Por fin con mi suegra 2
Después de nuestro primer encuentro sexual, no podíamos dejar de buscarnos, pero mi suegra tenia un regalo para mi que no deje de aprovechar.
Desde que tuvimos nuestro primer encuentro sexual, no paramos de buscarnos, en todos los sentidos. Con miradas, con sonrisas picaras, con comentarios un poco subidos de tono, cosa que hacían que mi mujer, su hija, se pusiera celosa y luego a solas me recriminara aquellos comentarios.
Susi : - Como hablas de esas cosas con mi madre?. La haces sonrojar - decía, sin saber que su sonrojamiento no era por pudor, sino que era por lo cachonda que ponía a mi suegra ..... Jijiji. Sabía como hacerlo para que, Rosa, mi suegra, mojara las bragas y luego fuera más fogosa cuando me la follara, aunque en casa no lo habíamos hecho.
Era lunes noche y hasta el jueves no podríamos volver a follar tranquilos. Así que mientras cenabamos los tres le dije, casi sin pensar a mi suegra :
Yo : - Rosa, porque no te buscas un novio?.
Mi mujer alzo la mirada y con cara de cabreada dijo :
Susi : - Porque se tiene que buscar un novio? - dijo sin dejar contestar a mi suegra.
Yo : - Pues porque es una mujer muy atractiva y estoy seguro que necesita otro tipo de compañía - dije esbozando una sonrisa.
Mi suegra alzó sus preciosos ojos y también sonriendo dijo :
Rosa : - Estoy bien como estoy. Ahora hago lo que quiero, sin dar explicaciones a nadie - decía mientras su pie empezó a acariciar el mío por debajo de la mesa.
Yo : - Ya, pero de tanto en tanto necesitarás desahogarte...... Jajajaja.
Mis palabras no gustaron nada a mi mujer que alzando la voz dijo :
Susi : - José, pero que te piensas que es mi madre, una puta?. A su edad, por favor.
Mi suegra la interrumpió y le dijo con un tono de reproche :
Rosa : - Oye, jovencita. José tiene razón. Que te piensas que no tengo necesidades por muy mayor que sea? Pues si y cuando puedo pues..... Eso, que me doy un buen homenaje - dijo sonriendo y acariciando mi pie con más fuerza.
Eso escandalizo a mi mujer que le recriminó sus palabras :
Susi : - Mamá, pero como puedes hablar así y más delante de José - dijo con los ojos fuera de sus órbitas, para proseguir diciendo.
- Desde hace un tiempo ha esta parte te estás volviendo una deslenguada y te paseas por casa casi desnuda. Parece que estes buscando guerra.
Mi suegra la miro fijamente, dejando de acariciar mi pie y le contesto :
Rosa : - Parece que la que me estas tratando como una puta eres tú y no José - dijo muy enojada.
Lo que empezó como un comentario para calentar el coño de mi suegra había acabado con mí mujer y su madre peleadas. Susi tenía mucho carácter, heredado de mi suegro, pero sabía que sé había pasado. Se levanto de la mesa y mirando a su madre le dijo :
Susi : - Lo siento, tienes razón, perdona. Me voy a la cama, estoy cansada y no me encuentro bien.
Cogio su plato lo dejo en la cocina y sé fue a la habitación, cerrando tras de sí la puerta del pasillo que daba a las habitaciones y la de nuestra habitación. Rosa me miró con cara de desaprobación y me dijo :
Rosa : - Ya te vale. A que venía ese comentario?. Sabías que tu mujer se iba a enfadar y sé iba a ir a la cama.
Yo : - Ya lo sé. Tenía ganas de estar contigo. No aguanto más. Quiero follarte - dije poniendo mi mano encima de una de sus piernas, libre de su camisón y acariciandola con dulzura.
Rosa : - Que te crees que yo no tengo ganas?. Encima tengo que aguantar y ver como besas y manoseas el culo y las tetas de mi hija, cada vez que puedes.
Yo : - Es para ponerte celosa..... Jajajaja y para que luego estes más caliente conmigo - le conteste poniendo mi mano en la parte interior de su muslo.
Rosa : - Eres un cabron - dijo sonriendo y apartando mi mano de su pierna.
Rosa : - Sabes que lo paso mal y encima la tocas mirandome. Pues ahora me toca a mí hacértelo pasar mal - dijo levantándose de la mesa y cogiendo el plato, se fue a la cocina.
Yo : - Y como me vas a castigar? - pregunte mirando su voluminoso culo mientras se iba y en tono burlesco.
Rosa : - Pues mira, hasta nueva orden y aunque estoy que hecho chispas no vamos a follar más - dijo con un tono firme mientras se ponía a lavar los platos.
