Preñada del compañero de trabajo de mi marido

Hola amigos de lo exótico, podría decir que me ha costado escribir este relato, nada más lejos de la realidad, tener sexo a escondidas de mi marido me provoca dosis extra de placer, contarlo a una amiga sería un despropósito por mi parte, en mi caso me moría de las ganas de contarlo a alguien y esta pagina a la que visito de vez en cuando me ha dado la idea de publicarlo de manera anónima pero  real, lo que cuento aquí es lo que me sucedió y no reparo en cambiar nombres ni lugares.

Todo comenzó a principios de este año, Enero, este mes mi marido con el que llevo casada siete años retomó su actividad laboral y empezó a trabajar en una nueva empresa, es allí donde conoció a Dani, un compañero con el que mi marido conectó bien y se hicieron buenos amigos, tanto es así que entre ellos decidieron quedar un fin de semana con nosotras ( pili la esposa de Dani, Rafa mi marido y yo ).

Mi primera impresión al conocer al matrimonio fué bastante buena, de forma casual descubrimos incluso que Pili y yo compartíamos la misma fecha de nacimiento, mismo dia y mes de 1980, mi marido y Dani compartían solo el año (1979). Una agradable cena donde nos conocimos bien, ellos se casarón un año después que nosotros y se les ve muy unidos, ni ellos ni nosotros tenemos hijos, aunque los buscamos con poco acierto. Dani es un tio fortachón de un metro ochenta aprox. , moreno con ojos oscuros, Pili es bajita, rechonchita, pelo castaño y con nariz chata. Mi marido es delgadito, metro ochenta y un poco "feillo", pero no me importa, es mi marido lo quiero y ya está.

Yo me llamo Verónica, Vero para todos, soy pelirroja, ( no de bote jeje ), me gusta cuidar mi aspecto físico, mido un metro y setenta y cinco cm, mis ojos son verdes, una 95 o 100 de sujetador, mis pechos son pecosos y tengo grandes pezones, mi "conejito" no está depilado del todo como el resto de mi cuerpo, a mi marido le gusta encontrar algo de pelo en esa zona, y aunque no es muy abundante si que se ve claramente entre mis ingles........ si pensais que lo tengo pelirrojo allá abajo.... estais mas o menos en lo cierto, aunque el color es más oscuro que el de mi cabeza no deja de tener un tono cobrizo.

Antes de conocer a mi marido había tenido relaciones sexuales con dos muchachos, no las recuerdo con especial morbo, fueron relaciones simultaneas a lo largo de dos años y no con mucha frecuencia, nada de especial y debido a la edad de los muchacho con poco placer.

Las relaciones con mi marido tampoco son para enmarcarlas, a pesar de sentirme una mujer fogosa el no tiene "manguera para tanto fuego", me consuelo bastante con un dildo que mi marido desconoce de su existencia, a pesar de esto jamás, pero jamás se me ha pasado por la mente un posible adulterio, eso sí, fantasias muchas.

Bueno, pues dicho todo esto, es aquí donde comienza todo, pueblo al sur de Andalucía, mes de junio, un jueves a las nueve de la mañana, yo estaba en pijama barriendo la puerta de mi casa, y Dani que aparece por la esquina con ropa de deporte.

• Hola Dani, ¿ no trabajas hoy ?

• No, me debian un par de días y me lo han dado hoy y mañana.

• Muy bien y aprovechando para hacer deporte verdad?

• Bueno, si, como Pili trabaja pues he salido a comprar el pan y algunas cosillas.

• ¿ quieres un café ?

La verdad, pensaba que Dani rechazaría mi café, solo era una invitación de cortesía, pero el aceptó encantado la invitación, me daba un poco de corte estar con tan poca ropa y el dentro de mi casa, los dos a solas, pero ...... en el fondo cuando lo tenía frente a mi, con esas calzonas y su miembro haciendo bulto entre sus piernas la situación comenzó a darme un poco de morbo inaudito en mi.

