Por dinero $$$

Por dinero $$$

Me encontraba con José un tipo de 60 años con quien hice match en tinder y empecé a charlar a modo de broma solo para pasar el rato en un fin de semana aburrido; sin saber lo que pasaria

desnuda frente a ese maduro de 60 años que me ofreció dinero y que contra todo principio acepte.  Un hombre alto, de tez de blanca, poco cabello ya teñido de blanco, y un cuerpo grande, pasado de peso, pero que por alguna razón me parecía atractivo

Me acerque al borde de la cama lentamente con nerviosismo y timidez, pero a la vez con cierta excitación,

en sus expresiones al verme denotaba experiencia; encontraba desnudo con piernas abiertas recargado sobre la cabecera de la cama, su miembro completamente expuesto, aun flácido, al parecer tenerme desnuda frente a él no era suficiente.

Me dio la orden de tocarme y suavemente fui con mis manos recorriendo mi cuerpo, con las yemas tocaba mis pezones, mirándolo fijamente a los ojos, mordiendo mis labios, el comenzó a hacer lo mismo, tocaba su ancho pecho con una mano y la otra la bajo por su gran barriga, hasta su miembro que poco a poco iba poniéndose duro con cada sobada. Se acercó al borde de la cama quedando frente a mí, mis senos quedaron a la altura de su boca, así que tomándolos con sus grandes manos comenzó a masajearlos, sus dedos pulgares jugaban con lo duro de mis pezones y de momentos los metía en su boca, succionado y mordiéndolos levemente

yo con mis manos recorría parte de tus espaldas, sentía lo suave de su piel, y en su cara lo rasposa de su barba descuidada de días, era un hombre que podría haber dicho jamás pasaría, pero algo tienen los maduros que me parecen excitantes.

Una de sus manos bajo hasta mi húmeda  vulva, y con uno de sus dedos recorría de arriba abajada separando mis labios, cada vez  entrando mas, podía sentir su ancho dedo sobre mi clítoris: con mis manos en su espalda le daba leves rasguños y mi respiración de agitaba, José sabia como hacerlo,.

Se puso de pie frente a mi, puso sus manos sobre mis hombros y me fue llevando hacia abajo, hasta quedar hincada, quedando frente a su maduro miembro,

-vamos quiero ver que tan rico saboreas mi verga-

Tome con una de mis manos su tronco, me acerque lentamente fruncí mis labios y le di un pequeño beso en la punta del glande, lentamente los abrí e iba introduciendo su glande en mi boca, con el dentro, con la punta de mi húmeda lengua jugaba con el orificio de su uretra; cada vez que mi lengua lo tocaba soltaba un gran gemido y se retorcía de placer, y sus manos tomaban con fuerza mi cabello,

Pase a recorrer con mi lengua cada centímetro de ancho miembro, lentamente por debajo de su mimbro pase mi lengua desde la base hasta la punta terminando restregándolo en mi cara, para ser honesta no era tan grande, así que abrí bastante la boca y lo introduje por completo, en ese momento con sus manos me llevo con fuerza hacia enfrente hasta llegar hasta mi garganta, me mantuvo por segundos hasta que empecé ahogarme. Rápido lo saco y en mi pecho cayeron rastros de saliva,

Me puso de pie y me pidió me pusiera en 4, así que rápido lo hice sobre la orilla de la cama, quedando con mis nalgas a su disposición, lo cual hizo me diera un par de nalgadas que me hicieron gritar de dolor y por qué no de placer, se pegó a mí y con una de sus manos tomo su miembro y fue buscando mi vagina, solo sentí como de un movimiento me la metió por completo, haciendo que soltara un gran gemido, comenzó a darme algunas embestidas fuertes y otras lentas.  Con cada una de las embestidas fuertes que me daba era un gemido más que resonaba e n la habitación, termine inclinando mi cuerpo sobre la cama, y de reojo veía sobre uno de los espejos que había, como era penetraba, no sé si les pasa, pero esa sensación de ver cómo te están cogiendo es simplemente excitante,

Me tomo de las caderas y Comenzó a subir el ritmo cada embestida era más y más fuerte, sus caderas rebotando en mis nalgas, sus respiración entrecortada y mis gemidos al sentir cada cm hacian que la habitación vibrara, paro por unos instantes,

-voltéate-

Justo iba a acomodarme para que terminara en mi boca, pero no alcanzo salieron un par de chorros disparados cayendo parte sobre mi pecho y el resto sobre la cama. –

-perdona esperaba aguantar más,-    me dijo con una respiración entrecortada

No te preocupes, es algo normal-

le conteste mientras tomaba un poco de semen de mi pecho con la punta de mi índice llevándolo a mi boca y saboreándolo.

Se recostó sobre la cama y yo me metí a darme un baño, al salir el ya no se encontraba me dejo sola y sobre una mesa de noche me dejo lo que acordamos.

Gracias por leer este es un relato escrito por uno de mis lectores que me pidió subir desde mi perspectiva. Gracias a los que ha pasado a escuchar los relatos en YouTube