Me levante, recogí lo que quedaba en la mesa y fui hacia la cocina. Dejé las cosas a un lado para que los lavara y me apoye en el mármol de la cocina. Yo la miraba y cada vez estaba más excitado. Se dio cuenta que la miraba y dijo :
Rosa : - Ahora soy yo la que mando - dijo sonriendo.
Me gustaba que pensara que era dueña de la situación, cosa que era del todo falso, pero queria que pensara que me estaba haciendo sufrir y más cuando yo empecé a pedirle que me levantara el castigo.
Yo : - Cariño, venga no te pongas así - le dije mientras uno de mis dedos le acariciaba su brazo.
Rosa : - No. Hasta que tu mujer no deje de estar enfadada, no va a haber nada.
Yo : - Rosa, te quiero y me vuelves loco - dije arrastrandome, aunque por dentro me reía.
Rosa : - Yo también te quiero, pero no.
Hice ademán de irme, me puse detrás de ella y rodee con mis brazos su gran cintura, también comencé a besar su cuello, mientras le pedía que colaborara un poco.
Yo : - Venga, cariño. Quiero que seas mía..... Buuuuufff..... Tengo la polla como a ti te gusta, bien dura.
Mi suegra tenia las manos mojadas, de lo cual me aproveche, pero se resistía y me daba culazos para que me apartara y la dejara.
Rosa : - Ya te he dicho que no y menos estando tu mujer aquí. Si se levantara y nos viera no quiero ni imaginar la que se montaría - decía intentando zafarse de mi.
Yo : A lo mejor se apunta..... Jajajaja - dije mientras mis manos pasaron de su cintura a sus enormes pechos, caídos por la edad, pero que me excitaban de una manera increíble.
Rosa : - De eso nada. No voy a follar con mi hija, vamos ni loca - dijo molesta.
Yo : - En la vida hay que probar de todo. No te gustaría ahora que mientras te beso y te magreo las tetas, tener a alguien comiendote el coño? - sabia que eso la calentaria aún más.
Rosa : - Si, claro. Pero a mi no me gustan las cosas raras - dijo dejando de forcejear.
Ya era mía, pensé .... Jijiji. Mi polla rozaba su culo por encima de la ropa y casi se me salía del calzoncillo. Una de mis manos dejo de toquetear uno de sus pechos y fue bajando para poco a poco subir su camisón. En ese momento, pareció que volvía a las andadas.
Rosa : - : José, por favor. Tengo miedo de que nos pille - dijo en voz baja.
José : - Si viene escucharemos como abre la puerta del pasillo - dije para tranquilizarla.
Como ya he dicho nunca lo habíamos hecho en casa y mucho menos estando mi mujer cerca, solo besos y un poco de magreo, pero de follar nada. El ambiente se había caldeado y mi suegra giró un poco la cara, momento que aproveche para que nuestros labios se fusionaran. Mi lengua buscaba la suya con desesperación, mientras la mano que le subía el camisón ya estaba dentro de sus bragas, jugando con su clitoris. La muy guarra ya estaba mojada.
Yo : - Que cabrona eres. Haciendome sufrir y ya estas chorreando - dije entre suspiros.
Rosa : - Es que me pones tan caliente que no me puedo resistir.
Mis dedos resbalaban sin problemas entre sus labios vaginales y mi suegra cada vez gemia más fuerte. Ya la tenía como yo quería, cachonda y con ganas de que me la follara. La separe un poco de la pica del fregadero mientras mis dedos penetraban su coño por debajo de sus bragas y nuestra pasión crecía por momentos. Nuestras lenguas jugaban la una con la otra, buscándose como dos adolescentes en celo. Yo seguía a sus espaldas y poco a poco fui bajando sus bragas hasta donde pude.
Rosa : - José, para por favor. Como sé levante tu mujer....... - decía entre suspiros mientras yo no dejaba de masturbarla. Su respiración se aceleró por momentos.
Yo : - Calla y pon el culo en pompa - le exigí. Mi suegra siempre había sido muy sumisa a su marido y ahora lo sería conmigo.
Rosa : - No pares de follarme con los dedos. Mmmmm..... Estoy apunto de correrme - decía gimiendo de gusto.
Saque mis dedos, dejándola a medias, para hacerla sufrir y que me pidiera que se la metiera. Rápidamente sé quito las bragas y poniendo sus brazos apoyados en el fregadero puso su enorme pero duro culo en pompa, exponiendo su mojada almeja para que mi polla la satisfaciera. Saqué mi dura polla del pantalón del pijama y la empecé a pasar entre sus labios vaginales.
Rosa : - Mmmm....... No me hagas sufrir más. Buuuuufff...... - decía suplicando.
