Por culpa del basket

Mi nombre es Marcos y ese día era uno de los más felices de los últimos años, el más feliz sin duda desde que los juegos de infancia con los amigos de toda la vida dieron paso a otras aficiones. Para mi la literatura y el baloncesto. Desde siempre me gustó mucho leer, así que en bachillerato comencé a escribir, trabajos de calidad dudable pero que me demostraron que imaginación sí tenía. Así que me matriculé en un Grado de literatura creativa y con los compañeros de la facultad me inscribí en el campeonato de baloncesto de la Universidad.

Desde el inicio, en las sesiones de entrenamiento, en las pistas de baloncesto de la propia Universidad nos juntábamos los compañeros en el graderío, unos jugando, entrenando, otros hablando. Nunca faltaba gente en el graderío, aunque la mayoría no prestaba atención al partido.

Ese día, después de una temporada larga y emocionante, debíamos jugar la final contra un equipo de un equipo de la facultad de Económicas. Yo no soy alto, al menos no lo suficiente para destacar, con mi 1,80 no solía jugar cómodo en posiciones de pibot, además tenía muy buen tiro y buen control de la pelota. Al final del tercer cuarto ya llevaba 14 tiros de dos puntos, 11 triples, 5 asistencias, algún que otro robo y algún rebote. Ese día el graderío estaba lleno, entre los amigos de la facultad vi a mi amor platónico, Nuria, una chica de 1,75, de tercer año, morena aunque solía ir con el cabello teñido de colores, desde morado, plateado, rosa, azul o de varias combinaciones de estos colores, sus ojos azul, sus pómulos altos, su sonrisa deslumbrante. Al ser de dos cursos por delante del mío apenas coincidía con ella, pero su hermano estaba en el equipo y eso permitió que la viera más de una vez. Cuando quedábamos para tomar un café o una cerveza después de entrenar o jugar, Nuria solía apuntarse con algunas amigas. Con mi natural timidez me costaba mucho entablar conversación con ella.

Un día Javi, su hermano, al acabar en entrenamiento me dijo que tras hablar con su hermana, ésta le había dicho que notaba que me gustaba. Yo ni lo negé ni lo refuté, pero él se rió. Sea como fuere, tras esa confesión que Javi me hizo no sé como me quedé solo con Nuria mientras esperábamos al resto.

Nos sentamos en las gradas, me preguntó por mis relatos, le dejé que leyera alguno que andaba escribiendo, mientras lo hacía cruzó las piernas y me quedé embobado con el juego que tenía con su sandalia. Imaginando lo que sería poder acariciar y besar esos pies, no vi que me miraba fijamente.

.- ¿Te gustan mis pies? - me lo preguntó tal cual, ante lo cual negué inventando que me había quedado pensando mirando el infinito.

.- No Marcos, mirabas mis pies, no el infinito. - le dije que no me había dado cuenta.

Me devolvió el relato y me contó que pensaba del mismo, en ésto estábamos cuando llegaron el resto. Luego la perdí de vista, aunque durante las horas siguientes, me pilló más veces mirando sus pies. En una de ellas, después de mirar como se quitaba una sandalia alcé la mirada a su cara y me miró fijamente sonriendo con picardía. No pude sino agachar la cabeza rojo como un tomate.

No volví a quedarme a solas con ella, aunque empezó a participar en las conversaciones que manteníamos, sobretodo le gustaba intervenir cuando era yo el que hablaba. Y como un idiota, y unos meses más tardes recalcó ella misma, podría decir que zapato había llevado cada día de la semana anterior y el color de las uñas.

Bueno, se inicia el segundo cuarto y yo estoy como nunca, como dije anteriormente, siempre he tenido buen tiro, pero ese día no fallaba. Nada más empezar el último cuarto anoté dos triples seguidos. El resultado del partido da igual, ganamos por un margen enorme y me coronaron como el máximo anotador, del partido y del torneo. Tras la ceremonia de entrega de medallas como campeones fuimos al vestuario. Una ducha caliente y salir. Cuando salía yo, Nuria estaba sentada fuera de los vestuarios.

.- Felicidades Marcos - me dice

.- Gracias Nuria - y nos damos dos besos en las mejillas.

.- Bueno chico, el curso se acaba y como no te decides, te vuelvo a preguntar ¿te gustan mis pies?

