Por ti 4

Estaba tirada en el piso llena de sangre, con el celular en su mano derecha, su brazo izquierdo se encontraba extendido en la alfombra blanca de terciopelo mientras sostenía una pequeña linternita -se la regale hace un par de años en navidad, cuando la encendía aparecía una foto nuestra, sonriendo con n enunciado “Jamas te dejare, fuiste, eres y siempre seras mi amiga”- su brazo derecho cubría su rostro. Camine de rodillas hacia ella, y en mi desespero no supe que hacer, Fabi se lanzo a mi lado y la empezó a revisar.

• Esta viva no temas. Tranquila no llores más! -me decía con una voz que me lleno de confianza absoluta- se ha quedado dormida por tanto llorar, tiene algunos golpes bastante graves pero no tiene costillas rotas, ni ningún otro hueso por suerte, aunque por como esta todo lucho y se defendió de su atacante hasta no poder mas. Parece le dieron una golpiza monumental. Pero sus signos vitales se encuentran estables. Las contusiones en su cuerpo de seguro le crearon un dolor irremediable en su momento, pero no por ello fueron las lagrimas en las que cayo en sueño -ella se levanto y comenzó apartar las tablas de madera del armario de la cama- mi hipótesis es que su dolor sentimental fue mas que el dolor físico y todas sus emociones se mezclaron y sin poder resistir rompió en un llanto abrumador que la ayudo a desahogarse hasta que su cuerpo no resistió mas y se durmió

Fabi se acerco nuevamente a Mónica y la levanto fácilmente acostándola en la cama ya preparada. La acomodo y quito la camisa y le desabrocho el brasier. Le coloco la sabana rosa para cubrir su tronco y se volvió a mi.

• Saldré a comprar algunas cosas que son necesarias para ella justo ahora. No llores más, tu amiga estará bien. Ven te daré un calmante.
• Prométeme que ella estará bien, que nada malo le ocurrirá. Que se recuperara y estará como nueva. -le pedía en medio de una suplica aferrada a ella-
• Te lo prometo. Hey -me dijo levantando mi cara con dos de sus dedos.- cuando te he mentido? -no pude responderle solo negué con la cabeza- Exacto jamas te he mentido por eso vas ahora a tomarte el calmante que te daré y luego te acostaras al lado de tu amiga, yo volveré pronto.

Por qué esta mujer con unas simples palabras lograba calmarme? Me sentía tan a gusto en sus brazos que me dolió tanto cuando se fue. Pero me tome el calmante que me fue haciendo efecto en realidad me sentía muy mal. Me acosté en la cama con Mónica esperando a que despertara mientras Fabi salia del edificio.

-Fabiola-

Salí a comprar medicamentos necesarios para la casi hermana del amor de mi vida, aun llovía pero ya no era tan fuerte como antes ahora eran simples gotas minuciosas que reventaban en el suelo de las calles solitarias de la gran ciudad, corrí con suerte al encontrar la farmacia abierta. Compre lo que necesitaba y me devolví al departamento donde había estado antes. Estaba calmada de hecho me sentía muy bien hasta que vi a aquel hombre alto de tes morena ahorcándola, cortándole la respiración con las manos a Sofia -QUE COÑO!- lance la bolsa de medicamentos sobre el sofá, -estaba cabreada, como se la había ocurrido tocar a semejante princesa?- él estaba de espalda a mi lo tome por el hombro e hice que me viera propinándole un golpe en el rostro que lo dejo tirado en el suelo sobre una mesa de cristal. No se de donde saque tanta fuerza, quería matarlo. Jamas debió tomar a quien siempre e considerado mi mujer. Él se volvió a levantar se que quería atacarme por que vi como su mano derecha se abalanzaba sobre mi, mientras su mano izquierda se mantenía sobre su nariz rota. Ante su ataque de borracho se tiro sobre mi y comenzó a ahorcarme lo estaba logrando me estaba debilitando y después siento como puedo respirar nuevamente y el vuelve a caer al piso con sus manos en sus genitales -Maldita, me las pagaras- me grito levantándose pero esta vez no medí detalle para tomar un jarrón que se mantenía -se mantenía- intacto y quebrárselo en la cabeza, el quedo inconsciente tirado en el suelo, en medio de mi coraje tome mi celular y llame a la policía. Pase la dirección y me calmo un poco la voz del oficial -Ya vamos para aya- guarde nuevamente el teléfono y voltee mi mirada a Sofia la cual estaba en el piso con sus manos en su cuello. Buscando el oxigeno que el desgraciado ese le estaba robando. Camine hacia ella y me arrodille a su lado

