Placer en el exterior

Una historia con un Noruego que le saca el aliento a cualquiera.

Hola a todos ¿cómo están? Yo bien. Bueno, hoy quiero compartir con ustedes una experiencia placentera de la que nunca me voy a olvidar.

Espero que les guste.

Todo empezó hace 4 años cuando tenía 18 años y tuve la maravillosa oportunidad de conocer Europa, donde estuve por 1 mes y medio. Entonces en Noviembre del 98 salí de Argentina y me dirigí en un vuelo a Dinamarca, donde estuve 15 días con un grupo también de Descendientes de Daneses, a los que anotándose en el club danés argentino les salé la oportunidad de ir con un cierto descuento por 15 días y es opcional quedarse 1 mes más, pero por ese mes no está cubierto el alojamiento ni el transporte si queres salir de Dinamarca; yo tomé la opción de quedarme un mes más y me armé un itinerario para poder conocer otros países. Estuve en España con familia que tengo allá, en Inglaterra, Francia, Italia, Alemania, Suecia y unos 3 días en Noruega que fue donde ocurrió lo mejor.

Me bajé del avión en Oslo para aprovechar 3 días antes de volver a Copenhague e irme a casa, me hospedé en un albergue que parece que no tenía mucha concurrencia ya que no éramos muchos. Había pasado ya 1 día desde mi llegada cuando estaba en un famoso shopping de la ciudad y estaba medio perdido entonces decidí pedir ayuda. La primera persona era un chico de cómo 15 años, pero no hablaba inglés así que fui con el segundo. Había un tipo dado vuelta mirando una vidriera cuando lo toco y le pido ayuda, de repente se da vuelta un hermoso rubio de ojos claros, 2 metros algo y un cuerpo espectacular y me dice que sí.

Cuando le pregunté lo que necesitaba él me dijo que si quería él me acompañaba y obvio que no me opuse. Empezamos a hablar y me preguntó que de donde era y le conté que era Argentino y todo, él se llamaba Djörjen, tenía 24 y era noruego. Me acompañó y compré todo lo que necesitaba así que ya estaba dispuesto a irme aunque no quería, pero tenía mucho que recorrer. Le dije que ya era tiempo de irme y él dijo que si todo estaba bien que él me iba a enseñar la ciudad y le dije que si obvio. Estuvimos todo el día juntos en los museos, los monumentos y los parques y ya se hacía de noche y le pregunté si quería ir a comer, me dijo que sí.

Estuvimos comiendo en un restaurante buenísimo y la pasamos re bien, un rato antes de irnos él me empezó a tocar el brazo, la pierna y me empezó a manear el paquete, entonces le pregunté si quería algo conmigo e hizo una seña afirmativa con la cabeza. Me iba a besar, pero le dije que no que estábamos rodeados de gente y nunca faltaban los homo fóbicos y me dijo que en su país era común, entonces nos besamos apasionadamente y me preguntó si podíamos ir a su departamento, no me negué. Pagamos y nos fuimos.

Llegamos a su depto y nos empezamos a desvestir le saqué la camisa y tenía un hermoso abdomen con unos pectorales que hacían su cuerpo perfecto, baje un poco más, le saqué los zapatos y le baje el pantalón. Se notaba un bulto impresionante debajo de su slip, no dudé un segundo y lo bajé. Me encontré con un culebrón de 24 centímetros en plena erección. Chupé su pene hasta que se corrió, no tardó mucho. Él me bajó todo y me devolvió el favor, parece que no tenía mucha experiencia, pero igual me daba mucho placer, me sentía en el séptimo cielo. Me dijo que lo penetre y accedí. Le pregunté si ya se lo habían hecho y me dijo que no, así que lo lubriqué hasta que entraban 4 dedos en su ojete. Se la metí de un empujón por lo cual pegó un grito, lo seguí embistiendo y parece que le gustaba. Me corrí dentro de él y lo llené con todo mi esperma..

Se dio vuelta y me preguntó si me podía penetrar y le dije que no, ya que tengo ciertos problemas y una vez trataron y no pudieron, entonces le pregunté que si no tenía problema con eso y dijo que no. Pero yo me sentí medio mal por no poder darle lo que él quería así que lo agarré de su gran pedazo de carne y lo empecé a masturbar. Me metí su gran verga en la boca y la empecé a chupar, fui desde la raíz hasta el glande, el cual lo chupaba y lo envolvía salvajemente con mi lengua, le di unos tirones en los huevos y lo excitó. Seguía chupando su delicioso aparato como si fuese un helado o algo por el estilo. Bajé hasta sus huevos y me los metí uno por uno en la boca, mientras tanto le metí un dedo en el ojete y entre la mamada y el dedo en su ojete, estaba excitado y pedía más. Se corrió un rato después y largó una cantidad incontable de Semen, el cual tragué una parte y el resto quedó en el suelo, ya que era mucho.

Lo puse en cuatro otra vez y agarré un poco de su esperma y se lo metí en el culo con el dedo, me pasé un poco se su leche por mi verga y lo volví a penetrar lo embestí lo más fuerte posible y él gritaba como le estuviesen amputando un brazo, probamos de todas posiciones, con él arriba, abajo, en 4, parados y de muchas maneras más. Me corrí unas cuantas veces. Cuando dejé de penetrarlo me la mamó con una energía que me hizo correr al instante y por supuesto que él me la dejó bien limpia. Después yo se la volví a mamar y se corrió. Nos dimos un beso, nos abrazamos y nos quedamos dormidos. Cuando me desperté había una nota y me dejaba su teléfono, su dirección de e-mail, su ICQ, su dirección, un foto y decía que si quería me bañe antes de irme y que lo disculpe, pero tenía que ir a trabajar.

Abusé de su baño, después me fui al albergue y me dormí pensando en él. Cuando me desperté seguí recorriendo la ciudad, pero bueno, no me quedaba mucho tiempo como para buscarlo ya que me tenía que volver. Me volví a copenhaguen, de ahí me volví a Buenos aires y nos seguimos comunicando por Internet. Bueno, eso fue todo, gracias por leerlo.

Si quieren escribir, por lo que sea, háganlo a: Breakinup207@hotmail.com

Chau.