Por Andar de Locas

Aquella tarde por andar de locas, casi me violan, y, excepto por esa parte, debo admitir que lo demás fue muy excitante,

Hola amigos d TR. Ya hace un tiempo que no subía un relato mas, y a pesar de que el presente ya tenía tiempo de haberlo escrito, no estaba muy convencida de subirlo. Sin embargo mi mejor amiga, Eli, finalmente me ha ayudado para hacerle algunos arreglos, y mandarlo para su publicación. Es mi afán solamente el poder cooperar con este excelente sitio web, del que he leído tantos relatos, así que espero sea de su agrado y consideren que no soy profesional ni muxo menos. Anticipo que, salvo las escenas en el transporte publico (ademas exageradas), los demás hechos aquí relatados son ficticios. Se que algunas cosas serán ilógicas, como meter a dos extraños a casa de una amiga, o dejarla a solas con esos dos extraños, pero al fin es una fantasia. ^o^ Pásenla súper, byeee

POR ANDAR DE LOCAS

Estas vacaciones decidí regresar a México. Ya tenía algún tiempo que no veía a mis amigos. Aquel día en particular me sentía un poco excitada. Eli y yo habíamos quedado para ir de compras y quizá al cine o algún otro sitio, así que me apresuré a vestirme y arreglarme: un vestido ligero, de tirantes y algo corto, amarillo tenue, muy pálido; botines cortos; un pequeño suéter rosa abierto. Para el cabello, una diadema rosa. Decidí no llevar sostén, pues se notaría demasiado por el vestido, y abajo llevaría unas pantaletas pequeñas, ajustadas. Terminé d maquillarme, muy ligeramente, y lista.

Eli llegó a la hora convenida. Eric, el chofer, nos llevaría hasta la tienda departamental.

  • Vaya, que sexy te vestiste Alin - me dijo Eli

(Tu también) - se lo hice saber. Llevaba ella una blusa ajustada y una mini d mezclilla

Se me ocurre una idea. Dile a Eric que nos lleve a la estación del metro de CU

(Para que?) - pregunte con señas

Tengo una idea - respondió ella

Acepte levantando los hombros, y le indique a Eric que nos llevara donde Eli decía. Eli siempre ha sido la mas alocada de mis amigas, se me ha pegado un poco de eso, y esa mañana lo comprobaría. En los pasillos del metro, las miradas de los chicos y algunos comentarios de los menos fueron excitantes. Nos subimos al vagón, sin embargo, cuando iba a tomar un asiento, Eli me sostuvo por el brazo y me llevo al fondo; quería que viajáramos de pie. Con cada estación que pasábamos, el vagón se llenaba mas. Las constantes y mal disimuladas miradas de los hombres me estaban excitando mas de lo que ya estaba. Finalmente el vagón se llenó por completo en la estación Balderas. Eli me comentaba algunas cosas sobre sus estudios, cuando noto que justo atrás de ella se encontraba un chico guapísimo. Eli seguía hablando, pero mi atención estaba concentrada completamente en aquel chavo alto, de tez clara y cabello castaño, lacio. Sus ojos oscuros de mirada increíble. En ese momento, me percaté que Eli paraba en seco sus palabras, y mostraba cierta incomodidad, no sabía por que. Haciéndole señales, le pregunte si estaba bien, y ella respondió que si con la cabeza. Fue cuando me di cuenta que el chico atrás de ella la estaba tocando, de hecho, mas que eso: con una mano le recorría las piernas mientras la otra desaparecía bajo su falda. Mire la cara de Eli, y me lleve una sorpresa al notar que lo disfrutaba. Esa situación me llevo a un grado de excitación increíble, tanto, que cerré mis ojos y disimuladamente baje una mano hasta mi vagina, para acariciarme sobre la falda, muy levemente. La verdad es que a pesar de todo me ponía muy nerviosa que alguien se fuera a dar cuenta. Afortunadamente viajábamos al fondo del vagón, en una esquina. No me di cuenta cuando, pero de pronto Eli acariciaba tímidamente uno de mis senos, y menos me di cuenta en que momento se había colocado otro chico justo tras de mi, y me acariciaba las piernas al principio lentamente, y poco a poco mas descaradamente, pegando su pelvis contra mi cuerpo, sintiendo así su endurecido pene dentro de sus pantalones, apoyarse contra mi trasero. Eli se acercó a mi oído y susurrantemente dijo "me esta metiendo un dedo". Eso hizo que mi excitación se fuera hasta las nubes. El chico atrás de mi siguió recorriendo mis piernas, hasta que de repente subió de manera intempestiva y trato de apartar mis pantaletas para introducirme algún dedo, cosa que no permití. No me había conservado virgen hasta ese momento solo para entregarme en un vagón del metro, con un desconocido y por un dedo suyo. No es mi motivación llegar así al matrimonio, ni mucho menos, pero tampoco entregarme a la primera. Afortunadamente lo comprendió y se conformo con seguir sobre mis piernas y acercando su excitación a mis nalgas. Al abrir los ojos, me di cuenta que un par de sujetos se habían percatado de las cosas, pero de suerte que no se atrevieron ellos a hacer mas. En el vagón contiguo, éramos el espectáculo soñado para un par de adolescentes que nos miraban a través del cristal. Eso me tenía cada vez mas excitada. Finalmente el metro llegó a alguna estación donde desciende mucha gente, y los chicos tuvieron que apartarse de nosotras y Eli ceso de tocarme, arreglándose un poco su falda subida. No supe si había tenido un orgasmo. Entonces, ya mas relajados todos, comenzó la platica