• Como estas?
• Estoy bien un poco desairada. Y tú?
• Estoy bien. Te dije que te cuidaría.
• Que le paso a tu mejilla? -pregunto ella pasando 2 de sus finos dedos sobre mi mejilla izquierda.
• No lo se, no había sentido dolor... Hasta ahora. -Me levante y me vi en el reflejo de la mesita de crista, el desgraciado del tipo ese me logro tocar la mejilla, mierda, me partió el labio! DUELE DUELE!
• -Sentí como unas manos rodeaban mi cintura. Y cerca de mi oído sentía su respiración- Estas bien?
• Solo tengo el labio roto, no es nada. Por qué te ataco este degenerado? -le preguntaba mientras le daba una patada pata en la pierna izquierda al tipo ese tan... y volteaba a verla-
• Déjalo, no vale la pena. Quiso entrar a ver a Mónica porque estaba arrepentido de todo el daño que le hizo y como se lo impedí se abalanzo contra mi y el resto ya lo sabes.
• Ya tranquila estoy aquí para protegerte. -la abrace fuerte ese abrazo me lleno de mi vida y volví a sentir eso que había sentido hace tanto cuando estuve en sus brazos.

Seque un par de lagrimas que rodaban por sus mejillas, y me dirigí a curar a Mónica. Ella me acompaño, tomándome de la mano, a pesar de la escena en la que estábamos me sentí tan plena solo al ver sus dedos entrelazando los míos, la mire y le sonreí -Tengo miedo- dijo ella brindándome una sonrisa del mismo modo. Vi que su amiga seguía dormida, saque los medicamentos algunas cremas antibióticas, vendas. La chica tenia algunas cortadas. Termine de curar y vendar sus heridas muy rápido, agradecía en esos momentos haber trabajado con algunos heridos de las guerras fronterizas, habrían pasado unos diez minutos cuando escuchamos las sirenas de policía. Salí a la sala y deje a Sofia y a Mónica en la habitación. Tal como las películas entraron varios Oficiales con armas en la mano con su frase celebre -Policía alto-

• Allí esta el hombre. -dije señalándolo-
• Que a ocurrido aquí? -pregunto el oficial de policía que se veía un poco mas viejo que sus otros dos compañeros. Los cuales revisaban el cuerpo inerte del sujeto en el piso.
• Llegue y estaba agrediendo a mi socia, luego intente defenderla y le golpee el rostro, partí su nariz, el tipo estaba borracho así que se abalanzo sobre mí e intento golpearme por suerte solo roso mi labio rompiéndolo levemente. Fue cuando empezó a ahorcarme le patee la ingle y cuando quiso volver atacarme le quebré el florero en la cabeza.
• Donde esta su socia?
• En la habitación cuidando a su amiga, venga.

El oficial y yo caminamos de nuevo a la habitación, Sofia estaba sentada a la orilla de la cama. Sujetando la mano de Mónica la cual parecía estar volviendo en sí.

• aquí esta el oficial.
• Que ha ocurrido?

Mónica se despertó por completo y con un poco de esfuerzo por su parte le contamos lo que había ocurrido, Mónica comenzó a llorar, Sofia la abrazaba y el oficial solo tomaba nota. Luego que terminamos con la explicación nos dijo

• Deben ir a la comisaria a dar sus declaraciones, este hombre pagara un largo tiempo en prisión. Y usted señorita -refiriéndose a Mónica- Mantenga la calma. Todo saldrá bien. Nosotros la protegeremos.
• Muchas gracias señor oficial. Lo acompaño a la puerta. -dije levantándome del suelo y acompañándolo afuera -

El oficial se fue y con el aquel sujeto tan detestable que solo pensar su nombre me daban ganas de matarlo!

