Paseando por el parque... II

Colocando sus manos sobre mi cintura a ambos lados de mi calzona, tirando fuertemente de ella hacia abajo y sacándola por mis pies, bonitas braguitas tienes... mmm

Paseando por el parque... buscando con quien disfrutar II

Sabéis una cosa… no hay chico que tras verme conectada y preguntarme por mi estado… su siguiente pregunta es saber qué es lo que más me gusta hacer, no quedándome más remedio que intentarle explicar que tras llegar a casa lo que más me gusta hacer y no solo en la cama sino en el mismo sofá… es masturbarme.

Me gusta ponerme cómoda… no importándome si me quito las braguitas o dejármela puesta, comenzando a recordar mi última experiencia… pero no siempre es la ultima sino la mas morbosa, aquella que con solo pensar en ella se me moja las braguitas sin llegar a tocarme… esa es la ideal. A veces me masturbo aunque haya finalizado mi relación en menos de un cuarto de hora… mmm, lo primero que hago es llevarme un par de dedos a la boca a modo de humedecérmelo… mmm y en especial a chuparme cada una de las yemas de mis dedos… en especial la de mi dedo corazón… mmm.

Comienzo por deslizar mis dedos alrededor de mi pubis… ooohhh, sintiendo mis cálidos dedos rozar mis labios vaginales… mmm, continuo por mi clítoris y sobre todo en mi mas que sensitiva vulva… mmm,

con la palma de mi mano deslizo mis dedos de arriba hacia abajo sobre mis labios vaginales y mi vulva… ooohhh alternándolo con movimiento circulares sobre mi vulva… aaahhh.

Llevada por el mismo placer retiro de mis manos y me la llevo a la boca de forma que pueda saborear mis fluidos… mmm, me introduzco no solo uno sino hasta dos de mis dedos dentro de mi boca y los saboreo de la misma forma como si fuera un miembro… ooohhh. Pellizco mis pezones que noto que están duros y el volcán de mi entre pierna me pide nuevamente caricias… no me puedo contener, por lo que comienzo nuevamente a acariciarme mientras me estremezco y gimo de placer.

Pero no puedo mas y mientras con un par de dedos me masturbo… penetrándomelos en mi orificio vaginal… aaahhh al tiempo que comienzo a hacerme un dedo sobre mi vulva… ooohhh, mi dedo entra una vez tras otra dándome ese placer que necesito y mientras me estremezco comienzo a tener convulsiones y calambres que no es otra cosa que mi primer orgasmo… ooohhh.

Cuando digo que os voy a hacer partícipe de mis confesiones… os lo digo de corazón, pues no solo son confesiones… sino anécdotas, vivencias, experiencias, desahogos, alivios, revelaciones y porque no justificaciones de aquellos momentos.

En estas últimas confesiones os estoy haciendo saber momentos o anécdotas de mi adolescencia, siendo estos años muy instructivos... mmm. Os debo confesar que cuando realmente me inicie en esta “desviación” cuando cursaba 7º de E.G.B., algunos diría que tendría alrededor de 12 años que era del grado de la primaria, pero lo cierto que no era tan buena en mis estudios, haciéndome repetir hasta en dos ocasiones por sugerencia de mis profesores.

Repetí por dos cursos… 6º y 7º y en su momento un sicólogo al cual me llevaban mis padres les hizo saber que el motivo más probable del fracaso escolar no era otro que un abuso, ya sea en el hogar con algún pariente o alguien cercano o por alguna persona ajena. Haciéndoles saber que esto se sabe por las pruebas realizadas en mí y por las charlas, mostrando entre otros síntomas desconfianza, aislamiento, incomunicación, hostilidad, cambios de humor, vergüenza e incluso culpabilidad. Por lo que en vez de acabar con 14 años que era lo que mandaba el sistema en su día al finalizar la E.G.B., yo los acabe con 16 años e ingrese gracias a los contactos de mi padre en BUP, COU, selectividad y finalmente la Universidad pero no cursándola en Sevilla sino en Madrid.

