Poliamantes 2

Sigue la vida de nuestra extraña oficina, pero pasamos de dos a tres miembros.

Poliamantes (II)

Dormimos de un tirón esa noche, desnudos y a gusto.

Al sonar el despertador ella estaba boca arriba, con las piernas abiertas, de su concha, salía una babilla y de su trasero un liquido indescriptible.

Me quedé mirándola, tenía un cuerpo muy bonito, no destacaba nada pero como ya dije, el conjunto era estupendo.

Abrió los ojos, me dijo que tirara el despertador, que quería seguir durmiendo, le dije que tenia 50 minutos para estar en la oficina, se dio la vuelta con un reniego.

Me hizo gracia la cosa, así que me levanté y fui a la ducha; después de asearme ella aun continuaba adormilada, le dí el tiempo, 35 minutos; ni se movió.

Bajé y prepare el desayuno, café con leche; entre el ruido de la cafetera, acerté a oír la ducha, estaba en marcha.

Diez minutos después, bajó envuelta en una toalla,

  • Oye, que tengo un problema. No tengo que ponerme.

Cierto, con la calentura no se había traído recambio, su ropa, estaba en el dormitorio arrugada y manchada con el jaleo de anoche; pensé un poco

  • Mira mientras pienso algo mas, ponte el terno del otro día, luego buscare algo de ropa de mi ex, que aun queda por ahí.

Se fue y en unos minutos, apareció con un pantalón corto y una camiseta, sin nada debajo.

Desayunamos en silencio

  • Pues con tu permiso debería ir a casa a cambiarme.

  • No, llegarías tarde al trabajo

  • Pero y los clientes –me cortó-

Estaba buena, nosotros tenemos una oficina técnica, a veces viene algún cliente, pero con preaviso o cita, por tanto no había tanto problema.

  • Como tenemos la agenda hoy?

Miró.

  • No esperamos a nadie.

Pero me daba corte que se fuera, por un momento imaginé que no volvía

  • ¿Cómo estas?

  • Me duele el cuerpo, sobre todo el culo.

Le puse la mano en el trasero

  • Aquí?

  • Cuantos culos crees que tengo?

  • Ja, ja

Se pegó a mi

  • Quieres mas guerra?

  • ¡Nooooo! Ya tuve bastante por ahí, tendré que dejar descansar ese agujero por lo menos un mes

Después de meter su ropa en la lavadora y ordenar la casa, estuvimos trabajando toda la mañana sin que faltaran miradas y sonrisas cómplices; y eso me ponía a cien, cerca del mediodía, ya tenia una "empinacion" de cien y me dolía la cosa; a ella le debía pasar lo mismo, ya que tenia la cara con un leve atisbo de rubor, intentaba adivinar su calentura mirando sus pezones que intentaban salir por la camiseta, así que en un momento que ella me preguntaba algo, me levanté, la agarre por los hombros y allí mismo debajo de la mesa de dibujo la penetré salvajemente. No duró mucho, pero ella se dejó hacer y se corrió prácticamente conmigo.

Lastima que no fumo, porque hubiese sido el momento ideal de fumar un cigarrillo.

Nos sentamos en el sillón y ella, con ganas de mas, volvió a hacerme una felacion lenta, lenta, lenta…vamos que me puso como un poste en unos minutos, y así, estando sentado, ella se subió encima y se penetró con premura, yo no hice nada, me limité a dejarla hacer.

Estaba cociéndole el gusto a ser pasivo.

En medio del barullo, ella se quedó rígida y tuvo una corrida como las anteriores, a resultas de la cual el sillón recibió una buena mancha.

Al comentarlo después, decidimos varias cosas, primera que se vendría a vivir conmigo y segundo que tendríamos que comprar otro colchón … y mandar el sillón al tapicero… y por supuesto comprarles a ambos fundas impermeables.

A partir de ese momento, empezamos a vivir como pareja, teníamos sexo a todas horas, no sexo explícito, sino del suave, excitante, un guiño, un toque, un lametón, un roce, un "ya te pillare" y eso durante la jornada laboral, en los descansos la cosa subía de tono y cogíamos tanto como lo permitía mi pobre cosilla, que jamás se había visto en una como esta.

A tanto llegó, que a petición-ruego-suplica mía, restringimos el horario, so pena de que todos los beneficios de la empresa, los dedicáramos a adquirir viagra.

A cambio, nos dotamos (ella se dotó), de una colección de juguetitos a cual mas curiosos, eso me permitía unos ratillos de descanso.