Una lanza a mi favor fué el whatsapp q me mandó mi marido , como suele hacer habitualmente en su trabajo de agente comercial o algo así viaja por toda Andalucía y me manda fotos de donde está y ahora yo lo tengo que averiguar, es una especie de juego que tenemos los dos y mas que nada es entretenido, en esta ocasión fue facil, pues la foto de la mezquita de Cordoba era facil de acertar, pues bien, con este dato ya sabía que mi marido se encontraba a mas de doscientos km de distancia de mi casa.

Esto me tranquilizó peligrosamente, mi mente comenzó a pensar en cosas extrañas, como nunca antes lo había echo. Dani ya estaba dentro de mi casa, con la puerta de la calle cerrada y los dos sentados cada uno en un "taburete" alto  que tengo en la cocina, tomando café.

Yo era consciente de que debajo de mi pijama no tenía ropa alguna ya que suelo dormir desnuda y me coloco la prenda solo para hacer las tareas de casa.

Esto propiciaba que cada vez que me agachaba a coger algo de la cocina mis pechos se quedaran al descubierto, incluso ya sentada en el taburete se podia adivinar como se me escapaba algun pelo de mi conejito por el lateral de mi corto pantalon de pijama.

Lo que más comenzó a preocuparme de esa situación no era que Dani clavese su mirada en mis pechos o en mis ingles, lo más preocupante para mi era que no solo comenzó a gustarme, sino, que también comencé disimuladamente a provocar aún más a Dani dejando en modo de descuido mis pechos al aire o bajando mi pantalón un poco para que los rizos de los pelos salieran por encima de mi pantalón. Vamos, una provocación en toda regla.

La conversación que tenía con Dani en esos momentos era vana, vacía, solo hablábamos para disimular la situación que estaba creando en esos momentos. Al mismo tiempo ya se podía adivimar como el bulto que tenía en sus calzonas iba creciendo de manera gradual conforme lo provocaba con mis "descuidos".

Bien pues el ambiente ya estaba creado, ya solo faltaba una chispa que encendiera de una vez aquella bomba, no quería ser yo la autora de la detonación, y Dani supongo que no se atrevía.

Todo fue más facil de lo que creia, aprovechando de que Dani tenía el fregadero justo detrás solo tube que tener la intención de colocar mi taza de café en dicho recipiente, un pequeño descuido por mi parte en forma de tropezón y justo antes de colocar mi taza en el fregadero hizo que mi cuerpo se enfrentara a el en forma de semicaida, nuestros cuerpos ya estaban pegados y de forma incosciente supongo Dani colocó su mano en mi espalda para que no cayese, nuestras caras estaban muy cerca, y solo tube que mirarlo durante unos segundos para que acercase sus labios a los mios, ya sentia el aliento de su boca en la mia.

Solo fue cuestion de segundos, nuestras lenguas jugueteaban ya al libre albedrio, pasión y desenfreno, como dos adolescentes comenzamos a jugar con nuestras lenguas, Dani me rodeó con sus brazos colocando sus manos en mi culo, yo me dejaba hacer mientras nuestras bocas no cesaban de chocarse una con otra invadiendo de saliba nuestras barbillas y cuello.

Sentía un enorme placer cada vez que Dani pasaba su lengua por mi barbilla o cuello, pero lo que más me gustaba era el flirteo que tenian nuestras lenguas fuera de nuestras bocas, las rozábamos, las mordíamos y las sobábamos paulatinamente ,impregnada de la saliba de Dani en mi cara comenzé a pasar mi mano por la entrepierna de él, su polla se adivinaba bien dura ,la acaricié varias veces al mismo tiempo que él me apretaba el culo con sus manos.

En un alarde de calentura y sin precendentes en mi, decidí ir bajando mi cuerpo hasta colocarme de rodillas delante de Dani, aún con sus calzonas puestas pero con un enorme bulto que sobresalía de manera notable, ( el tema de las mamadas no es costumbre en mi matrimonio, ya que a mi marido no le gusta mucho ).

Tenia claro que yo si tenía hambre de polla y quería tener esa dentro de mi boca, bajé sus calzonas y oooooooh¡

• Pero tío, vaya pollón que tienes.

Alucinada me quedé, acostumbrada a un tamño normal, mas bien pequeño como la de mi marido, Dani tenía una polla enorme, rasurada y limpia, con su glande totalmente al descubierto ( la de mi marido ni está afeitada y ademas su glande no se destapa entero).

