Que hizo ella para merecer todo esto??? (13).

Escurrió el plato en el fregadero y levanto la mirada perdida. El silencio casi monacal en la casa era algo digno de recordar. Violeta, suspiro de nuevo al secarse las manos en el delantal observando la cocina vacía.

Las Mellizas llevaban fuera cerca de un día en su salida con el internado, rogaba por tener a las dos pequeñajas algo mas aplacadas a la vuelta. Deshaciendo el nudo de su espalda colgó el delantal detrás de la puerta pensando en su hermana pequeña Eva.

Desde su vuelta de la piscina, la tarde anterior había observado algo distinto en ella.

Y sin lugar a dudas, su hermano Alberto tenia algo que ver en todo ello, solo había que contemplar la expresión de gato satisfecho que le lanzaba a la mínima. Algo se llevaban entre manos, o mejor dicho, conociendo a su hermano entre piernas.

Continuo andando hasta su habitación , hasta dar con el interruptor y encender la luz del cuarto. En silencio busco entre las perchas del armario la chaqueta de fina lanilla blanca y la descolgó. La sostuvo en sus manos, sonrojándose ante el recuerdo de su vecinito acariciándola. Estrujo la chaqueta y abrió los ojos acalorada, mirando hacia uno y otro lado, se desabotono el cuello de la camisa hasta quedar únicamente en sujetador. Afino el oído, procurando escuchar cualquier sonido acercándose .

Levantándose , se metió la chaqueta por los brazos abotonando cada uno de los diminutos ojales hasta el austero cuello cerrado a su garganta, la suave lana pegándose a su piel acariciándola. Abrió los ojos , al sentir el sensual tacto de la lana, se sentía perversa. En apenas, 10 minutos tenia que salir hacia la casa de su vecina, debía cuidar de Pascual.

Y violeta solo pensaba en tenderlo sobre la alfombra del comedor y follárselo sin darle tregua. Trago saliva ante lo que su calenturienta mente tenia planeado, peleando consigo misma , se detuvo ante el espejo del armario .

Que pensaría la buena de doña Eugenia, seguro que la tacharía de zorra y fulana. Ella que confiaba en que cuidase de su pequeñín, como se lo pagaba ella, abusando de un pobre chico . Buuenooo..., mas bien había sido el quien se había lanzado..., aunque... ella no se había impuesto nunca...., tendría que hablar seriamente con ella, para atajar aquella situación. No, no....-- menuda locura.--

• Te imaginas diciéndoselo-- se repetía Violeta-- Mire, señora Eugenia su hijo vera..., solo piensa en …., no sera mejor que calles la boca.

Acabo por ajustar el cinturón de su pantalón de lana, suspirando al apagar la luz y dirigirse a la puerta, todo seguía en calma.

Cerrando la puerta de su casa, bajo los escalones con paso lento, abrió la portezuela y llego junto a la casa de su vecina con el aliento atascado en la garganta. Tenia la mano suspendida en el aire sobre el timbre, cuando la puerta se abrió de inmediato, allí estaba la sonriente Eugenia con el bastón en mano dispuesta a salir con sus inseparables amigas.

• Pasa, pasa Violeta, se apresuro en salir al porche – no tardaran ni un minuto en llegar!, – estiro el cuello para observar la calle.--
• Vaya.., que elegante-- como van sus clases de rehabilitación?-- la observo detenidamente Violeta-- supongo que ya estará mucho mejor?--
• Ah si, muchísimo. Veras hija! , conocí a un par de viudas en las clases, y no te imaginas la marcha que tienen, – de echo, esta noche vamos a una sala de fiestas-- Se rió tontamente.-- Te imaginas , a mi edad.
• Ahhh que bien, respondió sin mucha convicción.-- Vendrá tarde , verdad?-- sospecho lanzando un vistazo hacia la escalera que conducía a la habitación de Pascual.--
• Si bueno..., menudo alivio tenerte para cuidar al niño-- se sujeto la cadenilla de su cuello-- contigo se que esta a gusto.-- susurró al ver el taxi pararse junto a la portilla.

Un par de señoras algo mayores asomaban sus cabezas por la ventanilla trasera, chillando igual que adolescentes en una noche de botellón. Aquellas eran las viudas alegres, pensó Violeta viendo como doña Eugenia se subía a la parte trasera del taxi.

Desparecieron en un abrir y cerrar de ojos, dejándola parada en la entrada de la casa aun con el pomo en la mano.

