Por una equivocación II

Natalia, tras lo ocurrido la noche anterior, accede a los deseos de su sobrino, y ahora es ella la que lo busca, manteniendo un nuevo encuentro en el baño, y recibiendo nuevamente el semen del sobrino.

A la mañana siguiente, Natalia se despertó viendo que su esposo aún seguía dormido. Lo intentó despertar y tras varios intentos logro que se embelesara un poco. Le dijo: - ¡ vaya por fin de despiertas!. La cogiste bien anoche. Pero ¿no entendí como tuviste fuerza para hacerme el amor de esa manera?.

-¿te hice el amor? - Le dijo sorprendido-, pues ¡¡ no recuerdo nada!! . La verdad es que tengo una resaca tremenda y me duele la cabeza por todos lados. ¡Malditas bebidas blancas!.

Ella le mostró su vagina con resto de semen. El hombre quedó extrañado, pero se volvió a recostar en la cama.

¿No vas a despertarte?. Nos esperan para desayunar abajo - le dijo.

El le contestó: Mira. Mejor vete tú. Yo creo que ni voy a desayunar hoy. Más tarde bajaré. Tengo una resaca tremenda. Y continúo durmiendo.

-como tú quieras . le contestó ella.

Le dio un beso en la mejilla y tras ponerse una bata se dirigió al baño. Tras ducharse y ponerse una ropa bajó a la cocina. Ya habían desayunado la mayor parte. Pero en ese momento observo que hace su aparición en la cocina Héctor. Venía de hacer deporte, con un pantalón corto y una camiseta. Venía empapado de sudor:- ¿no me digas que has madrugado para hacer deporte?.

- así es. La mañana esta esplendida .- le dijo sonriéndome. ¿ Y mi tio?

- Aun continúa durmiendo la nana. Ese no se levanta hasta la tarde. Tiene una resaca tremenda. Le contesto para que lo oyeran los demás.

Los otros familiares les dijeron que ellos iban a dar una vuelta por el pueblo. Héctor al encuentro con la mujer de su tío volvió a excitarse recordando los dos polvos de la noche anterior. Por ello, antes de subir a su habitación, sabiendo que estaban solos, se acerca a los oídos de Natalia y susurra :- Me voy a duchar. ¡Te estaré esperando !

Ella le mira a los ojos en señal de reproche. Pero el le dice nuevamente mostrándole el bulto de su pantalón corto de deporte: - “ Los tengo de nuevo bien cargados de leche”. Y se toca el pene para que ella pudiera comprobarlo. ¡Tengo ganas de llenarte ese coñito de nuevo tía!. ¡sé que lo estas deseando!.

Ella se sonroja, mira para todos lados por si había alguien escuchando. Al comprobar que estaban solos le contesta:- ¿ No tienes bastante con lo de anoche?….¡estas chiflado!

Y sin poder evitarlo, ella alza la mano y toca el bulto y los testículos del joven sobre el pantalón. El cabronazo estaba de nuevo empalmado. -¡ que cabronazo…! ¡Como estas otra vez!

-Se que sigues caliente tía. “Sé que estas necesitada de que te eche otro polvo”. Le dijo mientras se alejaba subiendo la escalera.

El se marcho, y ella se quedó pensando. Joder se notaba caliente. Para colmo había vuelto a tocar la mandarria de su sobrino, y comprobó que había vuelto a mojar las bragas . Preparó algo de desayuno y la subió a la habitación de su esposo. El me dijo que lo dejara allí que de momento solo quería dormir . Entonces, salió al pasillo.

Se quedó un poco meditando que hacer. ¡ Sabía que era un error, pero me notaba caliente y deseosa !. Sin poder contenerse, decidida se dirigió hasta el baño donde sabía con certeza que estaría duchándose Héctor. Tocó la puerta, y vio que estaba solo con el pasador. Abrió y entro. ¡ Allí estaba Héctor bajo la ducha !. El le sonrió mientras terminaba de enjabonarse y echarse agua limpia. Ella entonces cerró la puerta con pasador y esperó. Cuando terminó, el comenzó a secarse mostrando su desnudez ante ella.

El descarado no hacía nada por taparse. Mantenía su daga casi en estado de erección verificando la tremenda potencia viril de aquel muchacho. ¡Su daga era majestuosa!. Nada que ver con la de su marido. Aquel era un verdadero semental en toda regla. No podía creerse que su vagina se hubiera tragado semejante mandarria.

Héctor, tras terminar, completamente desnudo vino hacia donde estaba, y sin pensárselo mucho acercó sus labios a los de su tía y la beso por primera vez en la boca. Luego metió su lengua dentro de la boca de ella, respondiéndole en todo momento. Sus manos palpaban sus pechos a través la blusa blanca que llevaba, que le pronto desabrochó dejándola solo en sujetador. Todo esto mientras no paraba de besarla

- Vaya tía tienes unos pechos de escándalo.

-¿de verdad te gustan?- le contestó .

-Me encantan. ¡Estas demasiado buena!. Me vas a tener que hacer una cubana con esas domingas que tienes.

Ella se agito. Nunca lo había hecho, pero hoy estaba caliente y completamente decidida a todo. Por ello ni corta ni perezosa, se sentó sobre la taza del baño, y tras quitarse el sujetador, sus pechos quedaron al aire. Le dijo: - anda cabronazo ponme la polla entre las tetas. ¡Voy hacer que te corras cabron!.