Estaba tan mojada que mi glande solo pasándolo por sus labios se metia dentro de su coño, lo que la hacía enloquecer de placer. Mis manos cogían sus caderas, para impedir que le entrara toda mi verga, porque ahora tiraba su culo para atrás, no para hacarme desistir sino para que me la follara. La estaba haciendo sufrir, tanto que hasta yo sufría. No podía más, pero quería que me lo pidiera.
Yo : - Dimelo. Dime lo que quieres - dije con voz autoritaria.
Rosa : - Mmmmm...... Metermela...... Uuuuufff...... Quiero que me folles. Te necesito dentro de mi, cariño.....
No deje que dijera nada más, ya había sido suficiente, y de un fuerte empujón se la metí entera, haciendo que diera un buen grito de placer.
Rosa : - Aaaaah...... Mmmmm..... Por fin..... Siiiiii.
Entonces la saque casi entera y volví a embestirla con dureza.
Rosa : - Buuuuufff...... Que gusto me das, cariño. Sigue..... Mmmm....
Repetí un par de veces más y mi suegra ya no pudo más, tapándose la boca para no gritar tuvo su primer orgasmo.
Rosa : - Aaaaah..... Me vas a matar, mi vida - decía con voz entrecortada, recuperándose de su corrida.
Incremente el ritmo y me apoye ligeramente encima de su espalda para magrear sus grandes pechos que iban descontrolados para todos los lados. Aproveche para besarla y susurrarle a la oreja.
Yo : - Te gusta como te folla tu yerno? - le decía mientras le daba un buen cachete en una de sus nalgas. Un cachete que si mi mujer estaba despierta, seguro que tuvo que oír, pero en esos momentos lo único que me importaba era follarme y darle placer a su madre.
El ritmo de la follada cada vez era más rápido, frenético. Me incorpore y mis manos volvieron a coger sus caderas. Mi suegra no tardo en tener su segundo orgasmo.
Rosa : - Si...... Sigue..... Me corrooo... Aaaag...... Aaaaag..... - decía gimiendo como una posesa.
Separe sus nalgas para ver como mi polla entraba y salía de sus entrañas, cuando mi mente calenturienta hizo de las suyas. Veía como mi polla desaparecía dentro de su mojado coño, pero también veía el agujero de su culo, un agujero que se abría un poco a cada embestida que le daba. Con mi mujer probé de follarmela alguna vez por el culo, pero había sido imposible. Ahora me tocaba probarlo con su madre que con lo sumisa que era, sé resistiría pero al final caería, seguro. Tenía que tener satisfecho a su yerno..... Jijiji. Ante esas vistas dejé caer un buen escupitajo de saliva en su anillo anal y uno de mis dedos hizo el resto. Esparci la saliva por su esfinter y con cuidado y poco a poco empecé a penetrar su estrecho ano.
Rosa : - Cariño..... Mmmm.... Que haces? - dijo quejándose.
Yo : - No lo notas? - conteste firme y sin atender a sus quejas.
Mi dedo estaba entero dentro de su culo. Podía notar como mi dedo rozaba mi polla que seguía follando su coño.
Rosa : - Mmmm..... Para, José. Me duele.
Y más que te va a doler, pensé. Entonces un segundo dedo comenzó a hacer el mismo viaje que el primero.
Rosa : - Noooo...... Aaaaaagggg.... No lo hagas. Soy virgen - me imploraba.
Esas palabras aun me calentaron más y mis dedos empezaron a follar su culo que poco a poco se iba dilatando.
Rosa : - Aaaaah...... Me haces daño. Para, para....
Saque uno de los dedos, cosa que la alivio un poco, pero el que quedó hizo un trabajo perfecto. Dilato todo su ano, hasta que llegó un momento que entraba y salía sin ningún problema.
Yo : - Mejor ahora, cariño?
Rosa : - Si. Mucho mejor.... Mmmm.... - contesto un poco más tranquila y mientras mi polla no dejaba de follar su inundado coño.
Yo : - Quieres que tu yerno sea el primero en follarse este culo que lo vuelve loco? - pregunte susurrandoselo en la oreja y con voz sensual. Sabía que susurrandole a la oreja tenía mucho ganado, le encantaba.
Rosa : - Si, pero ves con cuidado. Me da miedo.
Saqué mi dedo de su culo y mi polla de su coño, estaba mojada con los flujos de sus corridas. La puse en la entrada de su culo, escupi un poco más de saliva para lubricar más y mi hinchado glande empezó a presionar su esfinter. Cuando entró note como las paredes de su recto apretaban con fuerza mi polla. Rosa se tapaba la boca para ahogar sus gritos. Me quedé quieto, no quería hacerle daño y necesitaba que su culo se adaptara a mi polla. A los pocos segundos metí un poco más.
