Pasión de Legionarios
En un bar de carretera me esperaba una de las mejores folladas de mi vida a manos de unos legionarios ante la atonita mirada de mi familia.
Eran las dos de la madrugada y conducia el coche a una velocidad constante por las carreteras de Andalucia, faltaban unas 3 horas para llegar a nuestro destino y tanto mi esposo como mi hijo estaban cansados y me pidieron parar a tomar algo, la carretera estaba casi desierta y no habia zonas de descanso asi que decidi parar en el primer bar de carretera que encontre.
Era un lugar pequeño con un cartel luminoso que la verdad no se veia muy bien, sino fuera pq buscaba un lugar donde parar de forma casi inmediata seguramente no hubiera reparado en aquel lugar.
Cuando entramos en el local una nube de humo nos golpeo en la cara, el local estaba vacio de no ser por el camarero y una mesa con 5 hombres al fondo, como pude ver al acercarme mas, eran 5 legionarios e incluso llevaban la cabra con ellos.
No pude dejar de fijarme en que nada mas entrar clavaron sus ojos en mi, en aquel momento empece a arrepentirme de no haberme puesto sostén y de llevar solo una pequeña falda y un top ajustado, pedimos algo para tomar y uno de los legionarios se acerco a saludarnos, nos pregunto a donde ibamos y se mostro muy amable con nosotros, sali fuera a buscar unas cosas al coche y cuando regrese al bar mi marido y mi hijo estaban sentados con los legionarios, riendo y bebiendo, al parecer los militares habian invitado a mi esposo y mi hijo a tomar unas copas, eso no me gustaba nada, se como afecta el alcohol a los 2, mi hijo tiene solo 18 años y mi esposo nunca ha sido de beber por lo que con 2 cubatas ya se pone tonto.
Les dije que teniamos que irnos pero uno de los legionarios me dijo que esperara un poco y me invito a bailar, yo me negue de forma educada pero mi esposo tomado como estaba al igual que mi hijo me animaron a hacerlo asi que el legionario que debia ser el de mayor graduación pidio al camarero que pusiera musica y empezo a sonar una cancion.
Pase unos 10 minutos bailando con aquel hombre cuando uno de sus amigos le grito,
"Estos ya estan listos Sargento"
De repente el hombre tiro de mi top, quedando fuera mis senos, entonces yo abri los brazos y los puse alrededor de cada uno para intentar taparlos, le grite al hombre si es que se habia vuelto loco y me llame a mi esposo y mi hijo pero los 2 estaban tan borrachos que solo miraban embobados sin casi poder ponerse en pie, incluso parecian a punto de quedarse dormidos.
"Si que estoy loco señora, loco por follarla aquí y ahora, desde que la he visto entrar con su familia, dejando esas tetas libres agitandose de arriba abajo nos ha puesto como locos"
Yo trate de salir de alli pero el camarero me detuvo y me dijo que el bar estaba cerrado, una sonrisa burlona aparecio en la cara de los otros legionarios, otro de ellos se levanto y se acerco hasta mi.
"Vamos señora, lo esta deseando, vera lo que son pollas de verdad"
Después de eso, el sargento y el que acaba de hablar tomaron una de mis tetas cada uno y los empezaron a chupar, yo intentaba resistirme pero eran bastante mas fuertes que yo, empezaron a manosearme toda, de momento uno de ellos en un jalón durísimo me bajo la falda y las bragas al mismo tiempo, y empezaron turnándose cada uno de ellos a meterme los dedos dentro de la vagina y en el ano también, sin dejar de lamerme las tetas, yo ya solo movía mi cabeza hacia atrás y soltaba suspiros, no podia evitarlo, lo que me hacian aquellos hombres me estaba gustando, en 19 años de matrimonio nunca habia sido infiel a mi esposo, ni siquiera habia tenido deseos de hacerlo, pero aquella noche no queria que aquellos hombres pararan, sus manos me llevaban a los limites del placer y aunque sabia que estaba muy mal, el que mi esposo y mi hijo lo vieran todo no hacia mas que aumentar mi morbo.