Quede sola en la sala y comencé a recoger los vidrios que habían tirados, los cristales partidos, algunas astillas mínimas. Luego de una ardua hora de trabajo ya se reconocía la sala, tuve que mover algunas cosas para que todo se viese en armonía. Me tome el atrevimiento de entrar a la cocina -la cual por cosas divinas seguía intacta- y prepare algo rápido, espagueti. 15 minutos después ya estaba entrando a la habitación. Ellas estaban acostadas en la cama Mónica le daba pecho al niño, mientras que Sofia solo parecía dormir.

• Hey les he traído comida.
• Siempre tan servicial -dijo Mónica viéndome con ternura-
• Jamas dejare de serlo.
• Ya va ustedes se conocen -Pregunto Sofia sentándose, mientras yo dejaba la bandeja de comida sobre una repisa-
• -Mónica me miraba a mi yo la miraba a ella. No sabíamos que decir así que decidí hablar yo- Si nos conocemos hace varios años ya.
• Pero como? -volvió a preguntar-
• Desde que su padre hizo negociosos con la aseguradora -respondió Mónica rápidamente-
• Exacto. -asegure-
• Ah -hablo sofia dudando de nosotras, ella fuese seguido preguntando si no les hubiese entregado el plato para que comiesen.

Comimos, una velada algo incomoda de miradas escondidas entre Mónica y yo. Llevaba 5 años conociéndola, los mismos 5 años que había pasado sin Sofia, ella era que me mantenía al tanto de como estaba mi adorado Pecado, Sofia me la presento un día en su casa, cuando ella llego con varios moretones en el cuerpo -Siempre me considerado participe de la ayuda al poder femenino- me sentí mal al verla así, desde entonces la he ayudado y apoyado, no era la primera vez que me caía a golpes con Robinsón con anterioridad ya me había fracturado dos costillas. Sino lo mande a meter preso en su momento fue porque Mónica me lo suplico, pero no se como ella soportaba que el la golpease cada dia, por cualquier motivo. Una tarde llegue y ella estaba convaleciente, por poco muere sino fuese sido por Konor mi hermano que me ayudo a llevarla a urgencias. No se que seria de su vida y de la vida del pequeño niño que ahora tiene en sus brazos.

• Tengo que irme ya. -dije viendo que era casi media noche-
• Quédense a dormir, lo mínimo que puedo hacer es ofrecerles hospedajes, aparte aun llueve.
• No quisiera ser una molestia -Dije levantándome de la silla que se encontraba a una esquina de la habitación. Y lanzándole unja mirada asesina a Mónica la cual no interpreto bien- Mónica mañana te mandare a mi equipo para que te ayuden con la casa.
• Fabi, quedate. Mira, lleva todo el día lloviendo a mares, las calles deben estar inundadas hasta las rodillas, te has mojado lo suficiente, si te sigues mojando enfermaras. Y ve que necesito a mi socia bien para poder firmar los papeles de seguro.
• -No me lo creía- Entonces si nos aseguraras?
• Pues claro que sí, eso es lo que mi padre hubiese hecho.
• Oh sí, que bien, me aseguraron, me aseguraron. Genial, o yeah, que chido, muy bien así, tengo seguro, aja, estoy asegurada! Oh si -dije haciendo un bailecito bien ridículo- Muchas gracias, muchas gracias de verdad infinitas! Enormes y exuberantes gracias.
• Ya, basta con que me digas que te quedaras.
• Esta bien me quedare, pero tu igual lo debes hacer, has venido conmigo en la moto.
• QUE? EN MOTO? -grito Mónica, el niño se comenzó a despertar y ella lo volvió a dormir.
• Si por qué? -pregunto Sofía extrañada nuevamente.
• En donde dormiremos? -pregunte casi dando brincos por toda la habitación-
• Ven te muestro.

Camine tras Sofia, y llegamos a la habitación de huéspedes. Esa que me conocía de memoria, al entrar la primera vista que tenias era la de la cama enorme apta fácilmente para unas 4 personas pegada a la pared, con una pequeña mesita que tenia un portarretrato, un pequeño reloj despertador y una lampara. Un televisor frente la cama, sobre una repisa. A su lado un pequeño chifonier de 3 cajones. Al fondo de la habitación del lado izquierdo se encontraba el clóset y junto a este un juego de mueble un poco a la derecha una ventana panorámica y la puerta que llevaba al baño.

