Placeres de la vida 3. Luciendo pantalones sexys

Me atrevo a salir vestido con unos pantalones sexys y acabo chupando mas de una polla con Sandra. Un poco bisexual y un poco travesti y creo que un poco gay

Placeres de la vida 3. Luciendo pantalones sexys

Acabé aceptando que Sandra me vistiera como ella quisiera y cuando salimos de la habitación del hotel yo llevaba una camiseta demasiado ajustada y lo que es peor unos pantalones de chica con un tiro tan bajo que se me veía el principio de mi culito o mejor dicho las braguitas sexys que me había obligado a llevar.

Entramos en el ascensor y bajaba un chico jovencito que se me quedó mirando un poco extrañado. Creo que al principio cuando me vio de espaldas se pensó que yo era una chica, igual es verdad que tengo un culito bonito jeje.

Cuando llegamos a la planta baja Sandra quiso acercarse por el gimnasio del hotel para verlo porque siempre procura hacer gimnasio  y mantenerse en forma.

  • Pero Sandra, ahora te vas a poner a hacer ejercicios? - le dije yo.

-No amor, pero quiero saber como es y que hay que hacer para usarlo para que podamos bajar tú y yo mañana.

En la recepción del gimnasio nos atendió una chica vestida muy sexy con ropa de gimnasio y con unas tetas grandes y apretadas por un top. Noté que Sandra se la comió con la mirada y me sentí un poco celoso.

Entiendo que era dificil no fijarse en esas tetas tan preciosas y apretadas en el top deportivo, pero se supone que Sandra y yo ibamos juntos. Sandra la dijo que queríamos preguntar por el funcionamiento del gimnasio para bajar mañana.

La chica del gimnasio notó la mirada de Sandra y a la vez me miró a mi de arriba abajo. Yo me sentí un poco avergonzado. Con una sonrisa dijo que sabia los ejercicios que necesitábamos.

-En este gimnasio atendemos personalmente a cada cliente. Mañana cuando vengáis yo me encargaré personalmente de tus ejercicios - dijo refiríendose a Sandra - y para ti creo que Carlos se debería encargar presonalmente.

Yo me quedé muy intrigado porque según decía el nombre de Carlos se le puso una sonrisa muy pícara en la cara.

-No hace falta-dije yo-creo que podré hacer gimnasia solo.

-Pues yo creo que sí que te hace falta -dijo la chica del gimnasio- Carlos Alexandro es un monitor cubano que tenemos en el gimnasio y que garantiza unos buenos resultados. Creo que a ti te vendría fenomenal y te enseñaría “ejercicios nuevos” que creo que te gustarían - dijo guiñándome un ojo.-  ahora lo llamo.

-Bueno, siempre viene bien hacer ejercicio - dije

Cuando se acercó Carlos me quedé helado, era un cubano alto, muy musculoso y llevaba una camiseta y unos pantalones de licra superajustados que no solo se le marcaba el paquete sino que se le notaba la forma de la polla. Una pasada.

Aunque traté de disimular, no pude evitar mirarle el paquete. Y Sandra, que estaba encantada con la situación empezó a hacer de las suyas.

-Mira Jose, creo que este monitor te va a venir muy bien para los cambios que necesitas- dijo Sandra- intuyo que te enseñará ejercicios corporales que te van a gustar, jeje.

Carlos me miró de arriba abajo y sonrió, se ve que le llamó la atención que llevara unos pantalones tan femeninos. Y me dijo que pasara mañana por el gimnasio que iba a ser mi monitor personal y que yo mejoraría mi cuerpo y así le gustaría más a mi novia, señalando a Sandra.

Inmediatamente Sandra respondió- no, que va, jeje, Jose es sólo mi amigo, no es mi novio. En realidad Jose está descubriendo que es gay y quiere feminizar su cuerpo.

Yo me quedé helado, cómo podía decir eso delante de otras personas?. Traté de disimular riendo y diciendo que Sandra era una bromista, pero en el fondo me estaba muriendo de verguenza. Y más cuando al salir del gimnasio y despedirnos Sandra le dijo a Carlos, que te estoy viendo, que te has quedado mirando el culito sexy de Jose jejej. Nos vemos mañana.

Salimos del gimnasio y nos fuimos al bar a tomar algo, yo necesitaba un trago porque estaba muy sofocado.

-Sandra, pero porqué dices eso? Yo no soy gay, y estás diciendo a todo el mundo que soy un mariquita.

