Que hizo ella para merecer todo eso??? (6.)

Violeta desvirga al cachondo vecino .

  • Mmmmmm, mmmmmm, mmmmm, mmmmmm-- gimió Pascual al frotarse la polla con mucha tranquilidad, – el gustazo le llevaba a machacársela sin descanso desde hacia casi una dos horas.

Cuando por fin el éxtasis exploto sobre la sabana de spiderman volvió a manchar descontroladamente en un potente chorro de aquella pastosa nata blanca. Se sentía tan a gusto en su cama, masajeandose el rabo sin descanso, que apenas había dejado de hacerlo desde que se acostara.

Eso le encantaba..., es mas..., era lo mejor del mundo-- pensó de nuevo al recordar el gustillo que le llegaba por todos lados.

Si seguía así, no podría levantarse por la mañana sin gandulear y arrastrarse por la tienda como alma en pena. Contento con el alivio de su mano, se volvió para taparse cerrando los ojos . El sueño llego casi como flotando.., esta vez Violeta estaba vestida de Wonder woman, los enormes pechos casi despuntando el uniforme rojo y dorado, enfundada en aquellas botas rojas tan sexys.

Se revolvió aun en medio del sueño, cuando se arrodillo frente a él; Thor y empezaba a hurgar su entrepierna hasta hacerlo suspirar de nuevo.

Cuando su boca se apodero de la gran barra de carne, la observo tragarse hambrienta cada palmo con hambre en medio de una serie de chupadas muy excitantes, el sujeto su larga melena oscura con ambas manos mientras disfrutaba mas y mas de cada lameton.

Era alucinante ver aquella boca tragando su carne con un ansia descomunal, solo pudo echar la cabeza hacia atrás mientras se dedicaba enterrándose mas profundamente en su cálida garganta, Mmmmmmm como empezaba a gustarle aquello!.

Se dejo llevar gustosamente, estaba a punto de explotar notaba sus pelotas pinchándole y Violeta le sonreía gustosa.

Antes de verla tragarse la nata espesa, noto como una mano lo agitaba por el hombro arrastrándole de nuevo a la realidad, sin poder evitar las reacciones de su traicionero cuerpo se volteo al notar el tacto de la mano, sin ni siquiera abrir los ojos noto como escupía traicioneramente la espesa leche sin importar a quien o que daba.

  • Ahhhhh, Pascuaaaal – retrocedió asustada Eugenia .-- casi a punto de empaparse con la lechada de su muy dotado pequeñín.

Intentando aparentar normalidad, contemplo las siguientes rachas de esperma escupido sin control alguno..., – igualito que su padre...-- suspiro nostálgica.

Después de observarlo muda de la asombro, tuvo que reconocer que su hijo debía tener muchísimo aguante..., tosiendo algo contrariada lo vio desperezarse y mirarla algo avergonzado, aquella vez no tuvo que decirle nada..., el salio corriendo hacia el cuarto de baño sin dirigir le una sola queja o reniego.

Iba a ser bueno....

Eugenia contemplo las sabanas ladeando la cabeza preocupada, desde luego que este niño necesitaba descargarse, solo había que oler la potente esencia a macho cabrio para darse cuenta , recogiendo las sabanas manchada en la cesta de ropa sucia abrió la ventana para que entrara algo de aire en el viciado dormitorio.

  • Ay Violeta..., ojala no me equivoque... pero hija mía …, vas a tener una tarde muuuuy ocupada.-- se apresuro a salir con la cesta de ropa sucia.

Pascual se sentía algo confundido..., esa tarde volvería Violeta a cuidar de él, pero ahora que conocía algo de su deliciosa manera de chuparlo, ya no quería jugar a ningún video juego.

Aplastándose los rizos frente al espejo del cuarto de baño, se termino de abrochar el uniforme azul del centro comercial, ato los cordones de sus deportivas y salio pitando hacia la cocina. – Estaba hambriento.--

Eugenia beso la frente de su angelito cuando deposito el bol con cereales y fruta. Enseguida olvido el incidente de aquel despertar tan excitante y volvieron a su rutina habitual, preparo su bolsa para el almuerzo , despidiéndose afectuosamente frente a la puerta de la cocina.