• Genial ten una feliz noche! Yo? Yo dormiré en el sofá! -dije saliendo de la habitación
• Que ocurre? -me tomo de la mano, su cálido tacto me contuvo.
• Nada, solo quiero tengas espacio suficiente para que duermas cómoda.
• Dejate de tonterías y duerme aquí conmigo. Aparte sera mas cómodo que el sofá.
• Esta bien esta bien, pero dormiré en la orilla derecha esa que esta del lado de la pared y pondré unas divisiones para que no te sientas incomoda, vale?
• Que dulce eres, iré a cambiarme.
• Veré como esta Mónica antes de dormir.
• Muy bien -me sonrió y se adentro en el baño.

Cerré la puerta de la habitación y fui corriendo donde Mónica. La que se encontraba parada viendo por el balcón, entre sigilosamente al cuarto y tranque la puerta tras mio pasándole seguro para que Sofia no escuchara.

• Como se te ocurre hacer esto?
• Donde esta Sofia? -pregunto viendo detrás de mí-
• se esta cambiando.
• Deberías hacer lo mismo.
• Esto no se hace Mónica, sabes que no podemos estar juntas! -le dije casi en un susurro haciendo presión en su brazo para que me viese.
• Me lastimas, ya no soporto mas esto! Mis mejores amigas amándose y alejándose porque un degenerado sin huevos quiere matarlas. No se vale. Deben luchar, se que ella te recuerda, quizás no del todo pero algo en ella te recuerda. Y si le dejas ver tu tatuaje lo hará por completo.
• Que puede decirle una frase como “Eres el pecado del cual nunca me arrepentiré”
• Te sorprenderías, aparte te ha visto en la moto. Por cierto eres una loca como has podido traerla en moto.
• Mi encanto natural y una amiga que jamas se cuido, por cierto como estas?
• Me siento... -me observo sonriéndome ampliamente luego devolvió la mirada al cielo donde los truenos y rayos no daban tregua a nada- plena, libre. Como hace mucho no me sentía. Siento una satisfacción y un alivio en mi pecho. Y el hecho de ver la lluvia caer y escuchar la naturaleza enfurecida me encanta.
• Eso me alegra amiga. -pasando mi brazo derecho sobre su hombro acercandola mas a mí-
• Hey y tu como estas?
• Yo? haber, como estarías tu si la mejor amiga de tu ex novia te hace quedarte una noche mas con el amor de tu vida y saber que ella no te recuerda, y que ahora solo te ve como una simple socia de negocios que ni te interesan y que por si fuese poco se va a casar en solo dos meses.? Dime como te sentirías? -pregunte sentándome en la orilla del balcón-
• Fabiola! Bajate de allí -Jalándome del brazo-
• No! aquí me siento libre. Aparte no me caeré. Llevo años en esto.
• Si claro, años donde tus costillas, piernas, tobillos y brazos han llorado!
• Coño pero entiéndeme! Ya no puedo con esto, muero por besarla por hacerle el amor. Pero quiero tenerla pero tengo miedo que el maldito de Simón me la quite por completo!
• Tranquila, las cosas se arreglaran.
• 5 años y aun espero esas palabras se hagan realidad.
• Quizás sino te hubieses ido a Europa en vez de quedarte aquí luchando por ella cunado perdió la memoria nada de esto estuviese pasando.
• Me quedaba y la mataban en físico! Yo me iba y moría mi corazón! Prefiero muera mi corazón sin tenerla pero sabiendo que esta allí! A que viva feliz en un mondo donde su risa no este.
• -baje del borde del balcón y ella me abrazo- Anda a la habitación y descansa.
• Y tú?
• Mañana iré a poner la denuncia y dar testimonio de lo que ha ocurrido con Robinsón.
• Gracias.
• Por lo menos hoy podrás dormir con ella. Y si no te recuerda que mas da, se su amiga. Aunque mi hipótesis dice que ustedes se aman, con o sin laguna mental.
• Intentare creerme tu hipótesis. Descansa.

