Qué bonito trio!

Un amigo mío me contó no hace mucho lo que le sucedió cierto día, cuando sorprendió a su primita con su mascota y decidí convertirlo en este excitante relato.

QUÉ BONITO TRIO!!

Esto sucedió hace unos meses en un pequeño pueblo, mi prima, mi pequeña prima, una chica de solo 18 añitos pero con un cuerpo de 20 años, quien iba a pensarlo.

Un día caluroso de verano (septiembre para ser exactos), visite a mi familia en aquel lugar cerca de la playa, todo trascurría normal, visitar a mis tíos, salir a la ciudad, en fin, yo con mi primita Isabel, su hermano y su familia con los que me llevo de maravilla, platicamos de todo.

Ellos tienen un perro labrador muy bonito llamado "Chiquilin", un fiel animal, cada vez que voy el perro sale a recibirme, moviendo la cola y eso no solo es conmigo, si no con la gente que el quiere.

Un día, como de costumbre se me ocurrió ir a visitarlos y a platicar con la familia, llegué y como tenemos mucha confianza, abrí el portón y entré al patio de la casa, pero me extrañó que el perro no saliera a recibirme, observe que la puerta estaba cerrada, me imagine que nadie estaba y que se habían llevado al perro, entonces me dije bueno a la tarde vengo a verlos; pero, algo me detuvo, oí algunos murmullos en la sala de la casa, me acerque a la ventana, despacio para no hacer ruido, llegué y como la ventana que da a la sala estaba abierta, abrí la cortina solo un poco para ver quién era el que estaba dentro.

Lo que enseguida observaría me dejó pasmado, mi primita estaba sentada en el sofá acariciando al perro y leyendo unas hojas, que después me enteré que eran de relatos zoofílicos que ella había bajado de Internet, bueno, continué observando sin hacer ruido, ella dejo las hojas, abrió un poco las piernas y se metió la mano debajo de su falda para luego comenzar a masturbarse. Esto lo hacia mientras acariciaba al "Chiquilin" en el lomo. Después su mano bajó al vientre, llegó al pene y el perro dio un pequeño brinco como diciendo eso no lo había sentido nunca, sacó su otra mano de entre su falda y se la dio a oler, "Chiquilin" comenzó a lamerla, se agitó mucho, su enorme verga salió de su capullito y comenzó a crecer y crecer.

Yo me quedé extasiado, no podía soportar aquel espectáculo fabuloso, pues se da el caso de que a mí me encantan los relatos zoofilicos y ya te imaginarás, estaba en estado de shock, pensé mil cosas para como hablarle, sin que se asustara y dejara de hacer aquello.

Me dije a mí mismo –ni modo! algo tengo que hacer, que pase lo que tenga que pasar.

Le hablé muy despacio, ella dio un brinco de susto y exclamó:

Juliooooo!!!! Qué haces ahí?????

Se puso de mil colores, yo no sabia que decir, atiné a decirle que se tranquilizara, que yo no iba a decir nada de lo que había visto, entonces ella muy nerviosa me dijo:

-Qué fue lo que viste??

  • Demasiado…! –Contesté aturdido.

  • Julio, por que no tocaste antes de entrar?

  • No te preocupes… yo no diré nada de esto, tranquilízate por favor.-Le respondí para calmarla.

  • Es que no se qué vas a pensar de mi!. Exclamó preocupada.

  • No pienso nada malo, creo que cada quién hace con su cuerpo lo que le venga en gana.

  • Tu lo crees así..??

  • Claro!.

En ese momento, ella notó que mi verga estaba parada y me preguntó si me había excitado.

-Claro, mucho, es algo raro, pero si. Sabes, he leído muchos relatos de zoofilia y me parecen buenos y al verte así jugando con "Chiquilin", me excitó tanto que estoy muy nervioso.

  • En serio!!??

  • Si, así es.

  • Sabes, apenas lo estaba intentando, pero tú me interrumpiste. Me da un poco de miedo por lo del nudo, pero estaba tan cachonda que eso era lo de menos.

  • Sigues excitada??? –Le pregunté.

  • Un poco…., oye julio ¿me ayudarías a hacerlo?

Casi me desmayo al escuchar aquellas palabras.

-Clarooo… !!, yo te ayudo primita.

Yo estaba muy nervioso y expectante de lo que iba a suceder. Entonces ella fue al baño y se trajo un tapete y lo puso en medio de la sala, el perro la seguía como desesperado oliéndole la mano.

  • Tranquilo, ahorita estaremos juntos.

Entonces ella se paró junto al sillón, se quitó la tanga y sentó en él, el perro comenzó a olfatearla siguiendo el olor que antes había saboreado, como desesperado entró entre sus piernas, ellas las abrió para facilitarle el trabajo, el perro lamía y lamía, una y otra vez, mientras mi primita se retorcía como gusano disfrutando de lo lindo.