La miré a la cara, rojo como estaba pero eufórico por el día, por sus ojos que brillaban con antelación a mi respuesta. No podía mentirle, ya era evidente que sabía que sí me gustaban.

.- Sí, Nuria, tus pies y tus ojos, enterita me gustas.

.- Ya ya, pero ¿te gustaría acariciar mis pies?

.- Un montón - le digo sin pensar siquiera que se estuviera quedando conmigo.

Me tiende una mano y me lleva, me dejo llevar, salimos del polideportivo, una vez en los aparcamientos, vamos a su coche. Entramos en los asientos traseros. Alza sus pies hacia mi, que no dudo y le quito las convers que llevaban, el olor acre y dulzón que se elevó de su pie me puso a mil, le saqué el pequeño calcetín blanco que llevaba y empecé a acariciar, todo, hasta el partido quedó olvidado, sólo me importaba ese hermoso pie que a dos manos acaricia desde talón hasta los deditos, una y otra vez, luego los deditos uno a uno, tocándolos, metiendo mis dedos entre ellos.

.- Lamelo - me pide ella visiblemente excitada.

Elevo el pie a mi cara y empiezo a lamer, cohibido y con hambre, pongo la leguna sobre los dedos, la miro para ver si está molesta, pero no, me anima a seguir y paso los siguientes diez minutos lamiendo ese maravilloso manjar. Tengo mi lengua entre sus dedos cuando suena su teléfono. Contesta y dice, sí ahora vamos. Sí, estoy con Marcos. El verla hablar con Javi, mientras yo tengo la lengua entre sus dedos me excita. Ella me retira el pie.

.- Anda, sécamelo con tu camiseta que nos están esperando - hago lo que me ha dicho aunque detesto tener que dejar el pie.

.- Ponme el calcetín y calzame - ordena ella, pero ante la perspectiva de volver a tener otro encuentro con Nuria ni presté atención al tono de su voz.

Salimos del coche y me dice lo has hecho bien cachorrito. Me extraña la forma de hablarme pero no le doy importancia. Llegamos donde nos esperan conversando sobre el partido.

Ya reunidos con todos, Javi se me acerca y me dice que me aleje de su hermana, la petición me parece extraña, por tu bien Marcos, eres un buen tío, no caigas en sus redes. No podemos continuar la conversación porque el resto se nos une.

Trato de no pensar en lo que me ha dicho Javi, pero ahora lo veo hablando con Nuria y sin que nadie les vea Nuria le da un guantazo que le dobla la cabeza, yo aparto la mirada.

Cenamos en un restaurante donde todo queda olvidado, al menos mientras hay comida y conversación, cerveza y conversación. A la hora de salir Nuria se acerca y me pregunta si quiero acabar lo que iniciamos en el coche.

Sin pensar en la advertencia de Javi, sin pensar en el tortazo que le ha dado le digo que sí. Nos alejamos del resto, me despido más o menos de los que me voy encontrando, me dice que espere y veo que va directa a Javi, habla con él levantándole un dedo, veo la cara que pone Javi y prefiero darme la vuelta.

Nada más subir al coche me dice que espera que tenga lengua para rato y sin más explicaciones arranca. Le pregunto que donde vamos y me dice que me tranquilice, que no me va a secuestrar, y se ríe, su risa es bonita, musical, sus ojos azules brillan y las alarmas en mi interior se apagan.

Va hablando de mi, diciéndome que soy el mejor lanzador que ha pasado por la facultad, yo me voy sintiendo más cómodo, no le he dado nunca mucha importancia a ser buen jugador de baloncesto, pero no puedo negar que me gusta lo que me dice, le pregunto por su rama de escritura, y me dice que la novela erótica, la miro con la boca abierta y ella me sonríe

.- Sí, no somos muchas

Veo que salen a la periferia de la ciudad, y vuelvo a preguntarle donde vamos.

.- Me vas a estropear la sorpresa cachorrito. - Otra vez con lo de cachorrito.

Veo que pone el intermitente, entra en una urbanización privada, veo unas bonitas torres bajas, de 7 plantas, grandes jardines. Aparca y me dice ya hemos llegado.

Salgo del coche y espero. Vamos cachorrito, no te quedes atrás, me dice ella dirigiéndose a un portal. La sigo, andamos por un camino en el jardín, llegando al portal veo que Javi está entrando.