-Tranquilo Jose, si no eres gay no tienes porque preocuparte, es sólo un juego. Además lo he hecho porque quería ver la reacción de Carlos, te has fijado en su paquete?.

-Un poco, se le notaba todo, verdad?

-Como un poco?, cariño se le marcaba toda la polla en la malla de licra, además seguro que no llevaba ropa interior porque se le notaba todo el capullo, y era enorme. A que te gustaba Jose?

-Bueno, apenas me he fijado- dije yo.

-No seas mentiroso, sé que te gusaria verla, es como las pollas de las pelis porno pero en real, a que sí?. Confiesalo Jose, no pasa nada.

-Bueno, la verdad es que sí que me ha llamado la atención, era muy grande y se le notaba toda la cabeza. Pero Sandra, no tienes que decir a la gente que soy gay. No lo soy.

-Ya lo sé amor, pero aunque no seas gay, tienes que poder tocar una polla. A que te ha gustado tocar la polla de Juan esta mañana?. Confiesalo, se que has disfrutado muchisimo. Además yo estoy excitadísima al ver como mi jose que tan bien me folla se convierte por un momento en una putita jeje, porque eso es lo que pareces con esos pantalones jeje.

Así hablando llegamos hasta el bar, ya era de noche y había mucha gente, todos arreglados intentando ligar. Y casualmente también nos encontramos a Juan.

Sandra se puso a llamarlo.

-Quieta Sandra, no lo llames, que no quiero que me vea vestido así.

-no pasa nada Jose, si os habéis visto desnudos en la playa, que problema hay.

Juan se acercó y nos saludó- hola pareja, cómo estáis?. Ya veo que os habéis puesto muy guapas jeje.

-Hola Juan - saludó Sandra- sí, ya veo que te has dado cuenta que somos pareja pero de amigas jeje.

-Claro que sí, vaya unos pantaloncitos más monos que llevais las dos, sobre todo tú cielo- dijo mientras me daba una palmadita en mi culo delante de todo el mundo.

-Jeje, me alegro de que te guste Juan -dijo Sandra- José se los ha puesto pensando en ti, incluso se ha puesto ropa interior sexy. Y diciendo esto me levantó la camiseta y como el pantalón era tan bajo se me vió el culotte con encajes que llevaba.

-Guau, que bonitos, me encanta-dijo juan- que bien te queda Jose, o Yosi o Yoli, que me sale más llamarte asíjeje

-No seas capullo Juan, que me llamo Jose, - le dije yo.

-Cielo, no pasa nada porque te llame Yoli, así seguro que el se pone más cachondo y se le vuelve a poner la polla dura como esta mañana en la playa, a que sí Juan?.

-Sí, en cuanto te he visto la ropa interior de encaje me he empalmado Yoli, - dijo Juan.

-Jeje, de verdad? Dijo Sandra- eso hay que comprobarlo y le rozó el paquete. - es verdad, mira amor, Juan la tiene dura otra vez. En la habitación me has confesado que te gustaría volver a tocarle la polla a Juan como esta mañana. No te cortes.

Y diciendo esto Sandra me volvió a agarrar mi mano y a ponerla en el paquete de Juan. Uff, noté su polla ya dura y eso me excitó. Pensar que por mi se le había puesto dura tan rápido me excitaba y me hacía sentir bien.

-mmm me encantaYoli- dijo Juan con voz de placer - eres una delicia acariciando una polla. Eres tan dulce y femenina, has nacido para dar placer a pollas duras y calientes.

Y mientras decía esto Juan yo me estaba poniendo tan excitado que no sabía lo que hacía. No sé porqué pero me salió espontaneamente con una vocecita dulce y femenina - de verdad cielo te gusta que te toque tu enorme polla?, me encanta darte placer amor, es una delicia, me la comería con ganas.

Cuando me di cuenta Sandra y Juan me estaban mirando con los ojos como platos y una sonrisa enorme.

-Ves amor- dijo Sandra- ya sabía yo que afloraría tu verdadera personalidad de putita. Claro que te la vas a comer.Sabemos qe lo estás deseando, y Juan no será tan malo de impedirtelo, al contrario, le vamos a convencer para que te deje probar una polla en tu boca, verdad Juan?

-Pero Sandra, yo lo he dicho sin pensar - dije yo con la boca pequeña pero sin dejar de tocar la caliente y dura polla de Juan por encima del pantalón.

