Por eso me gustas (2)

Me abalancé sobre el zipper de su pantalón y lo bajé, claro que él no opuso resistencia alguna, metí la mano y saque su verga rosada y flácida, que al contacto de mi mano comenzó a erectar… mmmm… esa sensación me encanta, sentir como crecen en mis manos, me resulta sumamente estimulante

Segundo round

Habían pasado algunos días desde aquella comida en el restaurante francés, cuando me llamó de nuevo mi amigo Antonio, honestamente no sabía si esperar su llamada, me revolvía el mundo y el estómago escucharlo hablar, sin duda era un tipo, interesante, tan seguro de si mismo, experimentado y al mismo tiempo era todo lo que siempre me ha repugnado, misógino, vulgar, ignorante y pagado de si mismo, sin embargo había algo en el, en su arrogancia y su vulgaridad que me atraía, y me intrigaba

Antonio: Hola, muñeca ¿Cómo estas?....

D. Cherry: Bien lo de siempre, el trabajo y esas cosas

Antonio: quiero verte hoy…, se me antoja cogerte

D. Cherry: No, hoy no, estoy full de trabajo

Antonio: Pues renuncia

D. Cherry: Jajajajaja si que fácil ¿y luego?

Antonio: Mira muñeca, entra a la oficina de tu jefe, le dices que se meta su trabajito por donde le quepa, haces tu maletita, y paso por ti, buscas un departamentito donde más te guste y te bañas y te pones bonita para mi, eso si muñequita, soy casado y seguiré casado, así que no te hagas ilusiones

D. Cherry: Jajajajaja… si claro ¿otra cosita?

Antonio: Chúpame la verga

D. Cherry: shhh…., shhh…, tranquilito papacito, en primer lugar, yo trabajo por gusto, no por necesidad, segundo, mis cositas me las compro yo, y no necesito que ningún "cabrón" me venga a solucionar mi vida, cojo cuando quiero, con quien quiero y si quiero, y justamente hoy no se me antoja, y te dejo por que debo volver a mis ocupaciones

Y colgué el teléfono, conté hasta mil, tratando de no perder el control, ¿Qué se había creído este tipo?...

A las 7:00 p.m. del mismo día recordé que el estaría en el edificio por que lo entrevistarían o algo así, en el edificio donde trabajaba, había algunas estaciones de radio, por lo que ya más serena, se me ocurrió, llamarlo, para darle una pequeña y gratificante lección.

Antonio: Si, quien habla

D. Cherry: Yo, tu muñeca… (Por supuesto hice la voz más melosa que pude)

Antonio: ¿ya se te bajó el ph?

D. Cherry: Ya…, quiero verte, ahorita

Antonio: pero, pero, ¿ahora?

D. Cherry: si ahora, o nada… tu dices

Antonio: pero solo tengo 20 minutos antes de ir a mi entrevista

D. Cherry: con eso tengo, nos vemos en el estacionamiento, en la entrada "E"

Bajé presurosa, no niego que me daba gusto verlo de nuevo después de evocar toda la tarde la odisea de la comida de hace días, me sentía tan caliente y ansiosa, a pesar de saber que en 20 minutos y en ese lugar no habría mucho por hacer

Subí al auto enseguida, y le dije, -estaciónate allá atrás-, señalé el lugar más apartado de las cámaras de seguridad

Antonio: que ¿no me das un beso?

D. Cherry: no, no se me antoja, yo vine a otra cosa

Antonio: ¿ah si? ¿A que?

Me abalancé sobre el zipper de su pantalón y lo bajé, claro que él no opuso resistencia alguna, metí la mano y saque su verga rosada y flácida, que al contacto de mi mano comenzó a erectar… mmmm… esa sensación me encanta, sentir como crecen en mis manos, me resulta sumamente estimulante

Inmediatamente comencé a pasarle la lengua, por todo lo largo, saqué sus testículos y les dí pequeños lenguetazos, -¿estas loca?, nos van a ver y en el pedo que nos metemos- dijo Antonio, Mmmm… slurp slurp…. ¿Y? ¿no que eres taaan influyente?- dije con sarcasmo

Antonio: Por eso pendeja, nos van a caer y se va a hacer un mitote de poca madre

D. Cherry: Tu flojito y cooperando… papacito

Sentí como su delicioso pene, cobraba vida, ahora era muy grueso, y cubierto de venas, de buena gana me lo hubiera metido yo sola por la vagína, pero era demasiado el riesgo, así que me limité a meterlo a mi boca, y a chuparlo y saborearlo, mmmm… la situación me tenía verdaderamente caliente, seguro que si nos estaba monitoreando alguna cámara, pero imagino que los guardias prefirieron contemplar el espectáculo y disfrutarlo que interrumpirlo

Besaba la corona del ariete de Antonio, recorría las venas de su gordo y delicioso pene con mi lengua, lo metía hasta donde más podía y jugueteaba con mi lengua a lo largo y ancho de su miembro, agarré sus testículos con las manos y los acariciaba y apretaba, entonces decidí que quería probar su leche y comencé a meterlo y sacarlo de mi boca rítmicamente, yo sé que el lo estaba disfrutando mucho, pero yo más, la adrenalina, el deseo contenido, y la extraña atracción que me hacia sentir este tipo… mmmm… tenía ganas de tocarme pero eso hubiera sido demasiado descaro y más el riesgo de ser tomada por las cámaras de seguridad

Antonio: Huuuy, así putita, mmm… que rico, mámamela, que rico mamas, putita, ¿Dónde aprendiste?... así, me vas a hacer venir, y no puedo llegar así a mi cita… oooohhhhh!!, si así….

Lo metía y lo sacaba lo acariciaba me lo pasaba por la cara, hasta que decidí que quería recibir su orgasmo en la boca, entonces metí su verga en mi boca y lo chupé y lo agité hasta que sentí la explosión de su orgasmo llenarme hasta la campanilla… jajajaja…. Se notó que tenía ganas de venirse, por que sentí mucha leche, toda se quedó en mi boca, y me dediqué a limpiar lo poco que había salido por la comisura de mis labios, el todavía con el pene de fuera me miraba incrédulo por lo que había hecho

-¡Eres una cabrona!- dijo Antonio, -tal vez-, contesté yo, y me bajé del auto como si nada

-Espera puta, ¡no te vayas!-… -Chao, luego te llamo- contesté…mirando la cara de confusión y satisfacción que le había dejado

Regresé a mi oficina esbozando una sonrisa, tomé mi cepillo de dientes y me lavé la boca…. Pensando si valdrá la pena verlo otra vez….

Espero que disfruten este relato tanto como yo disfruté recordarlo….

Besos,

Dark Cherry

dark_cherry2004@yahoo.com.mx