Ella abre el portal y la sigo. Subimos en el ascensor. Entramos en la casa, me dice que la casa la comparten ella y Javi. Me lleva a su dormitorio tras pasar por un enorme salón con terraza. El dormitorio también es enorme.

Se sienta en la cama y me invita a sentarme a su lado. En cuanto lo hago me pregunta.

.- ¿Vas a lamerme los pies?

.- Sí, claro, si me dejas sí.

.- Claro que te dejo, me encanta, pero te propongo un juego.

.- Dime - la verdad que estoy intrigado.

.- Tienes que dejar que te ponga una jaulita en tu pajarito - yo me quedo alucinado y ella lo nota en mi cara.

.- Si me dejas hacerlo, cuando acabes con mis pies podrás comer aquí - y se mete la mano bajo el pantalón, haciendo que mi capacidad de razonamiento desaparezca volatizada.

.- Vale, acepto. - Ella se ríe y dice, suponía que lo harías.

.- Venga, desnúdate cachorrito, no te puedo poner eso mientras lleves los pantalones. - De una chica hermosa a una depredadora mortal.

Me descalzo y desabrocho el cinturón, empiezo a quitarme los pantalones, ella busca en un cajón de su mesita. Me mira y me dice "Los calzoncillos también". No me gusta, ella sigue completamente vestida, pero es la chica que lleva apareciendo en mis sueños desde el principio del curso. Así que me quito los calzoncillos.

Se pone frente a mi y con una mano en mi cabeza, me tira contra la cama, y con rapidez me pone el aparatito. Se sube sobre mi, de rodillas sobre mi pecho, me mira y me besa, su lengua juega con la mía, ese beso se lleva cualquier resquicio de resistencia por mi parte.

.- No te arrepentirás - me susurra - ahora, lleva las manos a la espalda.

Obedezco ya completamente excitado, me muestra unas esposas forradas de terciopelo rojo, de rodillas ahora sobre la cama, me besa en el cuello, trato de volver a buscar su boca, pero me lo impide, me acaricia los brazos y casi sin darme cuenta tengo las manos esposadas en mi espalda.

Sonriendo, de pie ante mi, me ayuda a levantarme, noto que alguien más entra en la casa, pero, con sus caricias, no le presto atención. Me coge del hombro y me hace dar unos pasitos, luego me hace arrodillarme, lo hago y acerca una silla con ruedas delante de mi.

Se sienta en la silla, me pone los pies sobre mis rodillas y me mira a los ojos. Es sin duda la mirada más sensual y bonita que he visto. Levanta una pierna y me apoyda el pie en mi hombro.

.- ¿Me descalzas guapo? - pero sin manos, la idea de llevar mi boca a su pie me atrae, intento llevar mi boca a su pie sobre mi hombro, pero no llego, ella se ríe. Lo pone delante de mi cara y con los dientes le saco la zapatilla, el olor me atrapa y sin darme cuenta meto la nariz bajo sus dedos y aspiro.

.- Uis, esto va a ser mejor de lo que yo pensaba - me deja oliendo su pie durante unos segundos antes de cambiar y hacerme repetir la operación con el otro pie.

.- Ahora espera cachorrito, tengo que hablar con Javi - se va y antes de salir de la habitación vuelve - espera, que mala anfitriona soy, coge una goma para el pelo y me pone una de sus zapatillas, con mi nariz en el interior, fijada con la goma rodeando mi cabeza.

.- Ahora sí, no tardo.- Se va y me deja así, de rodillas, encluastrado y excitado, sin poder usar los brazos y con mi nariz en su zapatilla deportiva.

Durante unos minutos no escucho nada, luego un golpe sordo y vuelve a entrar en la habitación. Se sienta en la silla, vuelve a apoyar sus pies en mis rodillas, noto los calcetines húmedos.

.- ¿Te quito eso cachorrito? o ¿quieres seguir oliendo mi zapatilla? Bueno, te dejaré mientras me quito los calcetines y juego un ratito sola.

Veo como se quita los calcetines, se pone en pie y me los pone en las manos, noto el sudor de los calcetines en mis dedos. Vuelve a sentarse, a poner los pies en mis muslos y empieza a tocarse, abre las piernas, mis ojos abiertos como platos, su sexo afeitado atrea mis ojos como los del coyote ante el correcaminos. Se lleva un dedo a la boca, lo lame mientras me mira como un halcón a un ratón. Empieza a masturbarse, primero lentamente, yo empiezo a notar que ha sido muy mala idea aceptar el apartatito. Empieza a jadear, y a acelerar sus dedos, se corre, se dobla hacia delante, me quita la goma con violencia y su zapatilla se me cae. Ahora me mete los dedos con los que se ha masturbado en la boca, sus jugos vaginales me emborrachan, sólo quiero acercar mi boca a su sexo, pero me indica que no moviendo un dedo delante de mi.

