos desorbitados con expresión de sorpresa, escuálido y desarrapado.

El cabronazo había escogido el ultimo día del viaje para soltárselo, así , sin mas.

Omar era el resultado de una parranda con una muchacha que lo dejo en la puerta de la casa tras su ultima noche antes de partir a España. A los 9 meses en una mantita de cuadros lo depositaron berreando junto al portalón de su mama, esta lo acogió.... !-- se encogió de hombros con expresión boba en la cara-- . Lo había criado, era sangre de su sangre, pero ahora que tenia plata..., un buen trabajo en España y una bonita mujercita...; le tocaba a ella.

Y ahí era donde entraba su nueva mama.

  • Escucha mamita...,-- le hablo Nelson besandole suavemente el hombro-- Omar es un chico sano, fuerte..., pero no puede oír..., algo le sucede... y por eso... lo traigo a España..., para que lo miren los mejores especialistas.-- Vamos... mami..., yo sabre recompensarte..., ya tu sabes!-- la beso lamiendo su lengua.

Lo aparto bruscamente, sabiendo como sabia que los ojos del mocoso estarían mirándolos fijamente como un búho, uffff... le daba tirria.

  • No pensaras que vamos a vivir en el apartamento, verdad?-- Apenas tenemos espacio para nosotras-- se excuso mirándose las uñas-- No querrás que duerma en el cuarto de la plancha.-- Le soltó sin mas.
  • Rentaremos un departamento mas grande, – junto al centro, eh?-- así tu hija podría ayudarte a cuidar de Omar. – Porque se le dan bien los niños?--
  • Clarooo...-- abrió los ojos aliviada-- Suele hacer de nanny de los mocosos de los vecinos-- especulo haciendo cálculos mentales. – Solo que..., a lo mejor... no le hace gracia lo de volver … le prometiste su propio espacio..., o se te olvida?
  • Es verdad..., joder... tienes razón!-- pero si consigues convencerla , a lo mejor... lamió su cuello mordisqueandolo – A lo mejor me pienso lo del Audi...--

No dejaba de darle vueltas a la proposición de Nelson, especulando el tiempo que le iba a costar convencer a su hija , porque... bueno... no podía soltárselo sin mas. Ya tenía ojeado una casa coquetona en la parte mas In de la ciudad, rodeada de la creme de la creme , nooo, definitivamente no iba a desviarse de su plan.

Seguro, que se moría por dejar al muermo de su padre, ella solo iba a facilitárselo, al fin y al cabo el niño no iba en pañales, que tendría? 13 o 14 ?, mas o menos la edad de los enanos que cuidaba, no?

Susana, sobrepasada por la situación maquinaba su táctica, Ana, sin duda no era tonta, algo se olería . Fijándose en el muchachito que descansaba como una angelito se imagino la largas jornadas de médicos que Nelson pensaba cargarle . Ni hablaaaar!,

Puaggghh odiaba la palabra, aun recordaba la barriga hinchada, los vómitos, el dolor del parto, las jodidas noches sin dormir.

Ana había acabado con sus ganas de repoblar el planeta. Definitivamente no estaba hecha para ser madre.

Pese a que los años eran evidentes, sabia que no aparentaba los 39 que su carnet de identidad decía que tenia. Bueeno.... el de mentirijillas , Madre de nuevo?

Aquello bajo su lívido hasta el suelo, recolocandose el abrigo de chinchilla sobre sus hombros, lo que daría por uno de autentico vison, pero tiempo al tiempo--- pensó caminando hasta el asiento donde su nueva familia descansaba.

Ambas cabezas rizadas dormían ajenas a su plan .

A primera hora del día llamaría a Pedro y quedarían para comer los tres, algo así como una tregua, allí tantearía el terreno y dejaría caer lo de su nuevo hijo.

Si, definitivamente debía ir poco a poco. Luego, si se terciaba le haría creer cuanto la había echado de menos, y todas esas chorradas que esperaba oír su hija, era tan sentimental!

Si lograba tocar su corazoncito, quizás, solo quizás al día siguiente consiguiera convencerla para ir de compras, cuatro chucherías y.... dejaría caer lo del nuevo apartamento, cuanto la echaba de menos …., Blaaa , blaaa, blaaa y luego solo era cuestión de tiempo..., Omar seria cosa suya.

