Propuestas convertidas en orgasmos

Mi pareja y yo no pasábamos por nuestro mejor momento en lo que a sexo se refiere así que ella me lanzó una serie de propuestas que de primeras me pilló algo frio pero después han sido tremendamente satisfactorias.

Antes de nada me presento, mi seudónimo es penébolo, tengo 30 años y llevo con mi pareja 7 años. Mi pareja y yo siempre habíamos tenido una vida sexual muy satisfactoria hasta este último año que sin un motivo concreto nuestra actividad en la cama ha bajado mucho. De mantener cuatro o cinco relaciones por semana pasamos a una e incluso ninguna.

En la cama me considero un auténtico torbellino, me gusta hacerla disfrutar hasta que no puede más y aunque tengo una polla normal (16 cm) la verdad es que no paro de moverme y me encanta el sexo duro, soy incansable.

Mi novia de la que no daré nombre, tiene 26 años, es bajita(1,65) morena, con unas tetitas juguetonas y pezoncitos rosas que nada mas verlos ya se te pone dura como una piedra, siempre lleva el chochito rasurado y con un agujero estrechito, de esos que cuando la metes te absorbe la polla y te la presiona.

Pues bien, a raiz de nuestra escasa actividad sexual, un dia volvimos de fiesta, bien borrachos y cuando terminamos de follar me dijo que tenía una propuesta que hacerme y que no me lo tomara mal.

Yo la dije que me comentara esa propuesta que no me lo tomaría mal por lo que me dijo con estas mismas palabras "Quiero follarme a otro tio con una polla enorme y me encantaría que tu estuvieses delante".

Yo me quedé perplejo, le pregunté si no estaba satisfecha y que por que quería que yo viese como la follaban, respondiéndome que si que estaba satisfecha pero que tenía ganas de meterse una buena polla y que le daría mucho morbo el hecho de que yo lo vea todo e incluso participase.

El sábado siguiente, fuimos con unos amigos a una discoteca en Barcelona y a media noche nuestros amigos se marcharon y nos quedamos con dos turistas de marsella que conocimos, tras unas cuantas copas mi pareja no se como, me acabó liando y acabamos con esos tios en mi casa.

Lo que vino a continuación fue increible, primero empezó mi pareja desnudándose ante la mirada atónita de los franceses, siguió bailándome y me susurró al oído " hoy es el dia cariño, me voy a follar a estos dos tios que espero que la tengan grande, si quieres participar no lo dudes".

Tras estas palabras se fue con uno de ellos agarrándole la polla a través del pantalon y restregando su culo. Éste no lo dudó ni un solo momento y se bajó el pantalon y comenzó a tocar sus tetitas y su culito aunque no tenía una polla como ella esperaba.

El otro se sentó en el sofa y comenzó a pajearse viendo la situación, este si que tenía una polla descomunal, de unos 23 cm por lo que mi novia me miró y me dijo " eso si que es una polla , es lo que necesitaba".

Para mi sorpresa, me estaba excitando toda esta situación, ver como se iban a follar a mi novia dos tios que acababámos de conocer y además uno de ellos con una polla que de verdad daba miedo.

Ya en faena mi novia se puso de rodillas a comerse las dos pollas, la mas grande que no le entraba en la boca, lo hacía a golpe de arcada, salivando y con toda el rimel de ojos corrido. Se tiró mamando como 15 minutos, me miraba constantemente y me decía guarradas, una de ellas no se me quitaba de la cabeza " es la polla mas grande que me he comido y ahora me va a reventar el coñito cariño"

Ya después de las mamadas vino el éxtasis. Primero ella mismo cogió al de la polla grande y se abrió de piernas en el sofa quedando en la posición del misionero y pajeaba la polla del otro sin parar.

Cuando la penetró empezó a gritar de placer, unos gritos que seguro que escucharon hasta los del cuarto piso y eso que vivimos en un primero. Era increible su cara y como se abría su estrecho coñito. Y todo esto a la.vez que pajeaba con fuerza al otro.

Despues vino el otro y aunque no tenía una gran polla, la daba como si se acabara el mundo a la vez que pellizcaba sus pezones, no había visto cosa igual en mu vida, la estaban reventando y yo mirando.

Luego vino la cabalgada, se montó mi novia en la polla enorme mientras me miraba con una cara de placer que yo nunca había visto, el otro mientras la azotaba el culo dejando su mano marcada en las nalguitas mientras se la meneaba.

Después la pusieron a cuatro patas y esto ya fue el colmo, se turnaban los dos y la daban con una fuerza que no se como pudo aguantarlo pero no paraba de gemir como una loca y de pedir que no pararan. A todo esto tenía el culo completamente rojo de los azotes que la dieron. Se tiraron asi diez minutos sin parar, yo ya no podía mas y me levanté corriendo a correrme en su boquita, tragándose mi semen