Penetrada por camioneros antes de ir a Portugal

Este como cabron que es… no siente mi marcha por la soledad sino por la falta de sexo, proponiéndome acercarme a su oficina y saciar sus más bajos instintos… mmm

Penetrada por camioneros antes de entrar en Portugal

Hoy lunes 18 me he levantado como siempre… me desperté con tan solo las braguitas pues las noches son sofocantes, me marche a la cocina a preparar la cafetera… mientras este se hace me pego una más que merecida duchita, luego tomamos el café conversando cualquier cosa trivial.

Salí de casa con la idea de volver a Madrid y de paso poder quedar con algún que otro lector a modo de tener una confidencia más, pero quizás fuera el destino en el cual no ha querido. Ya que nada llegar a la oficina mi supervisor me ha mandado llamar, para informarme que no regresare a Madrid pero si a Portugal, yendo en este caso a Grândola… una pequeña ciudad cercana a Lisboa, donde debo de hacer un planeamiento de la zona… entre otras cosas.

Tras dejar mi coche estacionado dentro del aparcamiento tome el coche de la empresa, poniéndome en marcha pues me quedan cuatro horas de viaje. Pero antes debía de acercarme a mi casa a coger el equipaje… de camino a casa, llamo a mi marido haciéndole saber que tenía que irme de viaje y que seguramente hasta el viernes no regresaría… muy a mi pesar. Este como cabron que es… no siente mi marcha por la soledad sino por la falta de sexo, proponiéndome acercarme a su oficina y saciar sus más bajos instintos… mmm. Tras salir de casa con la maleta y vestida con un traje blanco veraniego corto, ropa interior y zapatos cómodos para el viaje, me encamine primero a despedirme de mi marido… mmm.

Tras llegar me pide que suba por la escaleras de incendio hasta su planta… casa que no me hace mucha gracia, recuerdo encontrarme a mi marido a falta de una planta a su oficina y este tras cogerme, comienza a besarme contra la pared… mmm, tira de mi vestido hacia abajo y con el sujetador. Comenzando a chupar mis senos… mmm, mordisquear mis pezones… uuummm, lamer mis mamas… uuummm, tras colocar sus manos en mis hombros… comienza a presionarme a modo de hacerme entender que debía de arrodillarme o ponerme en cuclillas (coño, se lo que pretende).

Tras desabotonar el botón de su pantalón y bajar la cremallera, baje su pantalón y bóxer… saltando su polla hacia mi rostro, comencé a comerle su glande sin mano… ayudándome rápidamente, tomándola por la base de tronco… mmm. Comencé a chupársela… dándole un trato especial a  su glande… aaahhh, tras un rato minutos… no os podría precisar cuánto, mi marido miro la hora… supuse que se quedaba sin tiempo. Tras sacármela de la boca… me hizo levantar, acabo por quitarme el vestido y al tiempo que él se arrodillaba me quito las braguitas… mmm.

Me pegue a la pared… separe mis piernas al tiempo que el colocaba una mano en cada uno de mis muslos… mmm, siendo testigo de cómo dirigía su boca a mi ingle… ooohhh, comenzó primero a lamer desde mi pubis hasta el orificio anal… ooohhh, apoye mi mano en su nuca… mmm. Chupo mis labios vaginales e introdujo la punta de su lengua… aaahhh, arrancándome un inmenso orgasmo… ooohhh, continuo chupando y absorbiendo mis fluidos al tiempo que sus dedos penetraban mis orificios… ooohhh.

Era todo un morbazo pues no dejábamos de escuchar las voces de los inquilinos de las oficinas… mmm, imaginándome como nos pillara… como actuaríamos, pensaba se nos unirían o que… dudas y preguntas que me hacia mientras mi marido me daba placer… uuummm.