Me la metí en mi boca y un escalofrio de placer recorría todo mi cuerpo me sentía puta, muy puta, el tener esa polla dentro de mi boca me hacía sentir guarra y puta, pero........ que placer sentir tanta carne em mi boca, la agarré con una mano y lo mismo me la metía entera en la boca que pasaba mi lengua desde la punta de su pene hasta donde terminan sus huevos y comienza su agujerito del culo, Dani gemía de placer y sostenía mi cabeza con sus manos acompañando mis movimientos de cabeza que no paraba de mover de fuera hacía dentro.

Tanto lamer los huevos y la polla de Dani pensé que acabaría corriendose en mi boca.....y ciertamente no me disgustaba esa idea, pero la realidad era bien distinta, todo esto no acababa nada más que comenzar. Dani me incorporó y me ayudó a ponerme de pié, me bajó mi pijama y me lo quité, enseguida me desprendí de la parte superior quedandome completamente desnuda.

• Laura, tienes unas tetas preciosas,

Sin mediar más palabras me senté encima de la mesa de la cocina, y Dani comenzó a chupar, a lamer, a sobar mis tetas, mis pezones parecían quere explotar, pasaba su lengua una y otra vez por ellos, mi placer era máximo, yo jadeaba y gemía como cual colegiala en su primera vez.

Saciado ya de sobar mis tetas su lengua comenzó a deslizarse suavemente por mi abdomen, bajaba muy lento mientras sus manos acariciaban mi cuerpo, yo me dejaba hacer. Mi conejito estaba bien mojado del placer que Dani me estaba propinando, pero se mojó aún más cuando sentí el contacto de su lengua entre el enredo de mi vello púbico, buscaba la zona carnosa y húmeda, y lo consiguió.

Os puedo asegurar que es la tercera o cuarta vez que me comen el coño, pero sin lugar a dudas es el mejor trabajo que me estaban haciendo en mi vida, como movía su lengua, acompañando sus dedos que se introducían solo con sus yemas dandome un placer extremo.

Dani estaba de cuclillas y yo sentada en la mesa, mis piernas abiertas descansaban sobre los hombros de Dani, él tenía sus manos abiertas alrededor de mi conejito, y uno de sus dedos comenzó a acercarse al angosto y estrecho agujero de mi culo, esto me gustaba, pero más me gustó cuando al mismo tiempo comencé a sentir también la humedad de su lengua rozando ese agujerito. Mas que gemir yo gritaba, y amortiguaba mis gemidos colocandome las manos sobre mi cara intentando morder mis propias manos para que no se escuchasen mucho mis jadeos, ( mas que nada por el tema de los vecinos).

• Vas a conseguir me corra Dani, me muero de placer. aaaaaaaaaaaaaah

Como un experto en la materia Dani se dió por aludido y supongo que quería hacer esperar el momento de mi oregasmo, se colocó de pie delante de mi, cogio su gran miembro con su mano derecha , aunque muy erecto supongo que lo movió una par de veces o tres para conseguir más firmeza, me miró, lo miré, y ya sabia que en ese momento Dani me iba a follar inevitablemente.

Sin levantarme de la mesa Dani acercó su polla hasta llegar a mi conejito, abrí bien mis piernas para facilitar el trabajo de entrada, y como si de un imán se tratase.........

• aaaaaaah........siiiiiiiiiiiiiiii

Me introdujo de manera suave toda su polla dentro de mi coñito, por unos segundos la dejó dentro y me apretó como si quisiera que entrasen sus huevos también, ¡ que placer !,

Ni os podeis imaginar la sensación que tenía en esos momentos de sentir un pollón tan grande dentro de mi, ¡ el tamaño si importa !, pufffff...... estaba en el limbo, Dani comenzo a follarme poco a poco , con movomientos lentos y pausados, el sudor comenzó hacer acto de presencia mientras pasaban los minutos, si si, los minutos, acostumbrada a un mete y saca de mi marido esto era completamente diferente, Dani no cesaba en sus movimiento que iban "in crecendo" con el paso del tiempo.