  • Vamos chicos..., ya salen las maletas...! – los despertó inclinándose y mostrando el generoso plano de sus tetas.

Nelson medio dormido, gruño escudándose tras su brazo. Omar en cambio, abrió los ojos desmesuradamente, fijos en las apetecibles tetas a un palmo de sus narices.

Susana casi estuvo a punto de soltar una carcajada, su hijito si que parecía despierto..., de hecho mas que despierto, empalmado ante las tetas de su nueva mama.

Encogiéndose como un ratón asustado, se apresuro a apartar los ojos de los enormes melones de su mama, enfocándolos en la cinta que empezaba a escupir maletas, sin que nadie le tuviera que rogar nada, se levanto de un salto recorriendo la distancia entre el banco y la cinta transportadora en una exhalación. No fuera a ser, que se fijara en el gran bulto en sus pantalones. En verdad, Susana le daba miedo, un miedo profundo y oscuro que le impedía acercarse a ella sin que el horror que se reflejaba en su cara pudiese esconderse.

La había estado observando a escondidas, en el hotel. Pese a que su papa, le había rogado que no se apareciese cerca de ella, no había podido evitar la curiosidad de su nueva mama.

Acostumbrado a vivir cerca de la abuela, merodeaba por la pensión haciendo un poco de todo, desde llevar las maletas, ayudar a la tía Arelys a ordenar las habitaciones de los huéspedes, echar una mano a todo aquel que lo necesitara.

Aunque no oía nada, entendía lo que los demás solían decirle leyendo los labios, la abuela le había enseñado bien. Que mas necesitaba?.

Sabia que tenia un papa que trabajaba muy lejos, al otro lado del mar. De él venia la plata que ayudaba a tirar a delante con aquella ruina que les cobijaba.

La abuela le hablaba de él, de lo orgulloso que estaría si llegara a tenerlo a su lado.

Así que, cuando apareció con una mama agarrada del brazo, sintió los pelos de la nuca erizarse.

No se parecía a la foto que la abuela tenia encima del ropero, era mas gordo, casi barrigón, lucia un bigote muy espeso y bestia ropa cara.

Lo siguiente que supo, era que debía preparar su maleta y marchar con ellos, una casa grande le esperaba al otro lado del mar, aya lejos en España.

La inquietud de saber que sus ultimas horas en San Juan las pasaría cenando con sus papas, le encogio la tripa .

La abuela lo abrazo con fuerza, sin soltar una lagrima. Tía Arelys parecía inconsolable, solo cuando se giro en el coche y la vio bañada en lagrimas, se le encogió algo el corazón.

Pero que carajo!, Menudo papayazo se le presentaba, no lo iba a desaprovechar.

Ana entreabrió el ojo molesta al escuchar el primer timbrazo, el pelo enredado le cubría parte de la cara impidiéndole casi respirar, soplo el mechón hasta que se deslizo sobre el hombro de su padre.

La estaba aplastando con su peso, pero por nada del mundo hubiera cambiado esa postura, le gustaba despertar con el peso de su padre apretándola entre su polla y el colchón de su cama.

El rabo aun algo duro enterrado en su coño, la cabeza de el descansando sobre el hueco de su hombro.

  • Mmmmm... gruño Pedro al escuchar el teléfono resonando justo a su derecha-- alargo la mano mecánicamente – Digaaaa?-- pregunto con voz ronca.
  • Aloooo!, Pedroo..., hola?-- Estas ahí...!-- despejo su embotados sentidos de golpe-- Soy Susi..., tu ex..., pero vamos... veo que te he despertado..., a que si?

Pedro parpadeo un par de veces confuso, su hija parecía aun dormida, el día que tanto temía parecía haber llegado.

La cabrona de su ex había vuelto. El nudo en la garganta casi le impedía tragar saliva cuando le contesto.

  • Vaya... susi..., has vuelto! – sentenció susurrando – ehhh... mira que te parece si te llamo en un ratito?-- rogó implorando mentalmente.
  • Ahhh, claro..., seguro que no estas solo, pillin!-- Esta bien..., puedes seguir tirándote a la putilla y luego me llamas, – no digas que no soy considerada.
  • Estooo..., se le abrieron los ojos al ver la mueca sonriente de su hija al escuchar la voz de su madre al otro lado del teléfono.-- Ohhhh jooodeeer, – se tenso al notar la vagina de Ana aplastandole la polla. – Siiiii... ehhh, buenooo ...-- intento despedirla a toda prisa.
  • Un momento polla de acero! – resonó la voz de nuevo de Susana-- Ya que estas ocupado follando como un conejo , me pasaras a la niña, no?-- Quiero decirle lo mucho que la he echado de menos.

