Primeros días de Edging para mi putita Alicia 2

Ella no aguantaría muchos días más con esa rutina así que planifiqué los últimos pasos para llegar al premio final. La verdad que aunque yo me masturbaba casi cada noche pensando en todo lo que pasaba diariamente entre nosotros, ya no podía alargar más esa situación y quería probar de una vez ese chochito y descubrir que podía hacer mi amiga con él.

Esa noche en vez de quedar para dar una vuelta con el coche quedamos en un banco de metal que había cerca de mi casa. Ahí estuvimos hablando de nuestras cosas hasta que se me acercó y empezó a acariciarme. Ahí el bulto de mi notorio pene que reposaba de lado empezó a hacerse muy visible en mi pantalón.

• Ya no aguanto más todo esto... quiero esto dentro de mí ya!! -dijo apretando mi pene por fuera del pantalón-

• Ya queda poco. Si te portas muy bien y aguantas lo poco que queda lo vas a tener. Pero te aviso que no será fácil...

- Jope.... porfa... -dijo mientras se sonrojaba-

Entonces empecé con unas leves caricias por fuera del pantalón en su vagina, haciendo movimientos circulares, intentando abrir sus labios... lo cual era bastante difícil, ya que sus pantalones eran muy muy ajustados, a lo que ella sorprendentemente respondió acariciando lentamente mi polla por encima del pantalón, concentrándose sobre todo en la parte del capullo. Mis pantalones al contrario que los suyos eran mucho más finos y entonces fui yo quien al cabo de una media hora de toqueteo constante me estaba retorciendo sobre el banco de metal.

Mi pene empezó a descargar preseminal de una forma espectacular a cada rato y a palpitar cada vez que lo hacía. Al ver que eso sucedía sobre todo con las caricias en círculos sobre la cabeza de mi pene, ella empezó a hacer caricias más suaves y más constantes, exactamente como las que yo le hacía en los pezones días anteriores.

Al poco noté que tanto su pantalón como el mío se estaban encharcando (esta vez, sobre todo el mío)

- Uuuuy que ha pasado??? Se me están mojando los dedos ya con esa mancha que me llevas en el pantalón

+ Ufff que cabrona eres como has aprendido de rápido....

- Cada vez la mancha se hace más grande... cuanto rato puedes estar así mojando el pantalón? Lo comprobamos??

Con eso último que dijo me volvió loco, la besé y metí mi mano en su pantalón. Estaba espectacularmente mojada, tanto su vagina como los bóxer de mujer que llevaba. Empece a pasar mi dedo por su rajita muy lentamente y a acariciar de vez en cuando su clítoris con unos movimientos circulares aún más lentos.

• Ahora te voy a decir lo que vamos a hacer. Nada de masturbarse esta noche... Prohibido. Mañana última prueba y si la pasas tendrás tu premio -decía mientras seguía con mi mano a la vez que ella también con la suya, retorciéndose muy fuertemente en el banco-

• No por favor no aguanto más joder... vamos a algún sitio y deja al menos que te la chupe te lo pido por favor...

• No bonita, no... te jodes por hacer que pusiera los pantalones perdidos...

- Por favor no podre dormir te lo suplico vamos a hacerlo en algún sitio... tu podrás dormir?? No me lo creo...

• Me va a costar, pero me voy a joder como tú vas a joderte también. Mañana por la tarde antes de que entres a trabajar vas a venir a mi casa y debes llevar puestas las mismas braguitas que llevas ahora. Puedes cambiártelas cuando llegues a casa y limpiarte sin darte placer, pero mañana cuando vengas debes llevar las que llevas ahora sin limpiarlas

+ Joder que asco... aunque pensándolo mejor me pone un poco la idea... alomejor no me las quito hasta entonces te gustaría más eso?

-Como prefieras. Va, rápido, es tarde ya, te llevo a casa.

Seguro sus chorreantes bóxer de mujer tras escurrirlos en un vaso hubieran dado para un buen chupito de su caldito... pero tenía otros planes para ellas, y se fue con las manos entre las piernas supongo que por notar el aire helado refrescando sus partes a través de la enorme mancha de mojado que tenía en sus pantalones.

Esa noche solo recibió un mensaje mío recordándole que nada de tocarse.

Al día siguiente por la mañana estuvimos hablando y le pedí que viniera a mi casa antes de irse al bar donde trabajaba de camarera.

Llega a casa y la recibo en la entrada, indicándole que no suba y que se quede en el recibidor.

