Por confiada, termine siendo prostituta 1parte
Yo fui siempre la chica linda que todos los hombres deseaban aunque siempre fui picara no creí que el destino me llevara a ser prostituta en contra de mi voluntad
Hola soy una chica de más de 30 años pero quiero relatarles lo que me paso cuando aún tenía 16 añitos de edad; yo desde pequeña fui la chica bonita de mi cuadra, con tan solo un metro y sesenta fui siempre de las chicas más codiciadas de mi barrio y de mi escuela no solo por mi carita simpática que siempre he tenido sino también por mi bonito cuerpo que me encantaba cuidar, yo era de las típicas chicas que casi no comía para mantener siempre al tope mi figurita, en lo personal me sentía muy bien con mis pechitos no eran grandes pero tampoco pequeños aunque siempre note que mis amigas sentían envidia de mí por mi cinturita y el traserito redondito que cada vez se me estaba desarrollando, yo tenía el cuerpo que cualquier chico u hombre podría desear y porque eso lo sabía muy bien, me gustaba la idea de provocar a los hombres, me gustaba que los chicos se excitaran por mí mientras yo me hacia la inocente, así siempre tuve a chicos lindos queriéndome conquistar sin que yo les hiciera caso, tuve varias compañeritas que deseaban estar cerca de mí para estar cerca de otros chicos, pero también tuve otras compañeras que me odiaban por mi forma de ser y por mi figurita aunque en ese entonces no imaginaba hasta donde llegarían sus envidias, me sentía muy normal.
Tengo que confesar que aunque me sentía muy sensual y sexi era muy promiscua y calenturienta aunque en mí había mucha ingenuidad, era joven y no media los riesgos en ese entonces; era muy confiada de las falsas intensiones del sexo opuesto, así como las falsas intensiones de las compañeritas que me invitaban a conocer chicos guapos para hacerme popular, ahora entiendo que lo que querían era destruirme, humillarme y bajar mis humos de grandeza y realmente lo lograron con ello les contaré un relato de las varias experiencias que tuve vivir por haber sido tan confiada.
Tuve una compañera que me presento con Carlos (así le llamaré en esta historia) un chico guapísimo, amigo de ella del cual era mucho mayor que yo, cuando lo conocí no puedo dejar de negar que me sentí atraída hacia él ya que por su edad todo su entorno masculino era mucho más desarrollado que la de otros chicos que estaban cerca de mí, él a conocerme no dudo ni tardo en apresurarse en ser gentil conmigo, llegaba cuando salía de la escuela para llevarme a mi casa y era mágico para iniciar en mi cuerpo el deseo de querer más que solo besos con él, realmente no tardó mucho en darse cuenta que yo era una chica con deseos de experimentar sentir varón pero que aunque gustaba de provocaba a muchos chicos no tenía había tenido nunca un encuentro sexual por lo que él fue el primero en mi vida.
Carlos tenía un gran defecto, era demasiado celoso y de él contaban que no andaba en buenos pasos; yo le contaba muchas cosas de él a mi amiga en aquel entonces (que realmente solo fue otra compañera envidiosa) y me decía que todo eran habladurías que yo era la chica perfecta para él y que él era el chico perfecto para mí; aunque siempre tuve mis dudas caí sin darme cuenta en la trampa de mis compañeras envidiosas fui poco tiempo su novia ya que él se molestaba mucho cuando quería tener intimidad conmigo y aunque estuviera yo caliente casi no le dejaba actuar, al punto que me reclamaba como que era yo la que lo calentaba y no le daba nada pero algo más terrible pasó en esos días descubrí que el andaba con otra chica por lo cual me llegaron los rumores que el solo quería acostarse conmigo, tomarme fotos y dárselas a la persona que pudiera sacarle provecho a esas imágenes, aunque hasta ese entonces no sabía a quién se referían de todas mis conocidas envidiosas.
Pasaron algunos días y se me acerco Alejandro (nombre ficticio) otro chico del quien no sabía que era amigo de Carlos, me estuvo enamorando de una forma muy bonita y yo por tonta caí en sus redes pensando que con él, me libraría del mal genio de Carlos ya que empezaba a sentir miedo de todo lo que hablaban de mi ex, yo buscaba que Alejandro fuera mi protector ante un ex rabioso por haber tenido poca intimidad conmigo pero la cosa para nada fue así ya que una tarde de regreso de la escuela salió Carlos a mi encuentro, esta vez con la excusa de que Alejandro ya había divulgado que había sido suya por varias veces haciendo alardes de los ricos momentos que yo le había hecho pasar. Yo me quede atónita queriendo negar la infamia que me precedía pero él índico que el mal ya estaba hecho, realmente el plan había salido a la perfección ya lo habían divulgado con todos los chicos que eran vecinos por mi casa, fue una buena actuación por parte de ellos y de la cual me hicieron protagonista.