  • AAAAAHHGGG !! MMMMMM !! UUUMMMM !! Qué rico..!!!!!!

Mientras tanto, yo sentado en el otro sillón expectante y muy excitado, me frotaba la mano sobre el short que traía puesto.

Era todo delirio, ella disfrutando y yo observando, duró como unos cinco minutos, cuando ella comenzó a lanzar unos quejidos mas fuertes, se estaba viniendo, lo disfrutó al máximo.

El perro estaba desesperado, se veía que quería algo más, entonces ella se paró, me observo y me dijo:

  • Ahora viene lo mejor, estás listo??

  • Claro!!!! –Le respondí entusiasmado.

Ella se puso en cuatro, se recargo en el sillón a la espera de que el perro la montara, pero no, él no lo hacia, se veía que era su primera vez, comenzó a lamerle la conchita por detrás pero ella le dijo:

"Chiquilin" ya no quiero eso, quiero que me montes y me metas toda tu verga!

Pero el perro insistía en lamer.

  • Soy toda tuya….anda hazlo!

A continuación se dirigió a mí.

  • Ayúdame, quieres?, Haz que me monte, me muero por tener eso adentro!!.

Me paré del sillón, agarré al perro y se lo monté. Creo que él entendió lo que pasaba y comenzó los movimientos coitales. Se oía el golpeteo entre sus nalgas.

  • No le atina, Julio.

Entonces me agaché y le agarré la verga, se la puse en la entrada de su linda conchita, que ya emanaba muchos jugos, creo que de un empujón le metió un buen tanto de esa enorme verga a lo que ella respondió con un grito desgarrador.

  • AAAAAAAHHHHHGGG !! AAAHHHHHH!! AAAHH!! AAAYY!!.

-DESPAAAGGG....CITOOOO AAGGGS... AAHHH !!. Papito dessssshhhh…!!

Yo me asusté demasiado y me acerqué a decirle:

-Tranquila, tranquila, linda! El dolor pasará, no grites que te pueden oír.

Se oía un lindo ruido cuando entraba la verga del perro, chap, chap, chap, chap.

No se cuanto tiempo duró, los gritos cambiaron a gemidos.

-UUUHHHH …AAHHHH …UUGGGSSS…MMMMMMM

Mi primita estaba sudando y disfrutando con la tremenda verga que estaba recibiendo, mientras yo me senté a un lado de ella, para disfrutar de aquel espectáculo maravilloso, me saqué mi verga para masturbarme, pero mi primita, entre gemidos y jadeos, me la agarró y comenzó a pajearme, pero me lastimaba, me la estrujaba, le sujeté la mano y le marque el ritmo.

-OOOOHH…. MMMM …Qué rico me lo estás haciendo!.

Pasaron como unos veinte largos minutos, los gemidos seguían, yo estaba igual, le acariciaba las mejillas.

  • Te gusta?? –Le dije.

  • Si, es delicioso, muy RICOOOO!!! AAAHHHHH … MMMMMM!!.

Yo acaricié al "Chiquilín" y le dije:

  • Muy bien campeón! Lo estas haciendo muy bien…!

Ahora, ella me apretó muy fuerte mi verga.

  • Julio, Julio, la está metiendooo!!! AAAAGGGHHH…!.

  • Tranquila, aguanta, aguanta.

  • Qué RICOOOO!!!! AAAAGG SS…..MMMM!.

De repente el perro dejó de moverse, la baba le escurría del hocico, mi primita muy sudada me dijo:

  • Julio, ya esta terminando, se esta viniendo adentro aaahh!!! Qué bien, no lo puedo creer!! –Exclamó.

El perro se bajó y quedaron enganchados cola con cola, él tratando de jalar pero no salía.

  • Crees que durará mucho? Me preguntó intrigada.

  • No lo sé, unos diez o quince minutos.

  • Entonces, ahora te toca a ti primito! Me dijo mientras me jalaba hacia ella.

Me la estuvo mamando por el largo rato que el perro duró abotonado con ella, su otra mano la tenia en su conchita, ella siguió chupándome hasta hacer que me corriera.

La verga del perro se achicó, dio un jalón y salió haciendo un un ruido como blop!!. El perro se fue a la esquina de la recámara a lamerse la verga.

Ella se paró y se sentó a mi lado, platicamos un rato de lo que habíamos pasado, abrió las piernas, y observé que le dejó la conchita muy abierta.

  • Me ayudas a limpiar? Me quiero bañar.-Me dijo.

  • Dale, pues yo te ayudo.

Mientras limpiaba, observé un charco de esperma del perro con los jugos de mi primita, saque el tapete para afuera y el perro se salió.

Fue algo muy bonito. Antes de despedirme de mi primita, quedamos en que volveríamos a repetirlo.