• Hola, guapito que tal para que querías que viniese

• Ola guapita, última sorpresa, espero que te guste. Arrodíllate.

Se arrodilló enseguida mirándome con cara de miedo.

• Tranquila no voy a hacerte nada feo, pero vas a tener que obedecerme, no hay "peros".

-A lo que asintió con la cabeza-

• Por favor... me he portado muy bien, llevo los bóxer desde ayer... ni siquiera se han secado un poco porque los he seguido mojando sin querer esta noche pensando en ti.

Me bajé los pantalones y mis bóxer y saqué mi pene ya lubricado en la parte del capullo, ya que había estado un rato antes fantaseando con lo que le esperaba a ella y ya me había mojado un poco.

Tal como salió se abalanzó a él con la boca a lo que la frené enseguida.

+ Eee calma calma. Las manos atrás de mis piernas. Primero límpiame bien la punta y saborea bien y después ya veremos

- Mmm que buena pinta

Empezó enroscando intensamente su lengua con el capullo una y otra vez mientras yo la aguantaba. Era difícil dejarlo limpio, ya que con el placer que me estaba dando, cada 2 x 3 salía más preseminal hasta que al cabo de un rato lo consiguió al menos por unos segundos. Tuve que apartarla, ya que ella seguía y no tenía intención de parar.

• mmmm que bueno esta joder -dice pasándose la lengua por los labios y afuera limpiándose bien- Ya me he cansado de ser una buena niña...me vas a follar ya o que... voy a llegar tarde a trabajar.

• Ni hablar, ya te dije que te faltaba algo para merecerte eso. Levántate y bájate un poco los pantalones y los bóxer. Ahora vas a hacer que termine dentro de tus bóxer con la mano y más te vale apuntar bien

• No por favor ya me tengo que ir a trabajar y no tengo tiempo de ir a cambiarme -suplicó reduciendo el ritmo de la paja-

+ Jajaja de eso se trata. Vas a ir a trabajar bien sucia y notando todo el rato tus flujos y los míos en tu entrepierna y yo voy a estar ahí para verlo

Aunque normalmente me cueste bastante más eyacular, estaba muy caliente por la situación y por lo ocurrido esos días, así que, concentrándome un poco mientras le metía la lengua hasta la garganta para ahogar sus pequeños gemidos de excitación y los míos por llegar al orgasmo, me corrí estremeciéndome un poco dentro de sus bóxer. Se sonrojó mucho y dudó bastante pero terminé convenciéndola.

+ Ale! Pantalones arriba y a trabajar

Solo me faltaba un buen plug anal o un vibrador con control remoto para que la escena fuera perfecta, pero no disponía de eso en esos momentos. Al llegar al bar, por lo extremadamente empapada que llevaba su ropa interior, alguna mancha se esclarecía en los pantalones oscuros que llevaba.

Me senté y pedí un café con leche y disfruté de ver como iba caminando incómoda sirviendo a la gente y me iba mirando con una cara pícara de enfadada mientras me maldecía en voz baja.

Una amiga que había ido a verla al bar le pregunto como es que llevaba los pantalones y parte de la camiseta mojada a lo que respondió medio titubeante que se había caído un café con leche hacia un rato.

La sonrisa de mi boca no se borró en ningún momento ante tremenda estampa, pensando en la sensación de pegajosidad y humedad que estaba pasando ella intentando que nadie se diera cuenta y preguntándome si le estaría gustando.

Estuve ahí hasta la hora de cerrar el bar y nos fuimos al sitio de siempre con mi coche.

+Bueno, qué tal? -Dije con una sonrisa pícara-

- Uff... que mal lo he pasado... No me esperaba estar nunca tan caliente... me daba mucha vergüenza, pero a la vez notar tu corrida y la humedad todo el rato ahí me recordaba constantemente lo de estos días y verte ahí a ti que lo sabías y estabas disfrutando... uf... me esta chorrando la patata de una forma... jajajaja

+ Que es lo que más te gustaría ahora?

- Cómo?

