Portugal

Siguió con sus embates en mi cola, la que empezaba a calentarse como estudiante Mi cabeza se volvía loca cuando empezaba a meterse el bikini nuevamente en mis nalgas

Tengo 27 años y me casé hace 13 meses

Mi nombre es Adriana, y estoy casada con Enrique a quien conocí cuando cursé la preparatoria

El estuvo en la “friendzone” mas de 8 años

Siempre guste de los hombres varoniles, estéticamente semi-perfectos, aunque eso me llevo a sufrir más de dos descalabros.

Mi marido no es de esa clase de hombre que haga voltear a las mujeres, es blanco, mide 1.70 m. No es atlético, y remotamente varonil, tiene 28 años y es heredero de una fortuna considerablemente sustanciosa. No se confundan no estoy con el por eso, si no por el dolor que me llevo mi atención superflua y material en los hombres

Una puede ser susceptible a estos romeos que deambulan por ahí tratando de encontrar a su presa. No fui la excepción

Por eso decidí casarme con Quique, quien siempre estuvo ahí para mi. Por mi parte desde muy joven tuve un cuerpo atractivo para los hombres de diferentes edades, compañeros de escuela de mi salón, de grados más avanzados que yo, maestros e incluso papás de mis amigas

Mido 1.68, apiñonada con cabello castaño y ojos grandes color miel, hombros muy coquetos que adornan mi busto mediano muy firme. Mi trastero ha causado celos en la mayoría de mis ex novios, es redondo y firme de un tamaño que luce con cualquier ropa sin verse grande, esta respingado, de vdd es mi orgullo, mismo que fue entregado a un solo barbajan antes de Quique, es perfecto según mis ex novios, también lo piensan un par de amigos de mi suegro y primos de Quique (no me gusta saberlo, pero lo escucho constantemente cuando ven mis publicaciones)

Mis piernas son torneadas naturalmente ademas las ciñen 3 años de mi pasión por el voleibol. Mi manera de vestir es sugestiva, nada vulgar, pero si muy sexy, los jeans ajustados son lo máximo en mi día a día

Cada dos años viajamos a una de las tantas convenciones a las que Quique viaja por la empresa de su abuelo, y esta vez nos tocó ir a Portugal, nos acompañó mi prima Ross, en un hotel bellísimo lleno de lujo y detalles hermosos, colorido por donde mi mirada se posara.

Q. Amor, vas a la habitación mientras veo a Joel? (Empleado de Quique)

Y. Si bb, nos vemos en un ratito

Subí a la habitación que es medio piso del penthouse del hotel

Esa semana también se llevó en el mismo hotel una pasarela de LB y una locación para la grabación de un video acerca de deportes extremos, por lo que el hotel estaba a full. Quique es enemigo de los gentíos, por lo que pienso que debió estar muy estresado

Después de ir de Shopping decidimos ir por la tarde a la alberca mi prima Ross y yo con parte de lo que compramos, aunque mi prima es medio llenita tiene la autoestima muy alta y eso la hace muy divertida, no le apena nada ni nadie, me gustaría ser igual, pero no puedo

Ella traía un bikini azul rey y un pareo blanco que cubría un poquito sus caderas anchas, unas sandalias también blancas muy monas, el pelo suelto castaño medio largo y unos lentes de sol tipo máscara negros

Mi bikini es color verde agua con filos blancos muy finos, un tipo chal tejido color hueso y mi cabello lo llevaba recogido, con mis lentes favoritos color champagne y unas sandalias doradas que hacían juego con mi sombrero

Nuestro caminar era suave y lindo como el de garzas elegantes, por toda la orilla de la alberca que estaba volada para tener apariencia flotante, de colores lindos en el atardecer de Portugal

Nos tiramos una rato en los camastros para disfrutar de todas las personas y sus actividades. Personas de RedBull, de O’nell, y otras marcas estaban ahí junto con algunos que parecían modelos de LB

En fin, los ojos de Roos y los míos no sabían para donde ver en tan dichoso buffet, era asombroso lo que los jóvenes atletas hacen con sus físicos, de verdad de campeonato

Como a eso de las 6:00 p.m. Quedo un escenario negro con muchísimas luces y bocinas listos en la explanada cerca del restaurante a lado de la alberca, el clima estaba delicioso, y se venía una fiesta en grande

Todo era espectacular, atardecer con luces multicolores bailarinas bañando parte del lado izquierdo del hotel, música electrónica impresionantemente sexy

Caminando por todos lados personas con ropa de etiqueta , bikinis, meseros por doquier con bebidas exóticas, jóvenes deportistas con ropa que parecía de chavos urbanos del Bronx NY era un contraste fascinante y adictivo

Muchas personas más ya estábamos en la alberca observando el espectáculo embriagador de la tarde que abrazaba la noche de fiesta, deambulaban de un lado para él o tro de la piscina algunas y algunos, nosotras estábamos en el costado a él jacuzzy mas grande de las albercas junto a un bar súper coqueto que atienden dos bartender bastante acrobáticos

Me encontraba sentada en una banca sumergida junto al bar con Ross

R. Que rápido armaron todo su equipo, dijo asombrada

Y. Si, están cañones

R. ¿Será muy cara toda la escenografía?

Y. Debiera (mientras daba un sorbo de mi bebida de Singeverga famosa en Portugal)

Continuamos con una plática divagante, mientras el alcohol entraba divertidamente en nuestras cabezas

Pronto algunos de los atletas con ropa de bandoleros de NY empezaron a aventarse a la alberca con botellas de vino y cervezas en las manos, simplemente era cómico

Algunos con gorras y cascos puestos!

