Primer día de vacaciones

Tras varias semanas de trabajo sin parar y vernos un par de horas a la semana decidimos aprovechar mi descanso para irnos a la playa, así que alquilamos una habitación y nos pusimos rumbo. Durante el viaje nos dimos cuenta de que eran nuestras primeras vacaciones en pareja lo que lo convirtió en un viaje aún más especial.

Cuando por fin llegamos a nuestro destino entre el calor y la humedad yo estaba deseando ir a la playa y darme un buen chapuzón, así que le propuse a mi novio soltar las maletas ponerse el bañador e ir directos hacia la playa. El hotel se encontraba a 5 minutos de ella así que con eso en mente realizamos el checking y subimos hacia la habitación. Llegamos a la habitación y empezamos a dejarlo todo lo más ordenado posible, dejando los bañadores encima de la cama para cambiarnos e irnos, pero los planes cambiaron un poquito.

Mientras yo estaba tumbado en la cama mi novio se empezó a cambiar haciendo gestos para provocarme un poco (cosa que consiguió) y se metió al baño. Mi pene se empezó a poner duro y después de un par de semanas sin hacer nada con el quise cambiar los planes de playa. Me quite la ropa quedándome en calzoncillos y fui detrás de él, lo abrace fuerte por detrás y nos tiramos un rato sin decir nada solo abrazados.

--Venga prepárate que nos vamos-me dijo-tú eras el que quería ir a la playa nada más llegar.

--Cambio de planes, me quiero quedar un rato más-le dije sonriendo.

--Entonces mi plan funciono-me dijo riendo a la vez que yo también reía

--¿Entonces tus movimientos eran para cambiar el plan de la playa? -le mire con cara de picaron

--¿Tu que crees?-me agarro el paquete mientras se iba poniendo cada vez mas duro

Nos fuimos a la cama y nos empezamos a besar, me quite los calzoncillos y nuestros penes empezaron a rozarse lo que me puso aun mas cachondo de lo que estaba ya. Le empecé a tocar para notar lo dura que estaba y con ganas de metermela en la boca, pero casi sincronizados se subió encima sin dejar que yo me moviera y se la metió en la boca. sentía que hacía mucho que no me comía la polla y lo disfrutaba como nunca, me comía los huevos como si no hubiera un mañana y yo no podría evitar soltar algún gemido y notaba que eso le ponía más.

--Ahora me toca a mí-le dije

Me metí su polla en la boca disfrutando como nunca, disfrutaba cada centímetro de ella en mi boca, quería ver si cara de placer mientras jugaba con sus huevos o me intentaba atragantar con ella, no podía parar de hacerlo hasta que no pude más y me tumbé en posición para que me penetrara.

Sin pensárselo dos veces empezó poco a poco a metermela, aunque con lo caliente que estaba no tardo nada en entrar, sentía su polla palpitar dentro y ya sin poder evitarlo gemía sin parar deseando que ese momento no acabara. Cambiamos de postura varias veces, hasta que de la nada paro y nos tumbamos abrazados un poco sudados.

--¿Te paso algo? -Le dije

--Quiero que ahora me la metas tu-me dijo

Y sin dudar un momento ahora era mi turno, entro como si nada y sus gemidos me ponían aún más cachondo, sentía como su culito apretaba mi polla dura como una piedra, cambiamos de postura para poder mirarnos a los ojos mientras no paraba de darle, hasta que empecé a notar que me iba a correr

--Oye si sigo me corro-le dije jadeando

--No pares que yo también estoy apunto-me dijo.

Aumente un el ritmo y con un gran gemido el empezó a correrse lo que consiguió que yo lo hiciera igual.

Nos abrazamos sudados después de todo lo que hicimos inaugurando nuestras vacaciones, riéndonos y casi sin fuerzas

--Creo que ahora un buen chapuzón en la playa va a sentar bien ¿no? --le dije riendo

--Pues te falta tiempo para ponerte el bañador--me dijo tirándome el bañador a la cara.

Y después de ese polvo disfrutamos de una tarde de playa