.- Primero mis pies, ¿recuerdas?

Coje un cojín y lo tira al suelo, pone los pies en él.

.- Cuanto antes empieces con mis pies antes tendrás acceso a lo otro - y como si hubiera dado el pistoletazo para una carrera de los 100 metros lisos. Me agacho, y besuqueo sus pies, luego lamo y vuelvo a besar, y luego a lamer y a lamer, desde dedos hasta el tobillo, el empiene, me detengo en el empeine, su suavidad me encanta. Se inclina para alante y coge otro cojín, lo tira al suelo, a su izquierda y veo que silba, yo ataco su otro pie, con el pie libre me pisa la cabeza.

Escucho un taconeo que se acerca, entra en la habitación, Nuria indica que de rodillas en el cojín, quiero levantar la vista y ver a que amiga a invitado Nuria, pero su pie en mi cabeza no me dejan verlo.

.- Trae una venda y unas tijeras - la desconocida se levanta, escucho otra vez su taconeo, ella me mete sus deditos en la boca y yo paso la lengua encantado. Noto que la desconocida vuelve a la habitación

.- Ponle la venda.

Mientras estoy jugando con sus deditos en mi boca la chica, huelo el olor de su esmalte de uñas y un perfume dulce y embriagador, me pone una venda suave y negra. No veo nada.

.- Espera cachorrito, que te tengo que hacer un arreglo y luego tendrás acceso a mi rajita.

Se pone en pie y noto que algo de metal toca mi cuello, empieza a cortar mi camiseta.

.- Pero ¿qué...? - no me deja terminar, me da un tortazo que me hace ver estrella, luego me susurra en el oído: "tranquilo cachorrito, ni una palabra más o te perderás el regalito que tengo para ti".

Sigue cortando, luego por la espalda, para ello me fuerza los brazos, luego corta por los laterales, hasta que de un par de tirones me deja totalmente desnudo.

.- Vaya abdominales que tienes cachorrito - me dice ella. Me agarra del pelo y me lleva a su sexo, el olor me invita a lamer y ella me deja hacerlo, me va guiando, lento, rápido, más rápido, lento, lengua fuera, ahora dentro y al final me regalo un orgasmo que empapa mi cara.

.- ¿Quieres otro cachorrito?

.- Sí - digo sin dudarlo

.- Tienes que ganártelo, por ejemplo, suplicame que te deje seguir comiendo.

.- Por favor Nuria, te suplico que me permitas lamerte hasta otro orgasmo

.- Mmmm - me lleva otra vez la lengua a su vulva, un par de lamidas y me aparta.

.- Estoy segura que puedes hacerlo mejor - dice

.- Por favor Nuria, permite que te vuelva a comer tu sexo, permite que te provoque otro orgasmo.

.- Suplica a Diosa Nuria y tu el gusano.

.- ¿Qué?

.- Si no quieres seguir no pasa nada.

.- Diosa Nuria por favor permita que este gusano vuelva a provocarle otro orgasmo.

Ahora sí, me acerca a su sexo y otra vez con sus instrucciones, ahora me dice que lo haga con lentitud, así que en cuanto subo un poco el ritmo de lamida ella me pide que baje el ritmo.

.- Barbie, tu saca a Ramoncín y ponlo en el suelo. Te quiero botando en él.

No sé quien es Barbie pero lo de Ramoncín lo veo extraño de narices, pero con la venda y la lengua donde la tengo pronto lo olvido.

.- Cahorrito lame, lame lentamente, pero sin dejar de hacerlo.

Noto a Barbie moviéndose cerca, gime. Nuria aprieta mi cabeza.

.- Muy bien cachorrito, sigue así.

Seguimos así, yo lamiendo con lentitud, Barbie gimiendo al lado, Nuria empieza a jadear.

.- Ahora cachorrito, rápido.

Empiezo a lamer con rapidez, la humedad de Nuria me pone a mil, retira la venda de un tirón. miro a mi lado y veo a Barbie (Javi), totalmente travestido subiendo y bajando su trasero sobre un pene de goma puesto en el suelo.