-Claro amor, y no tienes que pensar, ahora eres Yoli y vas a continuar disfrutando de una polla como esta mañana- dijo Sandra. -

-Sí Yoli, por favor, estoy cachondo perdido - dijo Juan- me ha excitado muchisimo verte con ese pantalon y esa ropa interior. Como sigamos así creo que me voy a correr aquí mismo en medio del bar y encima de mis pantalones.

  • Porque vas a esperar más?, a que no os atrevéis a ir al baño? -dijo Sandra.

-No, yo, casi mejor que poco a poco si nos vamos todos a una habitación-dije yo.

-Anda no seas cobarde- dijo Sandra- disfruta el momento, lo estás deseando, vete al baño y si regresas con la camiseta manchada no me va a importar aunque sea mia jiji, te la regalo Yoli

Entre Sandra y Juan casi me llevan empujando al baño de chicos y una vez dentro Juan me metió en un baño, cerró y sin pensarlo dos veces se bajó el pantalón.

-Mira Yoli, mira como estoy de cachondo, anda tocamela un poco-me dijo Juan.

A mi lo de hablarme en femenino me estaba empezando a poner cachondo y se la agarré con una mano. Tenia la mirada fija en esa polla, estaba dura, tiesa caliente. Totalmente depilada y ya empezaban a salir gotitas de la punta que mojaban mis dedos.

Juan empezó a empujar suavemente mi cabeza, despacio, con dulzura, hablándome suavemente como si yo fuera una niñita.

-Muy bien Yoli, sin miedo, acercate a mi polla que te está deseando. Abre esos labios tan dulces y besala.

Yo no era consciente de lo que hacía, me iba acercando y cada vez la veía más cerca de mi boca y mis labios se abrieron y empecé a salibar. Estaba deseando probarla.

Finalmente besé la punta y abriendo la boca me la fui metiendo poco a poco presionando con los labios para que Juan notara como entraba toda en mi boca.

-ufff siii, que putita eres Yoli, me encantas.Metetela toda, que boca más caliente tienes. Te gusta?

Yo no podía hablar, tenía toda la polla dentro de la boca y no quería sacarla. La notaba palpitar en mi boca y era una delicia que no me podía imaginar. Notaba como se ponía cada vez más dura, y como salían unas gotas deliciosas.

A veces me la sacaba un segundo para mirarla, agarrarla con las dos manos y volvermela a meter chupandola con avidez. Me sentía toda una putita pero me gustaba.

A la vez mi polla estaba dura comprimida contra las braguitas y el pantalón ajustadísimo me dolía pero me gustaba, y las braguitas me apretaban el culito haciendome sentirlo al máximo.

Juan se había vuelto loco, me apretaba la cabeza con las dos manos para que me la tragara toda y a veces con una mano me tocaba mis pechos, como buscando unas tetas que magrear. Estaba a mil y no tardó mucho en correrse como loco.

Noté como lanzó el primer chorro que me entró directamente en la garganta con fuerza. Estaba ardiendo y era muy abundante. Instintivamente separé la cara saliendo la polla y lanzando el resto de la leche contra mi cara poniéndome perdido y manchando también la camiseta ajustada que llevaba.

Ni siquiera fui consciente de los gritos que pegó Juan al correrse, era imposible que no se enteraran si había alguien en el baño.

Cuando paró de correrse tenía la polla dura, con gotitas de leche chorreando y la punta pegada a mis labios. Los volví a abrir y chupé durante un rato más. Era una delicia, mejor de lo que me había imaginado cuando Sandra me metía el consolador en la boca y me decía que lo chupara imaginando que era una polla, esto era mucho más delicioso.

Me levanté y estabamos pegado dentro del baño individual y Juan me dijo,- eres una maricona deliciosa, solo te falta tener unas tetitas para poner a mil a todos los tios que encuentres. Mmm

Y mientras decía eso me tocaba por encima de la camiseta como si yo tuviera unas tetas. Incluso extendió más la mancha de leche que se me había quedado en la camiseta tras su orgasmo.

Yo estaba tan cachondo que me dolia la polla dentro del mini pantalon, Juan lo notó y me dijo que me desabrochara, y que me masturbara que tenía que liberar a mi polla. Rápidamente me bajé el pantalón y las braguitas y me empecé a masturbar mientras Juan me tocaba como si tuviera tetas. Me tocaba las tetas y el culo como metiendo mano a una putita y no tardé mucho en correrme como loco, llenando toda mi mano de leche y gimiendo como una perra.