  • Recuerda Pascual que no estaré cuando vuelvas, Violeta te habrá dejado la merienda .., así que.. tu a lo tuyo... , de acuerdo?
  • Vale Mami, a lo mio..., – se volvió una ultima vez para dirigirse a su madre.-- Puedo enseñarle a Violeta mi colección de video juegos...?-- termino por decirle desde la ventanilla del mono volumen.
  • Estooo... siii, no creo que haya ningún problema.

Solo dejo escapar el aire cuando la furgoneta torció la ultima esquina , --debía preparase para marchar.

Cambiaría las sabanas del niño..., fumigaría la habitación con ambientador de flores..., dios quisiera que aquella tarde cuando volviese hubiera calmado algo de la quemazón del peque.

Violeta se dirigió apurada a la parada de autobús, aquel día salia una hora antes de la biblioteca, subiendo al abarrotado transporte publico sujeta a la barra superior, contemplo las cansadas caras de los viajeros, recordó por un momento revisar el correo electrónico, sujeta a duras penas al cada vez mas lleno autobús , tecleo su móvil concentrada en los mensajes, solo cuando se puso de nuevo en marcha noto el bulto apretándose contra su culo.

Intento no hacer caso de la tremenda erección frotándose contra el algodón de su falda estampada. A cada bache del camino la erección parecía levantar la tela poco a poco. Avergonzada e intentando no llamar la atención, aparto los ojos de la pantalla de su móvil para mirar por encima del hombre.

Estaba abarrotado, pero sin duda la durisima prueba que levantaba por segundos su falda pertenecía a un chaval algo joven, lo fulmino con la mirada, intentando no llamar demasiado la atención.

El pobre chico con la cara roja de rubor se aparto como alma que lleva al diablo y casi se baja en marcha del autobús.

Mas tranquila llego a su parada con facilidad, subió la cuesta hasta su casa y entro con cuidado hacia el interior.

Le recibió el jadeo ahogado al final del pasillo de su hermana Maria y de Alberto. Negando con la cabeza se apresuro a llegar a la cocina con las compras. Lleno la nevera con la verdura comprada, saco del interior de la misma la enorme olla y la puso sobre el fogón de la cocina.

Lavo la lechuga y troceo algo para acompañar la ensalada, los gritos cada vez mas alto la estaban poniendo nerviosa..., dejo todo dispuesto , rectificando la sal de la sopa y añadiendo las estrellitas a ultima hora.

Por ultimo se paro frente al congelador y apunto un par de cosas en la pizarra.

Todo estaba dispuesto, así que se dirigió al comedor para doblar la ropa de la cesta ,ordenando y disponiendo cada una de las prendas de manera pulcra sobre la mesa, solo las campanadas del reloj la distrajeron de su siguiente tarea ; cuidar de Pascual.

Nerviosa por lo sucedido el viernes, se apresuro a contemplarse frente al espejo de la entrada. Aquella vez escogió una camisa floreada de su madre, solo una talla mas grande de la que utilizaba, sobre ella una fina chaqueta de lana rosa.

Aliso con cuidado la tela estampada, ajustando y colocando la falda de algodón .

Estaba perfecta, --se dijo-- la perfecta y aburrida bibliotecaria. Incluso se enrollo su larga melena en un moño bajo.

Salio hacia fuera con un ligero hormigueo por todos lados, bajo las escaleras y toco la puerta de su vecina decidida.

Eugenia contemplo el impecable aspecto de su vecina con ojo critico, si como sospechaba esa tarde-noche terminaban arriba, se le notaria a la legua que estaba hecha para su hijito. La saludo dulcemente haciéndola pasa al comedor.

  • Violeta hija..., te dejo algo de dinero encima de la encimera por si queréis pedir pizza. A mi niño le encanta!, no creo que tarde en llegar , solo agarro las llaves y me voy. Eh?
  • Ah... bueno..., pero es que... va a volver mas tarde...?-- pregunto cada vez mas nerviosa.
  • Esto... no te había dicho nada? Uy... lo siento hija... esta cabeza mía...-- termino acercándose

Veras.., un par de señoras de rehabilitación cenaran en un self -service nuevo y claro..., * Ahh...pero-- termino de decir Violeta confusa. * Si... ya lo se... debería habértelo contado..., cuanto lo lamento..., pero es que a mi edad... no salgo mucho..., así que..., --ademas, prosiguió con la cara iluminada , a Pascual le das la cena, y a las 10 a la cama. No creo que volvamos mas tarde de las 12... Uy hija! Es que vamos a ver una películas de esas golfas!-- se rió retocándose el moño * Ahhh! La sesión golfa, yaaa!-- .