Y como se llaman - pregunto el mas guapo, el que había estado atrás de Eli

Yo soy Elizabeth y ella es Alín (el burro por delante, pensé, y sonreí). Y ustedes que onda

Marcos – el mas guapo

Fabian

No lo tomen a mal, pero están muy bonitas y de buen cuerpo

Gracias – Eli

Cuantos años tienen? - Fabián

Ambas 20; ya nos bajamos en la próxima estación - dijo Eli

Ah bueno. Mira, por que no nos dan su teléfono. Nos gustaría poder invitarlas un café o al cine; a donde quieran - Marco

Bueno, mira, este es el mío, háblame y me pongo de acuerdo con Alín, sale? - Eli

Sale - Marco

Y tu por que tan calladita? - me preguntó Fabián

Ya estábamos saliendo del vagón, y Eli aprovechó para pellizcar el brazo de Fabián. "Auch, que dije?" alcanzamos a escuchar.

Relax Alín, no saben… - me dijo Eli, a lo que conteste con una sonrisa

Hicimos nuestras compras y regresamos a mi casa. Estuvimos toda la tarde probándonos lo que habíamos adquirido. Me puse una blusa rosa, un poco ajustada, sin hombros, una falda blanca, apenas arriba de las rodillas, de vuelo, botas cafés, y una diadema en el cabello para terminar.

Eli llevaba una blusa estilo camiseta azul, y una mini de mezclilla, aparte de botines y una torerita. En ese momento sonó el cel de Eli; salió de mi habitación para contestar, mientras yo encendía el televisor y veía Smallville, ya hacía mucho que no la veía de manera continua y muchas cosas habían cambiado, llegando incluso a confundirme algunas situaciones. Aún así, valía el momento, por solo ver a Clarck, jaja ^o^. Además, para ser honesta, aún andaba excitada, mas al recordar lo que había sucedido apenas aquel mediodía. Eli tardaba en regresar, así que paulatinamente mi mano se fue adentrando entre mis piernas, y comencé a acariciarme suavemente. Había estado esperando esa sensación deliciosa. Abriendo ligeramente mis piernas, mis dos manos fueron a parar ahí, buscando excitar mi clítoris y acariciar mi vagina y el interior de mis muslos, mmmmhh. Estaba súper hot, pero de repente me sobresalté al sentir unas manos apretando mis senos. Rápidamente me di vuelta y me acomodé de manera pertinente. Era Eli, y la verdad no es que me diera pena con ella, ya en una ocasión nos habíamos masturbado frente a un contacto, pero cada una a lo suyo. En esta ocasión si me sobresalto el hecho de que ella me hubiese tocado de esa manera. Me iba a bajar de la cama cuando se lanzó sobre mi y me dio la vuelta, quedando boca abajo en la misma, y tomándome de los brazos, los cruzó por mi espalda, con ella sobre mi, dejándome inmovilizada.