R. Están locos! Les puede pasar algo! Algunos ni los 20 años deben tener

Y. ¿Te das cuenta cómo sueñas? Como tu mamá! Jajajajaja

Echamos a reír juntas dejando nuestras bebidas en la barra de piedra negra

Cerca de las 9:15 empezó a soñar mi teléfono el cual ni vi, ni oí, el de Ross poco después, era Quique quien a pesar de sus siete llamadas infructíferas dejó de insistir

Poco después Llego Joel para comentarnos que Quique salía del hotel a Aplleton dónde está la fábrica de un proveedor a hora y media de ahí.

J. El Ing Enrique me manda a decirles también que si ¿quieren que me quede con ustedes?

Ross volteó a verme con unos ojos que decían “NO”

Y. No te preocupes Joel, aquí estaremos bien, tengan buen viaje

J. Gracias Sra. Adriana

Y. Ciao Joel

Poco después ya había más personas en la piscina cuando empezó un concierto de un grupo para nosotras desconocido y todos se volvieron locos

R. Que locos están estos chamacos!

Y. Cálmate Sra. Prudencia! ¿Ya se re olvidaron todos los años de la carrera en que conocías a todos los cadeneros de cada antro? Jajajajajajaja

Reímos como mensas

Las personas se acercaron a la orilla de la alberca que estaba junto a nosotras en la barra, poco a poco se amontonaban más. En algún momento tantas personas nos cercaron de tal forma que nos paramos de nuestros banquitos y nos pegaron justo a la barra que daba hacía el espectáculo, uno de los bartender nos seguía atendiendo por lo que no hicimos caso, teníamos un buen lugar y alcohol a granel

Aproximadamente después de las 11:00 p.m. Muchas de las personas habían considerado oír la música desde una pool party en uno de los mejores hoteles de Portugal

El frenesí, romance, música explotó en un un ambiente que extasiaba a todos los que estábamos ahí. Se detuvo la música electrónica y subió un grupo de unos ocho personajes de cabello largo y ropa gótica

De pronto el grupo tocaba entre rock y ópera, con tres de ellos sin ropa bajo sus chamarras tipo abrigos luciendo tremendo abdomen demasiado rico

Dentro de todo el ajetreo y vaivén del agua con todas esas personas algo me llamo la atención

Sentía claramente empujones constantes de todas direcciones, pero hubo algo que me captó

Una persona detrás mío estaba muy pegado a mí con un bulto “duro” que me desconcertaba...

Trate de canalizar mi atención al supuesto bulto que constantemente empujaba en movimientos intermitentes justo en medio de mis nalgas, eran entre empujones y piquetes de un desodorante

Por lo que pensé...que debe ser algo normal entre el tumulto de gente y más en una alberca, con tanto chavo alcoholizado

Un par de veces los empujones de la persona detrás mío hicieron que me pusiera de puntitas, algo que resultaba un tanto incómodo, pero no podía caer en las actitudes de Roos, estaba en una Pool party, ¿que podía esperar?

Aunque intentaba disfrutar la hermosa velada llena de tantos matices auditivos y visuales mi mente ya estaba en aquel bulto que de pronto se detuvo, traté de pasar la mirada por encima de mi hombro para ver al dichoso que llevaba unos diez minutos en medio de mi bikini

Era un joven con el cabello lacio, castaño oscuro apenas perceptible, con una playera de colores azules con algunas rayas naranjas, supongo que deportiva, no pude ver mucho más sin ser indiscreta

Mi sorpresa creció más cuando volví a notar el bulto mucho más claramente, esta vez empujó justo de abajo hacia arriba encontrando la mitad de mi, casi estoy segura que si no he tenido el bikini hubiera encontrado mí vulnerable ano, fue tal el empujón que resbaló desde en medio de mis nalgas por encima del bikini pasando por mi vagina y abriéndose paso entre mis piernas que no estaban tan juntas

Instintivamente brinqué en mi lugar lo que fue fácil por estar en la alberca, y exclamé un “haay” ahogado, algo que evidentemente con la euforia de todos no era de notarse, cuando caí sentí como chocaba la punta del bulto un tanto entre tibio y caliente con mi nalga derecha, estaba segura que era su miembro, y que esta vez estaba fuera de su ropa, claro! Por eso ahora era mucho más fácil sentirlo

Algo me paralizo! No podía pensar claramente, voltee a ver a Ross con pena, pero ella estaba entusiasmada como cualquiera ahí, regresé mi atención a este tipejo y tenía que hacer algo para quitármelo de ahí

