Perdiendo el control II Conociendo al chico moreno

SEGUNDA PARTE ~en la primera parte Javier confeso sus sentimientos y fue rechazado~

El maestro pasaba lista con su pastosidad habitual en  el instituto mientras los alumnos contestaban mecánicamente al oír su nombre

-          ¡Nicole Ramos!

-          ¡Presente!

Contesto Nina levantándose ligeramente de su pupitre, el siguiente en la lista era Javier, Nina observo su asiento vacío y frunció el seño

-          Javier Rodríguez

No hubo respuesta…. Nina miro hacia Car, que parecía tener toda la concentración del mundo situada en las uñas de mi mano derecha, estaba tan distraído y con el semblante preocupado que el maestro tuvo que repetir su nombre casi 4 veces antes que dijera presente

-          Amílcar Trujillo

-          Presente

Contesto sobresaltado Car pensando en que casi le ponen falta, por estar pensando en… de forma intuitiva volteo a su lado derecho,  Javier no había llegado , pero eso no era raro ya que él y su padre acostumbraban a salir de viaje con frecuencia por motivos de trabajo. Se sintió observado y volteo hacia un costado chocando con la mirada penetrante de Nina, esos ojos azules interrogando, como preguntando…¿Sabes porque no vino Javier?, el evito su mirada de forma rápida, cuando salieron de clase se encontraron con Javier en el pasillo, que intento acercarse a Car tomándolo por el brazo susurrando “¿podemos hablar?” el se separo bruscamente diciéndole “ tú y yo no tenemos nada de qué hablar aléjate de mí, es la última vez que te lo repito”  de nuevo Javier se acerco a él suplicante con los ojos verdes marcados de lagrimas, poniendo una mano en su hombro “por favor, Car, amigo”

Car se voltio enfadado y  empujo a Javier poniendo sus manos en su pecho haciendo que retrocediera “No me toques, maldito maricon “ contesto mascullando las palabras casi en un susurro, pero para Javier retumbaron en sus oídos como si las hubiese pronunciado en altavoz, se alejo lentamente como si no pasara nada, pero a los pocos pasos doblando la esquina  para que Car no lo viera arranco a correr buscando un aula vacia donde esconderse, quería que el techo se desplomara sobre el, no encontró ningún aula y mejor entro al vestidor de caballeros ~ el vestidor era amplio  tenia pequeños cubículos frente al pasillo para los escusados, de frente a estos un gran espejo con un lavamanos  y en la parte izquierda los loquers frente a unas bancas para cambiarse, y más al fondo las regaderas~  ahí era el lugar ideal porque no había nadie ya que a esa hora no había empezado aun la clase de deportes, miro a todos lados buscando donde esconderse por si llegaba alguien, no quería que nadie se diera cuenta que lloraba, decidió que el mejor lugar era un escusado, se metió ahí y lloro mirando el móvil pensando en que mejor era mandarle un mensaje de texto, abrió mensaje en blanco pero no supo que escribir, asi que apago el móvil y se quedo solo llorando en silencio, poco a poco el vestidor se lleno de chicos, que sonaban como de 1er año.

Desde el escusado escucho sentado mirando por una rendija hacia el pasillo... Era el entrenador que entraba autoritario pidiendo a todos  salieran del vestidor para la cancha que y dieran 10 vueltas! Demonios si lo pillaban ahí lo mandarían directo a detención! Pensó asustado Javier...

Las voces se alejaban lentamente entre risas y chanzas después de unos instantes un silencio absoluto reino en el vestidor indicando que se encontraba vacio y Javier respiro hondo relajándose, de momento estaba a salvo y podía seguir sumido en sus pensamientos llorando en silencio, un ruido lo distrajo y lo hizo asomarse por la pequeña rendija que daba hacia el pasillo del vestidor y lo que vio lo hizo contener el aliento el entrenador tenia acorralado a un chico delgado semi desnudo pegado contra la pared, mientras el chico se aferraba al cuello del entrenador besándolo apasionadamente y el entrenador acariciaba su piel morena agarrando con brusquedad sus nalgas cubiertas por un calzoncillo deportivo y  mordiendo sus tetillas mientras el chico se aferraba a él.

Javier se alejó de la rendija asustado pensando en que por eso había mandado a todos a la cancha de forma tan apresurada para venir a cojer con el chico moreno, menudo pervertido el entrenador… eso era exactamente lo que faltaba pensó, pero no puedo evitar regresar a mirar,  los ruidos que hacían eran sonidos de besos, gemidos y respiraciones hondas lo hicieron pegarse a la rendija para observar mejor  pero ellos se movían OH NO A LOS DONDE ESTABA EL!!! Si lo descubrían lo pagaría caro y más después de ver como el entrenador desnudaba al chico manoseando su culo.