Con los nervios y la excitación me subí las bragas y el pantalón sin limpiarme, llevaba toda mi polla llena de mi leche y la cara llena de la corrida de Juan.

Cuando salimos Sandra nos estaba esperando extasiada. -contadmelo, contádmelo todo- decía.

Yo estaba callado, sin creerme lo que había pasado. Me había comido una polla y había disfrutado muchísimo.

Juan se lo empezó a contar a Sandra que disfrutaba como si lo viviera. -mmm me encanta decubrir que yo tenía razón. José es toda una putita, sabía que iba a disfrutar con una buena polla. Más que José tendré que hacer caso a Juan y llamarte Yoli jeje.

-has visto lo bueno que es ponerse unos pantalones tan sexys?-me decia Sandra- cuanto más sexy más deseos tendrán los chicos de darte sus pollas, y tú deseas jugar con una polla, verdad?

-Sandra, es solo un juego, yo no soy gay- le decía yo-

-Ya lo sé que no lo eres amor, pero te gusta hacer lo que yo te digo verdad?

-si, eso si cielo. Me excita hacer lo que me dices.

  • y te excita comer una buena polla, a que sí?- me preguntaba Sandra sabiendo que se me iluminaban los ojos recordando lo bien que sabía la polla de Juan que tuve dentro de mi boca hacía solo dos minutos.

Juan se fue y Sandra y yo nos quedamos tomando otra copa. Yo ya estaba desinhibida. Hasta me estaba sintiendo cómodo con estos pantalones que me marcaban todo, y esta camiseta super ajustada.

-Vamos a bailar Yoli - me dijo Sandra- y agarrándome del brazo me sacó al centro de la pista.

Nos pusimos a bailar y entre el calentón que tenía y el alcohol que había bebido de repente me puse a bailar sexy como Sandra, y a mover el culito como ella.

Los chicos se nos acercaban por todos lados, y de repente me di cuenta de que algunos se pegaban a mi, no sé si no se daban cuenta de que yo era un chico, pero me tocaban el culo con disimulo.

Todos los chicos se acercaban sobre todo a Sandra que estaba imponente.

Al finalizar la noche ya quedaba poca gente y a mi se me había pegado un hombre mayor que bailaba a mi lado y me sonreía. Yo no sabía que decirle, pero si podía ser mi padre, y encima era un hombre mayor, aunque se conservaba bien y con ropa muy moderna.

Sandra se me acercó al oido y me dijo - jeje Yoli preciosa, has ligado.

-qué dices Sandra, si podía ser mi padre. Es un viejo.

-mmm y eso no te da morbo?. Pensar que estás poniendo cachondo a un viejo.

-no se, es extraño, me ha tocado varias veces el culo y un par de veces bailando me ha abrazado por detrás y he notado todo su paquete en mi culo. Yo no sé si se ha dado cuenta de que soy un tio.

-es que no eres un tio, amor- me dijo Sandra- sonriendo al viejo que seguía cerca de nosotras- esta noche eres una chica, no te has dado cuenta de como movias el culito respingón con esos pantalones?

-Pero ese viejo podría ser mi padre- dije yo a Sandra con cara de asustado.

-y qué amor?, acaso no tiene polla?, acaso no te desea?, dejate querer, disfruta. No seas mala y ponle cachondo. Me encantaría ver como pones cachondo y das esa alegría al pobre viejo- me dijo Sandra con cara de viciosa- sería genial amor, sería la prueba de que tienes un lado muy putón jeje.- Y mientras decía eso Sandra hizo un gesto con el dedo al viejo para que se acercara, y cuando estuvo a nuestro lado de repente Sandra soltó - te gusta el culito de mi amiga verdad?, tocaselo que si la pones cachonda igual la mando hacerte una paja, te gustaría?.

El viejo se quedó alucinado. Con los ojos abiertos, pero no perdió el tiempo y rápidamente se pegó a mi culo y empezó a masajearlo. Frotaba su paquete contra mi culo sin ningún disimulo.

Sandra se me acercó y me dijo al oido - me encanta, fijate lo cachondo que le has puesto, me estoy imaginando que te está violando y me estoy poniendo a mil. A que te gustaría que te follara?, mmm sería genial que fueras gay porque estarías todo el dia follando con salidos como este verdad amor?