Nuria empuja mi cabeza a su sexo y sigo lamiento, ella se toca con un dedo, y entre su dedo y me lengua tiene un orgasmo mayúsculo, me ducha, literalmente me empapa la cara, el cuello. Ella se queda en silencio, recomponiéndose. Junta las piernas apretando mi cabeza contra ella.

.- Ya vale Barbie, deja de botar, siéntate. - Se pone en pie manteniendo una mano sobre mi cabeza.

.- Mira cachorrito, esta es Barbie - Javi está llorando.

.- ¿Pero qué haces Nuria? - pregunto y ella me mira

.- Cuidado cachorrito, cuidado con lo que dices - Javi me mira y niega con la cabeza.

.- Javi, ¿por qué no te quitas eso? - pregunto y Nuria se ríe

.- Cachorrito si se lo quita sabe que cobrará

.- Barbie, dile a tu amigo como sueles ir vestido a la facultad. - Javi niega con la cabeza.

.- Barbie, que te aplico el correctivo. - Javi se pone a temblar.

.- Siempre voy con medias y bragas y siempre con el aparato de castidad - yo lo miro alucinado

.- Verás cachorrito, Javi era un pervertido, ¿sabes que cogía mis bragas sucias y se pajeaba oliéndolas?, pero lo pillé, lo pillé y lo grabé. Y bueno, Javi pasó a ser Barbie.

.- Y ahora cachorrito tengo que ver que hago contigo - me alarmo, me pongo de pie como prudencia, ella se ríe.

.- Un cachorrito valiente - con mis manos a la espalda no soy rival para ella y lo sabe. Intento salir pero me empuja y caigo sobre la cama.

Se sienta sobre mi pecho, me acaricia la cara.

.- Te voy a aplicar un correctivo a ti cachorrito, pero como has sido un buen cachorrito lamedor y has hecho que tu Diosa tenga unos buenos orgasmos, el correctivo será suave, no como los que recibe Barbie todos los días.

Empieza a darme tortazos, las mejillas me arden, un pitido sordo suena en mi cabeza, pero tras el primer trallazo me caen 9 más. Me muevo, intentando quitármela de encima, pero no puedo. Cuando acaba con el décimo tortazo me pregunta si quiero alguno más.

Niego con la cabeza, aturdido por los golpes.

.- Vale cachorrito, tengo planes para ti, pero contra ti no tengo lo que tenía contra Barbie. así que dime ¿cómo lo hacemos?

.- Suéltame Nuria, esto no puede salir bien, y cuando tenga las manos libres no podrás pararme.

.- No, no has aprendido, prepárate que va la segunda tanda.

Y tal y como lo dice empiezan a caerme tortazos, uno tras otro, las lágrimas empiezan a fluir de mis ojos, ella lo ve pero no detiene el correctivo hasta que me da el décimo tortazo.

.- ¿Ves? Cuida tu lengua cachorrito - me limpia las lágrimas - pobrecito, un tío tan grande llorando.

.- Déjalo Nuria, es un buen tío - dice Javi

.- Barbie, hoy dormirás con el culo como un tomate.

.- ¿Qué tienes pensado para mi Nuria? - le pregunto

.- Venga ya cachorrito, se supone que eres listo.

.- Mantienes esclavizado a tu hermano y ahora quieres hacerlo conmigo, estás como una cabra.

.- Cachorrito cachorrito, no sabía que te gustaba tanto que te dieran tortazos.

Otro montón de golpes, de tortazos me caen, no puedo evitarlos de ninguna manera, rompo a llorar, pero no tiene compasión alguna. Aún me caen cuatro tortazos más.

.- Bien cachorrito, ¿tienes alguna otra cosa que decir? No olvides como te tienes que dirigir a mi. Mírate el pelo, aún embadurnado de mi corrida.

Se mueve sobre mí, vuelvo a tener su coño en la boca.

.- Cachorrito, o me he corrido en 5 minutos o te caerán la peor lluvia de tortazos que puedas imaginar.

Pasan unos segundos y me niego.

.- Como quieras cachorrito, el tiempo sigue pasando.

.- Hazlo Marcos - escucho que me dice Javi y algo en su voz me hace saber que ha pasado por esto.

