Prácticas provechosas

Ane empieza follando con Antonio y acaba entregándose a la exmujer de Antonio y follando con ella y con una amiga

PRACTICAS PROVECHOSAS

Ane había empezado hace unos meses unas prácticas en el despacho de abogados de su padre. Quería ser abogada. Se había instalado en vestíbulo del despacho de su padre, en un pequeño despachito que no se utilizaba. Había hecho amistad con la secretaria de su padre y con alguna otra chica del despacho. En esa planta estaban en un lado del largo pasillo los dos despachos de los socios más antiguos y a la vez dueños del negocio. Su padre y su socio y amigo desde la juventud. Los dos habían fundado el despacho hace unos 25 años. Los dos despachos estaban distribuidos igual, con un pequeño despacho que en el caso del padre de Ane iba a ser ocupado por su hija y en el de su socio estaba vacío. Luego un pequeño aseo en los dos y un  vestíbulo también en cada uno para las secretarias respectivas.

A esos dos despachos se accedía por un pasillo al que se accedía girando a la derecha nada más salir de los ascensores. Si girabas a la izquierda había otro pasillo que conducía al archivo y a otras dependencias donde trabajaban otros empleados. Frente a los ascensores unos grandes baños a los que se entraba abriendo la puerta con llave. Ane había recibido últimamente en una web de contactos unos mensajes que la habían halagado pero no terminaba de lanzarse porque el hombre era de la edad de su padre pero cada vez tenía más confianza con él y los mensajes subían de todo hasta que hace una semana su secreto admirador la citó en un sitio público pero discreto.

La sorpresa que se llevó fue mayúscula. Era el socio de su padre. Sabía que se había separado recientemente pero no esperaba algo así. Estaba completamente descolocada. Quería decirle si pero a la vez no por la edad pero en un par de días se decidió, fue a su despacho a decirle que de acuerdo pero antes quería saber si era la única ó si lo iba a ser porque a ella le gustaban las cosas claras y él le dijo que no que él lo que buscaba era sexo sin compromiso y que era muy abierto y ahora que estaba separado no se quería encadenar. Ella tardó otros dos días en decidirse y le dijo que de acuerdo. El día siguiente fue un cúmulo de mensajes subidos de tono pero no esperaba lo que le iba a ocurrir ese día. Había llegado al despacho solo para coger un pendrive para ese fin de semana trabajar desde casa después de llegar de la playa.

Volvía del despacho de coger el pendrive y cuando iba a girar para ir a los ascensores se encontró de frente con el socio de su padre y él aprovechó con el desconcierto del encontronazo para sujetarla del cuello y besarla apasionadamente. Ella estaba paralizada por la sorpresa y él manipulaba la cerradura de la puerta del baño. Ese día en la planta no tenía que haber nadie pero sabía que en los pasillos los vigilantes si podían circular. Logró abrir la puerta e hizo pasar a la joven dentro y la puso contra la pared.

Estaba a mil y lo primero que hizo fue levantarle la falda y arrancar el tanga. Ella puso el culo en pompa para facilitarle la labor y recibió a cambio un azote para que se pusiera bien recta y sacó su polla. Mojó los dedos en la boca de la chica y con ellos fue humedeciendo el culo de ella e intentó penetrarla. Encontró dificultades y tuvo que empujar con fuerza pero al final logró que mientras descapullaba la flor trasera se fuera abriendo hasta que el capullo estaba dentro y entonces empujó y entró toda. Lo que no esperaba Antonio es que la secretaria de su socio y amiga de Ane estaba por la planta. Ella si lo sabía pero con lo que estaba disfrutando se le había olvidado y aparte ella le había dejado en el despacho con lo que lejos de la acción.

Lo que no sabía era que María había visto la escena del encontronazo y como habían entrado al baño. Dentro Antonio embestía el culo de su joven amante hasta que no pudo contenerse y se corrió apenas la sacó sobre los muslos de la chica. Los dos estaban acalorados y sudados y encima ella manchados sus muslos de semen. Se limpiaron y adecentaron. Él le dijo que saliera ella primero y al de unos segundos iría él a su despacho. María en cuanto oyó la puerta y salió su amiga fue a su despacho y se quedó allí en silencio y cuando oyó que Antonio había entrado en el suyo cogió sus cosas y bajó al  garaje para ir a visitar a Ane. Iba a aleccionarla sobre Antonio para que no le hicieran daño.

