Por una materia 7 - solomily

La séptima parte de mi historia, gracias por leerme y comentar :D

Se habian hecho las 20:15 aproximadamente, Pao se habia ido muy apurada por problemas sentimentales que tuvo una amiga (aparentemente muy amiga), por lo que quede en la casa, con su padre, los dos solos.

No sabia que hacer, todavia me daba verguenza hablar con él, sobretodo porque le habia contado a su hija, aunque no estaba enojado con el, de hecho en el interior estaba agradecido, despues de todo, gracias a eso pude estabecer una amistad con Pao. Recordaba que me habia dicho que como mucho tardaria una hora, así que mi plan era permanecer inmovil, viendo la tele, haciendo de cuenta de que el no estaba presente, hasta que llegue Pao y me rescate. Por alguna razon me sentia protegido estando con ella. En 2 días se habia ganado mi confianza plenamente. En mi vida hubiera pensado decirle a alguien que un hombre me penetro, y ella con unas pocas palabras pudo lograr que se lo diga.

Habre estado unos 20 minutos con mi plan de ignorarlo y seguir viendo la tele, aunque confieso que aveces lo miraba de reojo para ver que hacia, si me estaba viendo, o si ya se habia ido. De pronto escucho su voz:

  • Perdoname. Era un tono mas bien neutro, ese tipico perdon sin sentimientos que uno dice solo por cortesía.

Trate por unos segundos de ignorarlo, pero lo habia dicho lo suficientemente fuerte como para asegurase que lo escuchara. Trate de sonar lo mas normal posible y respondi:

  • Por qué?

  • Si sabes por qué, es que ella me lo preguntó y se me ocurrio decirle eso en el momento.

Evidentemente, sus disculpas eran por mentirle a su hija sobre mis preferencias sexuales, digo mentirle por que hasta ese momento no estaba lo suficientemente seguro como aparentemente el le habia comentado a su hija.

  • No importa, no me molesta. Respondi, en realidad, me molesto un poco cuando me entere, pero despues de todo lo que habia pasado con su hermosa hija ya no me molestaba en lo mas minimo.

  • Es que serias una hermosa chica, es imposible que a alguien asi no le gusten los hombres. Volvio a su tono un poco perverso pero a la vez dulce.

Estaba volviendo a hacer el mismo juego de la vez anterior, solo que esta vez ya no sentia ese miedo, ni asco, ni ningun sentimiento desagradable. Sin embargo, mi verguenza aun me impedia responderle algo, trate de fingir que no lo escuchaba, pero los dos estabamos seguro que se habia escuchado a la perfección. Luego de decirme eso quedo mirandome como un minuto, podia sentirlo, como un rayo laser que te atraviesa el cuerpo.

Se levanto, note que se acercaba, cada paso que daba, hacia que comienze a sentir un especie de hormigueo por todo el cuerpo, sabia que eran nervios, pero nunca los habia sentido con esa intensidad. Se sento a mi lado, tan pegado como pudo, yo no podia hacer nada, ese hormigueo me habia paralizado el cuerpo. Extendio su mano por atras mio y me abrazo. Se acerco a unos centimetros de mi oido y me dijo, son voz dulce pero a la vez muy masculina:

  • No hace falta que me respondas, yo se que te gusta todo esto.

Seguia petrificado, pero a la vez estaba muy lucido, sentia todo lo que hacia y decia. Aun asi no me animaba a responder, de hecho, no sabia que responder. El continuo:

  • Te podes ir cuando vos quieras, yo no te voy a obligar a nada. Era un tono mas frio, mas desinteresado.

Por alguna razon no podia irme, no queria irme, en el fondo sentia ese deseo de volver a experimentar esa sensacion, toda su masculinidad dentro mio. Los recuerdos que tenia de aquella vez eran bastante difusos, solo recordaba ese dolor, que me habia perseguido por unos dias, ese dolor que con el tiempo comenze a extrañar, ese dolor que solo un hombre puede causarte, el mismo que yo seria incapaz de causarle a una mujer.

Sin siquiera darme cuenta, el ya estaba de pie y se disponia a bajarse los pantalones, yo solo observaba, ya sabia lo que se venia, se puso frente mio, esta vez podia observarlo con mas claridad, calcule en mi mente que podria tener unos 17 centimetros, trate de tomas fotografias con mi mente. Quizas en lo que estuve observandolo, el tiempo se hizo largo para él, asi que se abalanzo sobre mi, me agarro de la nuca, y comenzo a meter su pene en mi boca.