Pero esta confesión se en marca cuando yo cursaba octavo curso y seguía frecuentando el parque María Luisa sobre todo de medio día hasta el atardecer, almorzar en casa ligera y me marchaba justificando que había quedado con las compañeras de clase para repasar… claro esta era una trola, pero mi madre no decía nada y me dejaba marchar. Mirad os debo confesar que son muchos los recuerdos por no decir anécdotas al menos para mí… aunque para vosotros serán confidencias, todas llegado el momento se me agolpan de manera que quieren salir... desean liberarme de este peso y de alguna manera redimirme de mis pecados, librarme de esta mancha moral y rescatarme de esta soledad, pues esta adicción es lo que tiene.

La primavera estaba comenzando a entrar y por los calurosos días más parecían que eran de verano, tras atravesar las cancelas los enormes eucaliptos ensombrecen el parque que aun así hace un calor bochornoso. Desde siempre al parque se le conoce por otro tipo de experiencias pues es bien sabido por muchos que aquí los hombres buscan a otros hombres, pero no todos los hombres maduros, ancianos o viejos buscan jovencitos pues como heteros que nacen si se le pone a tiro una jovencita… van a por ella.

Paseando por el interior del parque por la Avenida Hernán Cortés pero no en dirección hacia la glorieta de los hermanos Álvarez Quintero, sino hacia el lado contrario caminaba con mi vestuario del colegio… mi falda tableada a cuadros y mi blanca camisa, escuchando música mediante los auriculares aunque en verdad no los tenía muy fuerte mas por poderme enterar si me llaman.

Aun recuerdo como aquel señor se me presento… ¡Hola me llamo José!, era un hombre mayor… calcule y que el mismo me lo certifico de cerca de 60 años, cabellos canosos y abundante, gafas y de físico corpulento… aunque más bien diría de barriga cervecera. Desde que me conoció comenzaba a traerme publicaciones de adultos pues había observado que me atraía este tipo de publicaciones… revistas, comic, etc., y poderlas ver juntos… dejando caer su mano y hacérmela a lo largo de mis muslos por debajo de la revistas… mmm. Notando la tremenda erección que este tenía… cuando el mismo cogía mi mano y la dejaba caer sobre su entre pierna…mmm, claro esta no le hacía nada… creíais, que soy una señorita.

Bueno continuo… mi amistad con esta persona era solo y puramente por el morbo, hasta que un día introdujo su mano entre mis muslos y di tal sobresalto que falto poco para haberme incrustado entre los azulejos. Comenzó a deslizar la yema de sus dedos por mi ingle… mmm, permanecí callada pero no pude evitar que dejara que escuchar algún que otro gemido de satisfacción… ooohhh… uuummm… ooohhh, comenzó a masturbarme hasta hacerme obtener un fabuloso y brutal orgasmo, tanto que creí haberme orinado y regrese a casa avergonzada mientras este liquido aun seguía deslizándose por la parte interna de mis piernas, pocas semanas después me entere que esto no fue orín sino los fluidos de mi orgasmo.

Pero como toda relación turbia y mantenida con mentiras, descubrí con el tiempo que esta persona me seguía y eso que creía tomar todas las precauciones, hasta que su insistencia tuvo su fruto. El primer aviso que me dio esta temerosa amistad fue cuando apareció con su bicicleta en la puerta de mi colegio, pensé tierra trágame… llegando a salir a las malas y puse fin a esa relación.

Pero como bien sabéis el no estaba por la labor de perder su objeto de disfrute y mediante la fuerza y las amenazas, consiguió de mi todo lo que deseaba hasta el final del curso… uuuffff. Por un lado tenía satisfacción por no verlo más pero por el otro lado temía que echara de menos… esas caricias, ese disfrute que le hacía a este hombre cada día… me tenía prendada.

Durante mis vacaciones y el tiempo que no nos marcharíamos a la playa, permanecía en casa y en con mis amigas… paseaba en calzonas (o pantalón corto deportivo como mejor querías) y camisetita por todos los lados. Hasta que cierto día lo vi a lo lejos espiándome… me lleve el susto de mi vida, salí huyendo sin ser vista… creyendo que no me había visto… al menos eso creí, pero una vez en casa me dio por mirar por la ventana y se encontraba el, haciendo señas que bajara… y así hice más por miedo que por otra cosa.