Cerro con cuidado la puerta, andando con pasos lentos asomándose en el silencioso salón , la consola parecía estar abandonada, los cojines del sofá desordenados y lanzados por el suelo, los vasos de refresco estaban aun sobre la mesa.

Esquivo las envolturas de patatas esparcidas por el suelo avanzando hasta la cocina, allí todo estaba igual de tranquilo, los platos resecos sobre la pila , la mesa despejada.

Con una ligera sospecha de donde se encontraría Pascual, se dirigió hacia la escalera que llevaba a las habitaciones. Escalón a escalón, recorrió el largo pasillo de puertas cerradas, la ultima a la derecha era la de Pascual.

El resto de habitaciones estaban cerradas, cosa que le produjo cierta curiosidad. No es tu casa , violeta! Se regaño a si misma. Sin mirar a nada mas que no fuera la puerta de final del pasillo contó los pasos con lentitud, Pascuaaal.... – dejo suspendido en el aire.

La habitación de su vecino estaba vacía. No había rastro , la cama estaba cubierta con otra colcha.

• Pascuaaal...., repitió en tono cansado-- donde te has metido?-- exclamo cansada mientras se dirigía al armario y lo abría.-- Nada... , tampoco se escondía allí.

Lo que le faltaba....-- se agacho para mirar debajo de la cama.

Salio de nuevo al pasillo y grito su nombre para dar con el, no hubo respuesta. Abrió la primera puerta de la derecha y encendió el interruptor. La habitación estaba desierta, ojeo con disimulo el enorme armario empotrado y salio hacia la siguiente.

Con una casa tan grande , los rincones para esconderse eran múltiples. Ojeo otra habitación de invitados, encaminándose hacia la tercera.

Abrió la puerta con cuidado, tanteando el botón de la luz, cuando sus ojos se abrieron le sorprendió encontrar a Pascual estirado en el centro de una colosal cama metálica, una autentica antigua reliquia de otra época.

Con la boca abierta por la sorpresa, se fijo en el resto del mobiliario antiguo y macizo que decoraba la habitación, como sacado de un túnel del tiempo.

• Pascual … pero que haces aquí,....-- venga sal de ahí.-- Esta debe ser la habitación de tu madre...-- como te pille aquí nos cae una buena-- intento agarrarlo del brazo para sacarlo de aquel mausoleo .
• Mama ya no duerme aquí-- contesto desde el centro de la colosal cama-- Sabes..., era la habitación de Papa y Mama. – Antes de.. -dejo en suspenso, le trae recuerdos tristes...,
• Buenooo, pues por eso! – me da como no se que, estar aquí...-- venga sal.
• A mi me gusta....-- Esta cama es super chula, mira como chirría.--- y para demostrar sus palabras se levanto y voto un par de veces , brincando sobre el armazón de muelles .-- Has visto..., como las camas elásticas de la feria!.-- Chriiim, Chriiim, Chrim, Chrimmm-- seguía meciéndose sin parar.
• Por eso mismo!..., intento sujetarlo del brazo y arrastrarlo fuera de allí-- esquivando con rapidez el brazo, la sujeto por la muñeca y la arrastro hasta el centro sin dejar de rebotar y de rechinar el armazón metálico.
• Ahggggg... seras bruto-- continuo intentando enderezarse entre el traqueteo de la cama antigua.-- Para, venga, para. – lo sujeto para que dejase de brincar como una cabra loca.

Violeta palpo la áspera colcha de ganchillo amarillenta, sus dedos no se llenaron de polvo tal como esperaba, las sabanas blancas de algodón parecían haber sido cambiadas hacia poco, echando un vistazo hacia la mesilla de noche paso un dedo por encima sin llevarse una sola mota de polvo.

• A que esta bien, – escucho Violeta-- Es enorme, así que...-- soltó una risotada cuando se lanzo sobre ella y la tumbo sobre la cama.

Casi la dejo sin aliento, todo el peso de pascual la aplastaba a la cama y entre chirridos bajo la boca hacia la de ella punteando el labio y lamiéndolo provocandola a entreabrir la boca para dejarle juguetear enroscando sus lenguas, cada vez mas hondo una y otra vez.

Y aquel era el idiota que no tenia idea de como follar?-- Violeta abrió la boca alucinada ante las lenguetadas que la dejaban sin aliento.

El chirrido ceso por un momento , la lengua del chico hundida hasta la campanilla. Ni sabia como sus manos reptaron por su chaquetilla hasta ahuecarse bajo sus teta derecha apretando a la vez que enrollaba su lengua hasta dejarla sin aliento. Casi enseguida su pezón se puso tieso bajo la enorme mano de Pascual , los gemidos de los dos sonando cada vez mas cachondos.