Tras darme la vuelta puso su glande en mi entrada vaginal y de un embiste… me penetro… ooohhh, apoyándome con ambas manos sobre la pared disfrutaba… aaahhh, no dejaba de penetrarme e incluso con dos de sus dedos había comenzado por mi orificio anal… aaahhh. No dejaba de mirar su muñeca como si supiera que se quedaba sin tiempo, sacaba su polla de mi orificio vaginal y con precisión me lo introducía en el anal… ooohhh, no dejaba de decirme…

  • “Joder… Susana, deseo darte todo mi amor… deseo que sientas todo el placer que quiero, no voy a tener tiempo”, me soltó.

Siendo yo la que hice que acabar… tras sacarla, me arrodille y al tiempo que la masturbaba se la comí… mmm, miraba sus ojos y lamí su glande… no dejando milímetro de darle placer, cuando me hizo señas que pronto iba a acabar… no deje que acabara en otro sitio que no fuera mi boca… uuummm, tragándome hasta la última gota. Tras darnos un abrazo y comernos la boca… aun con el sabor de s leche en mi boca, nos despedimos hasta poder hablar por la noche… mmm, como manera de poderle levantar el ánimo le hice saber que buscara a la vecina y que le diera todo aquello que deseaba hacerme a mí, obviamente es una prueba de consentimiento… claro está, también es una manera de decirle o hacerle saber que le voy a hacer infiel y si pudiera, sería en ese mismo día… mmm.

Bueno tras ponerme en marcha tome la A-49 (Autopista del V Centenario) en dirección Huelva con la idea de poderme parar antes a tomar antes de irme a Portugal, me detuve en un restaurante a tomar algo antes de cruzar la aduana en cuestión en el restaurante “Los Mellizos I”. Aun recuerdo que desde que aparque mi coche no dejo de darme la tabarra un hombre… diciéndome en todo momento guarrerías y borderías, ignorándole entre en el restaurante y tras pedir mesa, me fui a los aseos a modo de poder lavarme las manos y refrescarme. Cuando salí del aseo me encontré a este hombre saliendo del interior del aseo de caballero, él cual tras verme se detuvo y comenzó a magrearse con todo descaro su miembro… mmm. Soltándome este…

  • “No veas niña como me la tienes, te vi nada vas bajarte del coche y mostrar el interior de tus hermosos muslos… mmm, no veas como tienes a este camionero Cordobés”, me dijo.

Calle pero en vez de salir deje clavada mis ojos en ese bulto… mmm, cosa que este aprovecho mas por la ausencia de personas con bajarse la cremallera, introducir su mano en el interior de su pantalón y sacarse a duras penas… su erecto miembro, ambos sonreímos… el por mi rostro y yo por su duro miembro.

El sonido de unos pasos acercarse nos volvió a la realidad… acabando de salir y tras dirigirme a mi mesa me senté a almorzar, él se encamino a la barra y no dejo de mirarme en todo momento… mmm. Hasta que lo vi envalentonado delante de mi mesa con una cerveza en una mano… mientras en la otra llevaba una tapa, amablemente me pidió compartir mesa y compañía… cosa que muy educadamente acepte, durante el resto del almuerzo conversamos cosas de nosotros al tiempo que este me hacía preguntas con doble intención, proposiciones deshonestas y algunas fantasías a realizar… mmm.

Me enseño cual era su camión de los dos que había estacionado junto a la gasolinera, me dijo que desearía enseñarme el interior de la cabina y pudiera ver lo espaciosa y confortable que puede llegar a ser. Recuerdo como rozaba su pierna con la mía y me hacía sentir escalofríos, me soltaba proporciones a hacer y sugería situaciones como…

  • “Nadie nos mira… descálzate, levanta tu pierna hasta que tu talón descanse sobre la madera de la silla, toca con la planta de tu pie mi dura polla… veras como crece, restriega tu pie y presiónalo… te gustara”, me dijo.