Y así fue pasando lo que ahora llamamos la primera época; los negocios marchaban bien, teníamos una cartera de clientes estable y fiel, lo cual hoy se ve como un lujo, y que nos permitía realizar los típicos caprichos materiales, coche, viajes, comidas, fiestas; eso si, sin ostentación alguna, pero vivíamos desahogados, formábamos un buen equipo.

En esa idílica situación estábamos, cuando conseguimos un contrato con una multinacional, que implicaba nuevas disciplinas técnicas y nos vimos obligados a buscar ayuda en un/a aparejador, pues el proyecto tenia flecos que se salían de nuestras atribuciones.

Nos pusimos a seleccionar gente y por nuestro despacho, pasó una fauna (en el buen sentido, claro), de lo mas variopinto.

Después de mucho cavilar, contratamos a un chico algo mas joven que yo, llamado Sergio, el cual era agradable de presencia, un buen cuerpo, con sus horas de gimnasio, no muy alto pero de buenas proporciones.

Como era la primera vez que acogíamos a alguien en plan profesional (Chari empezó de becaria), pues pusimos el máximo cuidado en ello; le hicimos dos entrevistas y en la segunda le dijimos que era el elegido, dicho lo cual nos fuimos a tomar unas cervezas, porque esa fue la tercera, ya que opino que lo que mucha gente no es capaz de decir o se lo calla en un despacho, con una copa en la mano, lo dice y además con naturalidad; y así fue en efecto, Sergió cantó estupendamente, la corteza se la rompimos; ahí Chari jugó un papel especial, pero no fue físicamente, sino humanamente, porque entre otras cosas, el nos confesó que era gay; bueno, nosotros lo queríamos para trabajar, no para follar, y si era bueno en eso, lo otro no tenia importancia.

El lunes siguiente a esto que cuento, el flamante Técnico, tomó posesión de su "despacho", una mesa en un salón compartido por dos personas mas.

Y desde el primer momento, demostró que la elección fue buena, trabajador, emprendedor, dinámico y de un humor excelente.

Lo único, que a Chari y a mi, se nos cortó el sexo laboral; ya no podíamos hacer nada, ni tirarnos los tejos en medio del curro.

Por lo tanto empezamos el escarceo clandestino, cuando el se movía del sitio, nosotros aprovechábamos para rozarnos, besarnos, tocarnos o a lo que diera tiempo.

Es mas, recuerdo una vez que estando el en el servicio, Chari estaba en la fotocopiadora y me acerque por detrás, y sin previo aviso, le levante la falda, y apartándole el tanga, se la clave hasta el fondo, ella simplemente se dejó hacer, y en un par de minutos, cuando la cosa estaba a punto, sonó la cisternilla y tuvimos que abandonarlo; pensaba que tendría un desahogo y terminé (terminamos) con una frustración.

Como Sergio no era tonto, pues (por lo menos yo, y lo compartí con ella), de tanto en tanto al vernos intercambiar miradas, el se sonreía adivinando por donde marchaba el asunto, y yo creo que mas de una vez, fue al servicio solo para darnos un rato (eso lo se porque lo confeso después).

Pasados unos meses, el equipo funcionaba a plena satisfacción, Sergio salio de viaje a ver el famoso proyecto, con lo que nosotros aprovechamos para convertir la oficina en una sala de folleteo, en cuanto oímos el coche marchar, ¡zas!, en pelota picada y al lío.

Lo hicimos como salvajes encima de la mesa de Chari, fue sencillo, se bajó el vestido y las bragas, yo deje caer los pantalones , la abracé, le subí encima de su mesa (con el resultado de desparramar un montón de papeles) y allí mismo la penetre salvajemente, fue algo conejil, tres empujones y corrida fenomenal; con lo que ella se quedo a cero, pero bajándose de la mesa, me hizo una mamada sobresaliente, con el resultado de una erección fulminante.

Se apoyó y por detrás la penetré fuerte, pero a un ritmo pausado, porque ahora le tocaba a ella; al mismo tiempo, le tocaba los pechos, bueno, se los amasaba, le comía el cuello… en fin menos los pies, usaba todo lo demás, con el resultado lógico de correrse varias veces, antes de que a mi vez lo hiciera , dejándola pringosa y jadeante… al igual que yo, claro.

Poco antes de comer, volvió Sergio y ya no quedaban restos de la "batalla", lo habíamos recogido todo; eso si, el trabajo estaba ligeramente retrasado sobre la programación, cosa que achacamos a un corte de luz (le apagamos el PC para apoyar la mentirijillas).

La cosa siguió así y llegada la primavera, en un día de especial calorcillo, cuando el agua de la piscina estaba en su punto, pues propuse darnos un baño y comer en casa, a lo que Sergio contestó diciendo que mejor pedir comida preparada y el baño seria mas placentero… pero que tendría que prestarle un bañador, pues el evidentemente no lo tenia en la oficina.