Comienzo a lamer, la muy cerda está tan caliente que con la primera lamida me llena la cara de fluidos, pero me dedico a su placer, como el anterior, lento y luego rápido, no tarda en empezar a gemir y un poco más de lamidas y sus gemidos se superponen unos a otros, insisto con mis lamidas, golpeando su clítoris y se arquea, un orgasmo inmenso, me entran fluidos por la nariz, la boca tapada por su coño. Me retuerzo para coger aire y arqueada como está casi logro tirarla de mi, un par de tortazos más me hace quedarme quieto.

Vuelve a sentarse en mi pecho dejandome la boca libre.

.- Casi lo has hecho bien cachorrito, pero ese patético intento de tirarme de ti lo ha estropeado.

.- Ahora dime, ¿qué necesita Barbie? - me pregunta - Y cuidado con la respuesta que no me importa echar pegamento en la cerradura de eso que tienes en las polla.

.- No tengo ni idea de qué necesita Javi

.- ¿Javi? Es barbie y yo soy Diosa, contesta como es debido - Me da cuatro tortazos más

.- Diosa Nuria, no sé que necesita Barbie - digo rendido y con la cara ardiendo

.- Eso está mucho mejor cachorrito

.- Barbie levántate ya de Ramoncín anda guapa - le dice su hermana.

El pobre Javi se levanta y veo al falo que se ha estado metiendo.

.- Cachorrito, ¿sabes por qué le llamo Ramoncín?

.- Ni idea Diosa Nuria

.- ¿Se lo dices tu Barbie? Venga, no seas tímida

.- ¿Por favor Nuria? Soy tu hermano

.- Obedece perra inútil - no me puedo creer que Nuria sea así

Veo que Javi titubea, no se atreve a hablar.

.- Mi novio se llama Ramón y esto es un regalo que me dió para cuando no estuviera él - contesta al fin

.- ¿Quién coño es Ramón? - pregunto

Ella se ríe divertida

.- Ramón es un amigo de Nuria - contesta Javi - un tío bi, al que Nuria me ha entregado para que me pueda follar cuando quiera.

.- Barbie lleva el nombre de Ramón tatuado en una nalga

No me lo puedo creer, vaya familia pienso.

.- Bueno cachorrito, Barbie lo que necesita es una amiga, una Nancy, y esa Nancy vas a ser tu.

.- Estás como una cabra, esto va a acabarse ya - digo cargado de valor.

.- Barbie ata a este cachorrito.

Veo que Javi se levanta, coge mis brazos y me ata a las esquinas de la cama, luego los pies.

.- Tensalo bien nenita - dice Nuria sin bajarse de mi

Javi tensa las ataduras, entonces ella se baja de mi. La veo andar en su escritorio cogiendo cosas de un cajón, vuelve a la cama y se vuelve a subir encima mío. Me chupa los pezones, maldita loca pienso, en cuanto mis pezones reaccionan me pone unos piercings que me hacen ver las estrellas.

.- Cuidado Nancy que un tirón de esto te arrancaría el pezón y mira, Barbie te puede decir si soy capaz de hacerlo o no.

Me desinfecta las heridas y me pone unas gasas.

.- Ahora vengo, no os movaís nenas o me enfadaré - Sale de la habitación, intento levantarme, pero Javi me habla

.- No Marcos, no te muevas - me dice mi amigo

.- Tenemos que salir de aquí - le digo

.- Si te mueves, si ves que te has movido aunque sea un poco te arrancará los pezones y esposado como estás y con el aparato ese, ¿dónde vas a ir?

.- ¡Silencio nenas! .- nos grita desde algún punto de la casa y veo como Javi agacha la cabeza.

Nuria aparece un par de minutos después, hablando por teléfono. "Si Ramón, Barbie ya está lista y trae a tu amigo que ya tenemos a Nancy para hacerle compañía a mi hermana"

Me quedo helado cuando la oigo, pero espero a que termine de hablar.

.- Bien nenas, ahora vendrán unos amigitos a jugar con vuestros agujeritos - se ríe

.- Nuria, como un imbecil me meta algo te prometo que se la arranco.

.- Vaya cachorrito, no sabía que fueras tan valiente - me cuenta mientras rebusca en un cajón.