  • Ay Alín, que te haces, si se que esto te excita

Moví mi cabeza indicándole que no. Definitivamente no me consideraba bisexual, ni mucho menos lesbiana. Pero Eli me conoce tanto como yo a ella, y comenzó a atar mis manos una a cada lado de la cabecera de mi cama. Eso me excitaba completamente, y me debatía entre lo que no me gusta contra lo que me sobreexcita, sin oponer ninguna resistencia de consideración. Levantando mi falda y dándome una fuerte nalgada, me dijo

  • Vas a ser una buena zorrita verdad?

Se bajó de la cama después de atarme correctamente, y fue a su bolso, sacando algo que me extrañó mucho que llevara: un pequeño vibrador. Se acerco y sin decir con permiso, lo introdujo a mi boca; la verdad es que ya no hacía mucho por defenderme, sentirme dominada me excitaba como nada.

  • Chúpalo bien o te dolerá cuando te lo meta - dijo Eli. Me puse muy nerviosa y ella lo notó

  • No te preocupes, ya se que eres virgen y quieres seguir así. Te aseguro que no terminaré con eso

Acariciando suavemente mis senos sobre la blusa, comenzó a besar mi abdomen descubierto, lentamente, suavemente. Yo no estaba muy cómoda con ello, pero la verdad es que estaba cada vez mas excitada. Ella fue bajando hasta llegar a mi vagina. Llevando sus manos bajo mi blusa y mi sostén, acariciaba mas plenamente mis senos, pellizcando un poco a veces mis pezones, que para entonces estaban súper duros. Yo cerraba los ojos y experimentaba un mar de sensaciones, estando ahí, atada de manos, con Eli acariciando mi cuerpo a su antojo y un vibrador metido en la boca. La escena sin duda sería digna de alguna película de adultos. Lástima, nunca me han gustado. Entonces Eli cesó en lo que hacía y sacando el vibrador de mi boca, lo observó, escurriendo de mi saliva. Me vio a los ojos

  • Que buen trabajo, jaja - y me dio un apretón de senos, que la verdad no me gusto mucho, mas bien me dolió

Descendió nuevamente a mi vagina, y temí lo peor. No quería que mi primera vez fuera asi, con un vibrador, no. Levanté un poco la cabeza para poder observar lo que sucedía, y allí estaba ella, apuntando con esa cosa directamente a mi vagina. Comencé a moverme para que no lo hiciera. Entonces se subió en mi abdomen y me dejo inmóvil nuevamente. De pronto sentí que lo pasaba lentamente a lo largo de mi entrada, haciendo a veces leve presión, sin llegar a meterlo en ningún momento. Yo estaba mas que nerviosa, si ella se atrevía, definitivamente me iba a enojar con ella como nunca antes. En ese momento, un considerablemente fuerte dolor invadió mi cuerpo y comencé a retorcerme sobre la cama en la poca movilidad que me permitía tener el cuerpo de Eli encima. Las lagrimas asomaron a mis ojos y trate de jalar la mayor cantidad de aire, mientras apretaba los puños con fuerza y tensaba mis piernas. Eli sonreía y me decía "calmate, dentro de poco se pasara y comenzaras a gozar como una zorrita"

