Prostituta (09)
El Plan - Sigue la saga.
PROSTITUTA (9)
Este relato es continuación de la saga iniciada con Prostituta 1, 2,3,4,5,6,7 y 8 y es recomendable su lectura para comprender la trama y circunstancias que llevaron a la actual situación narrativa
I
(El plan)
María José, no recordaba haber sido tan feliz, como esa tarde con Federico, había renovado su vida, se sentía alegre, optimista, bien, era un bálsamo, curaba sus heridas y lo más importante, comprendió que él era su futuro
Pasaron toda la tarde en la cama, desnudos, incluso así Maria José fue a la cocina, para preparar café, paso una vista al gran departamento, era confortable, bien decorado y con gusto, quizás no lujoso ni ostentoso, sobrio, pero el toque de Federico estaba por todos lados, era funcional, moderno, con una limpieza inmaculada, no sobraba ni faltaba nada, cálido como él.
En la cocina encontró un pequeño delantal, que no alcanzaba a cubrirle sus pechos ni su pubis, con una leyenda que decía "Hoy cocino yo", se lo puso, preparó el café en la maquina Express que había (igual a la de su casa); con una bandeja con los pocillos y unas galletitas dulces que encontró hurgando en las alacenas, volvió al dormitorio.
La recibió un ataque de risa de Federico, lamentablemente el café no se pudo tomar, porque cuando terminaron de hacer nuevamente el amor, ya estaba frío, así que debieron conformarse con la galletitas, que para evitar llenar de migas la cama, los cuerpos de ellos sirvieron como platos; sin duda la parte mejor para él, fue levantar con su lengua de los pechos de Maria José, de todos los restos de las galletitas, que a propósito había dejado en gran cantidad.
Se acercaba la hora en que Maria José debía irse, fue cuando comenzaron a hablar del futuro.
Federico realmente era el hombre indicado, era el principal asesor financiero del ex presidente de la República, el mismo que había introducido la democracia en el país después de tantos años de dictadura militar y de gobiernos corruptos hasta la médula, más aún, Federico era amigo del Estadista, por consiguiente con una influencia decisoria en el principal partido de oposición al Menemismo. (Facción oficialista del partido Justicialista o Peronista, mezcla de populismo, elitismo, pero sobre todo corrupción e inmundicia)
Federico, quería que ella dejara de inmediato el camino de la prostitución, que ya no concurriera más a "Pecado", que abandonara al esposo e iniciara los trámites de divorcio, que viniera a vivir con él
Pero comprendieron que por encima de ellos aún estaba el destino de un país, las consecuencias serían graves, si lo abandonaban, máxime cuando en María José estaba la llave para frustrar el inmundo complot
Tenía el modo de acceder al Presidente, por "Pecado", las herramientas para la operación de frustrar el Complot, Federico se negaba rotundamente, decía que encontraría otra forma, pero en su interior sabía que no era posible
Era la palabra de una puta contra todo el "estableshiment", no era posible, se debía avanzar por el camino ya trazado, aún cuando les partiera el corazón, María José por un tiempo indeterminado debía continuar, lo que estaba en juego era superior a ellos mismos.
Al fin él accedió, refunfuñando pero hizo, comenzaron a jugar un juego peligroso, muy peligroso, con quienes se estaban enfrentados, no eran niños de pecho, para colmo eran los detentores del poder, siniestro, para ellos la vida no valía nada, no jugaban, era mucho lo que había en la mesa
Culminaron los detalles, cuando lo hacían sintieron frío, era miedo, se abrazaron, ella lloró, a Federico le brotaron lagrimas, no de cobardía, sino de rebeldía y sano temor, porque estaba arriesgando ahora lo que más quería en su vida, a Maria José.
Se despidieron, con un interminable beso, no de pasión que estaba saciada y con creses, sino uno dulce, de amor verdadero, ese que solo los que se aman mucho saben de su existencia y que los que carecen de ese tipo de sentimiento, nunca pueden llegar a conocer
Cuando Maria José llegó a su casa, aún Ricardo no estaba. Los niños estaban al cuidado de la niñera, jugó un rato con ellos, fueron a cenar, vio con ellos un rato de TV, luego los acostó, besándolos largamente en sus frentes, mientras lagrimas caían por su rostro, un sentimiento de profunda angustia la invadía, como los quería!, cuanto los amaba!, tenía miedo perderlos, no poder verlos nunca más, si algo no salía bien
Se acostó, tardó en conciliar el sueño, cuando lo estaba consiguiendo escuchó entrar a Ricardo, eso la puso alerta
Cuando se acostó a su lado, sintió olor de bebida alcohólica y perfumes caros de mujer, pero eso no le importó, fingió que dormía. Pero a él eso no le importó, simplemente le levantó la camisola, le sacó violentamente la pantaleta, se echó arriba de ella penetrándola con su pene que estaba en estado de erección.
Fue muy brutal, la bombeó con violencia, golpeando con fuerza en sus caderas, mientras apretaba los pechos en forma excesiva, le hizo daño, le dolió, mientras del aliento salían bocanadas de alcohol, en determinado momento el quiso besarla en la boca, pero ella apartó su cara, tenia miedo de vomitar. Maria José se dejaba hacer, su cuerpo estaba en la cama, pero su mente y su alma, estaban junto a Federico
Acabó enseguida, se echó a su lado, quedando dormido instantáneamente. María José, se levantó y fue al baño, tenía mucho asco, se duchó tratando de sacarse la suciedad que le había dejado su santo y católico esposo, mientras lloraba, pero esto reafirmó su decisión, haría lo que debía hacer
II
(Comienza el juego)
Durante la mañana en Pecado, no hubo mucho trabajo, atendió a un solo cliente, pero le dio mucho trabajo, era un hombre de edad madura, con apariencia prospera, agradable de muy buen trato, pero su pene, se negaba a funcionar, trató por todos los medios posibles, lo masturbó, le practicó sexo oral, se le exhibió como el lo solicitaba, pero el pene nada, inmutable, al final ya vencida, lo miró interrogante, él le solicito entonces, que ella se masturbara, con las piernas bien abiertas, mientras la observaba.
