¡peligro! exceso de largo

A un primo le apodan el "caballo"

Hace tiempo que mi hermosa hermana había pensado en hacer un trío con uno de nuestros primos consentidos, pues es apuesto y bien parecido, como lo queremos muchos mi hermana quería que lo consintiéramos.

Nuevamente soy yo Elodia con este nuevo relato que espero no aburra, es la anécdota con mi primo al que le apodaban el caballo, teníamos mi hermana y yo curiosidad del porque le decían así.

Esto que cuento pasó cuando mi hermana tenía 21 años (ya en ese entonces tenía de medidas 36D-27’’-38’’) y yo 19 años, aprovecho para decir que ambas estábamos ya en la universidad por obvias razones ya vivamos solas, mi hermana estudiaba psicología y yo para ser educadora, una de las formas para mantener los estudios fue que mi hermana se hizo teibolera, a decir verdad no fue necesario, porque nunca nos faltó dinero para lo que fuera, desde lo necesario hasta para lujos y gustos, pero quiero decir que no era cualquier teibolera, tenía clase y distinción, eso si, a la hora de vestir tiene muy buenos gustos y exigentes por cierto, ya que le fascina ir a comprar ropa a boutiques y mientras más cara sea la ropa, mucho mejor para ella, de mi hermana fue de quien aprendí a vestirme y caminar meneando el culo de un lado a otro como saludando a los hombres. Mí hermana me pidió que le diéramos un bonito presente a nuestro primo, obviamente el presente seríamos nosotras, consistía en primer lugar en una rica cena y por supuesto terminar en la cama los tres.

Así que lo preparamos todo, ambas cocinamos la cena y la ropa que usaríamos para entregarnos a él.

Llegado el sábado a las 8:00 de la noche dio inicio a nuestra reunión, al vernos vestidas con microvestidos de color negro y nuestros habituales tacones, el primo comenzó a babear incluso nos dijo “si no fueran mis primas ahora en este instante me las cogería” nosotras reímos, la plática en la cena fue de lo más cordial, hasta que mi hermana le preguntó el porque de su apodo, el primo se echó a reír diciendo “¿de veras prima quieres saberlo?, es por mi verga, es grande y gorda por eso me dicen así” a mi hermana pareció hacérsele agua la boca, hasta que le dijo “bueno primo entonces solo hay una forma de saberlo, vamos a mi cuarto los tres en este momento” sin más los tres subimos, entramos primero mi hermana y yo a la recamara nos sentamos de piernas cruzadas en la cama, luego entró el primo se paró en frente de nosotras y mi hermana le pidió que se sacara la verga, el primo se desconcertó como pensado ¿así nada más? Se bajó los pantalones y notamos un bulto exuberante, al bajarse los calzoncillos se descubrió su falo, que a pesar de estar dormido tenía un buen tamaño, mi hermana sonrió coquetamente entonces exclamó “vaya primo con razón te apodan el caballo, tienes el miembro digno de un buen semental, ya me imagino a cuantas chicas les has de dar placer con esa cosota”, nos quedamos admirando su bien proporcionado palo.

Tiramos al primo en la cama, él se maravillo del cuarto, pues mi hermana lo tiene decorado de posters de chicas, en otra parte hay otros de unos chicos mostrando sus miembros erectos, le dijo que mientras íbamos a arreglarnos para él que podía chismosear lo que quisiera, le señaló donde guarda sus tangas, sus dildos, sus revistas y películas porno.

Mi hermana y yo nos fuimos a mi cuarto para arreglarnos, ambas nos pusimos un baby doll de encaje, ella de color negro transparente para dar una sensación de sensualidad madura y yo uno de color rosa transparente notando una sensualidad juvenil e inocente, ambos con diminutas tangas, por supuesto que no podía faltar nuestros habituales tacones de teibolera, a decir verdad fue ella quien me estaba arreglando, me maquilló de lo mejor, me soltó el pelo luego lo humedeció con crema hidratante para el cabello (para ese día me había hecho chinos), puso brillo en mis labios y me espolvoreó con brillantina, para finalizar me colocó un broche de mariposa en mi cabello rubio, nos besamos tiernamente, antes de salir mi hermana me aconsejó “deja que primero me folle a mi, ya viste el tamaño de su miembro, tu aun no estás lista para semejante cosa, no es lo mismo uno de verdad que mi strap… ya estas lista para tu noche de bodas, esta es la primera vez que te vas a entregar a un hombre, trata de poner carita de niña inocente mientras se la estas mamando eso le fascina a los hombres, luego pones cara de puta” y salimos para el cuarto de mi hermana tomadas de la mano.