Violeta miro el reloj tras su espalda, intentando no contar las largas horas que quedaban por delante.

  • Si … bueno … avisare a casa.-- No quiero que se preocupen...-- aclaro dirigiéndose al teléfono.
  • Claro,-- le hablo con la chaqueta sobre los hombros-- Mi casa es tu casa..., cuida de mi pequeñín eh?-- termino despidiéndose.

Violeta tecleo el numero de su casa, como de costumbre estarían demasiado ocupados para contestarlo así que con lentitud dejo el mensaje en el contestador. Contemplo de nuevo la hora y se dirigió a la cocina, si se apuraba podría preparar algo de pasta..., quien decía que tuviera que comer pizza.

Hirvió la pasta hasta escurrirla con cuidado, preparo la sarten con aceite hirviendo echando dentro la olorosa salsa de tomate improvisada con albahaca y ajo.

Cuando estuvo ligada , probó con cuidado sin ni siquiera enterarse del portazo a su espalda.

Cuando la cuchara de madera tocaba sus labios, dos enormes manos la sujetaron las tetas por detrás.

Casi dejo escapar la cuchara, pero pudo terminar de colocarla sobre los tallarines aun medio pillada por sorpresa.

  • Quietoooo Pascual...-- las manos fuera, eh?
  • Mmmmm, si es que me encanta tocártelas.. – No me digas... que no te gusta un poco...
  • Oye.... ahora no es el momento..., así que suelta.

Decepcionado bajo las palmas de los hermosos pechos de Violeta, no sin inclinarse hacia delante oliendo la pasta.

El roce del paquete contra su falda fue como una descarga eléctrica, lo reconocía..., sin pretenderlo se apretó mas contra la erección, restregándose ligeramente contra él.

  • Se bueno y lavate las manos... comeremos algo...-- vale? – siguió acariciándose contra la polla.
  • Vale..., pero luego...-- continuo Pascual.
  • Buenooo... ya veremos...-- termino por contentar ronca.

Se aparto con rapidez sentándose frente al ventanal, dispuesto a devorar sus plato de pasta. Siguió cada uno de los movimientos de ella alrededor de la mesa, y solo cuando estuvo sentada frente a él . Pudo lanzarse a comer el humeante plato de tallarines.

Violeta contemplaba el insaciable capacidad de tragar tallarines a dos carrillos, como si se fuera a terminar el mundo.

  • Despacio..., o te ahogaras...-- suspiro aspirando sus tallarines con los ojos fijos en el plato medio vacío de su vecino.
  • Están riquisiiiimoooos!-- farfullo con la boca medio llena de salsa de tomate.
  • Me alegro...-- termino riendo Violeta.

Entre risas, siguieron cenando en la cocina olvidándose de todo.

  • Y como ha ido tu día?-- pregunto Violeta pelando una naranja.
  • Bieennn..., hoy a entrado una remesa nueva de leche y comida de animales.-- comento Pascual entusiasmado-- para colmo se estropeo el montacargas y Plafff... !

Para cuando salieron de la cocina ambos reían con las ocurrencias del otro, se asombro al ver como apenas parecían haber pasado hora y media.

  • Que te parece si te enseño mi colección de video juegos...,-- tengo todo un armario para mi.
  • En serio? … – se vio arrastrada hacia arriba por el incansable chico.

En efecto, su cuarto estaba atestado de video juegos, las paredes estaban cubiertas de cientos de posters de promoción de los dichosos jueguecitos. Casi sin un palmo de pared libre contemplo, la mesa con una única silla decrepita, y la cama ancha donde sin duda dormiría el querubín.

La colcha de hulk era de lo mas cómica, tuvo que reprimir la sonrisa cuando se vio arrastrada hasta los pies de la cama del entusiasmado chico. Se estiro hacia atrás , contemplando el techo cubierto de heroínas de cómic apenas cubiertos por unos palmos de tela brillante, curvas redondeadas de chicas sexys en posturas de lo mas provocativo.