Esa tarde fingió estar furioso me tomo del brazo diciéndome que iba a tener que pagarle muy caro mi infidelidad y abstenerme a mi castigo.
Tuve miedo y me sentí muy mal por varios días hasta no querer salir de mi casa, cuando tuve que volver a salir sola por cualquier situación los chicos me miraban y me hacían muchos piropos pero otros también me hacían propuestas indecentes y nunca faltaba más de alguno que me dijera si pudiese llegar a cobrar por esos servicios, mis tiempos de gloria se iban desapareciendo empezaba la humillación de algunas de mis compañeras que querían destruirme pero yo no sabía hasta donde iba a llegar sus límites eran crueles ya que pretendían que tuviera una mala reputación aunque trataba de ser fuerte ante toda esa situación de calumnias a ocultas de mi familia.
Fue entonces cuando por las tardes al salir de mi escuela pude notar que alguien me seguía como si me controlaran, trate de buscar la ayuda de algunas compañeras pero muchas solo se reían y me hacían creer que eso tal vez me pasaría por ser bonita pero que no era nada que solo era producto de mi imaginación.
Pero llego la tarde codiciada de Carlos y para mí el inicio de muchas desgracias…
Fue una tarde al salir de mi casa ya que tenía que ir a la escuela por unas tareas extra aulas, cuando iba por una calle poca transitada se me cruzo un vehículo e inmediatamente se bajó Carlos haciéndome entrar a la fuerza del lado del copiloto, realmente me asuste pero fue más cuando el empezó a amenazarme, me indico que con él no se jugaba y que si yo no era una buena niña podría llegar hasta matarme tomo de su mano izquierda un revolver y me hizo saber que todo lo que hablan mal de él era cierto, me indico que todo había iniciado con un pago que le habían hecho para hacerme un simple mal pero que al conocerme se había obsesionado con mi figura y que desde ese momento inicio su plan para aprovecharse de mis atributos de mujer sin embargo todo lo que habían generado con Alejandro le habían hecho cambiar y ese plan ahora sonado más excitante, esta vez no solo iba a cobrar una vez por hacer un trabajito, ahora iba aprovechar la situación para ganar mucho dinero a través de lo que me iba a poner a hacer.
Yo estaba paralizada, descubrí porque antes le había sentido miedo y note que sus palabras eran muy reales, francamente no estaba jugando y yo había cometido el peor error de mi vida al haberlo conocido.
El aprovecho para decirme que tenía que des abrochar mi blusa para que pudiera verme mis pechos, mientras los tocaba me puso el arma en mi cara y me dijo - Te gusta calentar pollas,ahora no solo las vas a calentar ahora las vas a tener que aprender a satisfacer– en seguida de eso me tomo del pelo de forma violenta e inclino mi rostro hasta tocar mi boca con sus genitales, me dijo que tenía que bajarle el cierre de sus pantalones con los dientes y que tenía que seguir siendo buena niña si quería vivir, sentía tanto asco y miedo pero de inmediato salto de sus piernas el bulto que tenía era su verga grande y ancha aunque ahora ya no me parecía excitante como las otras veces porque ahora me daba miedo porque sabía que ya no sería el chico lindo y tierno que trataba de seducirme para excitarme previo a una penetración vaginal sino ahora miraba su verga como una amenaza para mi cuerpo, el empujaba mi cara arriba hacia abajo para que le hiciera una rica mamada aún en contra de mi voluntad de pronto el vehículo se detuvo y yo me sentí más tranquila pensando que había terminado pero lo mejor para él apenas estaba comenzando.
Escuche otra voz, al levantar la visa note que era otro su amigo, era un enorme negro que tenía un cuerpo más grande que el de Carlos al solo verle me asuste. Carlos le dijo esta es la chica de la que te hable como la consideras para nuestro negocio, al escuchar eso entre en pánico pensé que negocio quería hacer conmigo, yo no era su mercancía, de que hablaban.
