Por un Beso de la flaca...
Relato de como una flaca bella (y odontóloga) volvió loco a su paciente.
Hola soy Ricardo, soy venezolano y quiero contarles como durante un viaje a España logré entablar una confianza con mi odontóloga de cabecera, y las cosas que ocurrieron a mi regreso fueron increíblemente candentes, ella es una flaca linda, blanca, usa lentes, cabello largo y liso, con unos pechos exquisitos y una colita pequeña pero rica. La llamaré Ámbar
Todo comenzó mucho antes del viaje, viví en Ecuador, pues me fui de mi país por problemas políticos y económicos; tengo una vecina que llamaré Karen y me dijo que le dió mi número de teléfono a Ámbar su prima, que estaba terminando su carrera de odontología, y necesitaba pacientes para practicas clínicas. Todo esto porque yo estaba sufriendo con mis muelas del juicio y tenía un año sin ir al odontólogo, como estaba nuevo en el país, mi veci me puso en contacto con la protagonista de esta historia, nunca imagine la suerte que tendría al conocerla.
Cuando finalmente nos conocimos, confieso que fue un encuentro normal al menos para mí, porque ella es muy seria de buenas a primeras, así que tenía que conservar mi compostura. Lo cierto es que esa vez nos conocimos normal, para describirla en la primera impresión, es difícil porque el uniforme le esconde virtudes físicas, pero se veía que guardaba secretos su bajo ese atuendo.
Cerca de mi fecha de viaje empezamos a conocernos más puesto que ella estaba de vacaciones de la universidad y visitaba mucho a su prima Karen. Puesto que siempre nos sentabamos en las noches a jugar cartas donde K, entre esas noches Ámbar estuvo y Compartimos chevere en los juegos y como iba vestida más casual, pude ver mejor sus atributos que ya había vislumbrado en su cuenta de instagram (sí la stalkeé jajaja). Tiene una bella figura, cintura de infarto, pechos bastante voluminosos para su contextura por lo que él juego de su torso es espectacular, de la cadera para abajo ni se diga, unas piernas de chica delgada y un trasero que le hace juego, que solo de mirarlo provoca morderlo, eso sí todo natural; como estuvimos más de cerca y en más confianza pude hasta abrazarla y rodear su increíble y pequeña cintura y sentir sus tetas pegandose a mi pecho bueno más a mi panza pues es más pequeña que yo.
Sin mucho rodeo voy al grano, ya en España en medio de la confianza que desarrollamos entablamos muchas conversaciones por WhatsApp, y entre tantas cosas que hablamos un día decidí ir más allá, y decidí preguntarle cosas del ámbito sexual, cabe destacar que ella tiene novio, en particular eso lo hacía más exitante para mi, porque sé que ella es una chica seria. Finalmente una noche nos madrugamos conversando y hablamos de gustos y tabúes sexuales. Y tan caliente me dejó que la siguiente noche soñé con ella, pero no quise dejarlo en el sueño sino llevarlo a la realidad. Así que en mi regreso de España, le dije que me fuera a ver en el aeropuerto. Y aquí comienza lo bueno ufff.
Ámbar me esperó en el aeropuerto como acordamos y yo cuando la vi me puse muy nervioso; al acercamos nos abrazamos, pude sentir su cuerpo cálido especialmente sus pechos tan ricos pegandose a mi, en ese momento mi pene reaccionó, y se irguió de manera descomunal, y lo tenía aprisionado dentro de mi short, pero en contacto con su abdomen, disimuladamente se lo hinqué un poco. Estaba muy sonrojado en ese momento.
Tomamos un taxi hacia mi Ciudadela, y durante el viaje le fui acariciando la pierna, puesto que ella también andaba de una camiseta pegada que le remarcaba sus lindos pechos y unos shorts, bien cortos, dejaba más de la mitad de su muslo al descubierto, era imposible para mi no acariciarla. Ella sonreía nerviosa y estaba sonrojada, me acerque a su cuello y le di un beso y eso la hizo reaccionar, volteó hacia mi y le plante un rico beso donde mezclamos nuestras lenguas en un calor exquisito.
Llegamos a la casa de su prima Karen y justo estaba saliendo de compras con su mamá por lo que nos dejó solos a Ámbar y a mi.
Nos sentamos en un sofá y continué lo que había iniciado en el taxi, retome las caricias en sus piernas y seguí besando su cuello para volver a llegar a sus labios finos (esos me matan de gusto) ella se fue relajando nuevamente puesto que estaba muy nerviosa y tensa, nunca le había sido infiel a su prometido.