+ Que que te gustaría que pasara ahora? Que querrías que te haga

• No te lo voy a decir... me da vergüenza

+ Después de todo esto tienes aún vergüenza? Venga va ambos lo sabemos

• En verdad tienes razón que cojones... Quiero que me comas el coño por favor. Lámemelo todo como un puto loco por favor... - dijo aún así con cierta vergüenza en su tono-

• Ve a la parte de atrás y quítate toda la ropa

Se quitó la ropa y abrió las piernas lo más que pudo. Y así lo hice. Empecé a lamerle toda la vagina y alrededores como si un perro comiéndose un chuletón se tratara. Olía muchísimo a sexo aún que no lo habíamos tenido aún como tal y el gusto era fuerte, pero no era malo. Agridulce y muy fuerte. Si la máxima expresión que puede tener el sexo huele y sabe a algo, ese era el sabor.

Sé que aguantó lo más que pudo sin ni siquiera yo pedírselo, pero enseguida se corrió cogiéndome con ambas manos la cabeza y gritando como una loca mientras miraba hacia el techo del coche mojándome la boca y los asientos traseros.

Me senté y me la saqué y sin dar más explicaciones empezó a chupármela desesperadamente tubiendo que pararla, ya que la muy zorra iba a hacer que me corriera enseguida.

Me puse el condón con alguna dificultad y a continuación la tumbé y empecé primero a rozar con el capullo la raja de su vagina muy lentamente durante bastante rato.

- Joeeeeee metémela ya por favor no puedo más llevo esperando esto demasiado vaaaa -A lo que yo me negué con la cabeza- Joder joder joder joder-

Ahí empecé un mete y saca lento con la punta. Su vagina era pequeña y estrechísima. Me abrazaba toda la verga de una forma espectacular que nunca olvidaré.

- Por favor dame más fuerte por favor!!!

Después de decirme eso casi interrumpiéndola empecé a embestirla con mucha fuerza para que en nada se corriera temblándole las piernas.

- Ah ah ah aaaaaah aaaaaaaaaah.... uuuuuuf... es demasiadoooo...

Me volví a sentar con el pene durísimo y tremendamente empinado pensando que aún la haría sufrir y correrse un buen rato pero...

• No te lo he querido decir, pero no sabes lo que te has perdido... vas a ver lo que te voy a hacer... algo que a mi ex le volvía loco... Preparate para correrte como nunca.

Y tenía razón... empezó con un sube y baja muy lento y cada vez que bajaba y en el último tramo de cuando subía contraía fuertemente los músculos de su vagina dándome unas sensaciones y un placer enorme en todo el miembro que se trasladaba incluso a los huevos. Siempre había controlado mis orgasmos y había durado el tiempo que he había querido en esa clase de relaciones sexuales hasta entonces.

• Para por favor no puedo más me voy a correr

- No!

+ Por favor quiero hacer que te corras más quiero darte más orgasmos

• Te he dicho que no ostia! -dijo con rabia mientras apretaba los dientes-

Intenté sacármela de encima, pero me aprisionó con las piernas y aumento el ritmo y la presión con su vagina. Se me pusieron los ojos en blanco del tremendo orgasmo que notaba que venía. Se me cortó la respiración y no podía hablar, en vez de las palabras que intentaba pronunciar solo salían sonidos ahogados. En ese momento se me contrajeron todos los músculos del cuerpo y ella notando que se venía la corrida inminentemente se sentó clavándose mi polla hasta lo más profundo para sentir la corrida calentita dentro del condón lo más adentro que pudiera (eso le encantaba y la ponía a mil como me confesó más adelante, donde empezó mi gusto por los "orgasmos arruinados" que me empezaría a dar constantemente), se quedó inmóvil y después de unos segundos de tensión donde se paró el tiempo exploté hasta casi desmayarme mientras jadeaba y respiraba aceleradamente al recuperar de golpe la respiración. El orgasmo fue largo y notaba con gran intensidad cada una de las palpitaciones que hacia mi pene en las que llenaba con grandes borbotones de semen el condón, que temía que fuera a explotar, mientras ella gemía notando casi en sus intestinos esa calor que crecía con cada chorro que yo soltaba. Así estuvimos un rato abrazados sin salir yo de su interior hasta que me liberó de su candado con las piernas. Y nos quedamos extasiados uno al lado del otro.

-Buah... ha sido increíble... no me hace falta preguntarte si te lo has pasado bien, he visto que si jajaja

+ Huh... aún no me lo creo.

Nos vestimos cuando empezamos a notar el frío, fumamos y charlamos hasta que el sueño se apoderó de nosotros.

La verdad es que los siguientes polvos entre ella y yo siguieron la misma línea, pero esta primera vez y su procedimiento juntamente con la última vez que lo hicimos (que curiosamente fueron casi idénticos) fueron las mejores y más especiales con ella a la que nunca olvidaré.