Por mi primito pierdo la cabeza 1

Después de varios minutos de recorrer mi cuerpo el orgasmo estaba en puerta un largo y delicioso suspiro invadió mi boca y llevando mi mano con mis jugos lo deguste a ojos cerrado pensando que era la leche de mi primito….

Inmediatamente de mi monumental orgasmo decidí vestirme con unos jeans ajustado y una camiseta de tirantes negras sin soutien  e ir a la casa para  conocer a mi futura familia y corroborar que las sensaciones que había tenido hacia mi primo no eran solo fugaz sino calentura de una mujer que quiere coger y pasarla muy bien  con su macho, entonces decidí comenzar a usar mi mejor artillería la seducción…

Al llegar a la casa vi a Carmen con los niños en la cocina muy entretenida en la preparación de la cena

YO- Buenas Carmen te ayudo?

C- hola!!! Y que tal la casita te gusto?

Yo- claro que si Carmen. Es lo más hermoso que vi en mi vida, mirando con una leve sonrisa a mi primito que se había dado vuelta para saludarme, y regalarle una guiñada de ojo.

La cena fue de lo más normal charlamos de la familia y recordábamos viejas anécdotas. Terminada la cena vi que mi primo se disponía a levantar la mesa y como una autómata decidí ayudarlo y colocarme en el fregadero para lavar los platos. Los pequeños roces eran como espinas en todo mi cuerpo, quería que me tocara, sentir todo su cuerpo, quería ser su puta y que me cogiera a gusto y placer, pero él me veía como a su primita solamente.

Mientras lavaba ponía mi culo en pompas y lo movía al compás de la música que se encontraba sonando ya que sabía que Carmen había ido a acostar a los niños. Mi baile era cada vez más sensual, llegando a lo sexual porque sabía que él se encontraba atrás de mí terminando de levantar las cosas, podía sentir que  sus ojos se clavaron en mi cuerpo que me miraba, media cada centímetro de mi ser, pero hasta ahí llego por que la maldita de su mujer nos interrumpió y toda la magia de derrumbo, puedo jurar que a la muy perra en ese momento la odie, pero con mi mejor cara de nena buena le dije- primita ya estamos terminando , quiero agradecerte por todo!!

Nos tomamos un café los tres y charlamos de la facultad y como nos organizaríamos ya que los primeros días me acompañarían para entrar en confianza con las calles de la capital, pero para eso faltaba todavía una semana.

Al terminar mi primo me acompaño hasta la casita, para enseñarme cómo funcionaba la alarma, mientras caminábamos notaba cierto nerviosismo de parte de él, como si quisiera decirme algo pero no se animaba.

La brisa de la noche estaba fresca y mis pezones erectos anunciaban que tenían frio quedando bien marcados en la tela de mi camiseta siendo muy perceptibles a la vista de mi primo que en un descuido de su parte lo vi que miraba fijamente mientras abría la puerta  y me dejaba pasar como todo un caballero, a lo cual le brinde una sonrisa mordiéndome el labio inferior.

Sus indicaciones fueron rápidas Fabián – mira peque esta es la clave xxxxx la tenes que colocar cada vez que entres o salgas, te la dejo anotada en un papel por si te olvidas de ella. YO- gracias Fabi sos un amor, y lo abrace pegando todo mi cuerpo en el suyo sin dejar centímetros de distancia, le susurre al oído – como te podre agradecer esto? Terminado de decírselo le mordí suavemente la oreja y me aleje para ver su reacción, él ni se inmutó solo se limito a dar la vuelta e irse, dejándome con un calentón de puta madre.

Me desvestí pensando en él, como podía ser que no me digiera nada o hiciera algo? y con miles de preguntas me quede dormida .

A la mañana siguiente me despertó los ruidos de los niños jugando en el patio, me levante y sin cambiarme, solo con mi pijama y una bata cruce hasta la casa principal, me desilusiono que mi primo no estuviera, pues se encontraba solo Carmen preparándose para irse a trabajar.