Encontramos al primo tirado en la cama con su majestuosa, orgullosa, descomunal, hermosa, impactante y gorda polla erecta, se estaba masturbando por que encontró una película de zoofilia propiedad de mi hermana (a ella le fascinan más si se trata de caballos o burros), era una escena en la que un perro se estaba follando a una chica, nos paramos enfrente de él y mi hermana le dijo “te presento a mi hermosa novia” dándome un profundo beso en mi boca, el primo pareció volverse loco, le modelamos nuestros baby dolls, incluso le preguntamos cual era su favorito, acto seguido nos sentamos con las piernas cruzadas en la cama cada una a un lado, yo del derecho y mi hermana del izquierdo, le pedimos al primo que siguiera masturbándose con la película mientras nosotras acariciábamos todo su cuerpo, hasta que al fin logró eyacular de tal manera que nos asombramos, le aplaudimos, chiqueamos y felicitamos aunque mi hermana dijo “ah que chiste eyaculaste así por la chica de la película y no por nosotras” pero el primo respondió “amores no se pongan celosas que tengo también para ustedes”…

Mi hermana y yo nos quedamos admirando aquel pollón, hasta que al fin, nuestras manos lo tomaron empezando a estimularlo, el primo correspondía de maravilla a nuestros toqueteos, mi hermana fue la primera en llevárselo a la boca recorriéndolo desde los huevos hasta el glande, me gustó la forma en como su lengua lo hacía, hasta la manera en como se estaba atragantando con ese tubo de carne era una delicia, sobre todo ese curioso sonido que se produce, en ese momento descubrí que mi hermana era de garganta profunda, al sacárselo de la boca sus labios y la verga quedaban llenos de una espesa sustancia combinada de saliva y fluidos preseminales, mi hermana si que es una maravilla pues hacía burbujas (más tarde me enseñaría como) con esa deliciosa mezcla, luego me lo ofreció para probarlo, le escupí y mi hermana siguió lamiéndolo, del mismo modo era una delicia verla sujetar el glande con los dientes haciendo que su lengua jugueteara con la extremidad del pene.

Luego me uní a ella, mi lengua ahora recorría aquel miembro como dijo digno de un semental, mi hermana del lado izquierdo y yo del derecho recorríamos su falo, nuestras lenguas le hacían las caricias más tiernas que esperamos jamás le hayan hecho, despacio, suavemente subíamos, en ocasiones nos alternábamos, es decir, mientras yo lamía hacía arriba mi hermana lo hacía abajo, luego mis labios acariciarían esa gordura, no podía creer lo gruesa y erecta de la tranca, si que nos estábamos embelesando con su macana, por momentos mi hermana le lamía la punta de su lanza y yo los huevos, luego intercambiábamos, hasta que al final ambas masajeábamos con nuestras lenguas sus huevos, los succionábamos con fuerza, los jalábamos con nuestras bocas y los soltábamos, el primo intento jalarse su manguera pero nosotras no lo dejábamos entre risas morbosas recorríamos al mismo tiempo lentamente su mástil, ya al llegar al glande, nuestras lengua se enrollan como serpientes, le dábamos besitos, seguía saliendo fluido preseminal, esa verga palpitaba de placer como queriendo estar más dura de lo que estaba, nuestras lenguas se llegaron a tocar a rozar, hasta que al fin la boca de mi hermana y la mía se encontraron para fusionarse en un beso quedando en medio el glande, el primo se quejaba suavemente de placer. De repente mi hermana quitaría la película, cosa que desagradó a nuestro bien dotado invitado, pero ella repuso “tranquilo corazón, al rato la seguimos viendo, mi hermana nunca ha visto zoofilia, sería más rico que los tres juntos la viéramos”, como es costumbre en ella, puso algo de música sensual, cachonda, a ella le gusta hacerlo mientras tiene una buena cogida, aunque a veces pone algo de música electrónica o reageton, según su estado de ánimo.

Mi hermana se sentó en la cama y deshizo el nudo de su baby doll, aquel fue un maravilloso espectáculo, el ver como eran liberados sus enormes senos, acto seguido se puso de a perrito en la cama, mi primo se acodó y le dejó ir de un tirón su enorme verga, pensé que tal vez la había lastimado, pero no fue así, arqueó su espalda para poder tragarse eso sin dolor, yo me quedé sentada a un lado viendo entrar y salir de manera violenta y sin piedad el miembro de mi primo y sus pelotas gordas rebotaban y colgaban, mi hermana gemía como nunca, creo que jamás había gemido así, ladraba de placer, me gustaba sentir el movimiento brusco de la cama por la cogida y como la cabecera golpeaba bélicamente la pared, por instantes creí que se desarmaría la cama.

