Por miedo a equivocarnos (9)

Raquel

No entendía muy bien que era lo que pretendía Roberto volviendo a mi vida. Todo quedó claro cuando él se fue, cada uno haria su vida y nos quedaríamos con los momentos bonitos. La cena esa noche fue amena, Carlos y Roberto contaban como era la vida en Argentina y las cosas que hacían allí mientras que yo lo único que hacia era pensar en Erika. Por fin la cena terminó y cada uno nos disponíamos a ir a descansar para el día siguiente. Antes de que pudiera subir las escaleras escucho una voz llamándome.

Roberto: Raquel, me gustaría poder hablar contigo un momento, prometo dejarte ir a descansar enseguida- dijo

Yo: Está bien, pero que sea rápido por favor, estoy muy cansada- dije con algo de incomodidad-

Salimos a la puerta de la calle y comenzó a hablar.

Roberto: Raquel, sé que lo nuestro pasó hace mucho tiempo y que quedamos en seguir con nuestras vidas cada uno por separado pero también sé que lo nuestro fue muy sincero y bonito. Me gustaría que nos diéramos otra oportunidad, yo te sigo queriendo y sé que esta vez saldría todo bien.. me podría mudar aquí y bueno, creo que podríamos estar bien, no puede ser que con todo el amor que nos tuvimos no acabáramos juntos..-

Yo: mira Rober..-

Roberto: No, no quiero que digas nada, solo te quiero decir que voy a luchar por volver a conquistarte como sea. Tu sabes muy bien que lucho hasta el final por lo que quiero y yo te quiero a ti. No te molesto más, buenas noches amor, te quiero- dijo dándome un beso en la mejilla y marchándose rápidamente-

Me dirigí a mi cuarto y me tumbé en mi cama a pensar en todas las cosas que me dijo Roberto. No se imaginaba lo que hubiera dado por escuchar todas esas palabras hace algún tiempo atrás, pero no en ese momento. Él es un hombre que no para hasta conseguir lo que quiere y por eso mismo me daba tanto miedo de lo que pudiera hacer, no quería que nadie se interpusiera entre Erika y yo.

Mientras estaba en mis pensamiento me llegó un mensaje de Erika dándome las buenas noches, todas mis preocupaciones se esfumaron al leer su “te quiero”. Después de contestarla, me preparé a dormir, estaba deseando volver a verla y poder besarla, se estaba convirtiendo en una adicción para mi. Al día siguiente ya estábamos todos de vuelta a la universidad pero ahora era mucho mejor todo. Erika y yo nos la pasamos juntas, disfrutando de la compañía de la otra. Me encantaba como me miraba.

Cuando salimos de la universidad Erika me invitó a tomar un helado y fuimos a un parque que nos quedaba cerca. Ver a esas parejas besándose, demostrándose cuanto se quieren sin tener que ocultarse de nadie me hizo desear estar así con Erika, sin ocultarnos, al fin y al cabo no hacemos nada malo. Lo hablé con Erika y se que la hizo muy feliz porque a ella no le gusta esconderse de nadie. Cuando llegué a mi casa mis padres se encontraban en el salón conversando.

Yo: hola mamá, hola papá- dije dándoles un beso a cada uno- ¿que tal estáis?-

Mamá: hola hija, estamos bien, aquí hablando de lo cambiados que están Carlos y Roberto. Ya te habrás fijado que Roberto está mucho más guapo ¿verdad?- dijo sonriente-

Yo: mamá, no me he fijado en eso porque Roberto ya no me interesa..-dije con algo de fastidio-

Mamá: pero hija si se ve que te quiere y que ha regresado por ti-

Papá: basta ya María, deja que Raquel elija al chico con el que quiere estar y si vuelve o no con Roberto tiene que ser porque así ella lo decida-dijo apoyándome como siempre-

yo: gracias papá-dije dándole un beso- quería hablar con vosotros porque tengo algo muy importante que deciros- dije mirando a ambos-

Papá: cuéntanos hija, ¿que tienes que decirnos?-

yo: es algo demasiado importante y prefiero que esté también Carlos, quiero que este toda mi familia- dije algo nerviosa-

