Pilar no tiene bicicleta

Micro relato basado en una anécdota con la canción de Los toreros muertos

El relato tiene como base una anécdota que sucedió con Miguel, el hijo de Pilar un día que estaba en mi casa y sonó la canción de Los toreros muertos, esa que dice “Pilar no tiene bicicleta, pero tiene un buen par de tetas, que nos las enseñe, que nos las enseñe”, Miguel soltó una carcajada histérica sin venir mucho a cuento lo que me dio que pensar que se sentía atraído por las tetas de su madre, igual que yo.

Miguel y su madre estaban sentados en el salón de su casa, Miguel cogió una cinta de música y la metió en el reproductor, se escuchó la voz de Pablo Carbonell cantando:

Pilar no tiene bicicleta

Pero tiene un buen par de tetas

¡¡¡que nos las enseñe, que nos las enseñe!!!!

  • ¿Has oído mamá?, parece que te conoce.

  • ¿Como dices cariño?

Miguel rebobinó la cinta.

  • Mira, escucha.

Pilar no tiene bicicleta

Pero tiene un buen par de tetas

¡¡¡que nos las enseñe, que nos las enseñe!!!

Pilar miró a su hijo sonriendo, es verdad, le dijo, no tengo bicicletas

  • Pero un buen par de tetas si que tienes, mamá.

  • ¿Y quieres que te las enseñe, no?

  • Claro, mamá, dijo Miguel y de paso me hago una paja mirándotelas, que se me ha puesto medio tiesa solo de pensarlo.

Pilar comenzó a desabrocharse la camisa que llevaba puesta mientras miraba como su hijo se sacaba la polla del pantalón,tenían una relación incestuosa desde hacía algún tiempo, Miguel se sentía atraído por sus tetas y ella le dejaba que se las tocara de vez en cuando y se desfogara, no habían pasado de ahí, a ella también le gustaba ver como su hijo se pajeaba mirándola y muchas veces se habían masturbado mirándose uno a otro.

Pilar se quitó la camisa, se quedó en sujetador, era negro y sus tetas rebosaban, estaban algo caídas, pero a Miguel eso no le importaba, empezó a meneársela despacio para que durara.

  • Vega, mamá quítate el sujetador y enséñame esas tetazas.

  • Si hijo, dijo Pilar desabrochándose el sujetador y dejando caer sus tetas, se las agarró y se las enseñó a su hijo.

  • ¿Te gustan las tetas de mami?

  • Me encantan mamá, dijo Miguel sin perderlas de vista, mientras seguía subiendo y bajando por el tronco de su polla. Me encantan esos pezones grandes y negros que tienes.

  • A mi me gusta ver como te la meneas viendo a tu madre, tienes una buena polla, vas a hacer feliz a muchas mujeres.

  • Quiero hacerte feliz a ti, mamá.

  • No hijo, no, no me vas a follar, confórmate.

  • Si mamá. Acércate tócame el capullo con un pezón.

Pilar se acercó y puso un pezón encima del capullo de su hijo, Miguel se estremeció de placer, pero no se corrió, le paso la mano que tenía libre por el culo a su m adre, por encima de la falda negra que tenía puesta, le gustaba el tacto suave de la prenda, aparte ce las tetas de su madre le encantaba su ropa y hacerse pajas con ella.

Pilar lo sabía muchas veces se había encontrado corridas de su hijo en sus faldas y sus sujetadores, no le importaba, era una fantasía más-

  • Date la vuelta mamá

Pilar se dio la vuelta,Miguel acercó la polla a su culo y empezó a restregarse contra su falda mientras le agarraba las tetas con su mano y se las apretaba.

Pilar movía el culo para acabar la paja que su hijo había empezado, notaba los empellones de este y sus manos en sus tetas, se levantó la falda por delante y se empezó a acariciar el coño por encima de las bragas.

  • Sigue, hijo, sigue sobándome las tetas y el culo que me has puesto a mil, me voy a correr yo también.

  • Si mamá, si, los dos juntos.

Pilar sitiò los estertores de su hijo contra su culo y la corrida de este encima de su falda, notó la humedad en sus dedos, ella también se había corrido.

Se dio la vuelta y besó a su hijo en la boca, MIguel cogió la su polla y la limpió en la falda de su madre. Pilar se fue a la habitación a cambiarse.

Miguel fue al aparato de música y volvió a poner la cinta.

Pilar no tiene bicicleta

Pero tiene un buen par de tetas

¡¡¡que nos las enseñe, que nos las enseñe!!!