Decenas de ellos cubrían casi todo el techo. Violeta se pregunto divertida lo ridícula que estaría ella en uno de aquellos vestidos, sacudió la cabeza hasta fijarse en su fiel vecinito estirado junto a ella , observando también el techo.

  • Sabes... te pareces a ella...-- pronuncio en tono seguro.
  • A quien...? a una de esas... Que va!.... ni en un millón de años.-- atizo un puñetazo travieso.
  • Que si..., eres como Wonder woman..., Dianaaa vamos!-- esa de ahí !

Señalando hacia el centro del mural , se refregó el hombro golpeado volteándose para ver mejor a su vecina.

  • Diana ; la reina de las Amazonas..., una princesa de Temiscira.. respiro con dificultad.
  • Pfffff...., esa... la morena?-- apunto con el dedo .
  • Si..., el mismo pelo negro, una tetas enormes..., mmmmm …, – termino poniendo su mano sobre la teta de Violeta, magreando lentamente sobre la blusa.
  • No creo... que me parecezca a esta tía... ni en pintura..., – dejo vagar la mano de Pascual hasta rozar el pezón.-- Además..., no es de verdad?

Con las neuronas dispersas desde que empezara a sobarle con dedicación la teta derecha, Pascual se quedo pasmado al notar a su vecina voltearse y quedar cara a cara con él, su cara a escasos dos palmos de la suya , sonrió medio idiotizado al cerrar los ojos para besarla.

Violeta tuvo que aguantarse la mueca, pero todo se le olvido cuando su boca se poso sobre la suya suave y cálida. Se ladeo aun mas cuando ella abrió la boca volviendo a enloquecer su boca.

La lengua de este chico se enrocaba como una boa alrededor de la suya, dejándola casi muda y con las bragas muy empapadas.

El beso se convirtió en continuo roce de lenguas, suspiros y saliva cada vez mas lento y lascivo.

  • Sacate la ropa Pascual...-- murmuro muy bajito tomando algo de aliento.

El chaval pareció despertar de la ensoñación en la que estaba sumido abriendo los ojos de par en par. – Queee... pero yo no... tu...! – contesto aturullado el chico, Violeta no dejaría de alucinarlo, su mano se movió lentamente, bajando muy despacio hasta el estomago , ahuecando la mano sobre la enorme erección de sus bermudas, le apretó las pelotas y luego la soltó. – arrancándole un gruñido nada doloroso.

  • Aaaaaaayyyy!-- protesto muy excitado, --no quería dejar de besarla pero tuvo que hacerlo para levantarse parcialmente y despojarse de la camiseta. La piel cubierta del espeso vello rubio lo hizo enrojecer avergonzado.
  • Mmmmmm... cuanto pelo, muchachote! – gimió Violeta aun con toda la ropa puesta.

Envalentonada , movió su mano hasta la cinturilla de las bermudas ayudándole a despojarse de las horrenda tela de camuflaje, el tremendo paquetón parecía reventar los slips de Patricio y Calamardo. Se aguanto de nuevo la risa, este tío!-- por fin recobrada de la impresión acaricio con ternura el suave bello de su estomago tenso , fue deliciosamente perverso magrearlo aun por encima de la tela, torturándolo.

Quien lo hubiera dicho..., estaba como un queso!

Vio como sus roces lo hacían gozar sintiéndose poderosa , la palma de su mano resbalo bajo la tela de algodón viendo claramente la pelambrera rubia al enredar sus dedos en el sedoso pelo, raspando mortificándolo mas.

Intento levantarse asustado, pero lo detuvo sentir la mano rodeando sus huevos masajeandolos.

Pascual echo el cuerpo hacia atrás hasta dejarse hacer, menudo gustazo!-- Vioooletaaa que mee haceeeesss?-- intento quejarse.

  • Yooo... nadaa! Solo estoy jugando con tu rabo! – le susurro al oído mientras le apretaba los cojones y los soltaba ,arrancándole un gemido lastimero. Esooo es ! – satisfecha con sus magreos agarro como pudo la tremenda barra de carne , comenzando a recorrer lentamente arriba y abajo todo lo que pudo, lo debía hacer bien porque el pobre parecía debatirse entre jadeos y gritos según aceleraba cada tallada.

  • Ahhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhh – Maaaas fueeerteee.... Ohhhh-- gruño satisfecho.