Sin problemas, un rato después metidos en el agua, relajados y tranquilos y recibida la comida, sin prisas estábamos de broma en el agua, cuando Sergio, al ir a la cocina a por cervezas, no se le ocurrió otra cosa que hacer "la bomba", con tan buen tino, que aparte vaciar media piscina, el bañador se le fue, quedó flotando entre dos aguas.

El hombre tuvo el natural corte, pero sin previo acuerdo lo resolvimos Chari y yo, empelotándonos también. La cosa quedó en un momento cómico, pero observé que a ella se le iban los ojos detrás del "rabo" del colega, la verdad es que así morcillota, me sacaba un par de centímetros de largo y se veía un poco mas gruesa, pero eso me lo dijo ella, yo hice una breve comparación y me dedique a otra cosa (soy hetero)..

Terminamos el baño, recuperamos los bañadores, comimos y estando en la terraza, al agradable sol, propuse terminar la jornada y darnos una tarde de asueto, cuestión que quedó aprobada por unanimidad, así que después del cafelito, vino la siesta. Evidentemente, Chari y yo al dormitorio y Sergio a otra pieza.

Y vino lo mejor; en cuanto cerré la puerta, Chari se me echó encima, y me dio un beso en el cual, la lengua casi me llega al estómago; estaba desatada.

Apenas tuve tiempo de quitarle el bikini y empezar a sobarle las tetas y el culo, ella mientras tanto seguía a lo suyo.-he de decir, que las personas estamos mal hechas, deberíamos tener un sitio independiente de la boca y la nariz para respirar, así los besos podrían se eternos- comiéndome en un solo beso, largo, largo, largo….

Empujando empujando, la arrastre hacia la cama y allí, se dejó caer, conmigo encima, con lo cual ella termino espatarratada y yo convenientemente situado, la penetré sin miramientos, como una compensación a las horas "laborales" que ya no podíamos hacer nada.

La verdad es que tarde poco en correrme, pero en ese poco ella lo hizo dos veces.

Después mas relajados, en la duermevela que siguió, me confesó que había estado pensando en el rabo de Sergio, que a mi no me hacia de menos, pero –joder!- que aparato gastaba el tio y como ella mismo razonó, que pena de "carne desperdiciada".

Nos amodorramos, pero al cabo de un tiempo indefinido, la vegija (o las cervezas), me llamaron y me levanté para ir al servicio, y mientras estaba orinando, noté una presencia tras mío, era Sergió, que sin previo aviso, me agarró por detrás y me metió mano.

O sea, yo estaba en posición de orinar, con la churrica (morcilloncilla ella) en la mano y de pronto noto un contacto tras mío, en mi trasero mas claramente y unas manos que me abarcan y me cogen la cosa.

En un principio, pensé que era Chari, pero no, esas manos eran distintas, así que por eliminación… ¡¡¡era Sergio!!!

Me quedé "petrificao de piedra", como estaba me revolví y sin dejar la posición de "orinar", me volví, el sin cortarse un pelo, miro, se agachó y me la chupó.

Y hete aquí, que yo heterosexual de toda la vida (y a mucha honra), me encontré que tenia a un tío (¡¡¡un tío!!!), enganchado a mi pilila, haciéndome una felación,.

No supe reaccionar, me quede allí y mi asunto creciendo en la boca de un tío, cosa que de haberlo supuesto, habría negado siempre, pero no; la cosa subía y a mi me faltaban un coño y unas tetas para justificarlo.

No fui capaz de hacer nada, y ahora pensandolo en frio, no se como aguanté.

Pero el hacia su trabajo y siento mucho confesarlo, sin envidia alguna hacia Chari o cualquier otra mujer que me había hecho una mamada.

La cosa duró un poco mas que con una mujer, pero al fin empecé a notar que me venia, pero no dije nada, me dejé llevar (o traer) y me corrí en su boca; se lo tragó todo.

Al alzar la vista en un espasmo de placer, en la puerta estaba Chari, con cara de póker, y los ojos vidriosos.

No dijo nada, se acercó, le dio un cachete a Sergio y me besó.

  • En la vida pensé que vería esto.

  • Yo, yo, yo

No pude decir otra cosa

  • Es que, veras, no sé.. – dijo Sergio-

-Ya, ya; vosotros me estabais haciendo la cama, yo caliente y la juerga en el aseo; pues en la cama se hace mejor y yo puedo disfrutar mas

Flipaba en colores, mi pareja-amante, en esa postura.

Sergio se levantó rojo de vergüenza (del esfuerzo, diría yo), no dijo nada, fue Chari la que añadió.