El negro me miro toditita y me le dijo: - “Veo que ya la traes practicando me parece que solo le hace falta un par de detallitos, le daremos unas buenas experiencias y nos irá muy bien”. – escuchar eso me aterraba!! -
Luego entro a la casa donde lo fuimos a encontrar, no me dejaron ver bien donde estaba solo pude notar que era un lugar un tanto obscuro y con luces en su interior, posterior a eso el negro volvió a salir pero esta vez llevaba una bolsa en su mano se subió a la parte trasera del vehículo y le dijo: -“ Vamos, verás que con esto tomaremos una mejor idea- llevémosla a un lugar apropiado para la situación”.
Yo no tenía idea que era eso, y seguía temblando de miedo, en todo el camino le fui pidiendo a Carlos que me perdonará que de ahora en adelante sería más atenta con él y que no le volvería a ser infiel, pero él se ría y me decía que ya no le importaba lo que yo dijera; me volvió a mostrar su revólver y me dijo: - Tu siempre serás mía pero de ahora en adelante no solo vas a ser mía cuando yo quiera, sino como yo te lo ordene - se ría con su amigo y me decía: - Esto te pasa por andar calentando pollas, querías calentar a todos como una puta entonces ahora aprenderás a no solo calentar sino a ser una verdadera puta.
Yo lloraba pero eso parecía no causarle ningún sentimiento, mientras Carlos hablaba, el negro me iba tocando todas mis partes, me rosaba con sus grandes manos los hombros, me tocaba mis pechitos y luego dirigía sus mismas manos debajo de mi falda de escuela y se decían que la iban a pasar muy bien, luego llegamos a un hospedaje lleno de espejos por todos lados, habían espejos en las paredes y por encima del techo ellos me empujaron hacia adentro y me tiraron la bolsa que cargaba el negro hacia mis pies, me dijeron ahora puedes entrar al baño y ponerte todo eso, si no lo haces te vamos a dejar aquí bien muerta y si lo haces pero no nos gusta lo que vemos vas a sufrir mucho es mejor que trates de quedar lo más linda que puedas para nosotros.
Cuando ingrese al baño pude notar que el interior de la bolsa contenía los implementos de maquillaje básicos de mujer como pintalabios rojo, sombras, una loción de aroma provocante, aretes de argollas largas y contenía ropa de una mujer vulgar, me habían dado ropa interior extremadamente diminuta de las cuales yo antes no había usado, medias de mallas con encaje rojas, una blusa que dejaba ver mi ombligo que tapaba mis brazos pero lo mínimo de mis pechos por su gran escote por delante como por detrás y una minifalda de lycra que se ajustaba a todo el molde de mis caderas y de mi trasero, me puse a llorar pues no quería ponerme nada de eso, de repente la puerta del baño se abrió y Carlos con el revólver en mano me entrego unos zapatos de tacón alto y me dijo: -“ Acostúmbrate a ponerte todo esto porque no será la única, luego se asomó el negro y dijo -Apúrate que luego de esto viene el show y mejor para ti que no nos enojemos”.
Cuando termine de cambiarme me sentía muy incómoda y no quería salir, entonces el negro me tomo del brazo porque no quería ni salir del baño y me hizo que modelara luego me dio una vuelta y me dio una tremenda nalgada.
Luego Carlos me tomo del otro brazo me separaba y me acercaba varias veces hacia él y me decía: – “Que rica estas!!! Me halo hacia él y me dio un beso en la boca, me hacía modelar y me decía volvía a decir: – ”Que rica estas!!! De verás que así si pareces toda una puta
Yo lloraba pero hacia caso a lo que me decían por miedo, mientras que el negro saco una cámara y me empezaba a tomar fotos y me decía que buena puta eres y se tocaba el bulto que tenía entre el pantalón.
Fue hasta ese momento que pude verme a través de los espejos del hotel, pude observarme y sentirme como una prostituta, sabia en mi mente que iba a ser la primera vez que me iban a tratar no como mujer, me iban a tratar como un objeto tendría que ser ellos su prostituta y el hecho de estar no solo con un hombre sino con dos me aterraba, yo en esos momentos no tenía ni idea de lo que me tenían reservado.
Luego de tomarme varias fotos en todas las poses que me obligaban aunque no quisiera como acostándome en la cama y sonreír como que fuera yo la que les invitaba a poseerme o posiciones en donde estaba parada dejando mucho a la imaginación de quienes pudieran observarlas entendí que ellos estaban preparando todo para que después pudieran chantajearme y de paso hacer su publicidad de su nuevo negocio de prostitución.
Esta historia continuará....