Primer juego con Kahlua

Cómo descubro a una nueva perra en una fiesta....

kahlua es brasileña, afincada en mallorca y como todas las latinas expira sexo por todos los poros.

morena 1.65 100 de pecho y qué puedo decir del culo? un culazo brasileño de esos que cuando los azotas redoblan como un tambor

La conocí en una fiesta, en cuanto la vi supe que era sumisa, tenía esa actitud que no deja lugar a dudas. Abierta pero a la vez temerosa, queriendo gustar sin mostrar mucho y sobretodo respetuosa con todos y con todas.

La observé friamente quería trazar mi estrategia y sobretodo quería ver hasta dónde podía llegar con ella. En esa fiesta no pasó nada, no me gusta tener público o al menos no público que no entienda el BDSM, pero me hice con su número y le escribí:

  • Ayer parecías un poco cortada...

K- quién eres?

  • Eso no importa de momento, solo contesta a mi pregunta

K - un poco cortada si estaba, no conocía a mucha gente allí y estaba nerviosa

  • Estuve tentado a hacerte alguna proposición aunque pensé que mejor dejarlo para hoy

K - qué tipo de proposición?

  • Qué tipo te gustaría?

K - Ay... no sé...

  • Yo creo que estás pensando en algo sucio

K- puede...

y dejé la conversación ahí, no quería más que saber si ella sería capaz de dejarse llevar y por el momento lo estaba consiguiendo.

Al cabo de una hora más o menos me escribió de nuevo:

K- de qué tipo de proposición estamos hablando?

Estuve dudando si era un buen momento para darle la primera orden o debía desarrollar el diálogo, decidido a no perder el tiempo le escribí:

  • Quiero una foto tuya con el tanga completamente metido en la boca en menos de 5 minutos

La muy perra tardó 30 segundos en enviarme la foto donde se veía su boca abierta con el tanga completamente metido dentro. Así que tuve que pasar a la acción:

  • Bien hecho perra, ahora envíame ubicación donde puedas estar en menos de diez minutos y sobretodo ni se te ocurra sacarte el tanga de la boca hasta que yo te lo diga

K- puedo saber quién eres?

  • Lo sabrás cuando te recoja. Tranquila, si decides irte, esto quedará entre nosotros

Cuando llegué a recogerla su cara era un poema, de tanto tener la tela metida hasta la garganta tenía los ojos llorosos y algunas lágrimas cayendo por sus mejillas. Estaba claro que la situación la tenía cachonda, miraba a un lado y a otro sin saber con quién había quedado y yo no pensaba ponérselo fácil

Sin descubrirme aún le escribí:

  • Estás muy guapa perra con tu boca ocupada. Puedo oler tu coño desde aquí...

K- Dónde estás? eres un cabrón  quiero escupir este tanga de una puta vez

  • Ni se te ocurra, vas muy bien de momento, pronto nos encontraremos

  • Ahora sin moverte del sitio pasa la mano por tu coño y dime a que huele

La imagen fue un espectáculo, en plena calle la perra se pasó la mano por el coño y se lo llevó a la nariz. Estaba nerviosa y apretaba las piernas, supongo que para no gotear mucho.

K- Huele a perra....

  • A perra en celo diría yo

  • Hay un banco a tu derecha. Si quieres correrte hoy, siéntate en el banco y tócate hasta que te corras. Tienes 10 minutos.

Kahlua miraba a todos lados, no se creía lo que estaba pasando y no se creía lo que iba a hacer. Se iba a tocar para un semi-desconocido en plena calle con el tanga metido en la boca y jadeando como una perra en celo.

Dudó un instante y luego empezó a caminar hacia el banco, se sentó y puso un jersey que llevaba sobre su brazo, extendiendo el brazo hasta su entrepierna.

Al principio, disimulaba bien. Era como si estuviera pensativa y movía su mano despacio, diría que trazando círculos alrededor de su clítoris. Poco a poco se fue animando, movía el brazo más rápido, respiraba más rápido, movía las piernas y la cabeza de una forma rítmica.

  • Córrete perra! - le escribí

Y explotó, explotó de una forma muy discreta. Poniendo su cabeza entre las piernas, estirando una pierna y manteniendo la otra doblada. Desde mi posición se apreciaba como iba convulsionando, una,dos, y hasta 7 veces conté.

Después de eso se desplomó en el banco, recuperando la compostura poco a poco.

Una vez estaba recompuesta, le escribí el siguiente mensaje:

  • Eres una perra muy obediente, tendrás noticias mías. Ya puedes escupir el tanga. Hasta pronto!