Por fumar porros con mi novia y mi madre
Una madre participa activamente en la relación entre su hijo y su pareja al probar el placer que le despierta fumar porros
Por fumar porros con mi novia y mi madre
Crecí en un pequeño pueblo al norte de Italia… Mi madre, Carina, quedó embarazada cuando tenía 16 años y nunca se ha casado... Ella ha tenido algunas relaciones pero ninguna cuajó.
Crecí tan unido a ella en todo que parecíamos que éramos hermanos en lugar de madre e hijo... Cursé estudios de Formación Profesional en electricidad y comencé a trabajar en una pequeña empresa local… Desde hace 4 años que tengo la misma novia… Se llama Gina y se lleva muy bien con mamá.
Mi novia y mi madre tienen cuerpos de proporciones similares… Hasta el pecho de ambas son practicamente del mismo tamaño… Ambas pesarán sobre unos 55 kg.
Me siento muy afortunado de salir con ellas porque se puede ver que todos los chicos miran a las dos de una forma que indica que se las follarían sin distinción de edades.
Yo, todavía vivo con mamá… Gina no vive con nosotros, pero muchas veces se está quedando a dormir.
Desde que tenía 16 años tomaba porros para fumar y mi madre lo sabía, pero nunca me dijo nada... No he fumado delante de ella hasta esa noche… La noche en que todo comenzó… Era un viernes y trabajé muy duro para no tener que hacerlo el sábado.
Entré en casa y mamá y Gina estaban cocinando la cena, pues a las dos les encanta hacerlo... Cenamos y luego nos pusimos a ver una película que era una historia de amor pero que tenía mucho sexo.
Aproximadamente a la mitad de la película me levanté para ir a mi habitación y fumarme un porro cuando mamá me dijo que podría hacerlo aquí porque ya lo sabía y no le importaba.
Este comentario me asombró y, sin decir nada, encendí el porro y comence a fumar… Gina fuma poco, pero me pidió otro porro y comenzó también a fumar conmigo… Cuando nos drogamos la película comenzó a mejorar, o simplemente era el estado de ánimo en el que nos habiamos metido.
Estaba sentado entre mamá y Gina y sentí que ella se estaba calentando porque comenzó a pegarse a mí.
Pude ver que mamá actuaba también de forma diferente porque no podía ponerse cómoda y terminó con los pies sobre mi regazo.
Llegó una parte de la película en la que dos chicas empezaron a besarse y desarrollaron una escena de cama, lesbica… Con lo que estaba viendo en la tele, mi polla comenzó a ponerse dura y yo traté de que mamá no pudiera verlo… Fue entonces cuando le dijo a Gina:
- "Creo que esta pelicula lo está poniendo caliente, Gina."
Gina miró y puso su mano sobre mi paquete y le contestó a mamá:
- "Pues, sí… Parece que voy a tener una noche divertida."
Soy bastante tímido, así que mi cara se puso roja al oír estos comentarios.
Durante el resto de la película, Gina siguió jugando conmigo y ví a mamá mirándonos y nos dijo que si una persona hace estas cosas cuando fuma porro, debería también intentarlo ella.
Este comentario me impactó y pensé que nunca había escuchado algo así salir de su boca… Gina lecontesto que después de fumar porro, disfrutaba muchisimo realizando sexo… Mamá me pidió que le liase un porro porque quiere probarlo.
Lié un porro y se lo pasé a Gina primero y luego a mamá... Ella empezó a fumárselo despacio, pero al no haber fumado nunca, con cuatro caladas estaba más que colocada.
Nos reímos y hablamos de todo... Mamá y Gina comenzaron a hablar sobre nosotros en la cama y esto realmente me excitó y alrededor de las 23 h. dije que estaba cansado y que me iba a la cama.
Mamá dijo que yo era un aguafiestas y que ella y Gina se quedaban a seguir hablando… Miré a Gina y le dije que no me quedara hasta tarde porque sabía lo que quería.
Debí haberme quedado dormido pero me desperté notando que me estaban mamando mi polla... Era Gina… Ella sabe darme placer y me mama muy bien mi polla… Después de unos 10 minutos la cogí del pelo con una mano y le metí profundamente mi polla en su boca y descargué mi semen en su garganta.