Salí de la habitación y camine con miedo, estando apunto de abrir la puerta ya para a las afuera de la habitación que compartiría con Sofí me quedo helada no se que hacer, tengo miedo de no contenerme y hacer una idiotez, pego mi cabeza frente la puerta suavemente intento abrir pero un recuerdo me invade

5 años atrás Sábado 1 de Abril 2005

-En que puedo ayudarla?

-Quiero un anillo.

-Aun no se le declaran, he -me dijo la vendedora un poco picarona-

-Es para mi novia, quiero pasar el resto de mi vida con ella. -replique con una sonrisa-

-Eso no me lo esperaba.

-Por favor este anillo esta perfecto. Me encanta! Lo quiero, no me importa el precio, lo quiero con un grabado que diga “El Pecado de un Águila” -dije emocionada.

-Segura?

-Ve en mi rostro alguna duda de mis palabras -nego con la cabeza- entonces vaya haga el grabado. La espero aquí.

-Enseguida se lo traigo.

15 minutos despues allí estaba el anillo un precioso aro de oro con un signo de infinito que en su centro portaba un hermoso diamante. Y a sus lados unos diamantes mas pequeños incrustados en la joya. Si no fuese sido por la posición que tenia fuese tenido que vender mis pulmones para pagar el anillo.

-Buena suerte. -me dijo la señora antes de salir-

-Gracias! Espero sea un gran día.

Salí de la joyeria y me monte en mi moto estaba emocionada, el cielo estaba radiante.

Sofía desde que te conocí cambiaste mi vida, y ya no tengo vida sin ti. Quiero un amanecer donde no oscurezca nunca y una noche donde el sol jamas llegue. Quiero besarte tantas veces donde nuestros labios se mezclen. Quiero mi vida esta que ya no tengo porque desde que te conocí mi vida eres tú. Sofía quisieras casarte conmigo?

No así no, esa no me gusto! Pase todo el camino ensayando la declaración perfecta. Tuve que estacionar la moto un poco lejos porque no habia parqueadero. Sofí llegaría ese día de viaje. 3 semanas sin verla y ya me sentía que el oxigeno me faltaba. Por fin en el aeropuerto. Cuando llegaran los pasajeros de África? Ya llegaron? Estoy asustada, nerviosa. Y si me dice que no? Y si no me responde? Y si sale corriendo? Y si no quiere su vida conmigo?

Me estoy desesperando!

-Señor disculpe podría ser tan amable de decirme a que hora llega el avión de África?

-Ese avión llego hace 2 horas señorita.

-2 HORAS! -exclame asustada-

-si.

-Gracias -dije corriendo a ningún lugar-

Empece a llamarla, 3 semanas sin escuchar su voz, sin ver su rostro, sin besarla. 3 semanas casi un mes de estos 5 meses que llevamos de relación, como en tan poco tiempo deseo tanto de ella?

No atiende mis llamadas, no contesta mis mensaje. Estoy esperándola aquí en la salida de todos los pasajeros y escucho por el megáfono.

-Señorita Fabiola Linsert que hermosa se ve hoy! El negro sin duda es su color.

Pero que rayos? La voz del megáfono me hablo a mi? Reviso mi maletín y veo mi cédula, si yo soy Fabiola Linsert Ay Dios! Sera que me raptaran? Y otra vez esa voz.

-Fabiola, estos meses a tu lado han sido los mejores meses de mi vida. Me has devuelto esa esencia que sentí perder, esa chispa pequeña que al ser avivada se convierte en un gran fuego que arrasa con todo a su paso, y hoy tu has arrasado con cada paradigma en mí.

La hermosa voz parece quebrarse y yo sigo dando vueltas en el mismo lugar. Mi rostro aparece en cada pantalla del aeropuerto. Esto no me gusta me estoy asustando, todos me miran y sonríen mientras comienzo a correr buscando la cabina de audio y seguridad. La voz vuelve hablar.