A pedro casi se le cae el teléfono del susto, Ana lo miraba divertido las piernas enroscadas a su culo .Firmemente encajado en la dulce y tierna vagina de su hija, la madre al otro lado del teléfono ordenándole pasarla con ella, como cojones se metía en aquellos jaleos?.

Negó con la cabeza, apoyando una de sus manos en el colchón, tendiéndole el teléfono con gesto desesperado, justo al costado de la cabeza despeinada de ana.

  • Bueeenooo... no se si estará por casa, – miro exasperado a su hija-- a lo mejor ya esta en clase!.-- tenso las venas del cuello al notar como las caderas de esta se movían resbalando sobre su polla.
  • Eres idiota, hoy es domingo..., dime que cojones estaría haciendo en la escuela?-- Anda , seguro que esta rondando por ahí cerca...-- Dale un grito y dile que se ponga..., Por favooooorr!-- recurrió a su tono mas meloso.

Pedro gesticulo como loco intentando que parase de follárselo, porque sin duda, esta vez era su hija quien lo follaba con ganas, la picara niña se mordía el labio inferior aguantándose los grititos que conocía tan bien, apretando las piernas alrededor del durisimo culo de Papa, mientras el gesticulaba con el teléfono.

  • Anaaaaaaaaaaaaa.... --grito a pleno pulmón haciéndose escuchar por casi todo el vecindario-- Deja lo que estas haciendo... y ven a saludar a tu madre... aulló echando chispas por los ojos.--

Ana tuvo que aguantarse la carcajada que parecía escaparse le de la garganta, estaba duro, muy duro, y pese a todo espero uno, dos , tres, minutos con la vagina palpitando alrededor de su rabo, tomo el teléfono de su mano poniéndoselo junto al oído.

  • Hola mama...!, – murmuro apurada notando la primera envestida profunda-- Ohhh...-- se le escapo-- Asiiii... que has vueltooo...?-- así que aquello podían jugar los dos.-- se aferro con los talones.
  • Pero buenooo... que mierda estas haciendo para aullar así...?-- le recrimino Susana al escucharla jadear.
  • Ah maamaaa... es que.., es que..., decidí hacerte caso y... ufffff...uffffffff..., perder un par de quilos... , veras... ohhhh, ohhhhh, ohhhhhh...., llevo un mes en el gimnasio de Papa.-- le mintió al verse colocada arriba , las manos de pedro sujetas a los cachetes ondulantes hundiéndose en la húmeda vagina sin tregua.
  • Vaaayaaa..., por fin me haces caso...-- mira que te lo decía yo!-- Y te han mandado ejercicios de refuerzo para casa, a que si?--
  • Ohhh , ohhhh, ohhhh...., siiiiiii procuro no perder el ritmo.... ojeo a Paco con ojos brillantes-- Ayyyy Maaamaaaa, ya casi acabooooo la primera tandaaaaaaa... ufff... uffff...-- sintió pulsando la tranca esparciendo el esperma paterno hasta la matriz. Aggggggggggggggggghhhhhfff siii , ya esta... – volvió a guiñar un ojo a Pedro.
  • Bueno nena..., me alegra que por fin me hagas caso... , si ya te lo decía yo! – esas caderas solo se bajan con ejercicio duro y esfuerzo.

Ana no pudo evitar contonearse sobre el cipote fláccido, las gotitas de semen se le escurrían entre su raja, mojan dolos a ambos. Agotado, las manos de pedro se posaron sobre las caderas de su hija, sujetándola y anclandola sobre él.

Podía verla asentir sin conseguir pronunciar una sola palabra, su madre era verdaderamente una cotorra, podía matarte con la verborrea incansable que escupía su boca.