Me quedé allí recobrando el aliento cuando le escuché decirme:
- "Vamos a fumar un poco más porque quiero follar como animales esta noche… Estoy muy caliente, Carlo."
Después de la mamada que me hizo, gateé entre sus piernas y pude ver, a pesar de la tenue luz que había en la habitación, que tenía el coño más húmedo de lo que había visto en otras ocasiones.
Empecé a lamerla lentamente alrededor de sus labios vaginales como a ella le gusta y comenzó a gemir y respirar con dificultad.
Cuando la estaba poniendo en otro mundo, oí una puerta cerrarse... Era la puerta de la habitación de mamá… Ella nunca la cierra para que el gato pueda entrar y salir cuando quiera.
Comencé a lamer su clítoris y cuando lo puse entre mis labios y comencé a chuparlo y moverlo con mi lengua, ella me agarró del pelo y me apretó contra su coño tan fuerte como pudo.
Retrocedí del clítoris y me deslicé hasta su ano y comencé a lamerlo y sondearlo... A ella esto le encanta y noté que estaba a punto de correrse, así que metí mi lengua en su coño y froté mi nariz sobre su clítoris… Ella se puso a gemir y a refregarse gritando que estaba llegando al orgasmo… Fue entonces cuando metí mi dedo en su culo.
Mientras, abundante jugo comenzó a salir del coño… Segregaba una especie de semen semipastoso, que no he visto en mi vida... Gina nunca había chorreado eso antes y yo sólo había escuchado que algunas mujeres segregaban esto.
Esa noche me llenó la boca con su semen pastoso... A medida que se relaja de su orgasmo todavía tenía mi dedo en el culo y ella me dijo:
"¡Quiero tener tu polla metida en mi coño"… Y se dio la vuelta sobre sus manos y rodillas ofreciendome su culo.
Llevé mi polla hasta su coño y se la metí dentro. Era en la posición de perrito, que tanto placer le daba… Estaba tan húmeda y caliente que empecé a follarle el coño y el culo al mismo tiempo y con movimientos lentos y largos… Ella comenzó a gritarme:
- "Fóllame… Fóllame duro… Así… Así, Carlo… Golpea mi coño con fuerza… Me voy a volver a correr… Aaaah… Aaaah."
Fue entonces cuando escuché un ruido que sonaba como una lámpara que se cayó de la mesita de noche en la habitación de mamá.
Me paré e intenté cubrir la boca de Lisa para mantenerla en silencio, pero ella no quiso y me mordió la mano… Grité y no estoy seguro si le di una bofetada… Ella gritó:
- "Sigue, Carlo… No pares… Que me estoy corriendo otra vez."
No podía aguantar más y descargué también toda mi carga de semen profundamente en su coño… Con mi polla aún dura y metida muy honda en ella, le dije:
- "Escucha… Creo que mamá está masturbándose, oyendonos."
Mientras escuchábamos, podíamos sentir que mamá estaba a punto de correrse… De pronto la cama dejó de chirriar y ella gritó mi nombre con fuerza… Se había corrido sin duda alguna.
Todo esto hizo que mi pene continuase tieso y Gina lo aprovechó para empezar a moverse con mi polla dentro de ella… Así que, de nuevo, comencé lentamente a moverla dentro y fuera de su coño. Me incliné y le dije al oido que la encontraba esa noche muy caliente... Y ella me confirmó que nunca había estado tan caliente… Luego hizo algo que me dejo paralizado... Gritó llamando a mi madre:
- "Carina, si realmente quieres que te machaquen el coño, es mejor que entres aquí antes de que esta polla de tu hijo, se agote."
Entonces escuché a mi madre decirle:
- "¡Ahora voy!"
Al escuchar decir esto a mi madre, me volví a correr de nuevo dentro del coño de Gina...Ya era la tercera vez esa noche.
Cuando la puerta se abrió vi a mi madre desnuda... Gina la miró y le dijo:
- "Fue hablar yo contigo y volvió a correrse.”
Mamá se nos acercó a nosotros mientras yo tenía mi polla todavía tiesa y metida profundamente en el coño más caliente y húmedo que jamás haya sentido... Mamá me dijo:
- "Carlo, sácasela que quisiera probar lo que he estado esperando saborear durante años."
Cuando la saqué del coño de Gina, mamá agarró mi polla, se la llevó a la boca y me la limpió.