• Mmmmffff..., mmmmfff...-- Ayyyy Dioooosss, mmmmmfff... – aparto su boca de su vecino intentando recuperar algo de aliento.-- bajo la vista un segundo para ver como las manos de el apretaban y soltaban su teta con fuerza. El ramalazo de placer la golpeo dejándola dispuesta a cada uno de los sucios jueguecitos que tenia planeados.

Procuro no descubrirse, satisfecha como estaba al contemplar como su mano desabrochaba la hilera de botoncillos de la chaquetilla , dejándola con el sujetador únicamente ante el salido Pascual que apenas tardo un segundo en hundir su cabeza entre el canalillo igual que un ternerillo en busca de leche.

Violeta algo desbordada , le dejo cabecear entre sus tetas como un borracho en barra libre, volteando la cara hacia una teta y luego otra.

• Mmmmmm, que ricooooo, queee ricoooooo-- cabeceaba mientras sus manos se daban prisa por bajar el sujetador , sumergiéndose entre las enormes tetas de Violeta.

Ver enterrada la cabeza rizada de Pascual entre sus tetas le produjo escalofríos, primero su lengua solo lamia suavemente el contorno de la carne que también amasaba una y otra vez, luego solo fue cuestión de tiempo que empeza a morder sorbiendo de sus pezones hasta endurecerlos de manera dolorosa dentro de su boca.

Se arqueo gustosa abrazando su cabeza dejandole bien claro lo bien que lo estaba haciendo, los primeros espasmos empezaban a humedecer sus bragas, se agarraba a cada teta como un hambriento mamando sin dejar succionar con ruiditos lascivos.

• Ahhhhhhhh siiii, asiiiiiiii , esooooo esss, siiiiiiiiii, ohhhhhh Pascuaaall, por tu madreeeee que bueeenoooo, ahhhhhh, ahhhhhh.--- jadeaba apretando la cabeza del chico sobre sus tetas.

Cuando Pascual dejo de chuparles las tetas, bufo frustrada abriendo los ojos de nuevo enfocando sus ojos hacia donde solo un instante antes había estado chupando y mamando, sus tetas brillaban por las babas de su vecinito que con una expresión concentrada se levantaba y batallaba con el cinturón del pantalón de Lana de Violeta.

Por fin la hebilla se soltó, dejando sus manos ansiosas buscar la presilla del pantalón abriendo con torpeza el pantalón deslizándolo lo mas lejos de su presa, sin decirle nada Violeta se mordió el labio inferior al levantar sus caderas para dejarle bien claro el pantalón por los tobillos, sin muchos miramientos el pantalón salio volando por detrás de su espalda, sediento como estaba de volver a gozar de Violeta.

• Que ganas tenia de volver a saborearteeeee......-- susurro en un tono soñador bajando la cabeza colocando su boca en el estrecho triangulo de tela rosa.
• Uuufffff, Pascuaaalll dioooos, se retorció Violeta al sentir la palma de la mano acariciar con rapidez sobre la tela rosa , apretando y soltando el clítoris para besar con delicadeza la fina tira y desplazarla a un lado.
• Mmmmm, mmmmm...-- continuo tragando el clítoris en la boca a la vez que sus dedos sobaban suavemente su húmedos labios vaginales. – Mmmmm, mmmmm, mmmmm..-- hociqueaba con furia .

Violeta sintio la sangre golpeando su cabeza ante semejante gustazo, La boca y la lengua de Pascual la estaban volviendo loca, abrasándola y haciéndola jadear explosivamente.

• Ohhhhhhhhhhhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, Ohhhhhhhhhhhhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.-- la sangre golpeaba su sensibilizado coño cuando dos dedazos enormes penetraron su vagina hasta casi correrse allí mismo.

El empujo otro dedazo mas hasta sacarlos empapados de la mucosa excitación y llevárselo a la boca para lamerlos.

Entre la neblina pudo verlo sonreír satisfecho al puntear de nuevo el sensible clítoris mientras sus ojos seguían cada reacción al empezar a claverle los dedazos en un rápido mete saca frenético, ya medio traspuesta al correrse en un potente orgasmo.

Poco le importo chillar igual que una histérica, pero aquello era demasiado. Y cuando las oleadas del orgasmo la golpearon, se quedo medio muerta .

