Profesora chayo mirona

Soy una mujer madura de 40 años, por cortos tiempos me dedico a la docencia y como maestra he vivido y conocido varias experiencias morbosas e inquietantes que a veces no nos podemos imaginar que nos ocurren a profesoras como nosotras.Y una de esas tantas experiencias la escribo en este relato.

Buen día a todos los lectores de esta grandiosa página donde relatamos nuestras vivencias, anécdotas o fantasías que tenemos dentro del ámbito sexual. Espero conocer grandes amigos y amigas para compartir charlas y vivencias sobre nuestra vida sexual.

Mi nombre es Rosario Montemayor,(Chayo) tengo 40 años, soy del bello estado de Oaxaca, soy maestra y madre de un hijo de 12 años, casada con mi esposo Jaime o como yo le digo de cariño Jaimito con 50 años de edad. Después de encontrar esta página y ya varios meses de ser lectora de muchos relatos publicados, me atreví a publicar este primer relato, así que espero sus comentarios para ir mejorando o tips para la redacción de mi relato, ya que tengo muchas experiencias y anécdotas que compartir con todos los de esta página.

Soy de la región de la costa del estado de Oaxaca, los que son de este estado sabrán que las costeñas somos chaparritas, jacarandosas y sexys,  yo soy morena, cabello ondulado a la cadera, mido 1.60, tengo unos senos de 38c, de cintura como 98cm, unas nalgotas que varios hombres me las miran al caminar y unas piernas sexys debido a que voy a clases de zumba y participo en carreras de 5 y 10km.

Tengo pocos años de docente frente a grupo, y tengo que viajar a diversos pueblos de mi estado para cubrir interinatos, mi esposo que también es maestro me ayudo gracias a estudios que tengo de pedagogía a ser maestra por meses donde se necesite. Los que son maestros entenderán mejor a lo que me refiero.

En una de esas ocasiones, como hace 3 años, trabajé en un pueblo alejado a 6 horas de la capital de Oaxaca, ahí conocí a una amiga maestra llamada Marisol con la que congenie rápido, nos hicimos amigas, ella tenía 40 años, era de mi estatura, morena, muy chichona y culona como yo, cuando salíamos a las calles del pueblo a comprar a las tienditas o de paseo, los señores maduros descaradamente nos veían las nalgotas y nos mandaban besos, nos chiflaban y en ocasiones los señores ya borrachos nos decían:

-Mamazotas a donde van con esas mendigas nalgotas, que culote se cargan maestras.

-Profas en esos pizarrones si meto mi marcador, cabronas muevan esas nalgotas pendejas.

Un 15 de septiembre en ese pueblo se celebra el grito de independencia al igual que todo el país, el presidente del pueblo y su gabinete nos invitó a tomar cerveza, a lo cual accedimos pero solo tomamos unas cuantas,  después del grito como a la 1am. Nos dieron a tomar mezcal, yo nunca lo había tomado y solo tome una copa pues no me agrado del todo, mi amiga Marisol sí estuvo tomando, yo me fui a mi cuarto pues ya no quería tomar, como en una hora llego mi amiga a su cuarto que esta junto al mío hablando fuerte acompañada de un señor, que al asomarme por la ventana que unía los cuartos era nada menos que el presidente del pueblo.

Estuvieron tomando y charlando, después se quedaron callados y me asome y me sorprendió ver como estaban en la cama acostados besándose y el señor manoseaba las chichotas y nalgas de mi compañera, después ambos se fueron desnudando, mi amiga con una panocha semirasurada y un tremendo trasero, el señor  gordo pero con un pene súper erecto y muy peludo.

El señor alzo las piernas de mi amiga en posición de misionero y empezó a penetrarle su vagina con gran fuerza, yo podía ver como ese pene salía y desaparecía dentro de la vagina peludita de mi amiga, mientras ella gemía y gritaba al ser penetrada, el señor le decía leperadas como:

Asi te quería coger pendeja maestra, que buena estas pinche profa, asi ábrete de piernas puta y mi amiga en lugar de enojarse lo disfrutaba. Luego mi amiga se montó sobre el presidente y se daba unos sentones con fuerza, me sorprendi lo bueno que movia todo ese culazo al ritmo mi compañera sobre ese pene bien erecto, por lo que el señor solo alcanzaba a gemir de los buenos sentones de mi amiga, el señor gritaba y se derramo llegando ambos al orgasmo.

Los dos terminaron sudados y cansados, él se vistió y salió discretamente dejando a mi amiga desnuda y tirada en la cama, al otro día en la escuela mi amiga estaba como si nada y yo jamás le dije lo que había visto  por temor a que nuestra amistad saliera perjudicada y hasta ahora seguimos siendo buenas amigas aunque ya no trabajamos juntas.

Por mi profesión como maestra he conocido muchos pueblos, mucha gente y profesores, tanto en la escuela como en las marchas y plantones por lo que tengo muchas cosas que contar tanto mías como de compañeras con las que he convivido. Espero sus comentarios y sugerencias, Mi correo es montoyanorma91gmail.com para los que deseen establecer un contacto más permanente conmigo, gracias…