Al principio calle y no hice nada pero tras retarme… lo hice, me descalce y eleve mi pierna hasta que apoye mi talón en la silla, busque con mi pie su miembro y tras notar su dureza… mmm, comencé a moverlo a modo de restregarlo a mi pie… notando como se endurecía aun mas… mmm

Pero la camarera tuvo que ver algo al acercarse pues su cara sonriente se delataba, tras pedirle el postre y la cuenta… este camionero volvió a proponerme lo de la cabina. Cosa que volví a rehusar y le deje caer que si deseaba algo, debía de ser allí en los aparcamientos… propuesta que acepto, me dijo antes de salir… coge tu coche y apárcalo junto a los camiones, cosa que hice… tras coger mi coche y ponerlo junto a los camiones… este se me acerco y dejarme alejarme del coche, allí mismo intento besarme… rehuyéndolos sentir sus labios en los míos, pero no les hice asco cuando estos se alojaron en mi cuello al tiempo que sus manos acariciaban mi nuca, cuello, espalda, cintura y nalgas… aaahhh.

Aprovechaba los escases de mis prendas pues yo salí de casa como os he mentado con tan solo un traje blanco veraniego cortísimo de color blanco, ropa interior y claro esta zapatos. Este beso mi cuello y descendió sus labios por mis hombros al tiempo que deslizaba la cinta de mi vestido hacia mis brazos, cayendo este por esto pero al mismo tiempo el resto de mi vestido a mis pies… dejándome con tan solo mi ropa interior.

Estaba en cuclillas tragándome su miembro y sacándomelo para volvérmelo a tragar… mientras este susurraba y gemía, acariciaba mi nuca con una mano mientras con la otra magreaba uno de mis senos… mmm. Pasaron varios hombres pero ninguno acabo por quedarse parado hasta que uno lo hizo, este hombre era un hombre mayor de escasos cabellos pero de color blancos como su bigote, con gafas de sol de sol y algo canijo. El camionero me pregunto…

  • “Te gusta ese tío, dejamos que se acerque”, me dijo.

Contestándole yo…

  • “Decides tu… por mí se puede quedar, pero eres tu quien debe permitírselo”, le solté.

Cosa que finalmente el camionero decidió que no se acercara, haciéndole señas a modo de que se marchara al tiempo que me decía…”no me gusta un pelo”, obviamente al otro hombre no le sentó mal que este lo echara, diciéndole…

  • “Quien coño eres tú para echarme, aquí estamos todos a lo que venimos y si estáis así es por algo”.

Obviamente tenía razón pero como yo le dije que el de echarlo… no yo, él mientras yo continuaba comiéndome su pollon que me costaba un poco tragármelo… mmm. El mientras apartaba mis manos de su miembro y me hacía ver que debía de hacerlas sin ellas, continuaba saboreando su miembro… sobre todo su glande… ooohhh, mientras él me decía…

  • “Donde coño has aprendido a comerla de esta manera, debes ser una puta de las buenas… ya me imagino follándote… mmm”, me soltó.

Este vio un segundo hombre acercarse al cual llamo la atención a modo de que se acercara, no dije nada pues no lo vi llegar… quedándome de la misma posición. Cuando note a esta persona… ya note las manos de este en mi nuca, acariciándome mis cabellos a modo de podérmela tragar aun más… aaahhh, observe por el rabillo del ojo como se la sacaba del interior del pantalón y acabo por colocarla delante de mí.

Tome su miembro con la mano al tiempo que me sujetaba con la otra a la pierna del camionero, vi que este otro tenía un buen pollon y tras apartarme del camionero me hizo tragármela… aaahhh, comiéndome su polla al tiempo que masturbaba la del camionero… uuummm. Estaba en cuclillas entre estos dos maduros cerca de Portugal en ese aparcamiento… mmm, creo recordar que el camionero mentó al otro que me la sacara de la boca que deseaba follarme y este la saco, me ayudo a levantarme y tras abrir la puerta trasera de mi coche, me incido que me colocara sobre este al tiempo que me bajaba las braguitas… mmm.

Tras colocarme sobre el asiento… el camionero se me puso detrás y con su miembro en mano… me penetro… aaahhh, comenzó a penetrarme mientras me sujetaba a mis caderas… aaahhh… uuufff… aaahhh.

  • “Aaahhh… aaahhh… ooohhh… aaahhh”, emitía yo.