Y mientras. su vecino quieto, observándola mientras se llevaba los tres dedazos mojados y brillantes por la corrida a la boca lamiendo de una manera inocente y lujuriosa.

• Me gusta mas que el chocolate..., – sentencio sonriendo –- Pero mira como estoy....-- atrapo la mano de ella llevándola al tremendo bulto de sus bermudas.
• Vaaaaaya!-- acaricio el paquete con suavidad, agarrando y soltando contemplando la cara de Pascual.-- Te gusta esto,?-- asiiii , ehhh?
• Ohhhh, siiigueeee Violetaaaa....ohhhh....-- sin mediar palabra Pascual se despojo de la camisa vaquera de un solo movimiento.--

tuvo que aguantarse la risa al ver salir volando la camisa , había que verlo sacarse la ropa de cualquier manera, torpe y patoso . Pero ahí acabo la situación graciosa, al girarse el tremendo pollón la apunto con furia.

Las venas azuladas se marcaban tremendamente ,el enorme cabezón rezumando una gotita brillante que se deslizo por la palma de la mano de Violeta al sujetarla y empezar a acariciarla.

Pascual gimió gozando de la suave caricia, la cara traspuesta en una mueca de placer al verse arrastrado sobre la gran cama.

Le machaco la polla un par de veces, excitada como estaba apenas le dio tiempo a deshacerse de la colcha para colarse entre las sabanas blanca,deshaciéndose de una vez por todas de las bragas rosas, abrió las piernas al máximo, el ardor del la vagina rezumando los jugos de la corrida hasta colarse entre sus nalgas.

Estaba muy cachonda, y para postres debía refrenar a Pascual que apenas podría aguantar mucho mas.

• Espera Pascual ….-- le rogó sujetándole la polla mientras este se colocaba entre sus piernas nervioso como un potrillo ,-- si bien lo había desvirgado, no sabia muy bien como resultaría aquella segunda vez.-- Esoo es, despacitooo, vennn asiii-- continuo guiándole.

Pascual sudaba como un cerdo, pero obedeció a Violeta. Aquella vez quería que durase mas, tumbada como estaba sobre la cama se coloco sobre ella rozando la suave piel con suavidad, tanteo un par de veces la polla sobre la espesa humedad de su coño. Aquello era una delicia! – frotando su polla contra la carne hinchada hasta que lentamente el enorme cabezón enfilo el apretado agujero, haciendo a Violeta jadear como una gata.

Ella apretó las mandíbulas al notar la enorme seta empujando toda aquella enormidad dilatando las paredes de su vagina, era tan enorme que le pareció una eternidad cuando por fin la penetro por completo. Lo sujeto de la espalda, procurando que no se moviese , intentando acostumbrarse a cada palmo de cipote, hasta que al fin sus huevos descansaron sobre la pegajosa humedad.

• Uffffffffffffffffffff , que suaveeee y mojaditoooo, ahhhhhh como me apretaaaaaaaaaa!.-- gruño tensando los músculos del cuello.--

Violeta viéndolo al borde de la corrida, levanto las piernas hasta la cintura de su vecino colocandolas detrás , notando como las paredes de su vagina apretaban aplastando la gruesa barra de carne hasta provocarle un doloroso placer. Tenia el coño dilatado como nunca, la punta del rabo tocando la matriz y la mole de el aplastandola sobre la cama.

• Agggggggggggggg, aaaaaaaaaaaaahhhhhhh aullaba Pascual al empezar a empujar con fuerza, hasta volver a lanzarse hundirse en las jugosas paredes una y otra vez.

Como si un obús la traspasase, se sujeto tan buenamente como pudo al cuello de su vecinito que empezó un mete-saca profundo y bestial. El orgasmo la arraso al segundo pollazo, sin poder dejar de gritar ante los sonoros chirridos de la cama al moverse en un constante Ñiiiiiq, Ñiiiiiq, Ñiiiiq, Ñiiiiq, Ñiiiiq. Aulló como loca al arañar sin compasión la ancha espalda peluda.

Pascual apretaba sus tetas con furia cuando de un chapoteo profundo acabo por correrse brutalmente, hundiendo su polla hasta casi traspasarle el vientre y el agradable calor espeso empezó a llenarla por completo.

Hechos polvo, los dos se quedaron callados intentando recuperarse tan buenamente como podían, Pascual con una sonrisa tonta descansando su cabeza sobre la mullida almohada de las tetas de su vecina. Violeta aun notando la caliente inyección de semen inundando su vagina, la polla aun medio tiesa descansando en su útero.