Mamá: si quieres podemos organizar una cena mañana y así puede estar Carlos-

Yo: prefiero que sea el sábado así me da tiempo a terminar algunas cosas y estaré mas relajada, ¿os parece?- dije convencida de que era lo mejor ya que conociendo a Erika necesitará concienciarse xD-

Papá: por mi perfecto hija, nosotros nos encargamos de todo no te preocupes- dijo sonriendo-

Yo: gracias a los dos.. ah! y también estará Erika. Ahora me voy a mi habitación, necesito repasar algunas cosas de la universidad,- dije dirigiéndome a mi cuarto-

Sabia que estaba haciendo lo correcto. Erika no es de las personas que se oculten y pues por mi lo estaba haciendo.. ya era hora de devolverle un poco de lo que hacia por mi. Al día siguiente le dije a Erika los planes de la cena y se alegró mucho aunque se que tenía miedo por la reacción de mis padres. Yo también lo tenía pero si estaba ella a mi lado todo sería más fácil.

Sin darme cuenta ya había llegado el día. Estaba muy nerviosa y conociendo a Erika ella tenía que estar peor. El tiempo pasaba muy rápido. Me duché, me vestí y me dirigí al salón donde estaban mis padres y en ese mismo momento sonó la puerta. Por ella entraron Carlos y Roberto. No entendía que hacía ahí Roberto si yo no le invité así que me dirigí a hablar con mi madre.

Yo: mamá ¿que demonios hace aquí Roberto si era una cena de familia?- dije molesta-

Mamá: hija, Roberto es como de la familia, además, si tu hermano viene, él se quedaría solo y es muy descortés de nuestra parte permitir que eso pase- dijo

Yo: siempre haces lo que te da la gana mamá, pero está bien, espero que después de esta noche os quede claro a los dos que no quiero estar con él- dije yendo a saludar a mi hermano-

Sabía que a Erika no le agradaría ver ahí a Roberto y la verdad, a mi menos, pero mi madre siempre hace lo que quiere. Estuvimos charlando un rato más hasta que sonó el timbre anunciando que Erika había llegado. La cara de Erika cambió cuando vio sentado a Roberto con nosotros. Me miró como pidiendo una explicación a lo que yo le hice una señal para decirla que yo no tenía nada que ver. La cena fue tranquila, hablábamos de todo un poco, hasta que tomé el valor suficiente para hablar.

yo: bueno, creo que es la hora que os diga el por qué de esta cena...-

Mamá: yo creo que ya me lo imagino- dijo mi madre sonriendo

En ese momento me quedé en blanco, por un momento me imaginé que mi madre se había enterado de todo hasta que siguió hablando.

Mamá: venga dilo ya, sé que nos vas a contar que has vuelto con Roberto, era de esperarse- dijo muy feliz-

No me esperaba que dijera eso al igual que por la cara de Erika ella tampoco.

Yo: mamá por favor, no es eso, déjame hablar. Si estoy con alguien y estoy muy enamorada pero no es de Roberto que por cierto no se porqué le has invitado sin mi permiso sabiendo que tenia que decir algo importante- dije respirando profundamente preparándome para la reacción de todos al enterarse de lo que tenía que decir- como os he dicho estoy muy enamorada y no es de Roberto ni de ningún hombre, estoy enamorada de una mujer y esa mujer es Erika- dije agarrando la mano de Erika ya que me daba seguridad-

Todos se quedaron en silencio durante un buen rato, nadie decía nada hasta que Carlos rompió el silencio.

Carlos: yo os apoyo, Erika a mi solo me importa la felicidad de mi hermanita y si es contigo yo soy muy feliz, solo te pido que me la cuides mucho- dijo mi hermano sonriendo-

Erika: no te preocupes que lo haré-dijo algo tímida-

Mamá: ¿mi hija lesbiana?- dijo en voz muy baja, sabía que ahora venía lo peor- no puede ser.. tu no puedes ser lesbiana!!!- dijo gritando- yo no te he dado esa educación!!- dijo mi madre comenzando a llorar-

Yo: mamá lo siento mucho de verdad pero yo quiero a Erika, estamos enamoradas, no llores por favor- dije triste al ver como se encontraba mi madre-

Mamá: ¿que no llore? Como no voy a llorar después de lo que me has dicho. Seguro que estas equivocada, seguro que te has dejado engañar por ella-dijo señalando a Erika-

Cuando dijo eso no puede evitar hablar. Erika no se merecía que la tratara mal cuando lo único que ha hecho es hacer feliz a su hija.