Pero en un abrir y cerrar de ojos su no tan furtivo miembro estaba presionando contra mi trastero, intentando entrar de nuevo de abajo hacia arriba, con empujones no tan sutiles que me hacían ponerme de puntas una y otra vez

Entonces recorrió mi nuca como una corriente eléctrica y mis pezones se endurecieron cuando me di cuenta que con tanto “piquete” el bikini me lo había metido en las nalgas, como si fuera un hilo dental, casi instintivamente con mi mano derecha tome con los dedos el bikini que me comía, me puse de puntitas y abrí un poco las piernas para sacar de mi el bikini lo más rápido que pude

¿Por que no simplemente me largaba de ahí? ¿Por que no le decía algo a Ross? No lo sé

El agua tibia, la música, el lugar, lo prohibido, sentir como un completo desconocido quería ultrajar mi trasero, no lo sé, tal vez la suma de todo me tenía congelada, sentía calor en mis piernas, mi respiración estaba agitada desde que me saqué el bikini

Las embestidas siguieron lo que me aceleraba el pulso, y desencadenaban toda serie de emociones que si estuviera fuera de la piscina estaría también mojada

Pronto sentí una mano en la espalda, no duraba mas de dos segundos, luego la posaba en mi cadera derecha, voltee girando medio cuerpo para verlo a los ojos, me estremecí cuando vi un par de ojos azules bajo unos mechones de pelo lacio largo hasta el pómulo que le tapaban un poco el ojo derecho, de quijada amplia, se veía demasiado joven, tal vez hasta era menor de edad, no era muy guapo, pero su aspecto rudo de deportista extremo y atrevido lo hacía atractivo

Siguió con sus embates en mi cola, la que empezaba a calentarse como estudiante

Mi cabeza se volvía loca cuando empezaba a meterse el bikini nuevamente en mis nalgas

Mi sorpresa creció cuando me tomo con sus dos manos de la cintura, solo me abracé como si quisiera tapar mis pechos con pena, pegada a la orilla de la alberca y el bar

Sentí un escalofrío que recorrió mi interior y lo que después descifre como morbo

Vinieron muchos “empujones” como punteadas saben? que me hicieron casi al ritmo de sus embestidas echar para atrás mis nalgas

Cada empujón de su dureza metía el bikini hasta resbalar por debajo de mi vagina, una y otra y otra y otra vez

La música o su miembro me hacían cerrar los ojos, aventar hacia atrás mis nalgas en un pequeño brinquito del va y ven de el agua de la alberca

De pronto me apretó un poco más hacia el con sus manos, y en un movimiento audaz con su mano derecha recorrió mi cintura y bajo hasta mi pelvis buscando mi vagina (o eso pensé)

Inmediatamente doble mis rodillas empujando con mis nalgas hacia atrás para evitar que me tocara, lo que casi hizo que terminara yo como brocheta, su cadera la empujó con el miembro estocandome, y casi estoy segura que con mi bikini solo cubriendo mi nalga izquierda se abrió paso hasta meterme un pedazo de su punta, fue un breve momento que pasó por mi piel en cámara lenta, el agua por todos lados con todas esas personas chapoteando, su virilidad rozándome fuertemente y logrando abrirme con suerte en su atino, abriéndose paso, y entonces a punto de ser penetrada todo se hizo rápido

Abrí los ojos! Instintivamente le di un codazo y me voltee hacia Ross quien levantaba sus dos brazos mientras brincaba feliz, pase enfrente de ella y le dije temblorosa al bar tender con una seña que firmaría la cuenta

R. Por qué quieres pagar cucha? (Así me decían desde la preparatoria)

Y. Me siento muy mal mientras veía al atrevido joven que se movía con dificultad entre todos los que nos rodeaban alejándose

Se fue...

No sabía que sentir, ¿pena? ¿Coraje? ¿Frustración? Me embarro no sé si más de media hora su miembro tieso y gordo

Lo que si sentía era que me temblaban las piernas, estaba muy agitada, quería que no se hubiera detenido, pero algo dentro de mí se espantó

Nos salimos de la piscina como pudimos en medio de empujones, cuando el viento suave tocó mi piel mojada antes de ponerme el chal y mis sandalias, me puse toda chinita

Nos fuimos directamente a la habitación a dormir

Por más de una hora di vueltas en la cama

Primero estaba caliente, muy cachonda, deseaba masturbarme como cuando estudiaba, pero eso me hacia sentir sucia, y no me lo permití, mi mente me decía que en algún momento la punta de su miembro tocó mi ano con intensiones de penetrarlo, lo que me volvía loca saber que sus fluidos de no ser por el agua de la piscina estarían en mi lugar más apretadito que tengo, o tal vez en mi bikini

poco a poco se bajo el calor de mi hinchada vagina y palpitante ano

Y. Duérmete ya Adriana (me dije a mi misma)

Estoy segura que mañana será todo como antes

Estaba equivocada.