Al principio creí que Eli se había atrevido a hacerlo, pero en un momento noté que lo que había hecho era penetrarme con ese vibrador de una sola por atrás, y sin esperar a que se calmara mi dolor, empezar a sacarlo y meterlo con gran rapidez

  • Uff Alín, deberías verte, perforada por este aparato. Que sexy te ves, hasta me dieron ganas de follarte

Eli se dirigió nuevamente a su bolso y sacó una especie de tanga con un par de penes adheridos a la prenda, uno hacia adentro y otro hacia fuera. Ella se lo metió en la vagina, mientras gemía levemente; estaba muy excitada. Yo me preguntaba que estaba haciendo, iba a ser poseída por mi mejor amiga, por una chica, pero de alguna manera ella había notado desde la mañana que yo andaba excitada y se estaba aprovechando de eso, excitándome mas. Yo ya no podía detenerme.

  • Mejor chúpalo bien Alín, para que no te duela

Comencé a lamer el pene de plástico, lamiéndolo lentamente y recorriéndolo. Sólo una vez había tenido sexo oral, así lo hacía lo mejor que podía, sin embargo, para Eli esto no fue suficiente y comenzó a moverse en mi boca como si me hiciera el amor, algo brusca. Al fin quedó satisfecha por el momento. En ese instante, alguien llamó a la puerta, y Eli se puse un abrigo par ir a ver quien era. El trayecto que recorrería desde mi recamara hasta la entrada de la casa era bastante largo, lo que me dio tiempo para pensar: por un lado, esto era realmente excitante, siempre me ha puesto sentirme dominada, aunque nunca lo había hecho. Hoy era mi oportunidad de hacer realidad esta fantasía y lo mejor de todo, con Eli, mi mejor amiga y con quien no había secretos ni de mi hacia ella, ni de ella hacia mi. Por otra parte, había leído en muchas ocasiones que el hecho de tener alguna experiencia de este tipo, par nada se consideraba que fuera les, pues de hecho me gustan los chicos, pero bi…. Quizás no, en una ocasión escuché que a veces solo se buscan experiencias nuevas que por su morbo nos excitan, sin que necesariamente nos convirtamos en aquello, solo como una especie de prueba. La verdad creo que estaba en este ultimo caso, pues desde que recuerdo, nunca me ha llamado la atención ver a una chica desnuda ni nada así, y los chicos me atraen al cien.

Sacándome de mis cavilaciones apareció Eli, lista para hacerme suya. Se lanzó sobre mi, levantando mi blusa con todo y sostén. Levantó mi falda hasta mis caderas y haciendo a un lado la panty levantó ambas piernas a los extremos de la cabecera de mi cama, donde también estaban atadas mis manos, y ahí me ató de los tobillos. De esta manera, yo quedaba completamente expuesta. Clavó su pene de plástico entrándome por detrás violentamente, y comenzó a moverse sin consideraciones, adentro y afuera de mi, casi saltando en la cama, saliéndose completamente y penetrándome nuevamente, provocándome así un intenso dolor que de alguna manera estaba disfrutando. Estuvo así, poseyéndome por casi veinte minutos, haciéndome llegar casi al orgasmo, y ella también. Cuando ya no podía mas y estaba a punto de llegarme, se salió de mi, se dirigió a mis ojos y vendó mis ojos. Estuvo unos minutos dando vueltas en mi habitación, o al menos eso creí, a mi ya no me importaba nada, solo quería que me volviera a penetrar, y lo hizo nuevamente después de algunos minutos, por atrás y casi desesperadamente, lo que me excitaba sobremanera. Entonces sucedió algo que me desconcertó. Escuché gemir a Eli alocadamente, pero su gemido se oía alejado de la cama. Me inquieté, pues si ella se oía lejos de mi, entonces… ¿Quién me estaba penetrando? Trate de llamar su atención, pero al no poder hablar y estar atada de manos y pies, fue imposible. Estaba cada vez mas nerviosa y como podía intentaba zafarme sin éxito de aquella situación, y no me quedó de otra mas que esperar mientras me seguían embistiendo violentamente.