Excitada como estaba, no tuvo que rogarle de nuevo. Apretó su roce de la lubricada polla hasta casi hacerlo boquear, dudo un instante. – no le estaría haciendo daño? , no tardaba en cruzar esta pregunta por su mente cuando oyó el largo quejido del muchacho al estirar completamente las manos por la colcha.

  • Te gusta así?-- pregunto algo insegura. Volando su mano por toda la polla arriba y abajo con furia.
  • Me encantaaaaaa....! - Perooooo meee voyyyyy aaaaaaaaaaaa--- dejo sin acabar.

lo sintió apretar las mandíbulas cuando no acabo de terminar la frase explosiva. Por fin, se corría.

Hinchándose en su mano mas y mas al escupir el primer manguerazo de semen espeso. se estrello contra su pudorosa blusa alcanzando su barbilla aun medio estupefacta .

Menudo caño de esperma...-- Diooooossss , si parecía yogur.! --retrocedió boquiabierta.

Se aparto dejando al volcán escupiendo furioso, intentando no tocarse. Lo tenia por todos lados. Con cuidado se deshizo de la chaqueta milagrosamente a salvo, desanudando la blusa sacándola con cuidado, se la saco quedándose en sujetador y falda.

Froto preocupada la tela sin fijarse como su potente vecino, la arrastraba y la colocaba bajo su peso aplastandola a la cama.

  • Alto ahí muchachote..., ya has descargado verdad?-- Pues ala... dejame marcharme.
  • Mmmmmm …, solo un poco mas... – protesto hociqueando entre sus tetas.
  • Oyeeee..., que a las 10. tienes que estar en la cama-- aulló al sentir la boca de Pascual apartando la tela del sostén y chupando con fuerza la aureola.
  • Mmmmmm gruño con los dientes enroscados en el tieso pezón.-- Ya estoy en la camaa....-- argumento sujetando sus tetas con ambas manos , restregando con los pulgares los dilatados pezones.

Violeta disfruto perversamente de la lengua de Pascual, menuda manera de castigarla.-- estaba al borde de correrse sin ni si quiera tocarle mas abajo de la cintura. Y como lo hacia! Ufff.., – jadeo arqueándose contra su boca. El tío no dejaba de alternar una teta y volver a torturar la otra, mamando muy despacio la aureola y luego puntear con la lengua el tenso pezón.

Estaba en el cielo, mmmmm... si querer evitarlo el primer espasmo la arraso de arriba a abajo , corriéndose en medio de pequeños gritos, no pudo evitar abrir las piernas para alojar mejor la tiesa tranca que empezaba a empalmarse contra la falda de algodón.

  • Menudo Calenton-- pensó al bajar las manos para enloquecida por el ardor empezar a levantar la tela de su falda y sujetar aquel esplendido culo.

Pascual levanto la cabeza de las sabrosas Tetas para contemplarla. Estaba preciosa, la piel cremosa ligeramente enrojecida , allí sobre su cama con las piernas abiertas y apretándole el culo de una manera muy agradable.

El gustillo empezaba a apoderarse de nuevo de su polla, tiesa de nuevo bajo la tela de la falda de Violeta, bajando la vista un segundo se dio cuenta que esta había levantado la tela , dejándola únicamente en bragas. La mano acaricio la estrecha tela blanca mojandole la mano, rozo de nuevo con cuidado la tela hasta impregnarse de un fluido que llevo a oler curioso.

  • Mmmmm, era dulce y picante... como la mismísima Violeta.-- siguió acelerando los roces de su mano hasta que una serie de jadeos y contoneos de esta la dejaron aliviada y con su mano empapada de aquellos deliciosos fluidos.

A él que le gustaba probarlo todo, no le fue difícil colocarse con la cara a escasos palmos del oloroso triangulo de tela, hociqueo husmeando y sacando la lengua para probar el liquidillo, el sabor no era desagradable, así que...! siguió lamiendo la tela decidido. Violeta lo sujeto con fuerza del pelo, – Ahogando un grito bajito-- antes de poder reaccionar la mano de su vecina se acerco hasta la tela y la aparto a un lado para ofrecerle la vista de su coño.