Luego de un rato yo quise intentar pero mi hermana al principio no quiso, el primo la convenció para dejarme probar, así que me acosté boca arriba, mi hermana me quito mi tanga y abrió mis piernas, le pidió al primo que fuera dulce y tierno conmigo, ya que era la primera verga real que probaría, mi hermana me besó, acarició mi rostro, me pidió que respirara y me relajara, escupió en mi pucha para lubricarla al igual que lo hizo con la reata, tomó con su delicada mano el palo del primo, ella misma lo estaba introduciendo, sentí una mezcla de dolor y placer a un tiempo, no supe, creo que perdí el conocimiento por instantes, miré con cierta incertidumbre mi cuca siendo abierta por aquella majestuosidad de verga, mis labios vaginales se abrían lo más que podían tratando de dar cabida a semejante instrumento, supliqué misericordia ya no quería seguir, pero el primo se negó cruelmente, me mordía los labios, los apretaba fuertemente, lanzaba quejidos ahogados, jalaba aire para aflojar mi cuerpo, pujaba para tranquilizarme, incluso chillé, mis manos apretaron firmemente los barrotes de la cabecera de la cama, no lo podía creer, hasta que logró meter casi la mitad, mi hermana dijo “hasta ahí cariño no quiero que te lastime nuestro semental”, el primo comenzó a moverse con cierto tacto, pero yo noté una expresión de desesperación en su rostro por querer penetrar con firmeza, yo no aguantaba la penetrada, me mataba a cada instante, sentía que mi cavidad vaginal era desgarrada, triturada, ese pedazo de carne a como de lugar estaba abriéndose paso en mi interior, el primo dijo “vaya mamita si que estas nuevecita, así me gustan las zorras”, incluso me estaba haciendo llorar de dolor, de placer, de felicidad, mi hermana me consolaba con besos, acariciaba mi cabeza, mi frente, mis senos, mi cuca, mis piernas abiertas, limpiaba mis lágrimas con su lengua, me tomó de la mano y la estreche con fuerza, le dije que la amaba, que estaba agradecida con ella por estar presente ayudándome en mi primera cogida real, el rechinar de cama era lento, delicado, no duré mucho, el primo sacó un poco su tronco e inmediatamente con gritos y sollozos expulsé chorros de fluidos vaginales parecía una fuente de placer bañando por completo su estaca y las sábanas de la cama, ellos estaban más que complacidos al verme así revolcándome de placer, estaba muy agitada, temerosa, un poco apenada por no darle el placer a mi macho como es debido, temblaba por aquel increíble orgasmo, mi hermana me besó y apapachó lindamente.

Ya una vez repuesta me dijo “no te preocupes mi amor, no pasa nada, pero no podemos dejar así al primo” señalando su pene erecto, inmediatamente como toda una profesional del sexo, mi hermana cogía con el primo, cada posición que hacían era con gran maestría, lo que más me encantó fue verla cabalgando a ese macho, pues movía de manera increíble su gran culo, era como ver una gelatina a la que le pegas, no había duda en mi, de lo experta que es ella en la cama, y claro está de lo puta que es, la cama se movía con tan rapidez y fuerza que casi me tiran al suelo. Sentí un poco de envidia y celos al ver a mi hermana gozar con ese tremendo bat, pensé que yo algún día podría hacerlo.

Comencé a masturbarme viendo a esos dos follar como desesperados, hasta que un poco antes de terminar, mi hermana acostó al primo en la cama y a mi a su lado, con sus tremendas tetas mi hermana le otorgaba una bien hecha rusa (o cubana), era toda una escena, un buen miembro en medio de semejantes melones, mi hermana miró a mi primo como acordando algo y ambos me acostaron en medio de la cama, nuevamente mi hermana me abriría las piernas, la verga palpitante de mi primo otra vez apuntaría a mi cueva, como un lindo detalle, mi hermana colgaría nuestras tangas en la descollante macana de nuestro semental, le dio una profunda chupada, luego escupió en mi vagina, acto seguido esa polla estaría cavando por segunda vez mi hoyo, está vez sentí un poco de alivio, pues perfectamente mi cuca la recibiría, pero solamente la mitad, la penetrada tenía un movimiento sabroso, el rechinar de la cama era suave, rico, mis quejidos eran delicados y excitantes, hasta que el muy cabrón dejaría en mi panocha hinchada su semilla, lo más sorprendente fue que al sacar su instrumento de mi, mi vagina expulsaría su semen, mi hermana lo limpiaría tiernamente, al igual que la estaca del primo, luego de reposar un rato, las dos lo acostamos para seguir mamándole esa vergota. Al final los tres nos quedaríamos dormidos, por supuesto él medio de nosotras y nuestras manos sobre su mástil.

Mi primo se quedaría con nosotras por una semana, fue la más intensa que yo haya tenido, hicimos de todo, en varias sesiones mi hermana usaría su strap on para que junto con el primo me dieran sendas cogidas. Al primo lo atendimos como se dice a cuerpo de rey, lo consentíamos demasiado, incluso le hicimos mi hermana y yo un lesbian o french show, ya al último de su estancia le regalamos una sesión de fotos le prestamos nuestra cámara fotográfica y posamos para el de todas las maneras que se nos ocurrían, claro está, según su morbo le dictaba a nuestro primo posamos como el quería, dos fotos me gustaron, una donde yo abro bien los ojos como denotando asombro mientras chupo el pene del strap de mi hermana, otra foto (luego veríamos una igual por Internet) donde mi hermana sale usando una diminuta tanga negra con un vestido de red muy corto y ajustado, se soltó el pelo, está de espaldas con la cabeza girada a la izquierda, y yo usando un micro vestido color negro con mi mano posada en su glúteo izquierdo, es el único hombre que ha dormido con nosotras dos al mismo tiempo… por ahora, luego mi hermana me hizo un certificado que decía “licencia para mamar” y a mi primo un colgante para su verga que decía “precaución exceso de largo”.

Besos

Elodia