Estuve ahí otros veinte minutos, esperando. Comenzaba a sentirme usada. Alguien estaba disfrutando de mi y yo ni siquiera podía verle el rostro, mientras esa persona me veía completamente, prácticamente desnuda. Sus manos jugaban con mis piernas y mi vagina; estrujaba mis senos y pellizcaba mis pezones. Por mi mente pasaban muchos escenarios: posiblemente algunos tipos se habrían metido a la casa y ahora nos violaban a ambas; quizás mi hermano menor nos había descubierto a Eli y a mi, y había invitado a alguien a unírsenos, quizás eran él y el chofer de la casa….

Finalmente la persona que me penetraba salió de mi; sentí como se deslizó hasta la orilla de la cama y bajó de ella. Después alguien subió nuevamente a la cama, tal vez el mismo tipo, tal vez alguien diferente. Nuevamente fui penetrada por atrás, y brutales embestidas se suscitaron otra vez contra mi. Cada vez que me estocaba, lo hacía tan fuerte que casi golpeaba mi cabeza contra l cabecera de mi cama. Me sentí como un juguete al que usaban para meter su pene cuantos chicos estuvieran en la habitación. Eli se acercó hasta mi y quitó la venda de mis ojos. Pude verla entonces, sobre sus codos y rodillas, completamente desnuda y siendo penetrada por detrás por un chico. Pude también ver al que me embestía tan violentamente, y los reconocí: eran los chicos que habíamos conocido horas antes en el metro. Ambos tenían los rostros llenos de satisfacción, por estar follando a dos lindas chicas, el mismo día de conocerlas y en la casa de una de ellas. Ambos chicos se salieron de nosotras, y llevaron sus penes hasta mi cara, donde se descargaron sobre mis ojos, mis mejillas, mi nariz, mis labios cerrados.

  • Que linda se ve, llena de leche su carita – dijo Fabián

Yo tenía asco, pero no pude decirles que no lo hicieran. Creí que sería todo, pero ambos le dijeron a Eli que necesitaban un poco de tiempo para recuperarse, y al parecer Eli estaba de acuerdo con ellos, pues se subió en mi abdomen, y comenzó un jueguito: abría y cerraba mi vagina, en repetidas ocasiones, mientras les decía a los chicos

  • Vamos a ver, quien de ustedes quiere ser su primer hombre?

  • Es virgen? - preguntó Marco

  • Así es. Esta nuevecita y pidiendo pene, mucho pene. ¿Quién de ustedes quiere entrar por aquí?

  • Yo - contestaron al mismo tiempo ambos

  • Alín, déjame metértela por ahí - pregunto Fabián acercándose. Moví la cabeza negando, pero creo que no lo notaron, pues Eli estaba entre nosotros

  • Entonces si te puedo dar por ahí? - escuche acercarse cada vez mas a Fabián

Eli volteó a verme. Yo le decía que no con la cabeza, ella me entendió pero decidió divertirse un poco

  • Ok, ella dejara que uno la estrene, a ver, como elegiremos quien? Ya se, el que traiga algo, lo mas loco que se les ocurra que le puedan meter a esta nenita, podrá tirarsela.

Ambos chicos comenzaron a buscar; al cabo de un rato, regresaron, Marco con un plátano y Fabián con una escoba

  • No me convencen chicos, a mi se me ocurrieron mil cosas mejores, creo que ninguno se ganó el derecho de poseerla, gano yo, jajaja

  • Ándale - dijo Fabián acercándose a mi rostro - no seas mala, deja que te la meta por tu ….. , te va a gustar, si Alin?