-Eres la mujer que me hace feliz, la reina que quizás no merezca plebeya, me tienes como agua para chocolate, tus besos, tus caricias, y esa forma única de demostrarme el amor, me han mostrado la sencillez de la vida, lo mas hermoso. -Sigo corriendo y a muchos metros de distancia veo la puerta. Las personas me ven, y sonrien ampliamente, se atraviesan en mi camino como si los hubiesen clavado al suelo (Carajos, por qué están tan felices?)- no quiero ni rosas ni claveles no quiero lunas ni amaneceres solo quiero una vida a tu lado. Solo quiero que hoy aquí en este lugar delante de todos ellos de testigos me des el si que necesito! El si que quiero escuchar de tus deliciosos y carnosos labios. Fabiola quieres ser mi esposa. -freno en seco la carrera, caigo al piso (No me paso nada estoy bien -le digo a unos hombres que me quieren ayudar.)

La pantalla que mostraba una foto mía ahora muestra la foto de Sofí y yo besándonos bajo la lluvia y un amplio CASATE CONMIGO... MANDAME UN SI CAMUFLAJEADO!

MIERDA! Susurro mientras me levanto del suelo. Y veo a Sofia salir del departamento de audio.

Oh Dios! No puedo articular palabra así que solo espero llegue a mí, de su espalda saca un ramo de rosas, y veo un cajita en su mano izquierda, se lo que hara así que me adelanto y de mi maletín tomo la cajita plateada que contenia en anillo, acaricio mi cabello suelto y me arrodillo delante de ella rodeada de ese monton de chismosos espectantes a lo que dire, sujeto su mano izquierda abro la cajita y mientras le voy colocando el anillo le resito:

-No hay tiempo en el que no pueda estar sin ti, no hay momento donde no te quiera aquí, mi corazon el unico sonido que recita es tu nombre y mis labios balvuseos de palabras que te quisieran decir. No se que día es, ni si es el momento indicado solo se que desde que te conocí siempre te quiero a mi lado, eres la mujer que le dio luz a mi camino y sentido a mi destino tan rápido corrí y cai en tus brazos entendiendo así que si tu estas conmigo no me importa el fracaso. Tu sonrisa es mi impulso y tus ojos mi sendero dejame vivir contigo este hermoso momento, no quiero perder mi vida pensando que este fue el momento y te deje partir. Sofia Fincherger aceptas hacerme la mujer mas feliz siendo mi esposa amandome a mi, y permitiendo regalarte cada momento unico que te hagan enamorar mas de mi.

El Aeropuerto quedo callado, como si nadie mas que no fuese ella o yo estuviera allí. Sus ojos se llenaron de lagrimas y en mi una sonrisa, que se iba desvaneciendo a medida que pasaban los segundos y ella no respondía. Estaba por pararme y salir corriendo y que me arrollara un camión, la intriga me mataba. Hasta que por fin levantandome y dejandome a su su altura me beso, me beso de esa forma tan apasionada como si fuese a morir despues de ese beso -por poco- de una forma tan unica que mi oxigeno me faltaba y susurro aun muy cerca de mis labios

-Si, quiero ser feliz a tu lado y ser tu esposa.

-Si? -pregunte alejandome unos centimetros ella asintio-

la levante del piso cargandola con las fuerzas que la emoción y adrenalina me brindo y empece a gritar:

-DIJO QUE SI! ELLA ME DIJO! QUE SI! -gritaba mientras ella se sujetaba fuerte de mi cuello- ME HA DICHO QUE SI! ME CASARE! OH POR DIOS ME CASARE.

El aplauso y alboroto se hizo presente, los silbidos y gritos de “BESO” BESO BESO! Retumbaban en el aeropuerto! La bese nuevamente, pero de una forma tan dulce como si fuera de cristal y tuviese miedo a romperla. Como pudimos salimos del aeropuerto corriendo por esas calles ahora donde llovía. La mayoría de las veces que estábamos juntas llovía, la mayoría. Dios nos había regalado ese privilegio.