Llamó a Ane y la citó en un bar sobre la playa que tenía unas mesas donde podían hablar de forma discreta. Cuando llegó Ane ella había pedido por las dos y de forma seria la hizo sentarse:

A ver tía, te has vuelto loca?. Follarte al socio de tu padre que es un mujeriego de cuidado.--- recriminó María de forma airada.

Ane casi se hace pis encima del susto, como puede saberlo si apenas ha ocurrido y entonces se dio cuenta. María estaba en el despacho y habrá salido y les habrá visto.

Te lo contaré pero no es lo que crees. Te acuerdas del admirador secreto que te comenté y con el que había quedado el otro día, pues era Antonio, no te lo dije porque todavía no estaba preparada para contárselo a nadie y porque no había ocurrido nada hasta hoy. De todas formas, qué has visto para saberlo?--- respondió Ane tomando el control de la situación.

Pues he visto cómo te ponía contra la puerta primero besándote y luego como sois un par de inconscientes pues habéis dejado la puerta abierta y he visto como en los mingitorios del baño de hombres te ha dado por culo contra la pared y por los gemidos que metías mientras te masturbaba y te corrías entiendo que has disfrutado. Observaba de lejos y retirándome cada vez que os movíais pero lo he visto.

Su amiga tenía razón, ahora que lo pensaba se dio cuenta que no habían cerrado la puerta.

Ahora escucha: Antonio como sabes se ha separado hace unos seis meses pues te contaré por qué ó mejor, tomate tu bebida y acompáñame a un sitio y allí conocerás todo.

Ane dudaba si acompañarla pero María con su carácter siempre lograba que la obedeciera y además desde que hacía poco le había hecho descubrir que con el sexo con mujeres también disfrutaba y que María siempre la protegía la siguió. Se montaron en el coche de la secretaria y ésta condujo tranquilamente en dirección a un lugar que Ane desconocía. María que tenía miedo de haberla asustado la dio un par de carantoñas y acarició sus muslos. Entraron en una urbanización y su amiga condujo hasta uno de los chalets más alejados de la entrada. Allí aparcó y salieron las dos amigas.

Tocaron el timbre. En unos segundos las hicieron entrar y las acompañaron a un salón. Entró y vió a Deborah, la ex mujer de Antonio, la conocía porque la pareja era amiga de sus padres desde los comienzos del despacho. María se adelantó y besó la mano que le ofreció la Señora. A Ane le pareció un saludo extraño pero no le dio mayor importancia. Su cabeza estaba puesta en otro lado. María indicó a su amiga que se sentase en el tresillo a la izquierda de la anfitriona. Ella lo hizo sobre el reposabrazos de la butaca donde lo hizo Deborah.