• Ha estado bieeennn....-- susurro acariciando la peluda espalda de Pascual-- eres un buen alummnoooo.... dejo sin terminar al notar la boca mamando de nuevo de sus pezones.

Mmmmm, muuuuuy bueeenoooo....-- acaricio con goce la espalda. * Siiiiii?-- Que te parece si.... repetimooossss....-- volvió a chupar el pezón con la punta de la lengua.

Abrió los ojos asombrada al notar la dureza de la polla dentro de su coño, ya estaba duro otra vez. Como demonios era posible?, bajo las piernas descansandolas , no podía ser...., o si?

Pascual seguía encima de ella, sin dejarla escapar de su peso aun con la polla palpitante dentro de ella.

• Esperaaaa, espe...-- la dejo a medio hablar cuando al fin volvió a lanzarse a follarla.-- abrió la boca medio sorprendida.--

la Tranca entraba, roja y brillante de la corrida anterior, entre cada una de las profundas riñonadas que hacían traquetear la cama como si fuera a desmontarse de un momento a otro. Los chirridos empezaron a volverse cada vez mas sonoros cuando empezaron a golpear la pared, la estaba jodiendo de manera salvaje, entre chapoteos de su polla Violeta se corrió violentamente entre escalofríos con Pascual entrando y saliendo cada vez mas rápido.

Hacia rato que había empezado a gruñir , mas parecido a un animal que al pobre chico que empezaba a conocer tan profundamente.

• Ahhhhhhh, ahhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhhhhhh aulló al clavar un pollazo profundo y empezar a correrse vaciándose en largos chorros .

Violeta noto el calor del semen llenándola de nuevo hasta sentirse repleta , oyó a Pascual gruñir acabando de un ultimo empujón medio muerto sobre ella, el pesado cuerpo la aplastaba sin apenas dejarle respirar, ambos estaban agotados.

Como pudo empujo el cuerpo de su vecinito hacia un lado , lo oyó quejarse algo. Estaba sofocada, aun cuando la polla mojada de Pascual se deslizo de su coño, apenas podía creérselo. Aun estaba algo tiesa.

Miro detenidamente a su cansado vecino , los rizos rubios pegados a la cara por el sudor, el cuerpo empapado y brillante , volteado boca arriba como estaba aun podía verle mejor el rabo casi tieso cubierto con unas gotitas de fluidos de los dos mezclados..

Pero que demonios comía este chico?-- se dijo violeta , ella si que necesitaba descansar, le escocia el coño de la fricción de el enorme cipote, sorprendentemente la viscosa mucosidad empezaba a deslizarse mojando las sabanas blancas.

• Menuda lechada....! – se palpo su distendido coño suspirando.-- Diooos y volvía a estar duro como una roca!-- era como uno de esos sementales...-- suerte que la flojera le había dado algo de tiempo para salir de allí pitando.

Procurando no moverse con brusquedad, bajo la sabana de la cintura ojeando por encima del hombro a su agotado vecino, dos polvos estaban bien..., muy pero que muy bien.

El reloj de la mesilla marcaba las 23:35, abrió los ojos sorprendida ante la revelecion. Si ella había llegado a las 21:45 y había estado buscándolo cerca de 15 minutos, eso quería decir....,

• Nooooooo.... ! Localizo sus bragas justo delante de ella en el suelo, a su lado algo mas lejos los pantalones de lana estaban arrugados en una bola informe, su chaqueta de lana aun colgada de uno de los postes metálicos de la cama.

No sabia si fue el leve chirrido que provoco aquella reacción, instintivamente cerro los ojos cuando sus manos ya envolvían la chaqueta, solo supo que el peludo brazo de Pascual la sujetaba de la cintura volviendo a arrastrarla al centro de la cama.

El poderoso brazo la sujetaba decidido. – No te vayaaas Violeta..., mira como estoy todavía! – tumbándola de lado mientras restregaba su pegajosa tranca entre la raja del culo, sin darle tiempo a soltar queja alguna restregro el glande mojado entre los cachetes hasta que la bestial polla penetro su vagina de un ruidoso CHOOOOOOOFFF! Tragando palmo a palmo por la dilatadisima raja , hasta que de un grito bestial la enterró por entero hasta el mismísimo útero.

• Diooooooooooos Pascuaaallll, Ufffffffffffffffff.-- gruño llena de la monstruosa polla.-- Quedate quietooo un pocoooo, por tu madreeee …., uffffffffffffff....-- protesto con la cara traspasada entre dolor y placer. Ni que decir que aumento cuando la mano que sujetaba su cintura se deslizo por sus piernas hasta que uno de los dedazos comenzó a restregar el abultado clítoris.