Yo: mamá!! no la trates así y no, yo no me he dejado engañar por nadie, la quiero, nunca he estado más segura de nada en mi vida-dije mientras algunas lágrimas comenzaban a salir-

Papá: ya está bien!!-dijo gritando- creo que cada uno debe irse ya su casa. Carlos, vete ya y disculpa todo esto Roberto, no debiste verlo...

Erika, muchachita, tu también deberías irte, ya hablaremos cuando todo se tranquilice un poco-dijo mi papá en tono amable-

Yo: si, tienes razón papá, vamos Erika-dije acompañándola a la puerta-

Erika: no se que decirte amor...-dijo- sabes que te quiero y que estaré contigo siempre pase lo que pase ¿verdad?-

Raquel: lo se mi vida, gracias por estar a mi lado hoy-dije abrazándola, sintiendo su calor, ese calor que me trasmitía tanta tranquilidad-

Roberto: disculpad!-dijo pasando a nuestro lado- Raquel, espero poder hablar contigo a solas-

Yo: si es lo que quieres... ya hablaremos en otro momento Roberto ahora me estoy despidiendo de mi novia..- dije algo fastidiada por su presencia-

Roberto: vale, pues ya hablaremos entonces-dijo dándome un beso en la mejilla-

Yo: es un tío insoportable, todavía no entiendo que hacia aquí-dijo molesta, se notaba que estaba celosa, me encanta que se ponga así-

Raquel: mi amor, sabes que a mi madre le cae muy bien y pues, le invitó ella, yo no sabía nada-dije robándola un beso-

Yo: está bien amor, me voy que tendrás que hablar con tus padres tranquilamente, recuerda que estoy contigo ¿vale? Llámame si necesitas algo, te quiero!- dijo despidiéndose-

Yo: vale bonita, ya te llamaré para contarte, te quiero- dije entrando en casa preparándome para lo que quizás me esperaba-

Mis padres todavía seguían sentados en la mesa en silencio. Mi madre no despegaba la mirada de su plato y mi padre de su copa de vino.

Yo: lo siento mucho- dije y solo mi padre me miró- lo ultimo que quiero es haceros daño porque os quiero mucho- dije desde la puerta-

Mamá: ¿cuando ha sucedido esto? Tu has tenido novios, siempre te han gustado los chicos.. ¿que ha pasado?- dijo sin despegar la vista de su plato-

Yo: mamá, me enamoré de Erika y ya está, no se puede controlar de quien te enamoras..-

Papá: creo que por hoy ya hemos tenido suficiente, lo mejor será que nos vayamos a descansar y mañana hablamos-dijo mirándome con ternura-

Yo: está bien, buenas noches- dije y me fui a mi habitación-

Me tumbé en mi cama recordando cada momento de esa noche, intentando adivinar que pasaría a partir de ese momento. Cogí mi móvil y empecé a escribir un mensaje para Erika.

Txt: Amor, apenas hemos hablado cuando os habéis ido, mañana se hablarán las cosas mas tranquilamente. Quiero que sepas que no me arrepiento de nada, quiero estar contigo, estoy segura. Buenas noches cariño, te quiero.

A los minutos me llegó otro mensaje de Erika.

Txt: Mi vida, recuerda que cuentas conmigo y que vamos a salir adelante las dos juntas. Gracias por lo que has hecho por mi. Buenas noches, te quiero mucho mi amor.

Después de leer el mensaje me quedé profundamente dormida. Al dÍa siguiente me desperté temprano, no había podido dormir muy bien esa noche. Me duché, me vestí y bajé a la cocina donde seguramente estaría mi padre. Cuando entré a la cocina mi padre estaba leyendo un periódico y mi madre a su lado tomándose su café de todas las mañanas.

