Primera vez atada y sodomizada

Habéis llegado a tu habitación , la cama está perfectamente hecha, la preside el cabecero, ese con el que él tanto tiempo había soñado, es precioso, perfecto, consistente, empieza a estudiar  las posibilidades que ofrecen los barrotes de maderas, Dios, son increíbles, lo miráis juntos mientras estáis  de pie frente a él, abrazados, él justo detrás de ti, sintiendo tu olor, sintiendo como tu pelo acaricia su cara mientras su boca busca tu cuello, besándolo y lamiéndolo, loco de deseo por ti.

Notas como sus manos torpes buscan la cremallera del vestido, desliza la cremallera hasta abajo, sus manos se desplazan por tu cuerpo, pasando por tu cintura, tus caderas buscando la orilla del vestido que de pronto empieza a subir hasta que sale por encima de tu cabeza quedando tu espalda desnuda frente a él.

En ese momento te giras y os besáis apasionadamente mientras tus manos desabrochan su camisa, juegas con su pecho y tus labios lo besan a medida que desabrochas los botones lentamente hasta quedaros finalmente sólo con la ropa interior. Él te sienta en la cama y te dice, cariño espérame un segundo, se acerca a su chaqueta y saca una pequeña bolsa que se encontraba en su bolsillo, saca un pañuelo negro de seda, se coloca detrás de ti y te venda los ojos, notas el frio y la suavidad de la seda, sientes la indefensión de la oscuridad, pero sabes que a su lado estás segura y confías plenamente. Después te tumba,notas como te sujeta una mano, sientes una tela suave en tu muñeca, un nudo simple, y como tu brazo se desplaza hasta estar completamente estirado y levemente levantado, la situación te excita tremendamente, pruebas moverlo y te das cuenta de que apenas tiene movilidad, Dios cómo te estás poniendo, y la sensación aumenta al sentir como te coge el otro brazo, notas la seda en torno a tu muñeca , otro nudo, otra vez tu brazo se estira y se eleva levemente, ahora estás indefensa, ahora estás a su merced, te gusta estar así, ¿qué hará ahora? ¿Empezará a besarme ya? ¿Sacará algo más para jugar conmigo?, - por favor que empiece a besarme ya-, no puedes aguantar más. En ese momento se acerca, te besa dulcemente en los labios y te dice, cariño ahora vuelvo. Desaparece, será capaz de dejarme así, los segundos pasan, se hacen eternos pero oyes como sus pasos se acercan y te dice suavemente al oído, ya estoy aquí preciosa, voy  a darte todo el placer del mundo……… en ese momento sus labios buscan los tuyos, su lengua tu lengua, vuestras salivas se mezclan constantemente, la respiración se acelera y tu cuerpo se contorsiona buscando el roce de su piel, pero él se aparta y te dice - no tengas prisa quiero jugar contigo, llevo demasiado tiempo deseándolo, te correrás cuando y como yo quiera. Saca una pluma larga de ave y notas un cosquilleo por tu frente, que se desplaza por tu mejilla, por tus labios, por tu cuello, por tus orejas, por tus pezones, allí se entretiene es suave, es agradable, es placentero , tus pezones se van endureciendo, él se acerca y los besa, los lame, te está volviendo loca… mientras desplaza la pluma por tu vientre, por tu costado, por tu ombligo, por tu ingle, por la parte interior de tus muslos, por encima de tus braguitas totalmente empapadas. Tu cuerpo se contorsiona, gimes y suplicas –cómeme por Dios, quiero que me hagas tuya- él te mira, sonríe, y te susurra – cariño, te repito que te correrás cuando yo quiera- , en ese momento notas como el roce de la pluma se detiene, él se aparta, ¿qué es lo que te espera ahora? Tu cuerpo se contorsiona, buscas satisfacer tu deseo apretando fuertemente los muslos uno contra el otro, necesitas correrte, necesitas explotar en un orgasmo brutal que llevas deseando desde hace mucho tiempo. De repente algo frio se posa en tu labios – Dios no, no me hagas eso, el hielo no, por favor házmelo después de correrme, quiero correrme cabrón, no puedo más – escuchas su sonrisa , se le nota seguro, controla la situación y eso le excita , sabes que tus peticiones no van a ser atendidas y que se hará sólo lo que él quiera y como él quiera, pero tus gemidos y suplicas lo excitan cada vez más, le gusta darte placer y verte desnuda, preciosa, indefensa, excitada, caliente, atada, empapada….te dice que beses el hielo, que saques la lengua y lo lamas, quiere ver como se derrite al contacto con tu saliva caliente, las gotas empiezan a caer por tu cuerpo, y su lengua las va secando, pasa el hielo por tu cuello y tras él, siempre su lengua , lamiendo cada gota que cae, pasa el hielo por tus pezones, van a estallarte , están duros como piedras y el contacto con el hielo te está volviendo loca, ese placer aumenta con el paso de su lengua, cuando juega con ellos, lamiéndolos, besándolos, succionándolos, mordisqueándolos, el hielo continúa bajando por tu vientre, por tu ombligo, se llena de agua, se inunda y él lo bebe, lo vuelve a llenar de agua y sigue bebiéndolo y sigue bajando el maldito hielo que pasa por encima de tus braguitas, las empapa, el hielo se mezcla con tu flujo y él disfruta pasando la lengua por encima de ellas, notas como su lengua aprieta fuerte por encima de la ropa interior, mientras tu abres las piernas intentando facilitar el roce , tu cuerpo se retuerce, y él sigue pasando la lengua por encima de tu sexo, pero necesitas notar el contacto directo, y suplicas que te quite las braguitas- no cariño, eso no va a ser posible de momento, tendrás que esperar un poquito, el hielo no se ha derretido todavía- te moja los muslos, de nuevo lo sube, juega con él , otra vez el ombligo y tu suspiras y maldices el puto hielo, su duración parece eterna y piensas que