Fui subiendo mi mano hasta llegar a su entrepierna y para mi sorpresa estaba mojadita, hasta el short estaba húmedo, yo estaba fascinado y exitado a más no poder. Mi pene estaba que reventaba dentro de mi short, lleve mi mano humedecida por los jugos de Ámbar a mi nariz, y sentí que estaba respirando el elixir de la vida, era algo muy rico. La monté encima de mi polla aprisionada y emprendimos un baile de sexo con ropa mientras nos besábamos.
Sin pensarlo más le saqué la blusa, ella sólo se dejaba hacer, y para mi agrado pude liberar esas ricas tetas que moría por ver desde mis vacaciones en España, y las empecé a besar y pasar mi lengua por toda la redondez de ellas, era exquisito, su olor era excepcional, me dejaba atontado de tanto gusto, mientras le chupaba sus pezones ella gemía de gusto como rogando por más.
La cogí por sus ricos cachetes traseros y los apretujaba con mis manos, y la hacía moverse más rápido en el sexo con ropa que ya habíamos iniciado, pude haber acabado allí mismo de no haber contado con mi capacidad de aguante, la verdad estábamos muy calientes y cada parte de nuestros cuerpos estaban hipersensibles.
Para mi sorpresa ella metió su mano y empezó a tocar mi falo por encima del pantalón corto que yo cargaba y lo acariciaba con mucho deseo,tanto que empezó a besarlo por encima mojando mi short con su saliva, era increíble como esta chica seria que conocí se convertía en una leona de fuego en el sexo; la tomé del rostro y le pregunté si estaba segura de querer hacer eso pues en sus confesiones me hizo saber que el sexo oral no le gustaba en particular; solo me lanzó una mirada de deseo y reclamo casi rogando que la dejara continuar
Así que le obedecí, nada más soltar su rostro bajo su mirada a mi short, y finalmente liberó a mi falo que estaba a punto de explotar, y sin mediar palabra empezó a darle lengüetazos, que hacían que yo temblara de placer tratando de contenerme para no estallar allí, cuando abrió su boca para metersela, la tome con mis manos y se la metí hasta el fondo de su garganta, ella tosio un poco por la hincada que le di, mantuvo durante un poco de tiempo el vaivén de cada chupada que me daba, hasta que finalmente lo sacó de su boca y se montón sobre mi nuevamente, ya ella estando desnuda, pues le había bajado el short desde que le acariciaba su rico conejito.
Estando arriba de mi nuestros sexos estaban super húmedos, el Mío por su saliva, y el de ella por su lubricacion, los empezamos a rozar el uno contra el otro, era una sensación inigualable, nuestros sexos rozandose y deslizándose entre ellos, no hay caricia más rica que esa. Sin pensarmelo dos veces la cogi de su lindo culo, la sostuve firme y coloqué su vagina justo en línea con mi pene y la senté, oooh Dios mío sentí que moriría de felicidad si lo hacía en ese instante, ella pego un grito de placer, empecé a moverla despacito, y fui subiendo la velocidad mientras iba aumentando el morbo de la situación, sí estaba ahora midiendo su sensatez, su estrechez era increíble,era una olla hirviendo por dentro, mi pene estaba gusto, salía y entraba con mucha suavidad, nuestros cuerpos hacían ese sonido del placer, me estaba cabalgando con tanto gusto, que me pedía más duro, Ámbar solo tenía la cabeza levantada, yo la penetraba mientras le comía las tetas, y de repente nuestros cuerpos estallaron en un orgasmo increíble, yo la llenaba de mis jugos y ya se movía involuntariamente por los espasmos que le generó el orgasmo, se quedo encima de mi abrazandome y diciéndome al oído que no se la sacara, al volver a la normalidad,ella fue a limpiarse los jugos que le eché dentro.
se dio una ducha antes de que llegara Karen y su mamá, entre magreos y besitos nos despedimos y me fui a mi casa que quedaba justo al frente jejeje, no olvido nunca ese encuentro, fue de los más ricos que jamás he tenido. Y así es que mi odontóloga me tiene loco aun más. Que flaca tan divina. Por ahora sigue ocupada nadie sabe si se volverá a dar ese rico encuentro,además de que vivo en Girona España, pues conseguí una oportunidad de trabajo, quien sabe si conoceré otra flaca bella como ella, y decirle como la canción del grupo español jarabe de palo : por un beso de la flaca yo daría lo que fuera.. Fin