María te ha traído aquí porque ha considerado que yo era más adecuada para contarte la historia sexual y amorosa de Antonio. Me ha mandado varios mensajes antes para contármelo y antes que digas nada cuando termine de contarte como es Antonio se solucionarán todas tus dudas y si no lo están luego responderé a tus preguntas. Por el principio. Antonio y yo nos casamos muy enamorados ó eso he creído yo y eso me ha asegurado él. Cuando llevábamos un tiempo casados tuvimos nuestras primeras crisis de pareja. Creí que se estaba follando a una amiga mía y se lo eché en cara y él lo reconoció y dijo que se enmendaría pero al de un año volvió a pasar y estuvimos medio separados. Acordamos que funcionaríamos a nivel de sexo como una pareja abierta pero que solo podíamos tener otra persona, que sería la misma persona y si surgiera alguna otra habría que pedir permiso y acudimos a locales liberales etc. Pasaron varios años así y hace un par de años conocimos a María que luego cuando todo el tema de la separación me apoyó mucho. María se convirtió en nuestro amante, por separado de cada uno de los dos ó de los dos en conjunto. Pero después de pasado casi un año, venía a dar una sorpresa con María a Antonio y me lo encuentro en la cama follando, dando por culo a lo que yo creía era una mujer y resulta que cuando se levanta era un joven, en concreto, era el chico que nos limpiaba la piscina. Un joven universitario que nos la limpiaba. Así que no me lo pensé dos veces y le pedí la separación. Yo, por herencia tenía dinero y acciones como para no tener que trabajar solamente negociando con ellas. Ahora, creo que cuando María me ha saludado te has sorprendido por como lo ha hecho. Te lo explicaré. Antes de separarme y con Antonio conocimos a mucha gente del mundo liberal y de otro mundo que es el mundo BDSM ó Dominación/sumisión. Cuando me separé con María empecé a profundizar más en lo que ya conocía ya que ella me acompañó a fiestas y a citas con otras personas y para sorpresa mía le gustó y luego quiso avanzar más. Ahora no solo es sumisa a nivel Bdsm mía sino que solo folla con quien yo apruebo. Para tu información, folla también con Antonio, el cual también folla con el chico de la piscina. Conozco también que ella te ha intentado seducir y que tú habías aceptado y que sólo faltaba concretar el día, la hora y el lugar, me parece muy bien y doy mi aprobación y para terminar, te pido, por favor, para que no creas que somos unas locas para ser también Ama y sumisa que veas un video que una amiga mía me ha enviado para que lo vea y que creo que refleja lo que sentimos María y yo.------ le contó Deborah a una sorprendida primero y luego excitada Ane.

Acepto ver el video, se lo debo a María, como amiga la quiero muchísimo y quiero entender eso que siente ella----- Respondió Ane.

Deborah se levantó y cogió la cara de la chica con las dos manos y besó su frente con dulzura. María se levantó para poner el video. En el video, había cuero y sentimientos, sexo y entrega. Muchas cosas que después de una hora tenían a Ane con mil sentimientos encontrados pero con una excitación terrible. Ahora tomó la palabra:

No sé nada de éste mundo y me da bastante miedo eso, no saber, no conocer etc. pero la excitación que tengo no la había tenido nunca.

Si es por miedo tanto María como yo te cuidaremos y te protegeremos pero si te entregas me gusta que desde el punto de vista sexual sea total. Follarías con quien yo dijera, evidentemente siempre puedes negarte, pero si las dos primeras negativas no tienen una argumentación razonable dejaremos la relación de Ama/sumisa pero seguiremos como amigas si quieres claro.

A todo esto María se había arrodillado al lado de Deborah. Ane entonces tomó la palabra y dijo:

Acepto Entregarme a Usted y a María y acepto lo que Ustedes tengan a bien ordenarme.

Te tengo que corregir Ane. María está a tu mismo nivel, solo se situaría por encima de ti en situaciones que yo lo indique, solo en esos casos. Respondió Deborah.

Ahora María te va a dar unos papeles para que los leas, rellenes y firmes, son una serie de prácticas y conceptos que debes rellenar y firmar. Evidentemente, es solo un símbolo.

María trajo los papeles y los puso en una mesa baja que había frente al tresillo y Ane los tuvo que leer y firmar cada hoja después de haber rellenado algunos campos. Todas las dudas le fueron resueltas por María sino de viva voz, si a través de fotos que extraía de una Tablet. Cuando hubo terminado firmó el documento de entrega.

Ahora vas a ver como tienes que comportarte cuando estés en mi presencia.

María se levantó y esperó que lo hiciera su Dueña, entonces caminó detrás de ella y cogió de la mano a Ane para indicar como debía ir, susurrándola que siempre un paso por detrás de la Ama. En un extremo del salón la Ama tocó un saliente de la biblioteca y ésta se abrió y descubrió una escalera que descendía dentro de la vivienda.

En la zona inferior caminaron por un pasillo, a un lado les enseñó un vestuario con duchas y luego al otro lado un vestidor con varios trajes, lencería, látex y vinilo, botas, zapatos etc. Y por fin entraron en la gran habitación. Allí Deborah caminó hasta un trono en madera oscura donde se sentó.

Ane, imítame y haz lo que yo haga. ----le dijo María a su amiga.