Estaba completamente desnuda rodeada por aquellos 5 hombres, el camarero se habia sentado junto a mi hijo y mi esposo y disfrutaba con ellos del espectáculo.
"Vaya follada le van a dar a su señora, ya vera como la dejan los agujeros ,jaja"
"Arrodíllate", me dijo el Sargento Yo sumisa y entregada a los que aquellos legionarios tan rudos quisieran hacerme obedeci quedando a la altura de las rodillas de ellos y empezaron a masajeárme nuevamente las tetas lo que hizo que mis pezones se pusieran muy rígidos producto obviamente de la calentura que tenia.
Los 5 no tardaron ni 1 minuto en quitarse los uniformes y quedar desnudos ante mi, no paraban de cascarse las pollas y sin saber como me lance, tome la polla del que estaba por delante de mi con una mano y con la otra la de otro y las empeze a cascar. "Nosotros también queremos señora" Entonces solte la polla que estaba enfrente de mi para tomar otra, pero la que había soltado me la meti en la boca, la agarre con la boca y la empeze a chupar como mejor sabia. La humedecía bien y se podía escuchar el chapotear de la polla en mi boca. Esto hizo que uno de los que se estaba pajeando se viniera con grandes chorros de semen que empaparon mi mano y mi brazo, además del suelo del bar.
El que estaba desocupado, fue por detrás de mi para meterme varios dedos en el coño que a esta altura estaba muy mojado. Tenian que haberme visto, con semen en toda una mano, pajeando a uno, otro que le metía 3 dedos en el coño mientras me amasaba mis nalgas, con una polla en mi boca y mis tetas llenas de saliva producto de mi trabajo mezclada con liquido preseminal del soldado al que chupaba. En eso que sin quererlo tuve un orgasmo, cuando abri la boca, producto de mi placer, el soldado al que estaba pajeando se corre, tirando su abundante semilla en mi boca, cara, cuello, tetas, en fin, me pringo toda.
Uno a uno fui mamandoles el pene, parecia una loca, al empezar con cada uno, pasaba la cabeza del pene por mi lengua, para después lamerle los testículos y luego hacerla desaparecer toda en mi boca, y así uno a uno se la fue mamando, mientras movía mi cabeza como frenética, con mis dos manos masturbaba a los otros. Después, de mamarlos a los cinco, de repente uno de ellos me puso de pie y el se sento en una silla, me acerco a el y yo de espaldas me sente sobre el hombre incrustándome el pene que desapareció en mi vagina, así estuve un rato, hasta que eyaculó dentro de mi, ni siquiera me importo en aquel momento el quedarme preñada, la calentura era superior y me encantaba saber que me estaban follando delante de los mios.
Luego, uno de los legionarios mas jóvenes me dijo
"te voy a follar, ¿quieres?
Si, por favor conteste yo
"Dímelo, mas alto, díselo a tu esposo y a tu hijo"
-"Quiero que este hombre me folle, que me llene con su leche"
Me tiro encima de una mesa del bar, puso mis piernas encima de sus hombros y me la metió entera de un golpe, me corrí nada mas meterla tensando mis piernas y golpeando en el costado del soldado.
Se movía como un animal, me golpeaba con sus huevos en mi coño y se me oia jadear como una loca tras poco mas de 5 minutos en la misma postura me pegó cinco o seis vaivenes, se puso rígido y pude notar como se corria en mi interior.