C- Buenos días dormilona!!

YO- buenos días y Fabi?

C- está trabajando linda, llega después de las 4

YO- te vas a trabajar?

C- si corazón, te presento a Lidia ella es la que cuida a los niños hasta que Fabi llegue.

YO- un placer Lidia. Le estreche la mano.

Lidia era una mujer de unos 50 años, gorda, cabello canoso que se hacía cargo de la casa mientras ellos trabajaban, tenía un aspecto de ser muy recta con una mirada de pocos amigos dada las presentaciones correspondientes se marcho de casa quedándome con los niños y la niñera cara de culo.

La mañana y la tarde la ocupe en terminar de desempacar y acomodar la casita a gusto y placer. Como hacía mucho calor me coloque un pequeño bikini  y me dispuse a tomar sol y escuchar música en mi mp5. Estaba por quedarme dormida cuando siento que un chorro de agua cae en mi cuerpo y gritan PEQUE!! me levanto de inmediato, era mi primo que había llegado, entre risas y corrida Fabi se cae y me coloco sobre él para hacerle cosquillas y pegarle, en ese momento todo se detuvo , se quedo tranquilo y aprovechando tome mi oportunidad comencé a moverme sobre su bulto como si estuviésemos cogiendo, lo miraba fijamente a los ojos y estrechaba cada vez mas mi conchita en su cuerpo, hacia círculos lentos, me movía de atrás hacia adelante como si la penetración fuera real.

En ese momento sale Lidia y nos ve en esa posición incómoda, Fabi como si nada pasara me coloca a un costado y se levanta dejándome con un mar de jugos entre mis piernas y entra a la casa con la vieja.

Sigo jugando con los niños un rato a la lucha en el agua y me voy a cambiar para ayudar con la preparación de la merienda.

Me coloco un vestidito corto  y unas sandalias a tono y me dirijo a la casa, al entrar veo que Fabi está recostado en el  sillón y me hace una seña de silencio ya que los niños duermen al lado de él,  me dirijo a la cocina sin hacer ruidos a prepararme un jugo cuando doy la vuelta se encontraba él sentado en una de las sillas, comenzamos a charlar de mi vida, mis amigos, novios, sexo a lo cual respondí sin obviar palabra alguna, el preguntaba, yo respondía. Después fue mi turno y lo bombardee con preguntas de sexo, posturas, mujeres, notando que él cada vez se ponía más nervioso., en eso suena su cel era Carmen preguntando si todo estaba en orden, lo deje charlando con su esposa y me fui a la casita sin antes pasar por al lado de él, darle un abrazo y morderle la oreja.

Estaba por comenzar a leer un libro cuando siento que la puerta se abre de golpe, era mi primo Fabi, su mirada no era la misma, traía sangre en los ojos, me agarra fuerte de los pelos, me levanta la cabeza y colocándose muy cerca mío me dice – no juegues conmigo perra, mira que yo no soy uno de tus pendejos de pueblo a mi me respetas puta. Y me mordió el labio dejándomelo adolorido. YO- que pasa primito estas caliente? Le pregunte con vos cachonda tocándole el paquete y sintiendo su dureza. F- vos me pones caliente pendeja. Dicho esto me agarro de los brazos y me levanto de la silla, abrazándome con fuerza podía sentir como el corazón le latía a mil como su respiración se entrecortaba, sus brazos comenzaron a recorrer por encima del vestido mi cuerpo sin tocar algo en especial, desde el cuello hasta mi culo, su mirada era perdida mitad deseo, mitad culpa, su boca estaba a milímetros de la mía, saco su lengua y comenzó a recorrer mis labios sin besarme, no me podía mover sus manos me tenían prisionera, su mirada embrujada , comencé a mojarme a chorros mi cuerpo pedía que lo poseyera, estaba entregada a él y con un hilo de vos que me quedaba le dije-  cógeme primito. Su cara cambio de golpe, me soltó, se aparto y se dirigió hacia la  salida dejándome con la conchita jugosa y falta de verga…