Como el estaba de pié y yo sentada en la mesa me abracé a él, nuestros cuerpos resbalaban con el sudor, pero yo crucé mis piernas alrededor de su cintura dejando descansar mis piés sobre su trasero, y de esta forma impedía de alguna manera que su polla saliese de mi madriguera, mis jadeos y gemidos eran constantes, ahora los amortiguaba mordiendo su cuello y clavando mis uñas en su espalda, Dani no paraba de bombear su polla dentro de mi, sus movimientos comenzaron a subir el ritmo, y con esa longitud de polla por mucho que sacase y metiese nunca salía entera de mi coño.

El tiempo parecía haberse detenido y su polla rozaba incesantemente las paredes de mi húmedo coño y lo hacía subir de temperatura de manera inevitable , nuestras lengua de nuevo comenzaron a encontrase al mismo tiempo que me follaba, y apretábamos fuerte para sentirnos aún más si cabe.

Como me desvelo luego, Dani se ponía aún más caliente escuchando mis gemidos y por momentos separaba su boca de la mía para colocarla en mis tetas y allí se volvía loco chupando y lamiendo mis pezones, pero claro, al mismo tiempo yo me deleitaba más aún y la sensación de que el orgasmo iba a llegar me dominaba por completo y me mojaba de mis propios flujos.

Deciros que a mis 33 años nunca, nunca he conseguido llegar a un orgasmo con una penetración, y hoy estaba a punto de pasar.

• Dani creo que me voy a correr, aaaaaaaaaaah

De manera incosciente y con mi orgasmo a las puertas de aparecer apreté mis piernas más aun sobre el trasero de Dani, impidiendo de alguna manera que sacase su polla de mi conejo y cortase mi orgasmo.

Pero claro, Dani comenzó a acelerar sus movimientos en un alarde de mascunilidad y maestría, acentuando mis ganas de correrme, pero al mismo tiempo el también pretendía hacerlo.

Con mi vientre practicamente combulsionando comencé a correrme irremediablemente al mismo tiempo que su polla derramba toda su leche dentro de mis entrañas, lejos de preocuparme.......

• Siiiiiiiiiiiii, me cooooorro.......aaaaaaah lléname de leche, siiiiiiiiiii te siento dentro

No se cuanto tiempo llevaba Dani sin follar, pero os aseguro que podía sentir claramente una cantidad de liquido calentito inyectando mi coño de manera desmesurada y descomunal, incluso con su polla dentro podía sentir como mis ingles chorreaban parte de su leche muslos abajo, pero que puta me hizo sentir, ahora si que soy una autentica zorra.

Después de tanto jadeos, gemidos, gritos y gastos de energia nos quedamos un rato abrazados con su polla aún dentro de mi, lo besé en los labios y le agradecí lo bien que me lo había echo pasar.

Después sacó su polla, que aún en estado de flacidez seguia siendo grande, sin preguntar se dirigió al cuarto de aseo donde supongo que se la limpiaria un poco, se vistió enseguida y mirandome a los ojos me dijo que ya hablaríamos de lo sucedido y casi sin mediar palabra se marchó.

Yo me quedé aún desnuda y llena de leche sentada en la mesa asombrada de lo que había echo, ¿ sentimiento de culpa ? nooooooooo, increiblemente orgullosa y satisfecha del pedazo de polvo que acababan de echarme, lo gocé y lo disfruté.

¿ Quereis saber más ?, pues si, me quedé icreiblemente embarazada esa mañana, después de buscar durante unos años ese embarazo tanto en mi matrimonio como en el de Dani y Pili, conseguí lo que llevaba años buscando, ¿ sentimiento de culpa por mi marido ? ninguno, el tambien deseaba un hijo y se que Dani nunca desvelará nuestro secreto porque a pesar de todo y al igual que yo seguimos enamorados de nuestras parejas.

¿ Se volvió a repetir ?........... pues si, y con más placer aún si cabe., y con nuevas experiencias como el coito anal, que nunca antes había practicado y que ahora estando embarazada lo he probado y descubierto que me gusta.

¿ si gusta, os prometo contar lo sucedido dias, semanas y meses después ?