A violeta se le agolpo toda la sangre a la cara, estaba al borde de otro orgasmo ya perdida la cuenta , gemía alucinada ante tanta calentura, Pascual empezaba a moverse embistiendo como un animal , el mete-saca clavandole la punta del rabo casi hasta el útero, follandola sin descanso dentro y fuera una y otra vez, una y otra vez, el dolor y el placer casi por igual, apretándola una teta a cada honda riñonada, no le importo morder su cuello mientras la follaba como un animal y así lo hizo.

Aulló al correrse salvajemente con la barra de carne atravesándola brutalmente, grito desesperada mordiendo la almohada cuando las primeras lagrimas empezaron a salir de sus ojos. Otro orgasmo le golpeo de los pies a la cabeza y todo se volvio borroso ante la inyección caliente llenándola otra vez, descargando cortos chorros espumosos que la dejaron medio muerta.

Pascual se detuvo ante el ultimo manguerazo aun sujetándola de la cintura medio muerto por el esfuerzo.

Desde donde estaba la cara roja del chico sonreía con una mueca idiota pintada en la acalorada cara.

Despegando su polla de la jugosa raja de su vecina, se estiro cuan largo era sobre el colchón.

Su pecho subía y baja rápidamente, como un fuelle sin aire.

A su lado Violeta recuperaba el aliento tan buenamente como podía, toda ella cubierta de una fina capa de sudor que hacia resplandecer su blanca piel, la melena extendida sobre la cama, los labios entreabiertos aun hinchados, las tetas cremosas subiendo y bajando lentamente, la estrecha cintura dibujando unas caderas dignas de agarrarse cuando uno quería meterle la polla entre aquel nido de rizos castaños que adoraba.

Gimió agotado, esa noche si que dormiría bien. Poco a poco, la flojera se le vino encima hasta casi dejarlo traspuesto.

Fue el brazo de Violeta lo que lo saco de ese letargo, no sabia muy bien cuanto tiempo se habían quedado dormidos, las sabanas seguían enrolladas en su cintura, su polla empalmada volvía a estar a punto. Pero los adormilados ojos pudieron ver como violeta lo zarandeaba medio vestida de cintura para arriba.

• Despierta …., va..., despierta... es muy tarde... – Tu madre no tardara en llegar..., Joooder otra vez..., – murmuro contemplando la tienda de campaña levantando la sabana.
• Agggghhh! Que sueñooooo..., dejame dormir un poquito...-- Intento volverse hacia el otro lado.
• Estas loco ?, si tu madre nos pilla aquí de esta guisa...-- Vamos...., no seas malo... ayudame a adecentar esto un poco – le dijo Violeta con los pies en el suelo .
• Buuuenoooo... , pero mira como estoy..., tendrás que....!-- dejo sin acabar Pascual apartando la sabana.
• Tu vístete..., luego veremos..., vahhh... le lanzo la camisa desde el otro lado de la cama.

Los dos se vistieron con algo de dificultad, Pascual intentando cubrir la dolorosa erección se anudo las zapatillas sin mucha prisa. Violeta aun con la chaquetilla puesta , se apresuraba por recoger sus bragas rosas y ponérselas con mucho cuidado.

Le escocia el coño de una manera brutal, el emplasto mucoso y viscoso no dejaba de salirle del coño como si se tratase de la regla. Mentalmente maldijo mientras se calzaba las bragas, debía encontrar una puta compresa , pero allí en semejante mausoleo no creía encontrarla.

Contrariada por la situación se olvido de todo, y estiro la sabana blanca. Sus ojos dieron con la descomunal mancha acusatoria, y la sangre se le agolpo en la cara. Pero cuantos días llevaría sin descargar?-- Como era posible, – negando con la cabeza cubrió con preocupación la cama con la colcha de ganchillo , alisando lo mejor que pudo la superficie de la cama.

Parecía como si nada hubiese pasado, eso pensaría ella-- se dijo. Solo que, si uno dejaba de lado el intenso olor a semen y fluidos flotando no podría evitar pensar en la contundente follada llevada sobre el armatoste de otra época. Apresurándose se dirigió hacia la ventana , debía ventilar aquel olor de jodienda cuanto antes, dejar la ventana abierta un par de horas, o quizás un par de días.