El pobre hombre se sentó en un extremo de la cama frente a Maria José, para tener una vista completa del espectáculo, ella cumplió con su cometido, masajeando con dos de sus dedos el clítoris, mientras con la otra mano jugaba con sus tetas y los pezones, que logró erguirlos a su máximo, su mente voló junto a Federico, era el que la acariciaba, solo como él sabia hacerlo, vio su cuerpo y su adorada cara, sintió placer, se excitó, su vagina se humedeció y ondas de placer que venían de su entrepierna y de los pezones se cruzaron, comenzó ese cosquilleo interno en su vagina, olas de calor, esa sensación sublime de placer infinito y pensando en Federico orgasmó, convulsionó su cuerpo, sintió los latidos en su vagina que se reflejaban en sus labios inferiores y superiores, la gruta del amor tenía espasmos, intentando apretar un pene que no existía en su interior y cuya misión verdadera era atraer al semen (que tampoco existía) al interior profundo de su vagina, para que la esperma y su carga vital, iniciara la carrera hacia la vida, la fecundación, la unión del óvulo con el espermatozoide ganador
Quedó con las piernas abiertas, a la vista del hombre, que obnubilado por lo visto, ya tenia una tremenda erección y que masturbándose, eyaculó en el vientre de Maria José, que no lo miraba pero lo presentía en su relax profundo
Todo esto lo anotó en su diario encuadernado en cuero, fotografió su cuerpo embadurnado el semen del cliente que ya se había marchado
En la sala común pudo hablar con Ana, le contó del Plan y de la ayuda que necesitaba, esta quedó en un estado de felicidad completa, al saber cual era su función en la maquinaria que se estaba armando; al fin se podía vengar de sus verdugos y de paso frustrar los planes de esos miserables, accedió a todo lo que se le solicitaba, su corazón latía a mil; era la hora de las victimas, era la hora que pagaran los ruines.
Maria José pidió hablar con el dueño, al que le presentó la posibilidad e un negocio que le rendiría mucha plata, el rufián estaba muy contento con ella y su desempeño y accedió también a participar, él pondría los materiales y elementos necesarios, con la condición que su nombre no aparecería en ningún momento, pero le pareció maravilloso lo que se organizaba
Tan contento y excitado estaba, que Maria José volvió a tener la visita en su vagina del gran pene que la había iniciado en la prostitución, pero que esta vez ya no fue novedad para ella, fue placentero si, pero mas por la alegría de que el circulo se cerraba y volvió a obsequiarle al rufián con un poderoso orgasmo, con un sabor total de venganza total y próxima, inminente, que gozó con toda su alma, quedando él nuevamente asombrado, por los años que trabajaba en el oficio y su experiencia adquirida, le parecía imposible que una puta orgasmara , más con la intensidad como Maria José lo hacia, realmente esa mujer era distinta y admirable.
Al salir de "Pecado", no fue directo a su casa, paró en un locutorio telefónico, llamando tarjeta en mano (esa que le había dado al salir de la cena de la condecoración) a la línea directa, siendo atendida de inmediato, escuchando esa voz desagradable y melosa, que tanto despreciaba, logró su objetivo; había picado el pez, la cita era para el Jueves y con las condiciones que ella impuso, respecto de lugar y hora
Luego a un negocio que había ubicado que contaba con impresora de alta definición para las fotos digitales, hizo hacer en el acto tres copias de todas la fotografías que había tomado hasta el momento en "Pecado", sacó fotocopias de alta calidad, de todas y cada una de las hojas de su diario
Cuando salió del negocio con las fotografías y las fotocopias ensobradas en dos juegos separados, en un paquete bien embalado la cámara fotográfica y el diario y el otro juego de copias, entró en una escribanía que Federico le había indicado, ya que el escribano titular era un miembro destacado del principal partido de oposición al gobierno, ateo declarado y sobre todo muy amigo de él, donde dejó en deposito ese paquete con instrucciones a seguir en caso de su muerte.
Al salir del notario, llamó a Federico, y le dijo que todo estaba en camino, que la cita era para el jueves
III
(Federico)
Al recibir el llamado, Federico puso en marcha su parte, se comunicó de inmediato con su amigo, el Ex Presidente, diciéndole que tenía que verlo de inmediato, que el asunto era urgente y grave, consiguiendo una cita para una hora después.
El Estadista, lo recibió en su casa, como siempre con muestras de afecto y amistad, Federico le contó todo respecto del complot (salvo lo referente al plan con María José, que quedo en reserva), quedando su interlocutor totalmente anonadado por la noticia, en silencio pensando.
Federico le dijo, que contaba con elementos para poder torcer el maligno designio, pero que se los reservaba hasta su momento, ya que no quería involucrar a nadie y menos a su amigo que estimaba y admiraba tanto.
Ese mismo día, la mayoría menemista, presentó en el Congreso un proyecto para convocatoria a Asamblea General Constituyente, para tratar la modificación de la Constitución, el objetivo menemista era obtener la posibilidad de un nuevo periodo, el proyecto con los puntos de reforma era abominable, era una reforma corporativa, fascista, contaba con el apoyo de toda la derecha política, la situación se agravaba, negras nubes ensombrecían el cielo, la política corrupta y hedionda estaba a un paso de ganar la partida
Navegante