Peluche

Una tarde en la caul tenia muchas ganas y me encontraba sola, y con algo me las tenias que sacar.

En una calurosa tarde de Diciembre después de almorzar me disponía a dormir la típica siesta como todos lo días, cuando de repente comencé a pensar en mi novio y en como él me hacia el amor antes de irse para Mar del Plata a pasar sus vacaciones de verano.

En ese mismo instante comencé a sentir unas ganas impresionantes de estar con él y cada vez que pensaba en eso más ganas tenia todavía, mi sexo se humedecía cada vez más y me encantaba(para qué negarlo) y la verdad es que tenia unas ganas impresionantes de ser cogida por él, debido a que me encontraba sola en mi cuarto, comencé a hacer suaves caricias sobre mis labios vaginales con dos dedos de mi mano derecha, lo cual encontraba bastante excitante.

Luego de varios minutos de esos excitantes masajes y dado que toda mi vagina estaba totalmente mojada por los efectos de los masajes que me había hecho, decidí introducir mis dedos lentamente en mi interior, despacio y sin prisa iba metiendo primero uno luego dos, tres, cuatro y sin darme cuenta tenia mi mano entera en el interior de mi concha lo cual me excitaba bastante al mismo tiempo en que me imaginaba como él me hacia el amor. Como no era suficiente eso busqué algún elemento para poder elevar mi grado de éxtasis, calentura, gozo que tenia en ése instante.

Sin dudar dos veces tomé varios muñecos de peluche que encontré en el cuarto, me acosté sobre la cama boca arriba con las piernas bien abiertas y tomando el muñeco de peluche con su hocico bien duro comencé a introducirlo muy lentamente en mi conchita toda mojada...la gran alegría que sentía en ese instante era inexplicable ese gran hocico de peluche metido casi totalmente en mi interior uuuuuuhhhhhhhhhhh....... aaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh.... aaaaaasssiiiiiiiiiiiiii...... sssssssiiiiiiiiiiiii........ meeeeeeee eeeeeeeennncaaaaaa nnnnttttaaaaaaaaaaaaa...... aaaaaahhhhhhhhhiiiiiiiiiiiiii

y como eso no fue suficiente coloqué mi mirada en un extremo de la cama la cual tenia una gran punta casi cónica con una pequeña esfera en la punta y se me ocurrió una gran idea.

Fue entonces cuando me coloqué con las piernas abiertas por encima de esa enorme punta de madera con una pierna en el piso y la otra con la rodilla en la cama, la verdad es que estaba muy nerviosa pero eran tantas las ganas que tenia de saciar mi calentura que era capaz de cualquier cosa y como ésta parte de la cama era muy tentadora ni dudé en hacerlo comencé a introducirme esa gran punta de madera con movimientos lentos pero profundos y cuando me dí cuenta tenía casi toda la punta que media unos 25 cm aproximadamente dentro mío y cada vez eran movimientos más rápidos, profundos y constantes, la verdad es que en el lapso de 30 minutos habré tenido como 10 orgasmos con esa enorme pija de madera.

El placer que sentía era inexplicable, me gustaba mucho lo que estaba haciendo y era tanta mi excitación que pensé en meter esa enorme cosa en ano, metiendo un dedo primero con todo mi jugo bañándolo sin sacar el gran pene que tenia en mi vagina comencé a disfrutar cada vez más de ese momento, en un abrir y cerrar de ojos tenía ese enorme pene dentro de mi ano, lo cual me hacia sentir muy bien.

Cogiéndome con ese enorme trozo de madera y con los muñecos de peluche delante mío era una situación demasiado placentera...

Después de haber tenido como 20 orgasmos muy intensos en esa tarde, quedé totalmente fundida sobre mi cama con los muñecos de peluche sobre mí, ahora cada vez que tengo la oportunidad de vivir esa experiencia, lo hago sin dudar.