Otra vez me encontraba alli, sentado en su casa, con su miembro en mi boca, con la diferencia que ahora yo practicamente no me movia, el me sijetaba fuerte y hacia es tipico saca y mete, solo procuraba mantener siempre abierta la boca. Era como lo recordaba, no tenia sabor alguno, pero si se sentia el calor que emanaba, me gustaba la sensacion, lo unico que me molestaba es que aveces era un poco torpe y la metia hasta el fondo, lo que me ocasionaba arcadas. Luego de unos minutos, su sabor cambio, debido a que expulso un poco de liquido preseminal, ahora, ya no me causaba asco, era un sabor nuevo, bastante peculiar, pero agradable.

Mientras el se enfocaba en el mete y saca de su pene dentro de mi boca, yo habia perdido la nocion completa del tiempo, suponia que su hija no iba a tardar en venir. Sin embargo, a el parecia no preocuparle, solo se concentraba en hacerme degustar todo su pene. Despeus de un rato, saco definitivamente su miembro y me dijo:

  • Ya sabes que sigue ahora.

Yo solo estaba pendiente de que su hija iba a venir, aunque tambien queria sentirlo dentro mio, le dije:

  • Ya va a venir Pao.

  • Vos no te preocupes, tenemos tiempo de sobra. Con una voz muy tranquila.

Me hizo poner de rodillas en el sillon, con los codos apoyados en el respaldo, era un poco incomodo porque el sillon era muy acolchado y se hundia bastante, pero en ese momento, no podia reclamar nada. Note que ya estaba atras mio, poniendose un preservativo, volvi a mirar al frente, y senti como la cabeza de su pene rozaba con mi ano, sentia como subia y bajaba. Me sentia nervioso, sabia que lo que venia me iba a doler bastante, pero a su vez necesitaba sentirlo. Detuvo su jugueteo y comenzo a penetrarme, volvia a sentir ese dolor, estaba empujando con fuerza, me tenia de la cintura, al aumentar la fuerza de la penetracion, tambien aumentaba la fuerza con la que me sostenia. Lo unico que puede hacer yo fue agarrame como pude del sillon.

Comenze a respirar profundo, el dolor me estaba superando, comenze a gritar que la saque, que espere un poco, y otras cosas, a el parecia no importarle, estaba decidido a penetrarme cueste lo que cueste. Ya no resistiria mucho mas el dolor, cuando siento un extraño alivio, su pene ya estaba por completo adentro mio. Por un momento pense que lo peor habia pasado, ahora solo quedaba que comienze con el mete y saca. Volvi a sentir dolor, quizas un poco mas intenso, cuando comenzo a sacarla, la sacaba lentamente pero esa constante, la saco hasta que solo su cabeza quedo dentro mio.

Volvio a repetir el procedimiento unas 3 veces mas, hasta que comenze a sentir que cada vez lo hacia con mas facilidad. Fue aumentando su ritmo, ya no me dolia practicamente nada, podia sentir su pene entrando y saliendo, al aumentar su ritmo causaba ocasionalmente que no entre completamente recta, por lo que sentia una leve punzada dentro, pero no era dolorosa. Habremos estado unos 15 minutos, y siento como la mete hasta el fondo, y comienza a tener endurecer sus musculos, sabia que estaba acabando.

Salio de mi cuerpo, se fue rapidamente al baño, yo no sabia que hacer, ni con que limpiarme, me daba mucho temor de que justo entre Pao y me vea ahi, con los pantalones bajos, y recien cogido, se iba a terminar todo. Solo pude subirme rapidamente los pantalones y arreglar un poco mi ropa. Despues de unos minutos, el salio y me dijo, con si nada hubiese pasado:

  • Nena, es mejor que te vayas antes de que venga mi hija.

Me senti un poco mal, un poco usado, pero sabia que era lo mejor. Se acerco a mi, me dio un beso en la boca y sali, camine mas rapido de lo habitual, sentia una sensacion rarisima, causada por el lubricante y la sensacion de tener el ano abierto. Trate de disimular, pero la verdad es que me incomodaba mucho.

Llegue a mi casa, y fui directamente a bañarme, el boxer estaba completamente humedo por atras, me meti a la ducha y me baña, trataba de procesar todo lo que habia pasado, me dispuse a sacar ese lubricante que habia quedado, y pude sentir con mis manos, que efectivamente tenia el ano bastante abierto, y quizas lo mas extraño para mi, es que me gustaba sentirlo y tenerlo asi.

Continuara...

Gracias a todos por leerme, no se olviden de calificar y comentar, tambien pueden escribirme a mi mail si lo desean :) solomily98@hotmail.com, gracias