cuando él se vaya lo primero que tienes que hacer es bajar la potencia del congelador para que los hielos se deshagan antes. Tras un periodo de tiempo interminable, escuchas lo que tanto anhelabas-  se ha terminado el hielo y voy a comerte - notas como besa tu boca, tus tetas, tu vientre y te coge las braguitas con las dos manos mientras notas como se deslizan por tus piernas hasta desaparecer, en ese momento el abre tus piernas, notas como se coloca entre ellas, como acerca su cabeza lentamente a tu sexo mientras va besando la parte interna de tus muslos y por fin, su lengua acaricia los labios de tu coño, lo hace con suavidad, de arriba abajo, quiere saborearte, quiere lamerte despacio, quiere hacerte disfrutar como nadie, y lo lame, se recrea, abre tus labios con su lengua buscando introducirla dentro de ti, quiere que la notes dentro, quiere abrirse camino y follarte con ella, mientras tu gimes y te contorsionas, no puedes tocarle, no puedes acariciarle,  te está volviendo loca de placer, sólo han pasado dos minutos desde que se encuentra entre tus piernas y ya notas que se acerca el orgasmo, tu pulso se acelera a la par de tu respiración y me dices – sigue que me corro- y la lengua aumenta su velocidad y la presión sobre tu clítoris hasta que llega ese orgasmo tan deseado. Él te observa mientras te corres, sonríe mientras sigue pasando su lengua por tu coño saboreándote, se aparta ligeramente y te dice – vamos a por otro y así sucesivamente llegaremos a infinito- los orgasmos suceden uno tras otro, dos , tres , cuatro ….-ahora  relájate, quiero que disfrutes de cada momento-, notas que se levanta, se aparta de la cama pero vuelve rápidamente ,se coloca y sigue lamiéndote mientras notas como su lengua baja hasta tu culo, pasa la lengua cerca de él, lo roza, con sus manos te abre el culo para poder pasar su lengua con comodidad, esa sensación te vuelve loca, notas como su lengua se abre paso en tu culo igual que anteriormente lo hizo en tu coño, sientes como juega con él, lo moja, lo folla con su lengua mientras sus manos juegan con tus pezones interrumpiendo sus caricias sólo para darte palmadas en tus bonitas tetas – ahora, relájate mi niña- notas que su dedo en tu culo impregnado por algo, seguramente lubricante, se abre paso dentro de ti, mientras la lengua vuelve a buscar tu coño para seguir dándote placer, notas como entra despacio, una falange, la segunda, lo saca, más lubricante, vuelve a entrar una  falange, dos , tres, ya está dentro, no duele, y esa sensación en principio extraña se convierte en placentera, notas como el dedo entra y sale de ti, lo saca , ahora está intentando meterte dos dedos, -tranquila , si te duele, me lo dices-, te susurra con una voz que delata su excitación y su control de la situación, quiero que me los metas enteros respondes sin dudar, sientes como entran los dos, el lubricante facilita la penetración, simplemente tienes que acostumbrarte a esa nueva sensación que te permitirá gozar también al ser follada por ese precioso culo, su lengua sigue comiéndote el coño y ese movimiento de los dedos entrando y saliendo consiguen un nuevo orgasmo que se repite por quinta, sexta, séptima y octava vez. – Dios para, no puedo más, déjame descansar, imploras y él responde -me quedan dos para hacer un número redondo-, se acomoda mientras mete sus dedos esta vez por el coño, y acelera su movimiento para hacerte llegar dos veces más. En ese momento notas como se acerca a ti, se incorpora a horcajadas sobre tu pecho, te acomoda la cabeza en una almohada y te pone la polla en la boca, quiere que se la lamas, que se la comas, quiere ver tu saliva bañando su polla, quiere follarte la boca, sientes su polla dura entrando en tu boca, mientras él te mira desde arriba, cada vez la mete más dentro, casi te toca la campanilla pero él disfruta viéndola desaparecer en tu boca, tras un rato de jugar, se acerca a tu oído y te susurra – Ahora mi niña voy a probar ese precioso culo- Te abre bien las piernas , las levanta sobre sus hombros y coloca una almohada debajo de tu culo que facilitará la penetración, notas como su polla se aproxima a tu ano, te la va a meter, notas como se abre paso, lentamente, está perfectamente dilatado prácticamente no duele, él te habla , te pregunta cómo te sientes, si te duele, si te gusta, y tú atada sólo quieres disfrutar , quieres ser totalmente suya y eso incluye ese culo que te está follando, ya está dentro de ti y empieza a moverse despacio, entra y sale, entra y sale, primero despacio, luego va acelerando su movimiento, las embestidas son cada vez más fuertes y esa mezcla de dolor y el morbo se ser sodomizada hace que alcances un grado de excitación que jamás había experimentado, en ese momento, él te desata una mano y te dice- mastúrbate - bajas tu mano y empiezas a acariciarte mientras él te besa y sigue follándote, estás a punto de correrte, sabes que él está igual, te avisa – joder¡¡ me corro-  sientes como su semen caliente baña tu interior, y eso termina por provocarte un orgasmo más. Cuando se recupera te desata y se tumba a tu lado - Ha sido una noche espectacular, me ha encantado que me sodomices y que me ates, espero que lo repitamos pronto- le dices mientras le besas……

Esperamos que os haya gustado nuestro relato, somos nuevos en este juego de la dominación y sumisión. Nuestros relatos son la expresión de nuestras fantasías que esperamos hacer algún día realidad. Os mandamos nuestra dirección por si queréis poneros en contacto con nosotros para comentarnos cualquier cosa o hacer cualquier tipo de proposición:

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