  • Joder , pensó me he corrido dentro! – se paso la mano por la cara, miro arrepentido al costado de la mesilla de noche la caja de condones vacía.-- Ya había terminado con todos?, Mierda..., he de comprar mas...-- dejo en suspenso el pensamiento.-- sujetando las suaves caderas de su hija rememoro los 3 meses de sexo inagotable que habían gozado ambos.

Al fin y al cabo, era su padre. Que cojones, estaba ofreciéndole una lección impagable para el resto de sus futuros folla-amigos. Al diablo con todo, a quien quería engañar, puede que al principio se justificase con ello, pero luego, luego..., gozaba follandola, es mas gozaban ambos.

La niña algo tímida, se había convertido en toda una mujer con el rabo de su padre.

Y a la mierda con todos, si se creían que podían acercarse un palmo e intentar colarse bajo sus bragas.

Solo pensar, en algún baboso universitario hundiéndose en ese coñito jugoso y estrecho.... Grrrrrrrrrr, le hervía la sangre. – Y parecía que a su polla medio muerta también.-- Era su hija, su mujer.... y que cojones …. su coño.

Asustado ante la revelación, sujeto a la niña colocandola de un brusco movimiento bajo él.

  • Siii... vaaaleee..., quedamos en eso-- sugirió advirtiendo a Pedro que no continuase frotando su polla de aquella manera tan cachonda.-- No, noooo.... se lo pediré.., seguro que puede hacer un hueco..., esta tarde creo que no....-- continuo hablándole.-- Estoooo... ohhhhhh, espera Mamaaaa, se mordió el labio enfadada .

Pedro sonreía astutamente tumbada sobre las piernas abiertas de su hija, restregando el cipote durante toda el parloteo que tenia a su hembra distraída.

A la mierda--- pensó. Agarro el teléfono de la mano y lo apago sin muchos miramientos,-- Le estaba haciendo el amor a su hija , el zumbido de la insoportable madre lo distraía de lo verdaderamente importante.

  • Uffffffff... Mama se enfurecera... ohhhhhhhh siiiiiiiiiii, siiiiiiiiiii , dioooooosss que duraaaaa, – jadeo agarrándose al cuello de Pedro-- Papaaaitoooo jodeeeer, nooo pares!.

Tenia todo el peso de la ley encima, chafandola entre su monstruoso rabo y las sabanas manchadas . Las manos apenas podían estar quietas acariciando la musculosa espalda, aferrándose a otro interminable polvo.

  • Oh nena... , lo que piense la bruja de tu madre me la suda...,-- lamió chupando el tierno cuello, succionando y marcando la visible muestra de amor paternal.-- Estas tan húmeda... a punto de caramelo..., mmmmffff..., sabrosa!-- Lista para la tranca de Papi?
  • Ohhhhh diooooos, oohhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiiiii metémela yaaaaa-- tartamudeo ana... Jodeeeer !-- levanto las caderas
  • Nena...., esta boquita...-- lamió mordiendo el labio metiendo la lengua envolviendo la de su pequeña.-- Voy a tener que lavártela con un buen chorro de crema espesa, Niña mala!-- Tiempo al tiempo!

Pedro apuro la ultima puntada sabiendo que el sabor lo perseguiría durante el resto de su vida, le jodía tener que admitirlo, pero que cojones. La niña sabia deliciosamente bien, su boca, su cuello , cojones la lengua de Pedro apenas podía dejar de mamar la aureola cada vez mas sensible, dura y tierna . Tragaba con ansia como un jodido niño de teta. Le encantaba verla cachonda, caliente , justo como en ese momento cuando el soplaba sobre el pezón sensible y volver a torturarlo una y mil veces.

Las manos de Pedro parecían ser como las de un pulpo, la acariciaban por todos lados, la sentía amasando sus tetas, arrancando un gruñido satisfecho. Deslizo la mano por la estrecha cintura, las caderas redondeadas de Ana lo estaban matando.

Era verlas moverse por el pasillo de casa y ponerle tiesa la polla, como no hacerlo ante la excitante idea del culo desnudo bajo tanta ropa.

Aquella extraña orden regia desde que se cruzaba la puerta de la entrada, bragas y calzoncillos fuera..., era mas cómodo para ambos, de hecho..., imaginarla con toda aquellas voluminosas ropas cubriendo el coño mas estrecho y acogedor que nunca tuviera la oportunidad de follarse era enloquecedor.

