Por una materia 3 - solomily

Bien, habia quedado luego de tener mi primer contacto sexual, encima con otro hombre, en mi mente sabia que eso iba a cambiarme para toda mi vida, aunque aun no sospechaba que iba a ser un cambio total.

Despues de ese encuentro, paso una semana en la que no nos volvimos a hablar. yo tampoco queria hacerlo, de hecho, no queria volver a verlo mas. Me sentia angustiado, no me podia concentrar en absolutamente nada, casi no salia de mi habitacion, de momentos tenia ganas de llorar, o me agarraban destellos de coraje y queria romper todo, hasta incluso trate de hacerme la idea de que todo habia sido un sueño, que realmente no habia sucedido, pero era inevitable recordar esa sensacion de tener su pene dentro de mi boca bombeando su semen.

La unica cosa buena era que mis padres aun no habian salido de vacaciones de sus trabajos, por lo que estaba casi siempre solo en mi casa. Hubiera sido imposible ocultar que algo me pasaba. Y quizas el unico consuelo que tenia era que iba a poder aprobar la materia y poder seguir con mi carrera. Trataba de ni siquiera recordar la cara del profesor, y solo pensar en la materia y mi futuro.

Del enojo, habia bloqueado el whatsapp del profesor, pero fue como por un dia, eso de un jueves o viernes (no recuedo bien), lo bloquee un dia a la mañana, y lo desbloquee el otro dia a la siesta. El unico motivo por el que lo hice fue por si el me hablaba para decirme algo acerca de la materia. Pasaron los dias, En todos esos dias la cabeza me daba un monton de vueltas, cada vez hacia mas esfuerzo para olvidar todo eso y solo queria aprobar. El lunes siguiente, por la mañana, escucho que llega un mensaje, era extremadamente raro que alguien me hable, yo no tenia amigos con los que hablaba por whats, y los mensajes de los grupos de la universidad los tenia en silencio. Abro el whatsapp y efectivamente, era un mensaje de el que decia:

• Hola, como estas?

Simplemente no sabia que hacer, si responderle, contestarle, volver a bloquearlo, pero siempre me podian las ganas de sacarme esa materia de mierda, asi que le conteste:

• Bien, y usted?

• Bien, como vas con el estudio?

Yo sabia que en el fondo lo que menos le interesaba era eso, por un momento pense que tal vez tenia un poco de miedo de que vaya a hacer un escandalo de todo esto, algo que sin dudas le podia costar el trabajo y su reputacion. Decidi seguirle la conversacion.

• Bien, ya logre entender un monton de cosas, gracias. Ni yo me la creia, con todo lo que pasaba por mi cabeza ya no me acordaba de absolutamente nada y ni habia leido durante esa semana.

• Que bueno, te hablaba para decirte que si podes venir hoy asi te comento como es el examen, por que yo despues me voy de vacaciones y recien vuelvo cuando comienzan las clases. Confirmame si podes.

Cuando escuche eso, me volcieron a entrar los nervios, quizas mas de los que habia sentido durante todos los examenes juntos, como iba a hacer para juntarme con el, para verle la cara. Pero al mismo tiempo tenia creia que quizas era para decirme que me iba a aprobar, o a lo mejor decirme que preguntas tengo que estudiar, y la verdad no podia estar mas equivocado, como a los 15 minutos le contesto.

• Despues de comer, como a las 2 de la tarde voy a su casa.

A lo que me contesto, casi de inmediato:

• ok. Con esa respuesta tenia aun mas esperanzas de que ya habia pasado todo lo malo, y que ya no me iba a tratar como la vez pasada.

Comi una manzana, solo como casi siempre, mientras pensaba hasta en como hablaria con el, como lo miraria, y mis movimientos, para no dejar en ningun momento lugar a que me trate como la vez pasada. Que en cierta forma creia que tenia parte de la culpa, pensaba por que tendria que haber dicho eso de su hija, por que le tuve que preguntar, y otras cosas mas.

Se hicieron como las una y media y ya estaba esperando el colectivo, juro que en todo momento pensaba seriamente en volver a mi casa, pero siempre me ganaban las ganas de aprobar la materia. Cuestion que eso de las 2 y algo llego a la esquina de su casa y me voy caminando lo mas despacio posible. juro que nunca habia sentido una sensacion asi de nervios, cosquilleo en las rodillas, boca seca, manos heladas, etc. Llego a su casa, apenas intento tocar el timbre, se abre la puerta y al otro lado estaba el, mirandome como si nada hubiera pasado y me dice:

• Buenas, pasa por favor. No pude contestarle nada.

Pensaba que ya estaba, ya no iba a pasar nada raro, poco a poco se fueron extinguiendo mis nervios. Me llevo a la mesa y nos sentamos en los mismos lugares de la ves pasada. Me dijo.

• Pensaba que no ibas a venir. Con un tono normal.

• Se me hiso un poco tarde, perdon.

• Esta bien, no hay problema, te queria comentar como tomo los finales y las preguntas que seguro entran.

• Bueno profe.

No pensaba en ningun momento nisiquiera mencionar algo rferido a la vez pasada.

• Toma, esto te lo podes llevar a tu casa, pero prometeme que no se lo vas a mostrar a ningun compañero. Dijo mientras sacaba el apunte que me habia dado la vez pasada, con otros cuadernos.

• Gracias profe. Le dije, mientras ya me disponia a levantarme para irme, por dentro sentia alivio, ya tenia los apuntes en la mano, y segun yo, la materia practicamente aprobada, a lo que me dijo:

• Espera, no te vayas, no hace ni 5 minutos que llegaste. No me gusto nada su tono, era parecido al que habia usado la vez pasada. Le conteste:

• Por que?