Con que así era?-- parecía una de aquellas ostras que tanto gustaban a mama, algo peludito pero sin parecer un monstruo del espacio, rosado y muy húmedo, suspiro hasta estremecer a Violeta que lo empujo de nuevo hacia delante para empezar a chupar aquel jugo tan sabroso que parecía chorrear hasta su boca, lamió tragando hambriento sin dejar de chupar aquel curioso botoncillo rosado, es mas punteo varias veces observando los jadeos mas seguidos, y casi sin querer hundió su lengua en el manantial de donde su boca tragaba con ganas.

Violeta deliraba de puro goce, el pobre chaval le estaba comiendo el coño con una naturalidad aterradora, abandonándose a la lengua de su vecino termino corriéndose furiosamente con un gemido escandaloso, la sangre golpeando su cara y sus sensibles pezones.

Este trago el delicioso jugo de su vecina que parecía estar muerta sobre la colcha, – Le habría echo daño?-- Estaría bien..., – muerto por la preocupación se arrastro hacia arriba para contemplar la agotada Violeta. – Oyeeee, oyeee...., – palmeo con delicadeza su cara.

  • Mmmmm... , paraaa, paraaaaa.... siii , estoy bieeen... valeee...!
  • Que sustoooo! … – pensaba que te había dado algo...-- termino acomodándose con la polla rozando el empapado coño.
  • Estoooo..., Pascuaaaal espera... sera mejor que... salgas de encima....
  • Porque... pregunto medio alelado al sentir resbalar su polla contra el sedoso y húmedo coño.
  • Nooo es una buenaaa ideaaa... – suspiro instintivamente subiendo una pierna y enrollándola en el muslo de Pascual, abriéndose para él, clavandole las uñas en los hombros
  • Perooooo esto da gustitooooo... ufff... no te gustaaaa....-- susurro al volver a sentir ese placer incontrolable latiendo entre sus piernas.

Cerro los ojos bajando de nuevo los ojos para morder el pezón duro y envestir contra la humedad entre sus piernas, resbalando sobre la encharcada masa de pelo y carne jugosa.

Tembló como un crío de 3 años cuando la mano de Violeta repto hasta ambos cuerpos agarrándole con fuerza la polla, boqueo sorprendido al verse sujeto de aquella manera.

Tanteando torpemente pajeo su polla dura hasta tenerla a punto para sujetarla y apuntarla hacia la húmeda entrada que antes había paladeado con hambre.

Pascual grito impaciente al tantear con la punta del enorme rabo la estrecha abertura, procurando no apartar los ojos de las tetas balanceantes de Violeta se hundió algo torpemente en el cremoso y cálido agujero, quedándose petrificado entre las apretadas paredes vaginales.

Violeta aspiro perpleja,-- El descomunal pellón de Pascual la había dejado sin resuello … y aun no se la había metido del todo....-- traspasada como estaba por tanta carne, intento empujarle a moverse. – Pascuaaaalll-- suplico... Muévete un poquito fuera..., así...!-- Pero nada pudo hacer...! – El pobre chaval estaba como muerto...!-- Tendría que desvirgarlo ella!.

Pegados como estaban, tuvo que rodear con ambas piernas el culo del chico para tomar impulso para cambiar la posición con el pobrecillo. Aun así seguía duro como el acero!.

Por fin estaba arriba y Pascual de espaldas contra la cama, la sonrisa idiota de su cara le dejo bien a las claras que debía ser ella quien lo iniciara aun echada como estaba , coloco sus manos sobre su peludo pecho levantándose muy despacio, empalándose muy despacito en la tranca de elefante.

Como si de un misil de duro hierro hirviendo, noto la punta casi llegandole al estómago.

  • Ayyyyyyyyy Dioooooosssss , aaaaaaaaahhhhhhhhhh, diooooooooossss—protesto en un gemido.

Ensartada como estaba , sintió renacer las ganas de su vecinito al endurecerse aun mas dentro de su mas que embutido coño, se sujeto sobre sus caderas para no perder el equilibrio y enseguida las manos de Pascual la sujetaron por las caderas.

Se mordió el labio cuando empezó a cabalgar la polla en un profundo chasquido, casi tenia todo el rabo fuera cuando volvió a clavarle otro envestida lubrica hasta sentir la punta golpeando su útero.

Jadeo excitada al repetir otra subida y bajada por la monstruosa polla de Pascual.

El pobrecillo apenas podía tener la boca cerrada, siseando y jadeando medio extasiado.