No se cansaba de follársela, de hecho..., apenas entraba por la puerta y dejaba la cartuchera colgada en el armario de la entrada, despertaba esa parte de su anatomía que últimamente gozaba de lo lindo de la visita de su hija. Su polla era lo mas parecido a un radar, allá donde estuviese Ana, allí lo llevaba..., en la ducha..., en la cocina contra el fregadero, sobre la mesa, en el suelo...,contra las paredes del pasillo, en el sofá del comedor, sobre la fina mesa de cristal, encima de la moqueta.

No había sitio , ni lugar extraño donde no follasen como conejos. Nunca antes le había sucedido algo así, el morbo de lo secreto , o puede que la torpeza del principio hacia mucho que había quedado atrás, algo oscuro y profundo le sucedía cada vez que su polla entraba dentro de las estrechas paredes vaginales de Ana.

Eso si que acojonaba, mas que una carga de melenudos con ganas de atizar.

Sacudió la cabeza, preocupado..., el momento era el momento. Así habían quedado, pero...., colocando el indice sobre el coñito peludo de Ana, acariciando en círculos la húmeda raja, satisfecho confiando en que por aquella vez ella consintiese estrenar ese culito.

Sus manos apretaron las nalgas , gruñendo suavemente..., deseaba ser el primero en darle por el culo.

Joder era su derecho de padre!

  • Cariñoooo, debías haberme dicho lo de los condoneeees... joder, me he corrido demasiado..., no deberías haberme dejado …,-- siguió apretando y soltando los cachetes.
  • Como si pudiera pararte.., ohhhhh que me estas haciendo....-- mmmm mordió las palabras Ana.-- Vamooos noooo sigaaas...-- ooohhhggg. - tenso el gesto notando el glande sobre la estrecha obertura del ojete.

No podía hacerlo, no?--, el estaba encima... y vamos..., no podía, no?--. Tenso las mandíbulas al comprender que..., puede que su polla no entendiese de posturas.

De hecho el cabezón embadurnado de la corrida anterior resbalaba una y otra vez hasta presionar el ojete de su culo, su mano seguía pellizcando su clítoris , los espasmos de placer pulsando sobre los dos dedos dentro de su vagina.

Pedro frotaba la polla sobre el agujerillo cada vez mas empapado, las fricciones habían conseguido aflojar la abertura ,encajando parte del capullo en tan estrecho agujero.

  • Ohhhhh..., ohhhhh nooo sigaaas... ohhhh es demasiadooo grandeee..., – se sujeto a los hombros de Pedro.-- me vas a rajar....! – protesto devilmente.-- Me harás dañoooo...-- empezó a lagrimear , el culo le dolería horrores.

  • Deja a Papa... nena..., solo deja que...-- se afianzo empujando un poco ,hundiendo la cabeza de su polla.-- Aquello era divino..., Mejor que el cielo...-- solo devia ir con algo de tiento..., la primera vez siempre era algo dolorosa.

Pedro le tapo la boca, no debía oírla llorar, o sino echaría abajo sus planes de abrirle el culo. Ver los enormes lagrimones escapando de los ojos hasta la oscura cabellera.

Su hija, ese era el gran problema, era su jodida hija. La única mujer que parecía amoldarse a su singular forma de vida.

No lo agobiaba, era algo así como la perfecta compañera de piso, algo tímida al principio pero toda una tigresa tras el pacto.

Sintiéndose una mierda , se bajo de encima de su hija, no era un hijo de puta, aunque su ex se empeñara en soltárselo cada cinco segundos.

La vio salir de la cama, encerrándose en el cuarto de baño de un sonoro portazo. Acaso , al final si que resultara un hijo de puta. No había violado a su hija?, agobiado por el recuerdo de aquella noche, salio de la cama parándose delante de la puerta donde Ana se encerraba. Sin duda estaría mejor con su madre, no con el cabrón salido de su padre.-- se alejo hasta su despacho, su voz flotando devilmente.

  • Ana... yo, yo... lo siento..., Estarás mejor con ella, murmuro .-- Te juro que..., bueno... se volvió cabreado-- nunca antes le había sucedido aquello, un buen polvo era un buen polvo.