Se metieron al cubículo de la izquierda justo al lado de donde Javier se encontraba escondido, el ruido de besos, chupetones y los gemidos del chico inundaban los oídos de Javier, un diminuto agujero en el vestidor le permitió una vista sorprendente, en el reducido espacio el entrenador tenia al chico pegado a la pared con una pierna levantada mientras intentaba introducir en su diminuto culito una polla de tamaño enorme, el chico ponía cara de placer y dolor mientras con una mano se aferraba al cuello del entrenado para no caer, con la otra se masturbaba moviendo su mano de arriba abajo rápidamente.

El corazón de Javier latía tan fuerte que pensó que en algún momento lo descubrirían guiados por el sonido intenso de sus latidos. Ahí oculto sintió como su pene se ponía duro y de forma casi inconsciente se llevó una mano a su pene acariciándolo sobre la tela. Mientras el chico moreno gemía sin parar con cada embestida brutal que le daba el entrenador, y cerraba los ojos ladeando la cabeza golosamente, Javier miraba tocándose sobre la tela, se llevó los dedos a la boca chupándolos para humedecerlos y se saco la polla pajeandose con la mano que ya había humedecido sin perder detalle de las furiosas embestidas que daba el entrenador al jovencito moreno, este abrió bien los ojos que eran de un café oscuro, al momento del orgasmo enterrando los dedos en la espalda aferrándose con furia, el entrenador jadeaba al venirse, le enterró hasta el fondo el pene al chico soltando un especie de gruñido, chorros de semen blanco escurrieron por las piernas del chico, Javier estaba ardiendo masturbándose rápidamente, mirando dicha escena y pensando en Car, NO inmediatamente lo saco de sus masturbaciones y de sus pensamientos, Car no…. Mejor siguió  mirando al entrenador que  se salió del chico moreno, que respiraba trabajosamente, de pronto  el chico moreno clavo la mirada en el hueco donde Javier se masturbaba mirando , DIOS! ¿HABRIA NOTADO QUE YO ESTABA AHÍ?  Pensó  Javier. Entonces  el chico moreno sin decir nada y sin dejar de mirar hacia donde estaba Javier se sentó en el w.c. Y. Comenzó a limpiar la imponente polla del entrenador, chupándola lentamente enredando golosamente su lengua a todo lo ancho y lo largo, el entrenador gruñía de placer sujetando los cabellos del chico para que este no se fuese a quitar dejándolo insatisfecho, la mirada del chico moreno permanecía fija sobre el hueco donde espiaba Javier, mientras Javier lo miraba parecía como si el chico moreno estuviera haciendo semejantes espectáculo solo para él.

El entrenador separo lentamente al chico moreno, revolviéndole el cabello en un gesto casi paternal "ya chicuelo, échate una ducha y ya sabes " dijo poniendo un dedo en sus labios indicando silencio a lo que el chico moreno sonrió asintiendo con la cabeza. El entrenador salió acomodándose la ropa dejando solo al chico  en el vestidor y el chico moreno salió detrás de el rumbo a las duchas que se hallaban al fondo del vestidor. Javier escucho la llave del agua y respiro aliviado. Pues tenía el corazón como un tambor y estaba sumamente excitado, pensaba en Car y en los abrazos que solía darle, esos abrazos de oso que lo apretaban y Javier se sintió un idiota por confundir esas caricias amistosas con caricias de deseo, apretó los dientes y dos gruesas lagrimas salieron de sus ojos, la llave del grifo se cerro y los pasos se aproximaron hacia el nuevamente. El corazón de Javier casi se detiene cuando escucho tok tok tok que tocaba la puerta del cubículo donde estaba escondido. Se guardo la polla y abrió la puerta resignado entre la pena de sentirse descubierto y el miedo a un castigo, pero se sentía más tranquilo de saber que era un chico del mismo instituto y que delante del entrenador no había dicho nada

Al abrir la puerta esos intensos ojos negros lo miraron con una risita cínica

-Te gusto lo que viste?

-Yo... Perdona... No fue mi intención... No diré nada, te lo juro

-Por lo visto si te gusto…

Dijo el moreno viendo la erección que aun tenía en sus pantalones Javier, a lo que Javier respondió bajando la cara completamente rojo.

-          Ya tranquilo no pasa nada….

Le dio una palmada en el hombro, en un gesto de complicidad

-          Solo, por favor, no comentes esto… significaría mi expulsión inmediata.

-          Si… no t preocupes, no diré nada…

-          Gracias, y si necesitas cualquier cosa soy Adrian no dudes en buscarme

El chico sonrió y  Javier sintió un doble sentido en la frase que lo hizo levantarse mirándolo y no pudo evitar reírse

-          ¿Es una invitación?