Yo le agarré del culo e hice que me la clavara hasta el fondo mientras vertía su liquido en mi rajita,lo pude notar perfectamente me estaba llenando el coño con su lechecita, en esto se quitó encima mío, yo todavía no me había corrido , me había dejado completamente caliente , el coño abrasando , lleno de su leche que me escurría por todos sitios ,necesitaba esa polla otra vez dentro de mi y esto no tardo en ocurrir, otro de los soldados, esta vez el mas joven que tendria mas o menos la edad de mi hijo se abalanzo sobre mi ,me dejo la polla tiesa a lo largo del coño , me miró fijamente a los ojos, no se atrevía, por su edad imagine que no tenia mucha experiencia en el terreno sexual y el que mi esposo y mi hijo estuvieran mirando a pesar de que parecian no darse cuenta de nada le hacia avergonzarse.
Estaba tan caliente que deseaba que ese joven me la metiera hasta que su polla rozara mi utero asi que le convenci.
"No te preocupes por mi esposo ni mi hijo, miralos, estan agilipollados por el alcohol, se lo merecen por no saber beber, son testigos de cómo me follan y ni se percatan de ello, follame cariño, metemela hasta dentro"
Le dije apoyando mis mano en su culo duro, noo se hizo de rogar, me la puso en la entrada y de un golpe entró hasta el fondo, se me nubló la vista, perdí la conciencia, estaba en el cielo, esa polla, larga y dura se movía en mi coño como los ángeles, en 1 minuto me corrí chillando como una loca.
Pero el joven tenia aguante y durante mas de 10 minutos estuvo martilleando en mi coño con una velocidad y una potencia que no habia conocido en todos mis años de matrimonio, desde luego mi marido no me habia follado asi de bien en la vida, aquel jovencito sabia como usar su polla y me sorprendio lo que me dijo después de dudar tanto antes de metermela.
"Señora, quiero correrme en su boca"
Yo no lo dudé ni un momento, no pensé en que nunca lo habia echo, siempre me negue a hacerlo con mi marido, era algo que me parecia asqueroso, pero en aquel momento estaba mas cachonda que nunca en toda mi vida, solo pense que era una polla maravillosa que me había dado el mejor polvo de mi vida, le eché a un lado y me la metí en la boca, chupé con fuerza el capullo, esa pedazo de polla , apretando lo máximo que podía con mis labios, no tardó nada, se derramó en mi boca, en la boca de la puta que se la estaba mamando delante de su esposo y su hijo, me lo tragué todo, en agradecimiento por su polvo. Los dos que aun no se habian corrido me cogieron y me hicieron ponerme a 4 patas, frente a la mesa de mi familia, uno se puso delante y me metio la polla en la boca, el otro se puso por detrás y me la enchufo a traicion, en esa postura y con 2 pollas llenando mi boca y mi coño estuve durante unos minutos hasta que el que me follaba la boca quiso probar mi coño, me cogio en brazos y apollo contra la barra del bar, apunto a mi cueva y me dejo caer sobre su polla me la metió hasta el fondo, sin dejar de bombearme hablaba con sus compañeros sobre mi, me entraba y salía jalándome de la cadera, yo gemía y disfrutaba, me estremecía el saberme cogida y observada, entonces el que me estaba bombeando el coño me entro con mas fuerza y empezó a eyacular en mi, sentí su leche y las contracciones de su polla al inundarme de su liquido, me la saco poco después para dejarle el lugar a el Sargento que ya estaba preparado para follarme de nuevo.