Yo me dejaba magrear por el viejo que ya me estaba metiendo mano por dentro del pantalón y sobando mi culito. No pude más y entre las palabras de Sandra y el toqueteo del viejo me animé y puse mi mano en su paquete. Estaba durisima, parecía increible lo dura que estaba, y encima el viejo tenía una polla bastante grande.

El viejo ya me tocaba descaradamente y estaba intentando meter un dedo por mi culo, menos mal que el pantalón me estaba superajustado que sino lo hubiera metido entero. Estabamos dando un espectáculo así que Sandra con todo el descaro nos dijo a los dos- porqué no os vais al baño y allí os desahogais?, si lo estáis deseando.

-No, yo no - dije timidamente- no le conozco de nada.

-No tienes que conocerle, hoy eres un maricón, dejate llevar y disfruta.

-Pero yo no soy gay- dije yo

-Da igual si lo eres o no, vete al baño y hazle una paja que lo está deseando. Me pongo super cachonda al imaginarte chupando una polla

En voz alta Sandra le dijo al viejo - guapetón que mi amiga está deseando ver tu polla, porqué no te la llevas al baño que ahora hay poca gente?.

La propia Sandra me empujaba para ir hacia el baño y el viejo que no daba crédito no paraba de tocarme. Entramos corriendo al baño y Sandra entró con nosotros y cerró la puerta.

-Yo esto no me lo pierdo, enseñanos la polla- le dijo Sandra al viejo.

El viejo se bajó los pantalones y sacó una polla dura de gran tamaño, menuda sorpresa. Yo estaba cachondísimo, me di cuenta de que me apetecía chupar esa polla y me puse a tocarla y acariciarla sin perder tiempo mientras Sandra me quitaba los pantalones.

El viejo cuando me vio las braguitas que llevaba se puso más cachondo todavía y empezó a tocarme el culo, me dio la vuelta y me bajó las braguitas. Estaba como loco con mi culo y no pudo evitar presionar su polla dura contra mi culo. Me empujó hasta que yo me quedé apoyado en un lavabo con mi culo en pompa y las bragas a medio bajar y empezó a presionar su polla contra mi culo.

Cuando noté su polla dura resbalar por mi entre pierna rozando mis huevos hasta que salió por alante pegada a mi polla que también estaba dura fue una sensación de locura.Yo empezé a pajear las dos pollas juntas tratando de agarrar con mi mano su polla y la mía pegadas mientras el movía las caderas como si me estuviera follando.

A veces se separaba e intentaba meter su polla en mi culito, presionaba fuerte y yo notaba su capullo en mi culo intentando entrar con fuerza, pero resbalaba y volvía a pasar por abajo hasta que el viejo se pegaba a mi culo y su polla se volvía a poner pegada a la mia.

Sandra disfrutaba como loca viendo como el viejo casi me violaba intentando follar mi culito que nunca había conocido una polla.

-No, por el culo no que nunca lo he hecho, me da miedo- decía yo.

-Amor si lo estás deseando-decía Sandra- una polla dentro de tu culo te hará sentir de verdad una mujer.

-Pero no, no, este hombre es muy brusco- yo me estaba asustando, y se me escapaban grititos entre miedo y gemidos muy maricones - ay ay, no no- decía yo gimiendo.

Eso le ponía más cachondo al viejo que acabó corriendose como loco manchando mi culo y mis huevos de su leche. Entre gritos echó varios chorros que noté calientes y abundantes, parecía que le iba a dar un infarto y en ese momento Sandra, que estaba gozando como nunca, me agarró la polla y me la masturbó hasta que me corrí y la llené la mano de mi leche.

-Siiii que bien, te has corrido con un macho llenandote el culo de leche, a que te ha gustado putita?- decía sandra mientras me ponía su mano llena de leche en mi boca para que chupara mi propio semen.

El viejo se vistió y se fue sin decir nada y nosotras nos quedamos en el baño arreglándonos. Sandra me dijo que no me limpiara la leche de mi culo que estaba calentita y me daría mucho placer, que aunque la manchara las bragas y el pantalón que no le importaba porque disfrutaba viendo que yo iba por la calle con el culo pringado de leche con una mancha que se notaba en todo el pantalón.

Nos fuimos a la habitación del hotel a descansar, Sandra disfrutando como nunca de lo puta que me estaba convirtiendo y yo sin entender que me estaba pasando pero gozando también como una perra.

en cuanto pueda seguiré con el relato. Y estaré encantado de recibir sugerencias y comentarios si les ha gustado. un beso

dulcex@gmx.es