Mientras, Gina se dio la vuelta y colocó su mano sobre su coño para mantener mi semen en ella... Al verla, mamá soltó mi polla, se giró hacia ella y comenzó a chupar el semen de su coño… Al mirar lo que hacía, pude ver que la cara de mi madre estaba empapada.
Levanté mi mano e inserté dos dedos profundamente en su coño… Dejó escapar un gemido de placer, miró a Gina y le dijo:
- "Tenías razón,Gina… Esto es justo lo que necesitaba"… Y volvió a lamer su coño.
Como mamá tenía su culo en el aire, me incliné y metí mi lengua profundamente en su orificio anal, mientras le trabajaba su coño con dos dedos haciendo que todo le resultara muy agradable.
Fui a meterle otro dedo en su coño pero ella se volvió y me dijo:
"No metas más dedos… Méteme tu polla."
"Sí mamá… Lo que quieras", le dije con una sonrisa.
Mientras llevaba mi polla a su coño y le metí la cabeza, enseguida me di cuenta de que mamá estaba bastante apretada, lo cual es normal porque debe hacer tiempo que no ha tenido una polla dentro de su coño.
Se la meto poco a poco y cuando toco fondo siento que se pone rígida… Su coño me aprieta la polla como no lo había sentido nunca... Siento además, que comienza a segregar tanto jugo que moja mis huevos y podría decir que también estaba chorreando... ¡Qué gran sensación tuve con mi polla metida profundamente en mi madre, mientras ella sigue comiéndole el clítoris a mi novia.
En este momento, Gina le grita:
- "¡Mónica, méteme los dedos en el culo… Estoy muy cerca ya!"
Veo a mamá sacarle lentamente sus dedos que tenía metidos en el coño mojado de Gina y llevarlos hasta su culo y metérselos poco a poco hasta el fondo.
Gina suelta un gemido y mamá con su otra mano, separa los labios vaginales de Gina y comienza a chuparle el clítoris… Se detiene, me mira y me dice:
- "Carlo, vas a mirar o seguir follando mi coño... Fóllame, hijo."
Empecé a mover mi polla hacia dentro y hacia fuera de su coño, con lentos y largos movimientos hasta que gimió anunciando un potente orgasmo que la hizo temblar de placer mientras continuaba chupando el clítoris de Gina.
Le tuve que pegar una palmada en el culo para que no se moviese tanto porque sus orgasmos se producian encadenados.
- “Quieta, mamá… Córrete sin moverte tanto.”
Ví que Gina se arqueó hacia atrás y me di cuenta de que estaba a punto también de correrse… Mamá, puso entonces la boca abierta en su coño, y le dijo:
- "Lléname, cariño… No te cortes.”
Y de inmediato, veo a Gina chorreando de su coño el flujo blanco y denso tirándolo en la boca de mi madre… Es la mejor imagen de este tipo que había visto hasta ese momento… La reacción institiva de mamá fue contraer sus músculos vaginales, tan fuerte, que me costaba seguir bombeándola.
Cuando la saque de su coño, le grité:
- "Me corro, mamá.”
Sin perder un segundo, agarré su culo con violencia, lo posicioné y le enterré mis polla profundamente descargando todo mi semen en sus intestinos.
A mamá, según le comentó, le agradó mucho el flujo de Gina… Y se lo dijo mientras permanecía sin moverse, clavada, como si fuera un estoque, por mi polla, metida profundamente en su ano y gimiendo de placer.
Después de esa noche, Gina se vino a vivir con nosotros y compramos una cama tamaño gigante para poder dormir y disfrutar de sexo los tres juntos.
Normalmente antes de acostarnos nos fumamos un porro cada uno, que a ellas las deja bastante colocadas… Y así, colocadas, se entregan sin pudor alguno a disfrutar del sexo sin complejos, hasta el agotamiento… Por poner un ejemplo, hace unos minutos, puse a mi madre de pié inclinada sobre la cama con Gina lamiendole el coño mientras yo le estoy dando por el culo hasta que ambos la reventamos de tanto placer que sus piernas no aguantan y se cae… Y una cámara filmando para luego poderlo ver.
Pero no todas las noches pasa esto, claro… Que al día siguiente hay que trabajar.
F I N