Violeta comenzó a subir y bajar por la polla un poco mas acelerada, tenia el coño a reventar y el pobrecillo parecía dejarse follar de lo lindo, antes de que entendiera lo que pasaba noto el pollon latiendo en su coño al descargar la segunda corrida de la noche.

Apretó los muslos reteniendo la lechada algo decepcionada, cayendo rendida sobre la mullida mata de pelo del muchacho.

La corrida la había dejado insatisfecha..., pero siendo la primera vez ...--se sonrojo , antes de advertir como la polla resbalaba de su interior.

  • Muchachote.... estas bien?-- palmeo esta vez divertida Violeta.

El pobre parecía haber recibido una paliza monumental y empezaba a entreabrir los ojos enfocándolos

con entusiasmo en la estupenda chica sobre él.

  • Uffff Violetaaaa, eso ha estado muuuuuy bieeeen..., – A que si?
  • Bueeeenoooo..., digamoooossss que no esta mal!.-- peino el mechón rebelde de su frente.
  • Oyeeee.... repitamoslo... Vaaa!-- intento zarandearla.
  • No se tu... pero a mi me duele todo!, no me digas que no estas cansado?-- acabo por bajarse de encima de su vecino.
  • Ufffff, echo polvo....!-- Pero me gusta esto mas que los Video juegos!-- sentencio convencido.
  • Mira... Descansa muchachote! Se ve a la legua que estas muertoooo!--termino de decir Violeta mientras se arrastraba al borde de la cama y se colocaba bien las bragas y mirando el reloj de la repisa.-- Tu madre no tardara en llegar, y si me ve aquí me mata!-- acabo colocándose la falda .

El sonoro bostezo le dio la razón, procurando no volverse agarro la chaqueta rosa abotonandola sobre los sostenes, debería bastarle hasta llegar a su casa. Enrollo la sucia blusa pringada , metiendola dentro del bolso, delante del espejo del cuarto de baño improviso un moño suelto , saliendo fresca y relajada de nuevo a la habitación.

Su vecinito seguía desnudo dentro de las sabanas, aun observándola desde su privilegiada posición.

  • Mañana volverás, verdad?-- pregunto ansioso.
  • Ehh... supongo que si,-- anda duérmete... – procuro convencer desde la puerta, – Si no duermes mucho mañana no podremos jugar a..., buenooo...-- termino sonrojándose Violeta.
  • Si , si … mira como cierro los ojos...-- Ademas... Aggggghhhh-- bostezo de nuevo esta noche anterior tampoco dormí mucho... estoy medio muerto!
  • Ay pillin..., que estarías haciendo !-- susurro apagando la luz del cuarto .
  • Pensar en ti … Violeta... , pensar en ti mientras me vaciaba una y otra vez.! – murmuro adentrándose en el sueño.

Escucho esa ultima frase con los nervios a flor de piel, temblando bajo las escaleras hasta volver de nuevo a la cocina, recogió los platos de la cena dejándolos en remojo sin dejar de dar vueltas a la ultima frase de Pascual.

Toda la noche? – Vaciándose...-- Madre de Dios... ! – se llevo la mano a la boca, y aun así...!

Acalorada por las ultimas confesiones de su vecinito, oyó llegar el taxi frente a la casa, del interior se bajo la anciana con dificultad.

Cuando subía las escaleras de la entrada , rogó al cielo que no la entretuviera mucho, se mortificaría si se daba cuenta del polvazo con el que había regalado a su angelito.

  • Ay hija, estoy muerta... – dejo el bastón tras la puerta..., mejor te dejo que no puedo dar ni un paso mas. – Confió en que mi niño se haya portado bien, verdad?
  • Si , desde luego... hemos cenado tallarines y luego se ha acostado.-- le dijo casi agarrando el pomo de la puerta. – Hasta mañana....-- se despidió saliendo casi pitando.

Eugenia , aparto el visillo dirigiéndose hacia las escaleras, no era una sentimental. Pero sin duda su querida Violeta había follado de lo lindo con su pequeñín, solo había que ver la mirada culpable de la pobre chica.

Satisfecha se acerco hasta la habitación de su niño , con la luz de su lamparita pudo verlo roncar rendido desnudo en medio de un lío de sabanas y olor a jodienda.

Ilusionada por su esplendido plan, se acostó con una eufórica sonrisa en la cara.