  • Relax chavo, no ganaron, no se las doy. Esta zorrita es mía y decido que nadie le entrara hoy por ahí - dijo Eli

Eso me sorprendió; Eli estaba mas loca de lo que creí, pero lo que dijo me tranquilizó, si es que podía sentirme aunque sea un poco tranquila estando en esa situación. Fabián se acercó entonces con su pene a mi vagina

  • Si Alín dice que no, la dejo en paz, pero creo que no esta en desacuerdo con que se la meta, porque no ha dicho nada

Sujetó mis piernas para metérmelo y cuando estaba listo para tomar mi virginidad, Eli, que se mantenía esperando, quizás excitada también, lo empujo con fuerza

  • Ya Fabián, no seas idiota, obvio no te dirá que no, que no captas que ella no puede hablar? - le grito ella a él, un poco molesta

  • Eres idiota o que? Te dije que no molestaras con eso. Desde la mañana te dije que me pareció que ella no podía hablar y tu ahí de necio - le gritó también Marco a Fabián

  • Tengo una idea. Esperen aquí chicos. Marco ahí te encargo. Nada de meterla por la vagina nada. – dijo Eli saliendo de mi cuarto

  • Que guarra te ves Alín; amarrada con el culo levantado, la falda alzada, la blusa arriba de tus senos y esas botitas que te hacen ver tan sexy. Hasta parece que tu amiga te vende, dinos, cuantas veces te ha amarrado para ofrecerte a sus amigos.

Me sentí como una puta; prostituida por mi amiga. Eso me excito, a la vez que me incomodó un poco. Mientras Eli andaba libre por ahí, haciendo quien sabe que cosas, y dejándome sola, yo yacía aquí, atada, inmovilizada, a merced de estos chicos.

Cuando Eli regresó, se llevó una sorpresa. Fabián perforaba con fuerza mi boca, saliendo y entrando como si me penetrara la vagina, mientras Marco apenas jugaba en la entrada de mi culo con el palo de escoba, poniéndome sumamente nerviosa

  • Hey, que depravados, que rico se la pasan a costa de mi amiga. Ya vengan a comer

Marco y Fabián me dejaron en paz un momento. Eli traía helado, y diciendo lo anterior, puso una porción considerable en cada uno de mis senos y otra en mi vagina. Eso me hizo tener un orgasmo inmediato, fuerte, que todos notaron y que al parecer los excitó. Rápidamente los tres comenzaron a comer el helado de mi. Fabián lamía el helado de mi vagina, intentando meter su lengua lo mas adentro, rozando de paso mi clítoris, excitándome nuevamente. Marco y Eli comían el helado de mis senos, besándose entre si, y después besándonos los tres. Nuestras lenguas se revolvían, se juntaban. Marco yo metimos nuestras lenguas a la boca de Eli, y luego ellos en mi boca. Así se quedaron, saboreándome por dentro, mientras sus manos jugaban con mis senos y mis piernas. Me sentí sucia, una cualquiera, estaba súper excitada. Esto era una orgía a costa mía. Fabián seguía en mi vagina, rozándome delicioso, excitándome otra vez hasta el límite cuando creí que ya no podría mas después del pasado orgasmo. Me dieron ganas de indicarle que le daba permiso de entrarme por ahí, que le regalaba mi virginidad, que entre los tres me poseyeran al mismo tiempo, cada uno en un agujero diferente, pero me contuve, afortunadamente. Se que de ser así, después me habría arrepentido. Eli los detuvo y finalmente me liberó de mis ataduras

  • Alín y yo debemos asearnos un poco, discúlpenos por favor - dijo Eli

Salimos de mi habitación y entramos en unos de los cuartos de huéspedes que quedan contiguos al mío. Desde ahí podríamos oír sus palabras

  • . Si, están bien buenas y que suerte la nuestra. Apenas las conocimos en la mañana, las pudimos meter mano, y por la tarde hasta otra cosa - dijo Marco, por la voz

  • Pues yo sigo con que quiero darle por la concha a la chinita - dijo Fabián aun de necio

  • Ahí vas otra vez. No vayas a hacer una idiotez que las haga enojar de vuelta. Ya de por si con tus comentarios estupidos, te había advertido que me lo parecía, pero tu ahí de terco - reconvino Marco