Caminamos hacia su auto ya que por la maleta que traía nos era muy difícil irnos en moto. Estaba feliz ella me sonreía yo moría por besarla. Por comerla toda. Y hacerla feliz siempre. Ya en el auto empezó a manejar mientras cantábamos la canción Cálido y Frío Franco de Vita

Por este amor contra corriente

por este amor que nadie entiende

-Acaricie su mejilla y ella de reojo me sonrío-

A veces no conoce fronteras

y se desboca de mala manera

me arrastra como el agua del río entre calor y frío

pero es tuyo y es mio

-Me señalo y luego se señalo.

claro como una noche de luna de luna llena

pero vale la pena. Y veces me lleva tan lejos

donde nunca he estado, aveces se me pierde y vuelve al rato

entre cálido y frío este amor es tuyo y mio

Por este amor que nada pretende

por este amor que pica y se extiende

-hice la señal de una serpiente con la mano ella volvió a sonreír (Amaba su hermosa sonrisa)

por este amor que nace del tiempo

por este amor que a veces ni yo mismo lo entiendo

y juega como si fuera un niño con cara de pillo al gato al ratón

y veces se me muestra desnudo tan frágil y puro que equivocarme lo dudo

y a veces me lleva tan lejos donde nunca he estado

a veces se me pierde y vuelve al rato

entre cálido y frío este amor es tuyo y mio

y a veces me confunde el cielo con la tierra

a veces no se si va o ya regresa entre cálido y frío este amor es tuyo y mio!

-Ella mantenía muy bien esas notas altas-

y aveces me lleva tan lejos donde nunca he estado

a veces se me pierde y vuelve al rato

entre cálido y frío (cálido y frío) este amor es tuyo y mio

y a veces me confunde el cielo con la tierra

a veces no se si va o ya regresa

entre cálido y frio este amor es tuy y mio!

La estaba pasando tan bien con ella. Paro el auto porque el semáforo nos daba la oportunidad de darnos un corto pero gratificante beso.

• Amor -dijo ella poniendo el carro de nuevo en marcha-
• Dime vida mía.
• Vida mía. No pero ahora si en serio. Cuanto te costo el anillo, se nota es carisimo! No merezco tanto -dijo ella observando el anillo y devolviendo la vista al frente-
• Amor contigo todo vale la pena, tu vales la vida y eso es algo insignificante, así que no te preocupes -le calme besando su mano-
• Que te ha parecido lo del aeropuerto?
• Me has dejado impactada, jamas pensé que me harías eso.
• Esa era la idea. Llevaba días pensándolo, noches llorando la falta de tu presencia, es que...
• CUIDADO SOFIA! -grite, ella volteo la mirada a su izquierda y en cuestión de milésimas de segundos giro el volante a tal magnitud que el carro del desgraciado alcohólico que se había comido la luz no nos impacto tan fuerte pero aun así golpeo la parte posterior del auto empezamos a derrapar ante la fuerte tormenta Sofí perdió el control del auto que termino impactando contra el edificio de la biblioteca nacional.

3 meses en coma, unas cuantas lesiones que ya sanaban y en el periódico el enunciado “La pequeña Fincherger despierta de su coma junto a su amiga que le acompañaba.”

-Sofia-

Me relaja la idea de dormir fuera de casa. No quisiera encontrarme a Pablo y que discutiera conmigo justo ahora. Fabi sale de la habitación y yo empiezo a cambiarme dejo su chaqueta que sorprendente mente estaba seca sobre uno de los muebles. Me di una ducha con agua tibia. Y después de unos minutos, salí. Me cambie ya que solía dejar algo de ropa. De pronto en un movimiento indebido golpee mi tobillo contra una de las patas de la cama -AUSH! Eso me dolió- ya tengo sueño pero Fabiola no vuelve, iré a ver como están ese par. Voy cojeando para no hacer mucha presión en mi tobillo y que mañana este bien. Abro la puerta y de nuevo...

Tengo varios capitulos terminados de este relato solo que he recibido una critica desalentadorañ... Nada que una buena dosis de egocentrismo no pueda curar. No en serio me sanimo mucho la critica mas de quien me la dijo. pero cada escritor necesita eso para su vida criticas buenas malas peores y estas LAS DESTRUCTORAS DE INSPIRACIÓN! Seguire escribiendo para esos que fieles leen mis humildes letras.

Saludos e infinitas gracias desde Mi soledad nocturta. Sol