El joven excitado colocó su daga entre ellos, y  ella comenzó a follarlo con sus senos. Y cuando la polla comenzaba a salir de ellos, Natalia agacha un poco la cabeza y comienza a lamer el glande con su lengua.

- oh si tia. Joder. Así… eres la mejor.. ssiii

Después de un rato, viendo que podía correrse, Héctor se detuvo y le dijo: para. Quiero volver a clavarte . Quiero que sientas de nuevo mi tranca en tu coño.

Sin poder contenerse Natalia se giro quedando en cuatro mirando hacia el espejo de la habitación del baño, y el se colocó detrás de ella. Apartó la braga con su mano, palpó los labios del coño de su tia, exclamando:- joder tía. Que putita eres. Todavía no te la he metido y estas empapada.

Y al momento Natalia gimió al sentir de nuevo aquel pedazo de polla abriendo su vagina y entrado como un misil dentro de la misma. La penetración fue tan profunda que pronto alcanzó su útero. ¡Joder que polla tenía el sobrino!.

-oh cabron. Me la has metido toda. Despacio…

-que buena hembra eres tía. Sientes mi polla en tu coño. ¡Te gusta! Te voy a dar mucha polla… “tienes el coño ardiendo”. Le decía sin parar de penetrarla.

-oh cabronazo. Me tienes toda atravesada. Ella se gira hacia el y le dice:- “Recuerda que creo que estoy ovulando”.

- ¿ de veras estas ovulado tía? Me pregunta excitado.

- Ya te lo dije anoche. Me siento muy caliente, puede que este en ello. Por ello no puedes volver a correrte dentro.

Sin embargo, el chico lejos de retenerse continuó atravesando por completo el coño de la hembra con su tremendo cipote, lo que la llevó a concebir dos orgasmos casi seguidos. Luego el chico se sienta sobre la taza del baño, y le dice:- vamos tia. Sé que estas deseando cabalgarme. ¡Qué esperas putita!. Vamos monta este caballo.

Con un morbo desmedido, Natalia  se coloca sobre su polla de su sobrino, abriendo sus piernas, mientras se dejaba caer clavándose toda la estaca hasta la empuñadura. – oh Héctor, como me abres. Me estas abriendo mucho mi coño. Mi esposo lo va a notar.

- caya y monta este caballo como es debido . Ella ante aquella palabrería lo comenzó a cabalgar, mientras le decía al oído:- en otro momento te follaré también ese culito. He visto que aún no tienes sin estrenar. ¿Seguro que el tío nunca te la ha metido por ahí verdad? .

- claro que no. Como se te ocurre. Y con lo grande que la tienes.. ¡¡Me reventarías !!. Exclamo ella sorprendida de la ocurrencia del muchacho.

- pues tengo el firme propósito de encularte. ¿¡ Serás mía por los dos lados !!

Sin poder contenerse, mientras lo cabalgaba, al constar la firme decisión de mi sobrino que querer encularla, fue suficiente para que de nuevo se viniera escandalosamente rebotando constantemente sobre la tranca del joven.

Héctor entonces la echó boca arriba sobre la taza del baño, y la comenzó a follar con gran maestría. – oh cabron.. me vas a reventar-

-ábrete putita. ¡Quiero que te entre hasta el mismo útero! - le decía.

-pero,.. ¡no puedes correrte dentro!. Tienes que hacerlo fuera..- le dijo excitada, observando que el joven parecía tener el propósito de hacerlo dentro de su vagina.

-¿ de verdad no quieres la leche de tu sobrino?  Me tienes tan arrecho que dudo que pueda salirme . – le dijo sin parar de bombearla con una fuerza increíble.

- pero… ¡podrías embarazarme !- le dijo ella viendo las intenciones del mismo.  Lo veía en sus ojos. Aquel semental quería llenarla de nuevo.

vamos tia!. Necesitas mi leche dentro. Si te preño… ¡todo quedará en familia!. – uf si… me vengo… “te voy a volver a llenar putita”…. ooo

Dicho y hecho. Al momento sentía dentro de su vagina los latigazos del semen del joven, sintiendo como nuevamente se volvía a deslechar dentro de ella. Joder le estaba volviendo a regar bien por dentro. Su estado de calentura evidenciaba a todas luces que podía estar en uno de sus mejores momentos de ovulación. Joder iba a quedar preñada de su sobrino . – oh cabron lo estás haciendo…ooo como te siento.

Tras terminar, le dijo:- Antes de marchar quiero cogerte por el culito. ¡Sabes, que será mío!.

-eso ni lo sueñes. Me romperías .- le dijo ella. Joder Héctor. Has vuelto hacerlo. Te has corrido dentro. ¿Y si me has dejado embarazada?

- pues vete haciéndote a la idea de que eres mi putita. Te voy a encular como Dios manda . Y si quedas embarazada te seguiré follando. Será un placer cogerte Preñadita.

Y sin decirla más nada se puso la ropa y salido del baño.

Ella se quedó preocupada. Se lavó el coño, viendo como brotaban restos de la semilla que el sobrino le había depositado dentro. Luego se fue al dormitorio de su esposo y se eche a su lado dejándose dormir. Se tocaba la barriga, sabiendo que podía llevar la semilla del sobrino dentro.