Pendeja Pajera

Es una jovencita de verdad irritante, pero aprenderá pronto a reconocer sus límites... Y los míos.

PENDEJA PAJERA

Son como las doce de la noche. Recibo un mensaje de texto en mi celu "Que haces?". "La pendeja está al pedo" pienso y respondo como siempre: "Nada, y vos?". Suena de nuevo: "Vení por casa ya" dice la pendeja. Agarro las llaves, mi celu, la billetera y me voy. Llego a su casa, me estaciono y apago las luces. Mensaje "Llegué". Sale por el portón, con pantalón deportivo, buzo, zapatillas y una cerveza en la mano. Se sube al auto, me saluda con un roce en los labios y dice "Arrancá y vamos, que estoy embolada".

Abre la cerveza, Le paso un vaso y sirve. Se toma dos tragos y comienza con la perorata de siempre: Sus amigos putos, sus amigas putas, su familia es un quilombo, su laburo de mierda, sus amantes... Se me acaba la paciencia rápido. "¿Qué amantes? Dejá de joder, si con el único que cojés es con el dedo". Se le cae la cara, me caga a pedos, me dice de todo, quiere que la lleve a la casa, que pare el auto para que se baje. Acelero y tomo para la ruta.

"Bueno, tranquilizate". Paro el auto a un costado, saco un porrito y lo prendo. "¿Te prendés?" le pregunto. Me mira con asco, pero estira la mano. Nunca fumé delante de ella, y según ella nunca fumó. Según "amigos" se daba con un caño, pero creo que es pura fantasía. Le tiembla la mano, pero agarra el porro, le hace una seca y se queda quieta.

No me había dado cuenta pero tiene los ojos llenos de lágrimas. Me mira con bronca, y yo le tomo la mano. La agarro por la cintura y le beso la boca. No se resiste, jugamos con nuestras lenguas. Hago otra seca y comparto el humo con ella. Apago el porro y le agarro una teta. Ella se levanta el buzo. "Chupamelas, dale" me ordena.

Comienzo a lamerle una teta mientras le acaricio la otra con mi mano. Ella se agarra de mi cabello y goza. Paso a la otra teta. Las tiene grandes y blancas, con los pezones rojos. Me desprendo el pantalón y ella mete su mano en mi calzoncillo. Me agarra firme la pija y la mueve despacio.

Yo sé que le gusta: Le meto mano en la concha y ella gime. Está toda mojada. La suelto y arranco. En unos minutos estamos en un hotel que conozco. Hotel, no motel. Pido una habitación, pago y subimos. "Tenemos toda la noche" le digo mientras me desnudo. Nunca habíamos pasado de tranzar en el auto, y hacernos la paja mutuamente. "Apagá la luz" me dice mientras se saca el buzo. "Ni mierda. Ahora te vas a bancar todo, incluso la luz prendida" le digo y la hago entrar al baño. Abro la ducha, nos metemos y nos bañamos. Me dedico a sus tetas, su cola y su conchita. Ella me lava la pija y me masturba un poco.

Mojados nos tiramos en la cama. La pongo en posición de 69, yo abajo, y me dedico a chuparle la concha. Ella solo me masturba. "Dale, chupame" le digo enojado. "Nunca chupé, dejá de joder" me responde. Después siento que me pasa la lengua. Al rato me chupa como si me lo hiciera siempre. Yo comienzo a lamerle el ano, rozadito y cerrado. Se abre y le meto un dedo. Me besa las bolas y las chupa con ganas. Me chupa la pija hasta atragantarse. No doy más y acabo en su boca. Protesta un rato, pero se traga mi semen.

Ya tengo dos dedos en su culito y acabó dos veces. Me levanto. Se queda boca abajo como dormida. Traigo enjuague del baño y le unto el ano algo dilatado. "No, ni mierda. El culo no. No lo hice nunca y ahora menos" dice queriéndose levantar. La empujo de vuelta y me pongo encima. Le abro las nalgas y apoyo mi glande en su ano. Entra muy suave a pesar de que se resiste. Me dejo caer y le entierro toda mi pija en su culito virgen. Grita un rato, pero cuando comienzo a moverme se queda quieta y suspira.

No pasan dos minutos y ella mueve su culo para que la penetre mas y más. Acaba una vez con la paja que le hago. Y otra vez cuando le lleno el culo de semen. Se queda quieta y yo encima de ella. Se pone de costado y yo me acomodo tras ella y la abrazo. Nos dormimos un rato.

Me despierto y ella sigue dormida. Busco un forro en mi pantalón. La despierto y le digo que cojamos por su concha. Me mira sin decir nada y se sube encima de mí. Cojemos un rato largo. Ella acaba como tres veces y yo no puedo. Hasta que saca el forro, se la mete de vuelta y acabo dentro de ella. Esta vez ella se duerme encima de mí, sin dejar que se la saque ni nada. Son como las 6 y me despierto. "Vamos, pendeja" le digo y nada. La sacudo y se despierta. Tiene su cabello rubio todavía salpicado con mi semen ya seco. Me rio y ella me mira con cara de culo. Nos levantamos y nos vestimos sin lavarnos ni nada. Bajamos, dejo la llave y salimos. Vamos a mi casa, dejo el auto, tomamos un taxi y vamos a su casa. Saca una cerveza de la heladera y vamos a su dormitorio. Cierra con llave y nos desnudamos. Comenzamos a tomar y pone música. Saco los cigarrillos y le ofrezco. Fumamos y al rato se duerme. Yo la abrazo y me acomodo para dormir, pero no puedo.

"¡Que lindo polvo!" pienso y me quedo un rato en blanco. "¿Ahora que vamos a hacer?" le pregunto sin esperar su respuesta. Medio dormida, se da vuelta, me mira y dice sin dudarlo "Ahora sos mi amante, así no me decís mas pajera".-