Volviéndose , se apresuro a dirigirse al lavabo. Pascual hacia rato que lo esperaba abajo, sin duda con la polla bien tiesa.

Aquella vez tendría que conformarse con una mamada rápida, contemplo el reloj del pasillo marcando las 0:45.

llego al lavabo apurada, bajándose las bragas llenas de semen viscoso. Aun seguía escupiendo la glutinosa corrida, preocupada rebusco entre el armario , intentando dar con algo para taponar la impresionante descarga, la leche seguía fluyendo como un manantial , contrariada agarro una compresa de perdidas de orina y la coloco asustada.

Y si aquello tenia consecuencias graves?.-- negando con fuerza, se subió por fin los pantalones y bajo al comedor.

Le ardía el coño, los labios vaginales le escocían al rozarse con la compresa. Con dificultad bajo los escalones traspasada por los pinchazos, con las piernas abiertas para evitar los roces se dirigió hacia el comedor donde Pascual lo esperaba sentado.

• Anda... que gracioso, andas como un pato!-- Te encuentras mal?-- le pregunto riéndose.
• Seras cabronazooooo...! le lanzo un cojín a la cabeza.-- Encimas tienes los huevos para decírmelo!-- Por tu culpa, joder...! – Puto salidooo!-- exclamo furiosa.
• Oyeee... protesto con tono inocente-- De verdad estas mala?-- Yooo... bajo la cabeza algo arrepentido-- pensaba que hacías broma....-- susurro.
• Bromaaa... ! – acabo serenándose al ver la reacción-- Veras..., eres muy grande..., vamos... que... tienes una polla descomunal...., y claro... pues... eso, que cuesta acostumbrarse.
• Pero tu te acostumbraras, a que si?-- hablo entusiasmado-- me encanta metertela así cuando estas bien empapadita, es jugoso y calentito y me encantaaaa!-- sentencio infantilmente.
• Ehhhh..., supongo que …. me ha sorprendido..., veras . Normalmente tu no hacías esto con nadie... verdad? – le pregunto curiosa.
• No...-- contesto contundente Pascual-- Solo se me ponía así al despertar... Dura como una roca... y a veces, a veces...-- se sonrojo bajando la cabeza-- manchaba las sabanas.
• Veras es normal, que... bueno que …. te acaricies …, tal como me dijiste el otro día. Eso Es! – si no después es...
• Ahhhh, que no podía parar...! – siii no se lo que me pasaba, pero no habia manera..., se me pone como una roca... como ahora..., mira.-- dejandole ver el bulto de sus pantalones.-- Pero..., si te hago daño...-- se encogió resignado.

Violeta lo vio entristecido, y aun después de semejante sesión follatoria le atravesó un curioso instinto maternal, aun sentía la lechada empapando la compresa. Pero aun así, supo que le debía una ultima corrida .

Situándose entre sus piernas se arrodillo de espaldas a la puerta, entre las piernas de Pascual que impaciente dejaba las manos sobre la butaca preferida de su madre, observo como Violeta adelantaba su mano hasta dar con la tensa cremallera y la bajaba liberando la gruesa erección aun tapada.

Respiro agitado al sentir las manos de Violeta acariciando la gorda barra de carne sin apartar sus ojos de los de él, colocando finalmente la otra mano bajo los gruesos testículos.

Se tenso nervioso sobre la butaca, sus manos firmemente aferradas al cuero de la butaca. Ella le agarro los huevos con fuerza sobandolos y soltandolos rápidamente.

• Viooooletaaaaaa ahhhhhh, – gimió asustado , sin dejar de mirarla agarrando el grueso tronco y empezar a acariciarlo . Ufffff, ufffff, ufffff, ohhhhhh queee bueeenooo, oooohhhh, ohhhhhh...

Ella podía oírlo suplicar como hacia unos segundos ella hacia, se sentía poderosa pajeando su polla con furia arriba y abajo arrastraba sus mano empapada de flujo transparente acelerando cada tallada, arrancando los suspiros ,-- Ohhhhh maaaaas rapidoooooo, ohhhhh, ohhhhh...-- suspiro cerrando los ojos . Ella se lanzo a machacarsela con mas fuerza, apretándola tan fuerte como podía, le latía en la mano como un motor , la venas hinchadas rozando su palma lo acerco a su boca punteando con la lengua la gotita de semen que empezaba a sudar.

Casi sin darle tregua enrosco la lengua por todo el cabezón , sin dejar de llenarse la boca de la seta sintió como las manos hasta ahora quietas sobre los reposa brazos la agarraban de la melena con firmeza, apartándole los largos mechones ambos se miraron con lascivia.