La puerta se abrió despacio, Ana se envolvía con una tolla afelpada azul. Recorrió el escaso espacio que lo separaba hasta el despacho de su padre, la mesa atiborrada de papeles desordenados estaba limpia , la superficie brillaba despejada, las estanterías ordenadas.

Lo vio sentado en la silla tras la mesa, pensativo, ausente.

Preparándose ante lo que se avecinaba se acerco hasta tenerlo frente a ella, acaricio su espesa melena enredada, atrayendo su mirada .

  • No quiero irme..., y no.

No estaré mejor con ella, acaso quieres que me vaya...?-- pregunto temerosa de la respuesta.

Pedro noto el nudo del estomago deshaciéndose, aquello que había empezado a temer unos minutos atrás había sucedido, estaba colgado de una cría. De una cría que encima era su hija, encoñado, y literalmente jodido, mas aun si su ex se llegaba a enterar.

  • No..., --susurro-- No quiero que te muevas de aquí...-- se levanto besándola , sentándola sobre la superficie de la mesa.-- Te quiero para mi... y que arda en el infierno por ello.-- sentencio deshaciendo el nudo de la toalla.

Ana se dejo sentar sobre la superficie de madera, sin apartar los ojos de la tiesa verga gruesa de su padre. Siempre la dejaba sin aliento, la tenia como un caballo y pese haberla tenido en sus entrañas se asombraba al imaginarse tanta carne llenándola.

Era una locura, pero..., y si le dejara...?

notaba sus ojos pendientes de cada movimiento , su dientes mordieron el labio superior nerviosa, girándose para mostrarle aquello que parecía obsesionarle.

La madera fría, le aplastaba los pezones , la manos a ambos lados de la mesa, igual que si fuera a recibir un severo castigo.

Pedro abrió los ojos sorprendido, aquello era mas de lo que se merecía, su hija estaba ofreciéndole su culo, allí delante de sus narices la fragante raja aun rezumaba los fluidos embriagadores. Se levanto de la butaca como si un resorte lo empujara, acaricio las apetecibles caderas , sujetando los gloriosos cachetes, separandolos y contemplando el jugoso coñito goteando fluidos solo para él. Los labios vaginales se abrieron ante sus dedos ansiosos de sus caricias, esta hinchada y muy cachonda. La tenia aplastada en la reluciente mesa , las lenguas entrando y saliendo de las bocas compartiendo el sabor excitado , enloqueciendo.

Solo punteo un par de veces su lengua sobre la vulva , llevándose el sabroso y cadencioso aullido de Ana.

  • Ohhhhhhh..., ohhhhhhhh...-- jadeo al sentir a su padre a su espalda sujetándola de la cintura.-- Despacitoooooo...., ohhhh...-- se quejo muy bajito.
  • Mmmmm ,mi niñaaa, ohhhh , ohhhh-- Iré muy despacito..., así disfrutaras poquito a poco-- dijo él atendiendo las reacciones al restregar la polla arriba y abajo, lubricando el ojete.

Ana abrió las manos afianzándose sobre la mesa, acababa de sentir en el ojete el roce del cabezón empujando, aguanto el aliento hasta casi marearse, el escozor del glande encajándose la dejo tiesa, le ardía el culo y solo era el principio.

  • Mmmmm , ohhhhhh neenaaa que jodidamente estrecho..., siseo . – Ya casi esta …!-- empujo hundiéndose un par de centímetros.--
  • Uffffffffffff, ufffffffffffffffffff,esperaaa un poquitin..., esperaaaa..., ahhhhhhh, me ardeeeeeeee , esperaaaaaa...-- se giro ana mirándolo suplicante.

Pedro casi encajado en el estrecho culete, se apresuro a sobar deliciosamente el abultado clítoris resbalando una y otra vez en los jugosos contoneos de sus caderas, sin quererlo, la niña se estaba clavando su rabo poco a poco. Hasta que por fin, la punta de su tranca toco fondo pareció el paraíso, los enormes cojones reposando sobre la vulva pegajosa.

  • Ya esta...hija , ya te la he metido toda...!-- uffffff..., no te muevasss..., por tu madre no te muevas.-- rogó Pedro. Veras que gustillo cuando empiece a....--

Justo entonces, el grueso cipote retrocedió un palmo hasta la mitad del culito, se agarro a las caderas de la niña sabiendo que el gemido de la boca de Ana ya no era doloroso, Ogggghhhhhhh-- suspiro bajito , llevándose un puño a la boca – Lo sabia..., la muy guarrilla gozaba de lo lindo e intentaba disimular--, levantando una mano dio un sonoro cachete en la nalga derecha, – Joooder... que buena vista...-- la tenia sujeta con la mitad de la polla clavada en el culo.