  • Veniros al dormitorio y allí "seguimos"

En aquel momento no se que me dio mas miedo, si el que me pillaran en un acto homosexual o el "seguimos" ese.

Y efectivamente, la cosa siguió en la cama, ella se puso en la postura del misionero y amablemente, Sergio hizo de mamporrero, y mientras yo la penetraba de nuevo, notaba unas manos que me masajeaban-acariciaban-mimaban, pero las mismas manos que la masajeaban-acariciaban-mimaban a ella.

Y Sergio, cuando podía prescindir de alguna mano, se masturbaba sin piedad… resultado, que por alguna oscura y sicológica razón, me corrí como un salvaje y Chari tres o cuatro veces mas…y Sergio se corrió..encima mío, me dejó los riñones perdidos de semen.

Fue una locura, dos heteros perdidos, conducidos a la cama por un homo convicto y confeso.

Pero la cosa resultó de lo mas, de lo mas.

Una vez relajados, Sergio empezó a pedir disculpas ( a estas horas), que llevaba un montón de tiempo viéndonos, que entendía nuestro juego, que nos miró (espió) desde el servicio, que el día del "apagón" el se fue mas tarde y nos vio cogiendo… que en la piscina ya no pudo aguantar mas y que si allí no se tiró encima mía fue casualidad…. Y que después de oírnos en la cama (discretos que somos), ya no pudo mas y al riesgo de que lo mandáramos a la mierda, pues me acometió sin mas…en fin, ver a una persona razonable, justificándose de mil maneras, cuando a resultas de su intrusión, el sexo que tuvimos fue genial, pues no merecía la pena ver tamaña humillación, así que….

  • No te preocupes, eres homosexual y se te ha ido el punto, pero lo has arreglado aquí en la cama, yo no tengo que decir nada, salvo ..

  • Yo tampoco –añadió Chari- gracias a ti lo he pasado en grande, aunque reconozco que verte con la cosa en su boca en principio me sentó raro..

Así quedó todo, a partir de aquel momento, el sexo fue comunal, siempre que Sergio, veía algo de tensión sexual, colaboraba para que estallara la cosa, después a lo único que aspiraba era a realizarme una mamada, a Chari no la tocó hasta bastante tiempo después y yo en la gloria, jamás había pensado que un hombre podría mamarmela tan bien como una mujer.

Y así empezó una nueva fase en nuestra relación, se vino a vivir a mi (nuestra), casa-oficina y continuamos la vida familiar-laboral-sexual colectiva.

He de decir que en un momento en el que estábamos los tres de cama, por un impulso tonto de Chari, que se había acostumbrado a realizarnos felaciones a los dos (pobrecillo, Sergio también tenia derecho), me vi obligado a realizarle una a el, yo la verdad, no saqué nada en claro, salvo la cara llena de semen, pero se que a Sergió le pareció un mundo

Y así prosiguió nuestra vida, de la planta alta (los dormitorios), a la baja (la oficina) y en ambos sitios sexo al gusto.

He de decir, que otro día, estando en el barullo o trío que montábamos, conseguí (era una fantasía) que Sergio se follara a Chari y el aceptó con la condición de que le enculara, cosa que me pareció razonable y al fin placentero, descubrí que por el agujero de atrás, tanto hombres como mujeres, se sienten igual.

Y así comenzamos a vivir, trabajo intenso de día, con las paradas de besos y roces entre todos (sigo sintiendo raro que un tío me bese), con apasionados tríos en los descansos o ratos libres, en los cuales, Sergio me hace felaciones, o yo me como el coño de Chari, o me la follo, mientras el mira y se masturba o usa los juguetitos de Chari… o momentos mas intensos en los que el accede (la verdad, es que le cuesta) a follarse a Chari y yo a el.

La verdad es que una de las sensaciones mas extrañas es estar penetrando a una chica y haya un tío que mientras y durante, te esta chupando los huevos; o cuando el está follandose a tu (nuestra?) chica y tu le sodomizas a el.

O cuando tu le haces un cunilingus a ella y el te la esta mamando a ti.. en fin no se vosotros lectores, pero a mi las permutaciones y combinaciones en la facultad me llevaron al martirio y ahora se trata de eso, pero menos que el me haya dado por culo, todas las demás están vistas

Jamás habría pensado que poner un homosexual en mi vida (en nuestra vida), podría alegrarla de semejante manera.

De manera que (visto desde hoy), formamos una familia peculiar, una pareja de hecho (Chari y yo) y un "adoptado" que además era conocido por todos su tendencia gay , al cual reciclamos a (por lo menos) bisexual, pero nadie podría haberlo dicho.