• Sentate, charlemos un ratito. Dijo en una mezcla de tono amigable y a su vez como ordenandome.

• De que? le dije, aunque ya sabia de que queria charlar el.

• te gustó hacerlo?

• Hacer que?

• ya sabes, eso que hiciste la vez pasada.

• No, no me gusto. Dije cortante.

• Nada nada?

• No

• Parecia que lo estabas disfrutando, igual no te culpo, sos nuevita en esto, despues vas a andar buscando sola.

Por que me volvia a tratar como mujer, mi tranquilidad se habia ido, sabia que me iba a insinuar a hacer de nuevo eso, aun tenia los apuntes en mi poder, pero por desgracia estaba en su casa. No contestaba nada, y el siguio.

• No creas que con eso que hiciste te alcanza para aprobar, ni para empezar, el trato era hasta que estes segura de que te gusta hacerlo.

Ya no habia alternativa, otra vez a recibir su pene en mi boca, me resigne y le dije.

• Bueno profe

• Asi me gusta. Dijo, otra vez poniendo su cara diabolica.

Se hiso para atras con la silla quedando de costado, y yo tambien me puse de costado, esperando a que el viniera y lo hicieramos de la misma forma que la vez anterior, yo sentada y el parado, a lo que me dijo:

• Veni, arrodillate, esta vez lo vamos a hacer bien.

Me arrodille frente a el y comenze con mi trabajo, el estaba un poco mas agresivo, casi no me soltaba la cabeza y siempre trataba de meterla mas, despues de 5 minuto, me dolian muchisimo las rodillas, y se lo dije, si nos podiamos poner como la otra vez, me contesto:

• No, esas rodillas se tienen que acostumbrar. Me molesto un poco, asi que decidi pararme, quizas era la unica forma de protestar que tenia, y tal vez fue lo peor que pude haber hecho. Me dijo:

• Bueno, vamos al cuarto. Cuando llegamos me sente igual que la vez pasada, pero el no se puso delante mio como yo esperaba.

Se fue al baño y volvio casi de inmediato, aun con el pene erecto. Con una mano se masturbaba y con la otra tenia un preservativo, y lo estaba abriendo con sus dientes (nunca en mi vida habia tenido ni tocado un preservativo la verdad, pero habia visto un monton de videos). Mi peor temor se estaba haciendo realidad, si hasta ahora se la habia chupado sin preservativo, no habia razon alguna para pensar que ahora queria que se la chupe con el. Asi que lo unico que quedaba es que el queria penetrarme.

Ahora si, estaba perdido, nunca habia temblado tanto en mi vida podia notar como cada vez me ponia mas rojo, sentia los ojos vidriosos, y aparte (segun yo) no habia forma de que eso entre dentro mio, lo veia imposible. El mantenia la calma y lo unico que me dijo fue:

• Ahora si va de verdad, lo otro era calentamiento.

Ya no tenia fuerzas, no recuerdo si el me dio la vuelta y yo lo hice pero, estaba ahi, con los pies al lado de la cama, agachado y poniendo mis manos sobre el cochon, recuerdo que no pensaba nada, fue como si cada nervio y cada neurona estarian concentradas en lo que estaba pasando ahi atras, sentia como una especie de crema estaba siendo untada con su dedo en la entrada de mi ano, de hecho nunca vi ni siquiera cuando saco esa crema ni de donde.

En un instante, ya sentia lo que sin dudas era su pene intentando entrar en mi cuerpo, fue entrando muy lento pero no retrocedia ni un solo milimetro, m dolor cada vez se multiplicaba y lo unico que me salia era gritar y pedirle que pare, aunque el hacia como si no estaria escuchandome. Seguia en lo suyo, muy seguro de lo que hacia, yo sentia una daga que cada vez se hundia mas en mi cuerpo, nunca habia sentido esa sensacion, pero no me gustaba nada. En un momento, quizas unos pocos minutos, pero para mi una eternidad, siento su cuerpo pegado al mio, definitivamente, estaba completamente dentro mio. Fue un momento de cierto alivio, ya no sentia la puñalada pero aun me dolia mucho, el no decia nada, estuvo asi como por un minuto.

Ya nada podia ser peor, despues de ese minuto, en el que casi ni se movia, comenzo a sacar su pene, hasta la mitad calculo, y volvia a meterlo hasta el fondo, el dolor era de la misma intensidad que la primera vez pero el recorrido era menor. Repitio ese movimiento como por 10 minutos, intercambiaba la profundidad y la velocidad, para mi suerte, el dolor era menor con cada embestida, de hecho ya no me dolian las enbestidas practicamente, el dolor era el de la primer penetracion mas que todo. Despues siento que la mete hasta el fondo y se queda quieto, comienza a empujar, intentando meterla aun mas, aunque era imposible. Da unos 3 o 4 gritos mas bien bajos y luego me la saca.

Caigo sin fuerzas a la cama, tenia la mente casi en blanco, lo unico que queria hacer era irma a mi casa, me sentia sucio, queria bañarme y dormir el resto del año, tenia los pantalones y el boxer por las rodillas, ni me acurdaba si el me los habia bajado o yo. Trate de recomponerme lo mas rapido posible, y me di cuenta que el se estaba duchando, sali rapido de su casa, y me fui practicamente corriendo a tomar el colectivo, que por suerte pasaba justo. Llegue a mi casa, aun no podia pensar en nada, me duche rapido y me fui a dormir, con la mente totalmente en blanco, lo unico que podia sentir era un dolor, desde la cadera hacia abajo, no era un dolor insoportable pero definitivamente nunca lo habia sentido.

Continuara...