Yo: buenos días- dije sentándome en una de las sillas-

Papá: buenos días cariño- dijo sonriendo- ¿quieres un café?-

Yo: vale papá, gracias- dije devolviendole la sonrisa- mamá, ¿sigues enfadada?-dije algo triste-

Mamá: no lo estoy Raquel, pero no esperes que acepte lo que nos dijistes ayer tan fácilmente- dijo con tono de voz duro-

Yo: Está bien, lo entiendo.. Papá, ¿tu que piensas de lo de ayer? No me has dicho nada todavía..- dije mirándole-

Papá: hija, es una noticia algo dura de asimilar pero yo siempre he dicho que no me metería en las relaciones de mis hijos y si a ti te hace feliz una mujer, adelante- dijo sonriendo- espero que seais felices Erika y tu-

Yo: muchas gracias papá, significa mucho para mi esto- dije dándole un gran beso en la mejilla-

Me dolía que mi madre no aceptase que estuviera enamorada de Erika aunque en el fondo la entendía. Que mi padre me aceptara significó mucho para mi ya que yo le adoro y su opinión es muy importante.

Le conté todo a Erika, lo que me había dicho mi madre y mi padre. Las dos coincidimos en que dejaríamos que el tiempo pasase para que mi madre lo aceptara.

Ya había pasado una semana desde aquella cena y todo iba muy bien con Erika. Mi madre ya se iba haciendo a la idea aunque no le gustaba mucho. Carlos decidió quedarse junto con Roberto durante un mes entero ya que no tenían mucho que hacer. Todo parecía ir bien hasta aquel día.

Mamá: Raquel, ayudame que ya estarán por llegar a comer Carlos y Roberto y todavía no tenemos puesta la mesa para comer- me dijo-

Yo: vale mamá aunque no entiendo porque tienen que venir casi todos los dias a comer. Carlos sí, porque es su casa, pero Roberto...-dije fastidiada por su constante presencia en mi casa-

Mamá: ya hemos hablado muchas veces eso Raquel así que termina de poner la mesa que ya están al llegar- dijo volviendo a la cocina-

Mi madre y Roberto últimamente se pasaban mucho tiempo conversando, incluso algunas veces había ido a mi casa sin Carlos solo para hablar con mi madre. Eso no me gustaba para nada pero bueno, a mi madre le caía muy bien, era de esperarse. Cuando ya estábamos todos, nos dispusimos a comer. Entre charlas acabamos y fuimos al salón.

Roberto: Raquel, ¿me permites unos minutos? tengo que hablar contigo..- dijo levantándose-

Yo: está bien, vamos- dije yendo hacia mi habitación-

Roberto: mejor vamos fuera de la casa, así puedo tomar un poco el aire- dijo saliendo-

Yo le seguí y nos sentamos los dos en un escalón de la entrada de mi casa.

Yo: tu dirás Roberto, no tengo todo el día- dije incómoda ya que sabía lo que me diría-

Roberto: Raquel, sabes que yo te quiero, lo nuestro fue muy bonito, dame una oportunidad y ya verás como te haré mucho más feliz que Erika- dijo agarrándome de la mano-

Raquel: nadie nunca me podrá hacer más feliz que Erika que te quede claro y tu lo has dicho, fue bonito, es pasado, yo ya he hecho mi vida y he encontrado a la persona perfecta para mi, así que deja ya de intentar cosas inútiles- dije fastidiada ya por el tema-

Roberto: yo sigo pensando que te podría hacer mucho más feliz y sé que todavía sientes algo por mi lo que pasa es que no lo quieres ver, pero yo te lo demostraré- dijo antes de abalanzarse sobre mi para besarme-

El beso me cogió desprevenida y no reaccioné rápido pero cuando me di cuenta de lo que pasaba lo empuje y le di una gran cachetada.

Yo: nunca en tu vida vuelvas a besarme ¿me has entendido? Jamás-dije muy enfadada-

Roberto: perdoname Raquel, solo quería demostrarte cuanto te quiero.. ya veo que es imposible que vuelvas conmigo. Solo quiero decirte que cuentas conmigo como amigo, te lo digo sinceramente- dijo mirando al suelo-

Yo: está bien Roberto, como amigo si te quiero en mi vida, pero solo como eso-

Después de llegar a ese acuerdo volvimos a entrar a la casa. Esperaba que a partir de ese momento no hubiera nada más que pudiera separarnos a Erika y a mi. Aunque no me había fijado en alguien que lo vio todo, o más bien, casi todo.

Bueno pues aquí os dejo otra parte. Espero que os haya gustado y muchas gracias a todos los que leen y comentan mi historia :). Disculpad la tardanza, sé que esta vez me tardé demasiado..

Un beso!!