¿Qué es lo que siento? (3)
Continúo en Londres pasándomelo bien.
Qué es lo que siento?(3)
No! Eso no podía estar pasando Me encontraba en mi habitación con un tío comiéndole el rabo y con mis amigas en el pasillo llamándome para que saliera ya que habíamos quedado .
No podía pensar que iba a hacer en ese momento, por lo que hice lo primero que se me ocurrió, guié de la mano a Paul hasta el baño, le dije que se callara y lo encerré con toda la ropa por si les daba por entrar al cuarto aunque iba a impedir por todos los medios que así fuera. Me vestí lo poco que pude, camisa sin abrochar y pantalón y me dirigí corriendo hacia la puerta.
Abrí la puerta no sin antes colocarme el bulto de mi pantalón que fruto del nerviosismo y la excitación ya empezaba a recobrar vida propia. Cuando lo hice intenté disimular y decir que acabando de vestirme aunque la camisa sin abrochar me delataba. No sospecharon ya que saben mi afán por probarme todo el armario antes de decidir lo que me voy a poner.
-Bajáis al Hall ? No tardo nada, en un momento estoy con vosotras.
-Esta bien pero no tardes ya que tus momentos y ratitos duran más de dos horas- sentenció Eva.
Aceptaron y menos mal porque no se que hubiera hecho si alguna me hubiera pedido pasar al baño.
Cuando se fueron y logré tranquilizarme me dirigí al baño creyendo que Paul ya se habría vestido y estaría dispuesto para irse mientras yo tenía el tiempo justo para arreglarme y bajar pero nada más lejos de la realidad. El tío no estaba vestido sino desnudo y estaba empalmado a mas no poder con su instrumento de grandes proporciones mirando al cielo y tocándoselo suavemente. Estaba visto que la situación le había puesto bien cachondo. Decidí acabar rápidamente lo que había empezado, acabar de vestirme y bajar al Hall antes de que aquello acabara mal. Me agaché y empecé a dar pequeños lametones a la punta mientras mi mano lo masturbaba. A ese ritmo no iba a poder aguantar mucho y mucho menos cuando mi otra mano bajó hasta su orificio y tras lubricarme el dedo se lo fui introduciendo por el culo. Cuando alcanzó el orgasmo, su culo atrapó fuertemente mi dedo mientras cinco chorros de leche bastante líquida se escapaban de su polla que fueron a parar directamente a mi cara, no me anime a tragármelo puede que porque me daba un poco de asco al principio aunque ahora no lo dudaría , que quedó completamente blanca. Estuvimos unos segundos en silencio hasta que el pronunció la respuesta a la pregunta que yo le hice en un principio.
-Esto no se acabaría así si yo te hubiera conocido primero- dijo en un tono entre la pena y la resignación.
Me lavé la cara mientras el se vestía y cuando acabó nos despedimos pero antes me dio su número de teléfono por si volvía a Londres y quería compañía en todos los sentidos de la palabra.
Me vestí todo lo rápido que pude pero no debió de ser suficiente pues todos me estaban esperando abajo y las reclamaciones de mis amigas no se hicieron esperar.
Todos dispuestos nos dirigimos hacia la salida donde Henry tenía aparcado su auto. Nos montamos y nos dijo que antes de ir a ningún lado había quedado con dos amigos que nos iban a caer muy bien por lo que nos encaminamos a un barrio residencial de las afueras a por ellos. He de admitir que todas las casas que dejábamos a nuestras espaldas eran similares, varios pisos y un pequeño jardín por lo que seguro que me hubiera perdido si necesitara volver solo.
Cuando llegamos comprobamos que los amigos vivían en las mejores casas del barrio, parecían los más adinerados del barrio cosa que comprobamos nada más verlos ya la ropa que vestían era de marca, una pasarela de moda de los más prestigiosos diseñadores de moda. Ambos eran altos, con cuerpos que se notaban trabajados en el gimnasio, uno de ellos moreno y el otro castaño. Nos los presentó Henry. El rubio era David y el castaño Tommy. Conversaron algo con Henry que ni Bea, ni Eva ni incomprendimos hasta que Henry nos avisó que nos íbamos con lo que proseguimos la marcha. Ellos fueron en otro coche y se pusieron delante como guiándonos. Durante el camino estuvimos entretenidos en desenganchar la pulsera de Eva que se unió a su chaqueta y no conseguíamos sacarla hasta que llegamos un local que parecía amplio.
A partir del momento que entramos no recuerdo mucho solo que el garito estaba muy bien y que pedimos algo de beber que me gustó mucho, la verdad no lo había probado antes y me tomé unas cuantas de más. Reconozco que el alcohol me sienta bastante mal y que con dos copas ya estoy haciendo el tonto pues esa noche me tomé cuatro más o menos por lo que no extrañe mi comportamiento. Los recuerdos son pocos solo se que uno de los momentos cumbre de la noche fue, por supuesto recordado a cada ocasión por mis amigas cada vez que tienen oportunidad, cuando me subí con Henry a una especie de podio a bailar el Relight my fire de Take that y el Overload de las Sugarbabes además con movimientos súper cachondos. Continuó la noche y al parecer gustó el baile porque no se pararon de acercar tíos a bailar conmigo en toda la noche. Algunos realmente guapos muy parecidos a Christian Gálvez(pasapalabra) y a Unax Ugalde en sus años de juventud. Con este último debí ponerme más tonto que de costumbre ya que le debía incitar a que me sobara porque hubo un momento en el que me estrujó el culo. Pensando que se estaba sobrepasando, Henry le dijo que parara si no quería tener problemas por lo que se pusieron un poco gallitos, a ver quien era más macho y se enzarzaron en una pelea que acabó con nuestros cuerpos en la calle puesto que nos echaron. Después de ese incidente y dado que eran las 4 de la madrugada nos volvimos para el hotel despidiéndonos de sus amigos. Henry dijo que me acompañaba a mi cuarto ya que dado mi estado y la somnolencia que me entró, tenía problemas para encontrar mi cuarto y muchos más para abrir la puerta. En el pasillo en el cual nos dividíamos según me contaría Eva más tarde, se quedó mirando desde detrás de la esquina si Henry me abría la puerta y se iba o entraba en el cuarto. Entró en el cuarto, lo que me costará muchas explicaciones en los próximos días. Mientras iba al baño se dedicó a abrirme la cama y cuando salí mechazote directamente diciendo buenas noches. La verdad, no me importó si se iba o se quedaba ya que había espacio suficiente como para cuatro personas . Al día siguiente cuando abrí los ojos me encontré los suyos mirándome fijamente mientras dormía y creo que ese fue uno de los momentos más bonitos de mi vida, no puedo expresar muy bien lo que sentí pero ver como un desconocido, prácticamente lo era, velaba mi sueño fue increíble. En esos momentos me arriesgué por lo que sentía y fui yo el que le besé.
Jamás tendrás un gran amor, pero estarás tranquilo, te sentirás seguro y vivirás ausente