Posando desnuda frente al fotógrafo
De alguna forma en mi fantasía me veo como esas mujeres, posando con ropa sexy o desnuda. Me fijo en las poses que aparecen en las fotos más profesionales y cuando estoy sola frente al espejo del baño o de mi habitación, intento parecerme a esas chicas simulando que soy yo la que está posando
Para los que me leáis por primera vez os recomiendo una lectura previa a mis anteriores relatos , donde podréis saber un poco más de mí y donde intento explicar cómo empezó una vida nueva, llena de travesuras morbosas y juegos de complicidad.
En mi anterior relato compartí una de las fantasía de mi marido “ convirtiéndome en su universitaria zorrita ”, y en este nuevo relato compartiré con vosotros una de mis fantasías que no he hecho realidad pero en la que a menudo me sorprendo imaginando como sería.
En mi relato “ sola en casa, navegando por internet ” ya os explique como me entretenía en las ausencias de mi marido… de alguna forma cuando veía esas películas o miraba esas fotos no podía dejar de pensar en que yo podía ser la protagonista.
Me preguntaba como me sentiría frente a una cámara posando desnuda o filmando alguna escena de sexo. Las chicas que veía por internet parecían disfrutar y aunque algunas quizás podían ser verdaderas zorronas, otras en cambio parecían mujeres como yo y no parecía que de avergonzaran de posar desnudas o teniendo escenas de sexo.
De alguna forma en mi fantasía me veo como esas mujeres, posando con ropa sexy o desnuda. Me fijo en las poses que aparecen en las fotos más profesionales y cuando estoy sola frente al espejo del baño o de mi habitación, intento parecerme a esas chicas simulando que soy yo la que está posando desnuda como lo hacen ellas.
Cuando fantaseo en ser una de esas modelos, me gusta tener un consolador entre mis manos simulando que es una de esas pollas que esas mujeres tienen entre sus manos o en sus labios… mientras no deja de oírse el clic de la cámara que me hace una foto tras otra.
Aunque con mi marido he compartido alguna sesión de fotos como la que expliqué en mi relato “ despertando mi relato más morboso ”, la sensación de que fuera un desconocido el que me fotografiara me hace sentirme especialmente caliente.
Me imagino ante ese desconocido, totalmente desnuda, quizás como única prenda escogería unos zapatitos de tacón pues cuando me veo con ellos creo que realzan mis piernas y mi figura…
El fotógrafo va disparando su cámara, sugiriéndome como debo de posar para que cada foto ofrezca el resultado más sensual, más sexy, más excitante…
Ante ese espejo convertido en fotógrafo, ofrezco mis pechos desnudos masajeándolos con mis manos e imaginando que no estoy sola en esa sesión….
Jugueteo con mi consolador, primero saboreándolo entre mis labios imaginando que es una polla caliente y dura…me gusta poner carita de viciosa al igual que las veo en las fotos de algunas chicas cuando se la están mamando a un semental…
Deslizo el consolador entre mis pechos y entreteniéndome acariciando mis pezones, que siento como se van poniendo más grandes y duritos por la excitación…
Me gusta esa última imagen mientras mis dedos se cuelan entre mis piernas para acariciarme y sentir la humedad de mi intimidad…
Doy la espalda al “fotógrafo” ofreciéndole una imagen de mis nalgas desnudas que se ofrecen lascivamente al inclinarme ligeramente y entreabriendo las piernas…
La “cámara” no pierde el detalle de como mi mano continúa entre mis piernas y mis dedos se cuelan en mi interior sin dificultad…
Me encanta posar sentada en el suelo…abriendo provocativamente mis piernas como si estuviera invitando a ese “fotógrafo” para que dejara su cámara y se acercara para follarme…
Eso me hace preguntarme que deben sentir esos fotógrafos al hacer esas sesiones. Me pregunto si se excitan haciendo su trabajo e imagino como podría seguir mi sesión cuando observara que su entrepierna crece bajo el pantalón…
Me excitaría ver que se le ha puesto dura fotografiándome y que sin poder evitarlo se la tuviera que sacar mostrándomela dura y caliente…
Mi consolador se convierte en esos momentos en la polla de ese “fotógrafo” y jugueteo golosa con esa imagen…sentada con la piernas abiertas, su “polla” me penetra haciéndome gemir de placer…
Me pongo a cuatro patitas como una gatita en celo al imaginar con deseo como el fotógrafo acerca su polla y juguetea con entrar sin dejar de hacerme una foto tras otra…
Me pregunto lo que deben sentir esas chicas mientras las fotografían cuando son folladas por uno o varios hombres, e imagino que soy yo la afortunada protagonista de esa escena en la que me veo rodeada de varios hombres locos por follarme mientras el fotógrafo ya no puede evitar pajearse ante esa situación…
Miro fijamente a su “cámara” e imagino que estoy tumbada en suelo siendo follada por esos hombres uno tras otro, mientras los que esperan su turno me ofrecen sus pollas para que las masajee con mis manos o les haga una deliciosa mamada.
El “fotógrafo” gime de placer y sus gemidos se confunden con los míos…
Siento que me voy a correr de un momento a otro ante la “cámara” y en ese pensamiento me acompaña la imagen de cinco pollas enormes corriéndose ante mis ojos que estallan de placer al mismo tiempo que lo hago yo.
Y con esa imagen tan sensual os dejo hasta un próximo relato…
Espero que os gusten mis relatos y que me hagáis llegar vuestros comentarios a lynda.bcn@hotmail.com