Rosa : - Con cuidado, mi vida. Aaaaah..... Aaaaah......
Yo : - Ya casi la tienes toda dentro - dije acabando de metersela toda.
Rosa : - Buuuuufff..... Mmmm......
Yo : - Te gusta?
Rosa : - Si. Mmm...... Mi marido lo había intentado alguna vez, pero nunca le deje.
Yo : - Jajajaja...... Pues mira, lo único que te quedaba virgen ha sido para tu yerno - dije empezando un ligero mete saca para acabar de abrirle bien el culo. Lo tenía super estrecho y su culo tragón abrazaba con fuerza mi excitada polla.
Yo : - Muévete tu. Así controlarás mejor.
Mi suegra empezó a mover su ensartado culo para adelante y para atrás, mientras mis dedos masturbaban su mojado coño.
Rosa : - Mmmmm...... Te quiero, José..... Aaaaah...... Me gusta..... Me gusta.... - susurraba, acelerando el ritmo haciendo que mi polla entrara y saliera cada vez más rápido.
Yo : - Yo también te quiero, mi amor....... Mmmmm...... Muévete así, no pares que me voy a correr.
Rosa : - Siii, mi vida. Llenarme con tu leche......Aaaaah .......Correte dentro de mi..... Quiero sentir tu semen caliente inundarme el culo - decía entre gemidos.
Estaba apunto de correrme y le di un buen cachete en una de sus nalgas. Mi suegra empezó a convulsionar, teniendo otro fuerte orgasmo.
Rosa : - Cariño..... Me corrooo..... Mmmm..... Aaaaah......
Cogí las riendas de la situacion, no podíamos estar demasiado tiempo no fuera que mí mujer se levantara. Así que la cogi de las caderas empecé un ritmo frenético, lo cual hizo que a los pocos segundos le diera lo que ella estaba esperando, mi leche calentita.
Yo : - Aaaaah...... Toma mi vida...... Mmmm...... Toma..... - le decía llenandola con mi esperma.
Una vez di el último empujón para vaciar hasta la última gota de mi esencia, mi polla salió de su culo. Los restos de mi corrida se mezclaban con unos hilitos de sangre que evidenciaba que la virginidad de su culo ya era historia . Cogí un rollo de papel de cocina y me limpie, mientras mi suegra seguía apoyada en el fregadero. Su respiración era acelerada y no sé movía. Arranque un trozo de papel y limpie su ano, su coño y sus muslos, ya que mi corrida y un poco de sangre le bajaban piernas abajo. Ella seguía en la misma posición. Me estaba asustando.
Yo : - Cariño, estas bien? - le dije nervioso.
Entonces empezó a reaccionar un poco.
Rosa : - Si, si tranquilo. Estoy un poco mareada. Buuuuufff....... Demasiadas corridas. He perdido la cuenta, pero yo diria que cuatro veces y encima me has desvirgado el culo. No puedo más - decía incorporándose y mirandome a los ojos.
Yo : - Te amo y me has hecho muy feliz dejando que fuera el primero en follarte el culo. Te quiero - dije besandola y atrayendomela hacia mi para abrazarla .
Rosa : - Yo también te quiero mucho. Soy tuya y tengo que satisfacerte mi amor.
Cuando nos separamos me dijo :
Rosa : - Voy al baño y a acostarme. Estoy agotada.
Yo : - OK. Que descanses, cariño - y la bese tiernamente en la frente.
Recogí los papeles con los restos de nuestras corridas y también me fui a dormir. Abrí la puerta con cuidado para no despertar a mi mujer y me metí en la cama. De repente la voz de Susi me sobresalto.
Susi : - Qué, tú suegra te ha puesto en tu sitio, no?
Yo : - Joder que susto me has dado. Pensaba que estabas durmiendo. Porque dices eso? - pregunte nervioso.
Susi : - La torta que te ha dado se ha escuchado desde aquí..... Jajajaja.
No sabía que contestar. Un sudor frío empezó a apoderarse de mi cuerpo.
Yo : - Si, bueno. No le ha gustado mi comentario y sé ha enfadado un poco, pero ya está solucionado.
Susi : - Esa és mi madre - dijo girandose satisfecha y volviendo a ponerse a dormir.
Me había salvado por los pelos. Me giré y me puse a intentar dormir, después del sobresalto. Yo si que la puse a su madre en su sitio, partiendole el culo..... Jijiji Tenía razón en decir que esa era su madre, pero también era mi suegra y mi amante y no podía dejar de pensar en donde sería nuestro próximo encuentro sexual.