Se me acerca, se sube a la cama, se da la vuelta y se sienta en mi cara. Anda con mi pene, cuando me coge los huevos con la mano me quedo completamente quieto, me está pajeando y me siento extasiado, se levanta levemente permitiéndome coger aire y se deja caer de nuevo sobre mi, noto el líquido preseminal, rezo porque no pare. Me preparo para tener un orgasmo y me aprieta el escroto, lo retuerce, el dolor me sube por toda la columna, con su culo en mi boca me es imposible gritar, mi erección baja de golpe y vuelvo a tener el apartito puesto, aunque lo noto más pesado.

.- Bien cachorrito, ¿vas a portarte bien? ¿vas a ser obediente?

.- Vete a la mierda - le digo cuando puedo hablar

.- Vale, pues nada, será por las malas, pulsa un botón en un apartito que lleva entre las manos y siento un dolor en mis huevos que me deja sin aliento.

.- ¿Cómo ha sido cachorrito? Estaba en nivel 3, ¿quieres que probemos el nivel 7?

Estoy conmocionado, no consigo contestar.

.- Contesta cachorrito, ¿probamos el 7?

.- No, no Nuria por favor, Diosa no, por favor - no puedo creerme ni el tono que utilizo, estoy implorandole que pare.

.- Eso está mucho mejor cachorrito. Pero no sé si lo has dicho de corazón o asustado. Dime, ¿cómo te portarás?

.- Me portaré bien Diosa Nuria - Se sube a la cama, se pone de rodillas a mi costado.

.- ¿Ves? no es tan dificil.

.- Barbie, a la entrada, a esperar a nuestros invitados. Nancy y yo vamos a hacer cosas de mayores. - Odio el trato que le da a su hermano. Javi obedece dándome a entender que ya está acostumbrado.

.- Bien cachorrito, eres mío, lo eres desde que me fijé en ti y tu en mis pies. - no espera respuesta - Prefiero ser obedecida sin más, a tener que castigarte para que me obedezcas. Mientras seas obediente todo irá bien.

Intento hablar pero me pone un dedo en los labios.

.- No tienes nada que decir cachorrito. Te voy a entrenar para que seas Nancy, pero no hoy, no he tenido tiempo aún. Hoy vamos a participar todos, vas a ver como Ramón y su novia follan, y vas a ver como el amigo de Ramón me folla a mi. Pero al amigo de Ramón, vas a ser tu quien se la ponga dura, lo harás con una buena mamada, si lo consigues te daré un premio, si no eres capaz, te castigaré, probaremos el nivel 7 y luego volveremos a intentarlo.

.- ¿Qué harás cachorrito?

.- Obedecer

.- No tonto, eso lo tengo claro, digo referente a la mamada

.- Se la haré - me auto sentencio

.- Bien, espero darte el premio, ahora vas a hacer lo que mejor haces - se da la vuelta y me pone su vulva en la boca - a lamer cachorrito.

Y así estoy cuando suena el timbre, se levanta, riendo divertida, me da un morreo.

.- Ya están aquí, se un buen cachorrito nene - me recomienda con otro beso en la boca.

Sale de la habitación dejándome perdido en mis pensamientos. Regresa al instante, veo a Javi, entra primero y se pone a cuatro patas al otro lado de la cama, tras Javi viene el que imagino que es Ramón, viene de la mano de Javi, Ramón tiene unos 10 o 15 años más que nosotros, con los brazos musculosos llenos de tatuajes. Suelta la mano de Javi y da la vuelta a la cama. Luego entran Nuria y otro "motorista" tras ella. Nuria nos presenta

.- Cachorrito este es Pablo, éste me mira y me agarra por debajo de los hombros para moverme al borde de la cama.

Mientras tanto Javi se la está comiendo a Ramón, que con una mano pega la cabeza de mi amigo a su entrepierna. Pablo se saca la polla del pantalón, abro los ojos por el tamaño y grosor de la misma, se inclina sobre la cama y pone su pene en mis labios.

.- Cachorrito, a mamar que la quiero bien gorda para mi - me dice Nuria y juguetea con el mando, obediente abro la boca y empiezo a lamer la polla que rápidamente va cogiendo firmeza.

Nuria se sube otra vez en mi, con la cara casi pegada a la polla de Pablo. Mira como Pablo va endureciendo su polla en mi boca y sonríe maliciosa, echa una mano al aparato de Pablo y lo pajea, él deja de metermela en la boca, en sus manos coge un tamaño que asusta, ya no me entraría en la boca pienso. Nuria se da la vuelta, se pone a cuatro patas dejando su coño sobre mi boca, Pablo se la mete sin miramientos.