Se tumbo en una de las mesas y yo me monte sobre el, su polla entraba como un embolo haciéndome gemir y pujar, sus aplastónes a mi cuerpo eran tremendos, a pesar de su delgadez física tenia una fuerza tremenda, sus embestidas me llegaban al fondo y me sentía perforada sin piedad pero gozaba con gusto, yo me alzaba y me dejaba caer, estaba en el cielo mismo con ese hombre, me la clavé toda y me moví en círculos como tanto me gusta, sintiendo su polla completamente llenándome el coño, me vine tremendamente, grite deliciosamente, me estaba entregando a ese legionario de manera deliciosa, sus amigos solo nos veían coger, miraban como me tragaba con mi coño su polla una y otra vez hasta el fondo y luego movía mis nalgas para subir casi hasta la cabeza y luego me dejaba caer de nuevo envainándome su polla así hasta que quede vacía, agotada, estremecida, entonces vino algo delicioso, el jovencito ya tenia su polla lista de nuevo para el ataque y empalada por el coño como estaba por su superior me la apunto al ano y me la empujo haciéndome respingar del dolor que sentí, unas fuertes punzadas en mi ano me indicaron que estaba forzándome, yo grite pues me dolió pero el me agarro con fuerza por mis nalgas y me entro mas, pero no entraba toda aun, me la saco y mi ano quedo abierto, me hecho un escupitajo en el culo, me untó su saliva y me dio con mas ganas, me embistió de tal forma que su polla entro casi completa. "Vaya culo, lo tiene muy estrecho, vamos a encular a esta tia compañeros"
El joven me la metia y sacaba del culo con fuerza, me estaba destrozando el recto, yo sentí que me rompía pero estaba disfrutando como nunca, cierto que no era yo virgen del culo, pero solo lo habia echo con mi esposo un par de veces o tres, sus amigos mientras tanto, me pusieron sus pollas frente a la cara, yo abrí la boca estúpidamente y uno y otro me la metían alternadamente en mi boquita, pero yo no sentí mas que mi culo ardido e invadido por ese chico salvaje que me estaba culeando tan sabroso, era un experto, me la metía y me la dejaba dentro un poco, luego me embestía rudamente y muy rápido y me la dejaba de nuevo toda metida, yo sentí tronar mi culo a cada metida, eso junto con la polla del sargento que llenaba mi coño me hacian estar el gloria.
Cuando el joven se corrio, me lleno el culo de leche y se sento junto a mi familia, estaba agotado igual que yo pero sus compañeros tambien querian probar mi.
Yo no pude más que obedecer, de hecho lo deseaba, estaba con más ganas de que me culearan y me ofrecí a ellos así como lo querían, y al mismo tiempo pensaba en lo mucho que mi esposo e hijo sufririan si se dieran cuenta de lo que aquellos hombres me estaban haciendo.
Me saque la polla del Sargento del coño y me puse a 4 patas en el suelo para que uno a uno pasaran por mi culo, sentí la polla del primero entrar en mi dolorido culo y me estremecí al sentirlo, mi ano estaba muy sensible y a pesar de estar bien abierta me dolió y grite, entro una y otra vez, yo por mi parte gemía y disfrutaba de ser enculada de nuevo, en lo mas emocionada estaba yo cuando el muy idiota se me vino dentro, su leche me lavo el recto y al salir me escurrió su liquido blanquecino, el otro se tomo su tiempo, me entraba y salía delicioso, me entraba hasta el fondo y me la sacaba también muy lentamente, provocándome sensaciones deliciosas, todos probaron mi culo pero solo 2 de los legionarios se corrieron en el, el resto queria echarme su leche en otro sitio.
Los 3 que faltaban por correrse nuevamente hicieron un circulo y descargaron sus pelotas sobre mi, me llenaron de leche por completo, tanto la cara como la boca o mis tetas, lo que entro en mi boca fue directo a mi estomago.
Luego me ayudaron a limpiarme y a meter a mi esposo y a mi hijo en el coche, me dieron las gracias por el polvo y yo antes de irme y con mi familia ya en el coche les volvi a chupar las pollas, esta vez tambien me comi la del camarero, me habia vuelto una puta o tal vez ya lo era pero no lo sabia, luego subi al coche y nos fuimos, mi esposo y mi hijo despertaron a 15 km de casa, les dolia la cabeza y para mi alegria me preguntaron que habia pasado puesto que solo recordaban entrar en el bar y tomar unas copas con unos militares, por suerte para mi, el resto solo lo se yo y aquellos legionarios que me hicieron gozar como nunca.