  • Si se me fue, ni modos. Mira lo que encontré, su ropa interior - dijo Fabián, obviamente escualcando mis cosas

  • Vaya, la niña parece fresa (>>no me gusta que me digan fresa<<). Mira esos colores. Puras pantaletas chicas, casi no tiene tangas - dijo Marco

  • Y si me llevo una de recuerdo - dijo Fabián

  • Mejor pídesela, o mejor aún , dile que te regale la que trae puesta, llena de sus juguitos - dijo Marco

  • Esta casa de cual de ellas es. Me parece que Eli dijo que de Alín no? Esta bien chida - Fabián

  • Que suerte la nuestra, habernos tirado a un par de chicas lindas, ricas y encima en casa de una de ellas, en su habitación - Marco

  • Y para presumir la obra completa, ahora que regresen le voy dar a la chinita por la concha. Tu agarras bien a Eli. Esa vieja es tan puta, que igual nos ayuda con su amiga - Fabián

  • Ya deja de llamarla chinita, y además, por que tanta terquedad con darle por ahí. Dale por atrás otra vez y ya. Además, creo que esto ya se acabo. No la vayas a regar - Marco

  • Yo quiero usar su vagina. No voy a desperdiciar esta oportunidad. Chance y cuando la tenga adentro hasta termina gustándole - dijo Fabián

  • Vamos a decirles que esto se acabó, vale Alín? - me dijo Eli y yo asentí

Después de asearnos y arreglarnos un poco, subimos a la habitación. Fabián seguía revisando mi cajón de la ropa interior. Marco miraba el jardín desde la pequeña terraza de mi cuarto. No se dieron cuenta que entrábamos

  • Genial, tienen piscina allá atrás - Marco

  • Crees que nos vulevan a invitar alguna vez a lo mismo

  • No se. Oye, te digo algo, aparte de todo este rollo, esta Elizabeth, no se, como que me late - Marco

  • No manches, a poco si. Pues yo podría estarles dando a ambas todo el día. Eli es bien caliente, y Alín me recuerda las pelis porno de japonesas. Cuantas cosas le haría … - Fabian

  • No me refiero a eso. Digo, esto fue genial y quisiera repetirlo, pero Elizabeth en verdad me gusta. Tu nada mas piensas en el sexo y ya. Eli es como muy decidida, muy audaz, buena onda, aparte de hermosa, divertida, no se, me late. A poco a ti no te gusta Alín. Es una chava bien linda. Ve su cuarto, lleno de peluches - Marco

  • Tierna y todo, pero bien zorra. Además no andaría con ella si no afloja. – dijo Fabián

En esos momentos Eli y yo decidimos entrar como si no hubiésemos oído nada. "Que onda chicos, pues esta fiesta se acabó. Ojalá se la hayan pasado bien como nosotras" dijo Eli. Nos dirigimos a la salida; Marco y Eli iban adelante, platicando no se que; Fabián y yo los seguíamos. El metía su mano bajo mi falda y sobaba mis nalgas descaradamente. Eso ya no me gustaba, después de haber oído sus comentarios, pero pensé que en unos minutos se iría y decidí aguantarlo. Sin embargo Fabián aún no daba por terminada la diversión ni pensaba darse por vencido. En cuanto Eli y Marco salieron el cuarto, me empujó adentro y cerró la puerta

  • Ey, que pasa allá adentro? - gritó Eli

  • Jaja, creo que Alín se quedó con ganas. Me empujó adentro, cerró la puerta y ahora está sobre mi - gritó Fabián desde adentro

  • Ni loca me trago ese cuento. Como si no conociera a Alín - dijo Eli a Marco, tal vez por que esperaba que éste estaría de acuerdo con su amigo, y la detendría mientras Fabián se aprovechaba de mi