.- Abre la boca cachorrito que yo voy a empezar a chorrear ya y no quiero que caiga una gota en la cama - Ante la idea de recoger sus flujos vaginales abro la boca. Veo el monstuoso pene entrando y saliendo del coño de Nuria, un constante mete y saca como un martillo pilón.

.- Lame cachorrito - empiezo a lamer, con cuidado de no tocar la polla que la está penetrando. Veo como Ramón se sube a la cama y ensarta a Javi por el ano, Javi emite un ligero quejido. Al momento veo que se mueve alante y atrás según va siendo follado. Sobre mi Nuria demuestra tener un aguante tremendo, pero finalmente sus gemidos se amontonan y Pablo cae sobre ella ante su propio orgasmo.

.- Pablo la boca del cachorrito, úsala - y no quiero protestar

Me la mete en la boca mientras aún está escupiendo semen, el sabor amargo me repugna. Me la saca y me dice que mantenga la boca abierta, pegotes de semen caen del coño de Nuria y caen en mi boca. Se sienta y me indica que la limpie, lamo su sexo como antes, pero el sabor del semen me frena, ella no lo nota o no le importa, se mantiene encima mía hasta que he terminado con la última gota de semen.

Al momento Ramón se corre dentro de Javi, que en silencio, veo que está llorando.

Los tres salen del dormitorio, solo quedamos Javi y yo. Los dos en la cama, los dos hemos sido usados y olvidados.

.- Perdóname Marcos, no supe advertirte, no me atrevía a decirte lo que me pasaba - me dice Javi sin dejar de llorar.

.- No tienes nada que perdonar Javi, es tu hermana la que está como una cabra.

.- No, no está loca Marcos, es una sádica.

Nuria regresa a la habitación.

.- Bien Barbie, ve al salón y sirve unas copas a los dos hombres que hay en la casa - el tono de desprecio con el que dice lo de los hombres no nos pasa desapercivido.

En cuanto Javi sale Nuria se tumba a mi lado, apoyada de lado me mira fijamente.

.- Lo has hecho bien cachorrito - me dice. Me niego a contestar

.- Mira, te propongo una cosa. - la miro esperando que se trate de una broma - seré tu novia, podrás pasearme por la facultad como tu novia - pongo una mueca horrible

.- ¿No te gustaría? - me pregunta

.- No Nuria, no soy como tu, no consideraría que te estoy paseando, no creo que seas una perrita.

.- Oh, había olvidado que eres un buenazo. Bueno pues pasearemos como novios. Dejaremos que todos vean que la tía más guapa de la facultad está con el mejor jugador del equipo de basket. Claro que llevarás un aparato de castidad, que te quitaré cada poco tiempo para usarte y en algunas de esas ocasiones permitiré que también goces tu.

.- Vale, acepto Nuria.- se ríe

.- Espera cachorrito que no he acabado. Cuando yo te lo diga irás también con bragas y medias. Y cuando te lo pida vendrás a mi casa, para follar, o para irte convirtiendo en Nancy.

.- Paso Nuria

.- Cuidado Cachorrito, nunca te haré lo de Javi, pero habrá días que te quiera ver como Nancy, esos días al principio no te gustarán, luego seguramente sí. Y esos días no serán mayoría.

Yo la miro sin saber si hay trampa o no.

.- No seas tonto cachorrito, estás como un tren y no voy a desperdiciarte.

.- Está bien Nuria, acepto.

Me mira fijamente, estudiándome.

.- Mi hermano dice que no eres de los que mienten, que sueles mantener tu palabra, ¿es cierto?

.- Sí, suelo hacer lo que digo.

.- Vale, te voy a quitar el aparatito que llevas, vamos a follar y luego te pondré el apartatito que te puse al inicio. ¿Algún problema?

.- No, maldita sea Nuria, acepto pero te pongo una condición yo también.

.- Venga, no te pases cachorrito.

.- Libera a tu hermano

Bueno, esto es todo, al final liberó a su hermano, salvo algunos días que vuelve a ser Barbie, ya no sufre las vajaciones que sufría. Mi vida sexual ha mejorado muchísimo, no me mitió. Solemos ser una pareja bonita y activa sexualmente, aunque salvo Javi, nadie sabe que suelo llevar el aparato de castidad y tan sólo alguna que otra vez, Javi y yo somos las putitas de mi novia.