Pornhammer 40k - parte 3 Astronave Gárgol

Tercera parte deonde Ishar-ied huye de sus captores junto con una nueva aliada.

Astronave Gárgol.

Ishar-ied estaba desarmado, pensando en el modo de escapar antes de que sus captores consiguieran el cristal, el cual estaba en realidad muy cerca de ellos, él se lo había introducido por el ano, teniendo que apresurarse a escapar antes de que la bruja Hesperax lo examinase con sus tortuosas prácticas. Pasado un tiempo, llegó a su celda una prisionera, era una tau, vestía con ropas te tela cristalinas, esta raza en concreto tenía muchas semejanzas con los humanos, sólo que teniendo 4 dedos en las manos, 2 grandes dedos en los pies, la nariz unida, las bocas más grandes y una intensa piel azul clara, su pelo era negro y brillante, Ishar-ied tenía el pelo multicolor en una corta cresta, su piel era muy clara, sus ojos de un intenso azul luminoso, de facciones delgadas, aunque diferentes a los humanos, ambos eran realmente bellos a la vista de cualquier ser humano.

Ambos se pusieron ha hablar rápidamente de cómo escapar de allí, muy pronto supieron como atraer la atención de los guardias, el corsario eldar fue un gran arlequín, teniendo capacidad para sujetarse en el techo después de hacer unas acrobacias, los guardias habían sido examinados y ambos supieron que hacer para asaltarlos una vez llamada su atención al interior de la celda.

Asur, que era como se llamaba la tau, dejó caer sus prendas quedándose con un ligero tanga dorado, Ishar-ied se desnudó por completo dejando sus ropas ordenadas y escondidas, Asur dejó caer su tanga, el cual cayó lentamente hasta caer en la parte superior de sus pies, luego se miraron fijamente y se abrazaron, ella agarrón firme y con suavidad las nalgas del eldar mientras introdujo su lengua en el interior de sus labios, Ishar-ied acarició su espalda hasta llegar a su trasero, luego comenzó a bajar por las nalgas mientras ella subió con una mano para acariciarle la espalda mientras con la otra mano introdujo un dedo en el ano del eldar, algo que lo hizo gemir directamente sacándose el cristal, muy asombrada, ella contempló el cristal, después el corsario lo introdujo en su poniendo sus manos bajo su culo mientras ella le introducía un dedo por el ano y le masturbaba su tenso y suave pene con la otra mano.

Ambos comenzaros a lamerse las lenguas con los ojos cerrados mientras se masturbaban y se acariciaban la espalda y el trasero el uno al otro, después de un rato, Ishar-ied se tumbó, Asur lamió sus piernas y pies, las cuales tenían un bello muy escaso, luego introdujo el cristal en el ano de él durante un rato hasta que se agachó para besar con los labios y la lengua sus entrepiernas y finalmente comenzar una felación, como el pene de él era muy largo, ella comenzó a masturbarle al tiempo que le absorbía el pene, luego continuó lamiendo y besando su vejiga, siguiendo por su barriga, hasta llegar a los pezones, con los cuales estuvo un buen rato mientras él gemía ligeramente con su dulce voz, después continuó con sus hombros y cuello hasta terminar besándole nuevamente, incorporándose de rodillas poniendo su vagina en la boca de Ishar-ied, ella comenzó a brincar lentamente mientras él le mordía ligeramente el clítoris y lo penetraba con su lengua, la cual era un poco más larga que le de los humanos, ella brincó a la velocidad de los movimiento de Ishar-ied hasta alcanzar cada vez más velocidad con resonantes orgasmos, soltando una gran cantidad de flujos vaginales sobre la cara del eldar, el cual los mantuvo dentro de su boca poniéndose ante ella de rodillas, besándola con los flujos, algo que hizo que el líquido impregnara sus caras y parte de sus torsos, cayendo lentamente por sus espaldas hasta llegar a sus anos, finalmente, Asur se puso con las piernas flexionadas sobre su pene, él se abrazó a ella fuertemente, ambos brincaron lentamente hasta alcanzar cada vez más velocidad, gimiendo apasionadamente mientras presionaban sus cabezas entre ellos y se decían cosas preciosas hasta eyacular tanto que sus partes quedaron pringosas mientras el semen y los flujos vaginales se esparcían por el suelo, tras acabar, estuvieron un rato relajándose pasándose el cristal e introduciéndoselo el uno al otro mientras se sonreían, Asur tenía muchas ganas de huir con su futuro capitán formando parte de su flota espacial.

Los gemidos alarmaron a dos guardias, los cuales corrieron con dagas envenenadas a la celda con intención de cortarle las lenguas a sus prisioneros, cuando llegaron encontraron a la tau vestida, comentando que el otro prisionero había escapado, los guardias entraron e Ishar-ied cayó sobre ellos por sorpresa desde el techo propinando una patada en espiral, enseguida Asur los golpeó con el cristal produciéndoles unas brechas en las cabezas con un efecto secundario, sus mentes fueron destruidas.

Ambos recuperaron sus ropas y se armaron con el equipo de los dos cabalísticos, utilizaron los cascos de los guardias para ocultar sus rostros y fueron explorando la astronave, en un momento cruzaron al lado de la bruja Hesperax, la cual los miró con odio e interrogantes por alguna razón, era una eldar fría y bella, albina con el pelo rojo y la piel ligeramente morada, vestida con hombreras y pinchos, collar cuchillas, brazales y tobilleras de metal negro con una escasa protección que mostraba sus nalgas, tripa, la parte inferior de las piernas y brazos y sus pies, con las uñas de un rojo tan oscuro como la noche.

Cuando los fugitivos encontraron por fín una nave para fugarse, la bruja los encontró junto con muchos guerreros de la cabala, pero ambos consiguieron despegar huyendo de la astronave, quedándose estancados en el espacio durante un tiempo, el cristal estaba con ellos, una tecnología arcana que reflejó algo temible, a Celestine juzgada y ejecutada por las fuerzas imperiales, él debía darse prisa antes de que fuese demasiado tarde, necesitaba encontrar su astronave para encontrar a Celestine.