Pregunto sorprendiéndose de su propia reacción y más aun de que la sonrisa cínica desapareciera del rostro de Adrian para volverse en un gesto de preocupación. Una mirada furiosa fue la respuesta a lo que Javier dijo y este de inmediato  se dio cuenta que había cometido una indiscreción.

-          Lo siento… Adrian cierto… amm soy medio bruto para expresarme, era broma

Extendió una mano  a manera de saludo, la cual con cierta duda apretó adrian.

-          ¿Que hacias ahí escondido?

-          Yo…  hmmm este…

-          Estabas llorando o drogándote, tus ojos están muy rojos, tu sabes un secreto mio, creo que seria justo que yo supiera uno tuyo, digo para estar parejos…

Y otra vez esa sonrisa juguetona, Car tenía una sonrisa parecida pensó  Javier, sonriendo un poco mas animado

-          Llorando … tuve un problema con mi … con el q ERA mi mejor amigo

-          El musculoso bravucón

-          ¿Cómo lo sabes?

-          Jajajajajaja hombre se la pasan todos los días juntos y sin separarse, los había visto antes, voy en tu clase de literatura.

-          Ah… perdona de verdad no recordaba haberte visto antes

-          Es normal me siento hasta atrás y casi no hablo con nadie, bueno, ¿era tu amigo o tu novio?

Javier no pudo evitar cerrar el puño furioso al recordar las palabras de Car y la forma en que lo había rechazado

-          No, ERA mi amigo… aunque…  bueno

-          Entiendo , tu no lo veías como tu amigo… bueno dime brujo pero yo m había dado cuenta que sentías algo especial por el, tu mirada te delata, con el eres muy cálido

-          ¿Si? No lo había notado… bueno,  ayer lo… lo bese…

-          Uuuy

Adrian se revolvió el pelo mojado al escuchar esas palabras, como  si no necesitaba conocer el resto de la historia

-          Mándalo a la goma,  aléjate un tiempo veras como se da cuenta lo que eres demasiado especial para el un bruto musculoso

-          Hey… Car no es un bruto musculoso… Car… es… era…

Javier dejo la frase al aire y Adrian levanto una ceja sonriendo alegremente, y Javier tuvo que reconocer que Car solía ser su protector pero que en realidad si era un bravucón.

-          Es normal tío mira un tipo como él, así malote, dudo que quiera que lo vean de manita sudada con otro tío…

Sintió una lagrima escapar y recorrer su mejilla hasta el mentón, y Adrian sin decir nada se acerco besando su mejilla borrando con sus labios la lagrima. Javier sonrió tiernamente y salieron del vestidor hablando alegremente sobre temas diversos, entonces se dio cuenta que el eran muy diferentes pero tenían gustos en común. Al llegar al corredor  vieron a Nina apresurada marcando en su móvil y  Javier la llamo a gritos. La hermosa Nina se acerco  mirándolo

-          ¿Dónde demonios estuviste todo este tiempo?

-          Conmigo

Intervino adrian, mirando sonriente a Nina, que lo miro intrigada

-          Si, si… estuve con el, estuvimos checando unas cosas de…

-          El baile de fin de curso, Javier me estuvo dando tips para la música

-          Ah  pero pudiste avisarme he estado muy preocupada, Car anda muy extraño y tu desaparecido, tuve que desayunar sola

-          Lo lamento Nina, tienes razón debi decirte, pero no te preocupes por Car esta en sus días

-          Bueno, no importa ahora, no le veo el punto a que aparecieran porque ya no tenemos clase, la maestra de literatura está enferma y no vendrá así que podemos retirarnos

-          Bueno, ¿por qué no vamos a mi casa? – sugirió Javier- veamos que tan bueno eres en Guitar Hero, nadie puede contra Nina.

-          Bueno vamos tengo el auto de mama llegaremos en un instante- dijo animada Nina por el cumplido de Javier

Rieron alegremente y Adrian sintió cierta alegría al escuchar la invitación, pues era la primera vez que hacia amigos, aunque haya sido en una circunstancia tan extraña. Caminaron los 3 chicos hacia el auto de Nina subiendo Javier atrás como era su costumbre y Adrian en el asiento del copiloto  que acostumbraba a ser el asiento de Car.

Car camino hacia el estacionamiento con la mirada en el piso y al levantarla se quedo  mirando con ojos perplejos como se alejaba el carro de Nina con otro chico sentado en su asiento y apretó los puños y los dientes con furia, “que fácil me remplazaste maldito idiota”  pensó mientras miraba el coche alejarse, camino lentamente hacia la parada de autobús maldiciendo en silencio.

~CONTINUARA~

Es la continuación, esta es la primera historia que subo sus comentarios y criticas me serán de mucha ayuda ^^