  • Abre Fabián - gritó Marco tratando de abrir, cosa imposible

Fabián me había tirado sobre la cama y tomándome de las muñecas me llevó hasta la cabecera donde me volvió a amarrar. Después fue a mi tocador, obtuvo unas tijeras, sacó su pene del pantalón y acercándose a mi, me dijo

  • Chúpala bien, perrita, para que te entre fácil y no te duela. Y ni intentes morderme o salgo así, porque si me lastimas el pene, te lastimo la concha - dijo mostrándome las tijeras

Sin mas opción, se la chupe lo mejor que pude. Pensé que si iba a ser violada, al menos trataría de sentir el menor dolor posible

  • Bien, bien, ah, siii … eres una experta, una putita profesional. Debí imaginarlo. Para obtener tu concha debí ofrecerte dinero. Me hubieras dicho cuanto cobrabas desde el principio. Ummhh….

La sacó de mi boca, y con sus manos en mis tobillos, me abrió de piernas. Algunas lágrimas salieron de mis ojos; me sentí indefensa, desprotegida, a su voluntad; pensé que todo habría estado bien si desde el principio Eli no los hubiese invitado. Pero ahora, sin poder defenderme, sin poder siquiera gritar, iba a ser violada por este idiota. Colocó su pene en la entrada de mi vagina, retrocedió un poco, e intentó clavármelo de un solo golpe, pero en ese momento levanté mi cadera, y fue a incrustarse en mi ano. Me dolió bastante; apenas había clavado la mitad de su miembro, e intento salirse, pero lo rodee con las piernas y lo apreté contra mi. Me dolió mas cuando su pene entró por completo, hasta adentro, por la presión que hacía, pero decidí mantenerlo ahí lo mas que pudiera. Intentó abrir mis piernas con sus manos pero entonces comencé a moverme para hacerle perder el equilibrio y que no pudiera usar sus manos en tratar de liberarse, sin embargo, el mismo movimiento hacía que prácticamente me follara yo misma con su pene. Pensé que si lo hacía venirse, tardaría mas en recuperarse, así que con las piernas estuve moviéndolo a manera de que hiciera el amor contra su voluntad.

Finalmente se dejó caer en mi y mordió uno de mis pezones. Eso me dolió y el aprovechó para salirse de mis piernas.

  • Maldita zorra. Te voy a romper toda aunque no quieras. Date la vuelta y ponte de cuatro, te cogeré como la perra que eres

Yo no lo hice, y el me tomó de las caderas y me volteó violentamente; cerré los ojos y me resigné a ser penetrada. Levantó mi falda y jaló mi pantaleta (braga) hasta romperla. Entonces por la terraza entro corriendo Marco y derribó a Fabián, arrojándolo contra la pared. Eli llegó unos segundos después de Marco; Fabián se levantó y de momento encaró a Marco

  • Que onda, se va a poner a los m….., éntrele - dijo Marco apretando los puños

  • Idiota !!!! – le gritó Eli a Fabián mientras me desataba. Fabián aún dudaba, pero Marco era mas atlético, alto y fornido que el, así que decidió calmarse

  • Ya, perdón, me dejé llevar - le dijo Fabián a Marco

  • Pídeselo a ella - le contestó Marco refiriéndose a mi

  • Perdón Alín, no tengo excusa, ya no volverá a pasar - me dijo

Yo estaba muy molesta con él y ni caso le hice. Los acompañamos a la salida y se fueron. Aquella tarde por andar de locas, casi me violan, y, excepto por esa parte, debo admitir que lo demás fue muy excitante, pero de cualquier manera, lo pensaré bien antes de aceptar otra aventura así. Eli y yo seguimos siendo las mejores amigas. Ella volvió a verse con Marcos y para la fecha de publicación de este relato, ya casi llevan un año de novios. He tenido la oportunidad de conocerlo mejor, es un chico muy atractivo, divertido, responsable y buena onda; también lo considero un buen amigo. Dice que aún es amigo de Fabián, aunque a el, Eli y yo ya no lo hemos vuelto a ver.

FIN …byeeeee ^o^