Poseida por una vez
Queria ser dominada, que me partieran en dos, sentir el semen en mi boca, en mis pechos, en mi vagina y en mi ano. Queria ser sometida y hasta ahora ninguno me habia follado ni medianamente como deseo cada noche.
Estaba cansada que los hombres a verte elegante, joven, guapa y con clase, te traten como una florecilla, queria ser dominada, que me partieran en dos, sentir el semen en mi boca, en mis pechos, en mi vagina y en mi ano. Queria ser sometida y hasta ahora ninguno me habia follado ni medianamente como deseo cada noche.
Los hombres se me acercan, follo bastante e intento repetir aunque el polvo no haya sido de mi agrado, solo esperando que al tener mas confianza se atreva a follarme en condiciones, pero nunca tengo esa suerte. Y siempre por la educacion o por el que diran, callo mis deseos, no me atrevo a actuar como la zorra que llevo dentro.
Esa noche seria diferente, llevaba caliente todo el dia viendo porno por internet. Marcos, el ligue de turno me habia llamado para que fuera con el a cenar con unos amigos.
Elegi un vestido negro bastante elegante, por debajo de la rodilla, marcando todas mis curvas, con un gran escote, que baje algo mas, para dejar casi al descubierto mis pezones. Me puse unas medias de liga, y un tanga negro. Me maquille, algo mas escandalosa que de costumbre con los labios rojos. Pense que para que te follaran como una puta, deberia parecerlo.
Cuando me vio, vi como su expresion denotaba su asombro. Lo bese en la boca, apretando mis pechos contra èl.
Me monte en el coche, y no dejaba de mirarme mientras hablaba tonterias, creo que estaba nervioso. Me armè de valor y le dije,que no llevaba bragas. Era mentira pero pensè que lo pondria caliente. Para mi asombro, Marcos metio la mano entre mis muslos, se encontrò con el tanga, no parò y metio sus dedos en mi sexo humedo.
Me habia depilado entera, por lo que podia notar mi chocho rosita, algo abultado por el deseo. Me tocaba el clitoris, estaba casi enloquecido, usaba la mano con maestria, me introducia los dedos y los movia con violencia. Yo gemia, le decia que estaba caliente, que esa noche seria su puta, que queria que me partiera el cogno.
Tuvo que quitar la mano para cambiar la marcha, yo me comence a pellizcar fuerte los pezones duros como piedras.
Ibamos camino del restaurante y quedaban 20 minutos de trayecto, mirè su paquete abultado y sin pensarlo, le abri la bragueta y comence a chuparsela. La deseaba, queria lamerla, sorberla, chuparla, me la refregaba por los labios me golpeaba la cara, chupè y chupè todo el camino.
El casi no podia conducir, comencè a suplicarle que se corriera en mi boca, que queria su leche calentita, me cogio del pelo y comenzo a empujarme la cabeza hasta que su polla tocaba el fondo de mi garganta, yo me movia mas fuerte, notaba en mi boca el sabor de su espumita...
Cuando me di cuenta estabamos en el aparcamiento, me tiro del pelo para levantarme la cabeza y dijo que habiamos llegado. Yo le suplique que por lo menos se corriera, que no podia dejarme asi. El comenzo a darme palmadas sobre el clitoris. Me dijo: - Vamos putita, ahora baja del coche que ya te dare lo tuyo.
Nos bajamos del coche, yo estaba colocandome el vestido bien, cuando me sorprendio con una bofetada, como estaba tan caliente, me excito.
-Te he dicho que te bajes del coche, no que te tapes
Me saco mis grandes pechos y los mordio mientras me subio el vestido, yo miraba a los lados por si venia alguien y el me dijo que si viniera alguien le diriamos que se apuntara a la fiesta.
Volvio a cojerme del pelo y me puso la cara en el capo. El frio del metal me atraveso los pezones, comenzo a follarme violentamente sin soltarme el pelo. No podia creerlo, iba a explotar de placer, en mis labios solo decia follame, follame, follame....
Le pedi que se corriera en mi boca, pero el seguia empujando, golpeando los huevos en mi cogno abultado. Saco la polla y me quito el tanga. Yo le suplicaba que no parara. Para mi sorpresa, me metio el tanga en la vagina. Yo seguia en pompa, con las piernas separadas y las tetas y la cara sobre el capo.
Comenzo a escupirme en el culo, mientras me abofeteaba los cachetes, no podia soportarlo, mi cogno latia con fuerza, queria su semen, su polla, ser penetrada...
Se agarro la polla y la condujo por mi ano. Yo me movi. No estaba preparada, nunca lo habia hecho, me doleria, no queria...Me apreto la cara contra la chapa y lentamente me penetro el ano, con la otra mano tiraba del tanga alojado en mi vagina.
SSSSIIIIIIIIIIIiiiiii, el dolor se mezclava con el gusto estaba a punto, no podia mas, cogio ritmo y empezò a hacerlo violentamente. Y con èl, yo ha gritar de dolor y de gusto. Fue mas rapido, y me metio el tanga en la boca para sofocar mis gritos. Se agarrò a mis pechos,empujò y empujò como un animal. Hasta que me inundo con su semen.
Al notar el calor en mi ano, todo mi cuerpo comenzo a extremecerse, me corri como nunca lo habia hecho, mientras gritaba ahogadamente puesto que tenia la boca tapada.
Saco la polla y me dijo: - Esto no a acabado aqui putita, ahora limpiamela con la boca de rodillas.
Mi sexo seguia excitado, se la chupe como si de miel se tratara. Se la guardo, y me ordeno que me vistiera pero que el tanga se quedaba en el coche.
Aunque me parecieron horas, esto sucedio en diez minutos. Fuimos a cenar. Al caminar sin ropa interior, notaba mi culo dolorido, los labios de mi cogno se frotaban al andar, sobresalidos por la excena anterior.
Durante la cena no hable, estaba en una nube pensando en el momento vivido, tantas veces imaginado. Superaba mi imaginacion. Estuve sumisa toda la cena, cumpliendo los deseos de Marcos, al que queria complacer con tal que volviera a poseerme de aquella manera.