Ana no sabia lo que pasaba con su traicionero cuerpo, la sensación de una polla de caballo atornillándose a su culo le hizo apretar los dientes, la quemazón del rabo ardiendo era rarisima. Tenia ganas de aullar de dolor y a la vez no podía ni abrir la boca, era como tener un ariete venoso taladrándole las entrañas.

Ni que decir cuando su padre le saco un poco toda aquella carne, la impresión la hizo sisear dolorida, pero por primera vez, la quemazón dejo de molestarla, la vulva le palpitaba haciéndola boquear de placer, espero ansiosa , los gruñidos de Pedro le llegaban claramente, la ponían aun mas cachonda, y pronto se le unió sin pudor alguno.

  • Esooo es Anaaa..., menea ese culito rico hija... asiii, esooo es...!-- gruño Pedro complacido ante las sacudidas acompañando su riñonadas.
  • Ajjjjjjjjjjjj, ajjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjj, ajjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjj – babeo al notar las pistonadas brutales hundiéndose en sus entrañas.

La sensación del pollón taladrandola como un animal fue demasiado, procuro levantar la cara de la mesa cada vez mas inestable, de la superficie se derrumbaban la hilera de carpetas a cada empellón. Era impresionante, todo se esparcía desordenadamente por el suelo mientras los espasmos la acalambraban de arriba a abajo.

Nunca antes se hubiese imaginado aquello, notaba el vientre de Pedro apretando su ojete, se la había clavado...., tenia el pollon de caballo alojado en su culo. Apretó los músculos, asustada, era demasiada polla..., lo era.

Quería sacarla de dentro, pero no hubo manera... , aquello pareció enloquecer a su padre, sus jadeos mas parecidos a rebuznos. Acojonaba un montón.

--- Ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhggggggggggggg, Ohhhhhhhhhhhhhggggggggggggggggg , Ostiaaaa Putaaaaaaaaa. – berreo echando el cuello hacia atrás.

Ana solo se dejaba llevar, alucinada por el vaivén del rabo entrando y saliendo , los ruiditos salpicando ,el cadencioso bamboleo de las pelotas sobre su raja, todo conducía a un final demasiado bueno para ser cierto.

Los gemidos de los dos se convirtieron en un coro lascivo a cada golpe de ojete. La paternal mano de Pedro masajeaba el clítoris decididamente, arrancando los aullidos a la putilla mas caliente que había tenido que encular: Su hija.

El escozor que sintiera al principio se había convertido en un placer delicioso que le llegaba a oleadas, justo a cada caricia de su mano.

Las piernas de gelatina parecían no aguantarle mas, y se aferro a la tranca de Pedro con todas sus fuerzas. El trabajito manual de Papa había conseguido hacerla chorrear poco a poco, hasta que el fogonazo del orgasmo la arraso de la cabeza a los pies.

Pedro se sujeto a las caderas de la niña como si la vida le fuera en ello, ese ojete le apretaba el rabo como un prensa y sentía los cojones palpitando a cada chorro. La mente se le fundió en negro al inundar dos tres y hasta cuatro interminables caños de esperma el ojete de su niña, luego al igual que un roble golpeado por un rayo fulminante cayo sobre la espalda sudorosa de Ana.

Los dos jadeando aun firmemente encajados, los dos recuperando el aliento, pedro con una sonrisilla idiota dibujada en su cara, Ana aun haciéndose a la cálida leche fundiéndose en su interior.

Pasaron los minutos, y finalmente Pedro murmuro junto al oído de su hija.

  • Diooos... me parece que voy a volverme una adicto a esto..., – beso la suave curva de su cuello.-- Ha sido..., Buuuufff..-- Estas bien?-- hociqueo jugueteando.
  • Mmmm... Noo, nooo seee -- se agito mimosa como una gatita-- me estas aplastando... anda salte de encima...-- contesto con la voz enronquecida.