Dedicándose a enloquecerlo, lamió de arriba a abajo el grueso tronco, chupando cada hinchada vena hasta hacerse con ese sabor a macho en sus papilas, lo oía suspirar con las mandíbulas tensas . Sonriendo perversa, lamió la polla como un sabroso helado de chocolate y cuando sentía las manos de Pascual apoyadas sobre su cabeza se lanzo, abrió la boca empezando a meterse tanta rabo como pudiese.

Enseguida empezó a escuchar los sollozos del chico, tragando tanta carne como buenamente podía las mandíbulas le dolían una barbaridad, pero no le importo. Pascual estaba en el Nirvana, bien que podía verlo. Asfixiada ante tanta carne, empezó a bajar y subir lentamente, la saliva escurriéndose por su boca ayudaba de lo lindo, y pronto comenzó a gemir al compás impuesto por Pascual .

Cada vez sentía hincharse mas y mas , dándole alas para acelerar los chupetones.

El delicioso sabor amargo se mezclaba con los jadeos del pobre chico que empezaba a rogarle a la vez que se dejaba mamar , su mano amasando los inmensos cojones.

• ohhhhhh,ooooooooooohhhhh, oooooooooooooooooooohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh-- suspiraba Pascual bombeando su tranca dentro de la boca de Violeta.

Lanzándose en un ultimo vistazo, acelero la mamada hasta que la tensión de los músculos se volvió salvaje. Nada la hubiera movido de allí, ni si quiera el ruido de la cerradura de la puerta abriéndose y el inconfundible sonido de un pasos lentos parados frente a la visión.

Violeta no escucho nada de esto, solo se vio agarrada con fuerza por el pelo al escuchar los gemidos alterados de su vecino descargando un amargo chorro de esperma tras otro. Claaaccc!, el bastón cayo al suelo en un golpe seco, solo entonces entreabrió los ojos sospechando de donde provenía el ruido. Pero ya no podía parar, continuo eyaculando como un surtidor de semen tragando tan buenamente como pudo la espumosa y cálida crema hasta que las manos de Pascual acabaron soltando su pelo totalmente satisfecho.

Sintiendo el picor de la mirada clavada en su espalda cerro los ojos ante lo que se avecinaba ,saco de su boca la polla fláccida, sabiendo que el chillido que empezaba a martillear sus oídos iba dirigido a Ella.

• Viooooletaaaaaaaa! , queee demonioss...! aulló furiosa doña Eugenia enfurecida acercándose agilmente hasta donde ella estaba arrodillada.

Jovencitaaaaa , esto es....-- pronuncio sonrojada por la humillación-- Quiero hablar contigo ahora mismo , chillo con aire de tirana.-- En la cocina...

Violeta se levanto con las mejillas ardiendo aun con una pequeña gota de semen en la comisura de la boca, agachando la cabeza ante lo que se aproximaba.

• Y tu jovencito, sera mejor que te vayas a dormir, enseguida! -- chillo furiosa dirigiéndose a Pascual.
• Noooo, no me voyyyyyyy ....,-- le grito desafiándola-- me quedo con Violeta – Ella es mi noviaaa y no puedes meterte con ella así como .... – dejo sin terminar la frase al enrojecer hasta la raíz de su rizado pelo.

Violeta cerro los ojos aterrorizada, aquello no podía ir a peor..., – Suuu novia....-- ahora si que esta sentenciada y lista para ser ejecutada.

empezó a sentir verdadero miedo subiendo por la columna vertebral al sentir la honda respiración de Doña Angustias soportando aquella ultima gamberrada. Eso si daba miedo, pronto la mano sudorosa de pascual la sujeto con firmeza mientras ambos se quedaban frente a la anciana.

• Mama... , por favor... no es para tanto..., me gusta mucho Violeta y yo a ella también, verdad? – lo miro con ojos de corderillo.

La respuesta se quedo atascada en su garganta, si decía que si , todo aquello se convertiría en una situación surrealista, aun por el rabillo del ojo la cara de la pobre anciana había palidecido brutalmente, solo le faltaba matarla allí mismo , pero si lo negaba todo y se largaba de allí, quien sabe … solo a lo mejor se le ocurría demandarla..., o hacer que la metieran en la cárcel.

Apretando la mano sobre la de Pascual , el hilo de voz salio de su boca como si se tratase de otra persona, – Ehhhh , siiii, algoo así como novios....!

La suerte estaba echada.