Estaba disfrutando de lo lindo y para nada esperaba que la otra puerta se abriera y que entrara por el otro lado el otro hombre, tras entrar en el coche y sentarse junto a mí. Me tomo de la cabeza y me hizo tragarme su polla… uuummm, apretando mi cabeza contra ella al tiempo que me soltaba…

  • “Así… así… uuummm, sigue zorra… sigue… ooohhh, que lo haces muy bien”, me decía.
  • “Aaahhh… aaahhh… aaahhh, despacioooo… cabron”, decía yo.

El camionero estaba todo engrandecido pues sus embestidas eran brutales tanto como las palmadas que me daba en mis nalgas, el camionero iba cada vez más rápido y más sádico en sus penetraciones, llegando a advertirme que se iba a correr ya… que si le dejaba hacerlo dentro, claro esta no le deje y este me hizo salir del coche a modo de poder acabar en mi boca.

Luego le tocaba al otro hombre… al cual antes de penetrarme le hice saber que debía de ponerse un preservativo, tras colocárselo me hizo tumbar sobre el asiento trasero me penetro, comenzó a embestirme sintiendo las miradas del camionero y de otro hombre más… aaahhh. Este levanto mis piernas al tiempo que tiraba de mi cuerpo hacia el… ooohhh, sintiendo las penetraciones más profundas ya que mis piernas descansaban en su hombros… uuufff. Sentía como este en breve obtendría su orgasmo… ooohhh, momentos en que el otro hombre se introducía dentro del coche y sin decir palabra me enchufo su polla a mi boca, comenzando a chupársela hasta que el segundo descargo entre alaridos y este ultimo también.

Aun recuerdo cuando después de ayudarme a vestirme y limpiarme con toallitas húmedas… pues pasaba de entrar en el bar a hacerlo, más aun después del griterío que habíamos formados. Cuando el segundo me sugirió tomar una habitación en el hotel llamado como el bar y que pasara la noche allí, sugiriéndome que podría descansar, ducharme y poder estar otro rato a solas con él. Cuando decliné su amable oferta este quiso darme dinero a modo de hacerme ver que el podría pagarme el hotel, cosa que me molesto enormemente y poco falto para haberlo mandado a la mierda.

Antes de marcharme tome nota de los datos del camionero cordobés al igual que en los míos, tras despedirnos con un beso de buenos amigos con derecho me hizo saber que intentara acercarse donde me iba a hospedar, haciéndome saber que si le fuera posible llevaría compañía… cosa que le agradecí, dándole un morreo.

Bueno continuo, tras ponerme en marcha continúe por la A22 en dirección a Messines siempre por la carretera con peajes hasta que tome la salida 10 y me incorpore a la IP8 hasta llegar a mi destino, tras coger en recepción la llave mi primera idea era darme una buena ducha a modo de quitarme este olor a hombres… mmm. Luego me puse en marcha, me encaminarme hacia mi trabajo no sin antes tomar precauciones… ya sabéis condones, toallitas, vaselina… mmm.

Hola a todos antes de comenzar me voy a presentar, me llamo Susana y me considero una ardiente sevillana, ante todo bisexual y libre de follar con quien me dé la gana, sin presiones ni chantajes. Os debo confesar que disfruto del sexo en toda su plenitud como cualquiera, aunque en mí caso dicen que lo hago en toda su integridad y hacer posible con quien me venga en gana, disfrutando tanto de hombres como de mujeres a mí antojo e incluso a veces con parejas, no suelo hacer intercambio de pareja con mi marido. No suelo decir no… a no ser que sea por motivos familiares, trabajo o que seáis jóvenes.

También os repito que no me seáis pesados, ya que con un marido tengo de sobra, no me obliguéis a no ser que estemos liados, tampoco me presionéis que con mi jefe tengo de sobra y menos echarme en cara nada, pues eso es algo que mi padre hace muy bien, dicho esto comienzo… pasadlo bien y no mancharos demasiado..

Bueno mis queridos lectores y lectoras hasta aquí llego mi confesión, se despido hasta otra confesión, pero eso sí… sí deseáis saber más de mí, os invito a pasaros por mi blogs desfasado personal:

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