Aun habiéndose corrido como un animal , su hija apretaba su polla con decisión . Se mordió el labio al escuchar el Plooooooop descorchando su culo, el considerable agujero le acojono un huevo. Mas aun, cuando Ana se irguió ofreciéndole un plano explicito de la cremosa baba escurriendo sobre la moqueta.

  • Ojooo hija... que estas...-- dejo sin acabar la frase-- la tomo en brazos hasta llegar al baño.

Los gestos de su carita lo decían todo, la dejo sobre la taza de water, pendiente del sonido del esperma golpeando la porcelana. Ostia Puta!, se había corrido como un jodido animal. Se paso la mano por la sudorosa cara, la incipiente barba despuntaba... , pensando en la insoportable soledad que iba a sucederle cuando ella abandonara su casa.

Recuperando la compostura, se dio cuenta en su propia desnudez al bajar la vista y contemplar su polla chorreando y caída.

  • Amiga mía... – reconvino a su polla-- Estamos jodidos..., decididamente jodidos.

Ana por lo contrario, no dejaba de admirar la figura impresionante de su padre, bueno..., de su posible padre.

Que bueno estaba! , las piernas algo peludas eran musculosas, ni que hablar de la polla fláccida de caballo que descansaba brillante, ni un solo centímetro de grasa cubría su estomago gracias a su trabajo aplasta-cráneos, cada musculo delineado para golpear, atizar y follar como un salvaje.

Su boca dueña de aquella inagotable y juguetona lengua, su nariz partida atractiva cuando la contemplaba hundida en su coño, sus ojos azules chispeando cuando la abrazaban y levantaban su falda al llegar a casa, siempre dispuesta a darle una cálida acogida vaginal.

Pero... la ciencia era ciencia, y bueno los burdos análisis de biología en el instituto así lo decían, era poco probable que el fuera su padre biológico. Ni repitiéndolo 4 veces, dejaba fuera de dudas. Su grupo sanguíneo raro de por si, no podía ser remotamente el de su padre. Pero siempre existia cierta duda.

Esas cosas no eran del todo fiables. Y si después de todo el tío que la follaba como una puta del puerto no fuera su padre?.

Luego estaba lo de su madre, porque cojones le había estado mintiendo todo aquel tiempo. Sabia que era mas puta que las gallinas, lo corroboraban todos los tíos que aparecían por su cocina cada desayuno, pero de ahí a esos extremos.

Algo cohibida, se levanto... de la taza, el culo le quemaba y dejo que Pedro le untara una copiosa capa de áloe. Sus dedos eran mágicos, solo cuando acababa de esparcirlo,comprobó como la erección volvía a despuntar tímidamente.

  • Bahhh, tira para tu cuarto... o si no me parece que no saldremos de casa...-- venga ponte algo que la bruja nos espera.!-- cacheteo las nalgas de Ana.

Desapareciendo por el pasillo camino pensativa, volvió a darle vueltas a lo mismo,el cepillo de dientes de Pedro debía ser suficiente, de hecho así se lo habían dicho en los laboratorios donde le hicieron la prueba de paternidad hacia 2 semanas.

El sobre había llegado el día anterior, y permanecía oculto en su mochila.

Con pies de plomo y pasitos cortos se sentó dolorida sobre la cama de princesa, agarro la mochila sacando el sobre. Cada uno de los euros gastados habían sido cortesía de su nuevo papito, así que , que mas daba.

Rasgo la solapa y saco el folio doblado.

Leyendo los tecnicismos tan rápidamente como pudo, se fijo en el ultimo párrafo a pie de pagina.

Resultados de la paternidad del donante; NEGATIVO.

Compatibilidad de grado: 8%.

  • Hija de puta cabrona, salio de su boca.-- releyó el resultado 2 veces mas, haciendo cabalas de como iba a sacar provecho de aquello, por que sin duda..., Pedro sacaría provecho... – si llegaba a saberlo..., o puede que la maternal e hija de puta de su madre supiera ver la verdadera magnitud del problemon que se le podía venir encima.

El informe oficial parecía redactado para ser utilizado frente a un juez, por un segundo le tembló algo la mano. Aquella podía ser la llave a su libertad, verse libre de la garrapata de su madre. Suspiro levantando el animo, porque..., puede que.. , pudiera quedarse con Pedro.

Siempre que él la aceptase.