María se situó delante del trono y Ane a su lado. María se fue desnudando, primero el jersey que llevaba. Ane retiró su chaqueta, luego María la blusa y Ane hizo lo mismo y al mirar a su amiga se quedó con la boca abierta, cosa que la Ama recriminó. Luego se soltó el botón de los pantalones y se fue quitando los jeans hasta quedarse solo con el tanga. Ane retiró la falda.

Entonces Deborah las hizo detenerse y fue a una pequeña vitrina con unos  pequeños puñales y cogió uno de ellos muy afilado y brillante. Se acercó donde las chicas y cogió sus manos y las hizo agarrarse de la mano y ponerse una frente a la otra. Con el cuchillo empezó a jugar en el cuerpo de las chicas. Pinchaba suavemente los pezones marrones oscuros y pequeños de su sumisa y luego hacía lo mismo en los más pálidos de Ane para luego ir bajando y apretar delicadamente como si una pequeña polla fuera en los culos, en las vulvas. Entonces de un corte decidido cortó los lados del tanga de María y seguido del de Ane.

Ahora separaros un par de metros pero miraros ya que no os habéis mirado antes.

Ane vió como era su amiga. Con raya en medio dos cortinas de negro cabello caían a los lados rodeando unos ojazos color miel, unos pequeños pechos con pequeños pezones marrones oscuros y un pubis con un pequeño mechón de vello púbico negro como el carbón. María vió como Ane temblaba y su cuerpo. Pelo castaño por los hombros, unos pechos pequeños aunque algo más grandes que los de su amiga con los pezones más claros y como si apuntasen al techo y en el pubis apenas una pequeña raya rubia.

Hizo que las dos mujeres se cogieran de los hombros, así separadas fue a por unas pinzas que estaban unidas por cadenas de tal forma que las dos chicas quedaban unidas y con los pezones torturados. Entonces se divirtió colocando primero los restos de los tangas uno a uno sobre la cadena cosa que aportaba peso al cadena y al dolor de las chicas.

Cuando estuvo un rato divirtiéndose decidió que era hora de pasar a otra cosa. Hizo que María se tumbase boca arriba en una especie de camilla con los pies apoyados en la camilla y los muslos abiertos. Ane tenía que adorar el sexo de su amiga y a ello se puso primero casi como explorando y con delicadeza por su inexperiencia. María en la camilla se echó hacia arriba atrayendo a su amiga para que el culo y los muslos de la chica quedasen en el borde. No se habían fijado pero Deborah había ido a por un arnés el que untó vaselina y se acercó donde Ane y la penetró. Cuando se dio cuenta Ane se giró pero María la cogió de la cabeza indicándola donde se tenía que centrar que era entre sus piernas.

Deborah embestía cada vez más fuerte haciendo que Ane gimiera cada vez más fuerte y eso en cascada hacía que también aumentara sus lamidas sobre el coño de su amiga la cual aullando se corrió quedando completamente extasiada en la camilla y Ane no tardó mucho más. Deborah se retiró y las dos chicas se fueron bajando de la camilla y cuando vió bajarse a María se le vino a la cabeza una maldad.

Ane, súbete a la camilla en la misma posición que tenía María.

Ane obedeció sin rechistar y Deborah cogió del pelo a su sumisa y la llevó y puso de tal forma para que estimulase oralmente a su amiga pero que a la vez pudiera estar a su merced. Para ello había situado un pequeño mueble a los pies de la camilla. Allí ató los brazos de su sumisa y cogió un pequeño juego de plugs metálicos y con lubricante fue jugando con su culo hasta que el tamaño era similar al arnés que llevaba puesto y la sodomizó. Ane veía la cara de María y los ojos del placer se le ponían en blanco. Con otra mano acercaba un vibrador muy potente al clítoris que aceleró el orgasmo de la chica. Los movimientos de su esfínter eran rítmicos a la follada y a su ritmo de lametones sobre el coño de Ane y esta vez las dos chicas más la Ama tuvieron el orgasmo casi a la vez.

Se fueron las tres a las duchas que había en el vestuario, se acariciaron, besaron etc. y vistieron concretando que era el comienzo de una larga relación.

Este relato es imaginario pero si queréis podéis escribirme, es más me gustaría que lo hicierais a:

Picante100@hotmail.com