Por amor
Dejó de ser un sueño, ella ya camina libre y feliz, todo por amor, lo que alguien sintió para dar vida a Lucrecia
Ya acostumbra a la calle a sus benditos codigos, mi fortuna giro hacia un lado positivo, al menos habia solucionado el tema economico y garantizaba la existencia de Lucrecia.
Habia de todos modos adquirido una experiencia que tome con seguridad y me dio resultados. Por un lado crecia como mujer e iba dandome cuenta que la vivencia sexual que tome solo a fuerza de creatividad le encantaba a los hombres y yo gozaba como la mas puta. Siempre pense en tener una buena cama sin prejuicios y resulto asi, para mi satisfacción.
Claro resulto que la satisfacción en la cama, la fuerza del placer que sentia, y la sensación de dar un verdadero climax al hombre, florecian en mi un sentido de libertad
en el sexo que jamas habia soñado. Si me sentia una verdadera puta con ellos sin pudores ni culpas, gozaba de esa sensación y cada vez era mas intensa.
Caminaba feliz donde fuera, se me dibujaba una sonrisa que parecia permanente, me observaban y esto me ponia mas contenta aun. Solo pensaba que mi cuerpo descargaba energia con el mas minimo roce de mis prendas y mi aguda imaginación que lo ayudaba a sentirse de los mas cachondo.
Lucrecia era ya dueña de lo que merecia desde hace tiempo, sintio por primera ves que
no habia forma, ni persona o familia que la hiciese volver atrás, el futuro era una pertenencia segura de ella, a pesar de los años transcurridos conservaba la frescura que
alimentaba su felicidad, nadie daba credito a su verdadera edad, ni siquiera era necesario mentir, no creian la real. Ella sentia que esos años le habian otorgado un credito extra, que era la confianza con que la miraban, y sobre todo escuchaban.
Siempre fue una persona inteligente y vivaz, pero siempre guardada celosamente. Ahora
Soltaba con alegria y sin soberbia su personalidad, a la que siempre acompañaba un gesto de verdadero afecto. Afecto que la salvo del desquicio y la locura, atrincherada tras estos, supo de su valor hacia delante, mas alla de las frustraciones y engaños que sufrio defendiendo su convicción.
Hoy solo la veo caminar, no existo mas alla de lo intangible y metafisico, por que D nunca se rindio, su llanto y angustia dieron vida, la vida de alguien que solo ahora le alcanza con maravillarse de si misma, y sobre todo no olvidando que su vida es un acto de amor.