Estuvimos paseando hasta que encontró un sitio el cual me hizo entrar y volvió a decirme…

  • "Voy a contárselo a tus padres, me has cabreado muchísimo y tendré que ser muy malo contigo, me has comprendido", me decía.

Aunque yo sabía perfectamente que en verdad este no podría, ya que sino el quedaría encerrado en la cárcel con el cargo de abuso a una menor, pero lógicamente calle y he hice mi papel de niña asustada y temerosa de sus palabras. Entonces colocando sus manos sobre mi cintura a ambos lados de mi calzona, tirando fuertemente de ella hacia abajo y sacándola por mis pies, se incorporo y tras tomar mi camiseta tiro de ella hacía arriba hasta sacármela por la cabeza… dejándola caer al suelo, quedándome en ropa interior ante el e intentando taparme con los brazos con rostro avergonzado.

Continuo por quitarme mis intimas prendas y una vez desnuda ante él, comenzó aquello que tanto le gustaba que no era otra cosa que disfrutar de mi joven e inocente cuerpo… besando y chupando cada centímetro de mi piel, lamiendo y mordisqueando mis pechos e endureciendo mis pezones… aaahhh, dándome alguna que otra bofetada en mis nalgas al tiempo que penetraba mis orificios con sus gruesos dedos… ooohhh.

Ese día se me marco… no por el hecho de lo que sucedió, sino cómo sucedió… uuummm. Me coloco a cuatro patas al tiempo que me ofreció su miembro que por cierto estaba muy dura, me pidió que se lo acariciara y claro esta obedecí, comencé a acariciárselo… sintiéndola caliente y gorda… no muy grande por cierto, pues apenas tendría unos 16 cm., de tamaño… pero sí de grandes testículos. Tomaba sus genitales por la base de este y comenzaba a restregármelos por la cara… mmm, olía ese nauseabundo olor que tanto me embriagaba aunque no comprendo el motivo… ooohhh.

Luego me pidió que le diera una chupada y no hizo falta pedírmelo por segunda vez, me introduje su glande dentro de mi boca al tiempo que con la punta de la lengua la recorría (joder, repetía todo aquello que había visto en las películas porno de mi padre), saboreaba su grande y hice que él lo disfrutara con la mejor manera que pude, pude apreciar el sabor de aquellos líquidos preseminales salía de su glande… de su capullo… mmm, los notaba fluir dentro de mi boca. Me estaba volviendo loca con aquel miembro en mi boca… al tiempo que ahora yo jugaba con mis deditos con mi vulva… mmm.

-"Aaaaaahhh... que gusto sigue… sigue no pares, puta", exclamaba entre jadeos.

Saqué de mi boca su miembro y tras levantársela… recorrí con la lengua todo su tronco… aaahhh, al tiempo alce la vista y le mire… observando su rostro… veía como ese sesentón disfrutaba cómo nunca… aaahhh. Me aparto con violencia al tiempo que soltó…

  • “Aun no me quiero correr… todavía no", me dijo.

Tras colocarse detrás de mí y tras posar ambas manos sobre mis nalgas… separo mis glúteos, comenzado a lamer con esa espera lengua mis nalgas… ooohhh, chuparme entre mis glúteos y sentir esa lengua en mi orificio… ooohhh. Creía que me iba a desmayar del gusto… de ese placer que me estaba brindando, no me dejaba moverme siendo el mismo quien levantaba mi trasero para que su lengua me penetrara mas y mas profundo… ooohhh. Deseaba que me penetrara pero no podía pedírselo… ooohhh, quería que fuera él quien lo hiciera… aaahhh, haciéndome lograr al menos un par de orgasmo (joder, con el jodido viejo), pero ese momento no llegaba y me dejaba satisfecha.

Nos llevamos mucho tiempo disfrutando y cumplí los 17 años y José mi viejo amante, quería darme un regalo de cumpleaños… según el… deseaba darme el mayor de los placeres, un recuerdo para cuando el no este y que siempre lo recuerde. Ese día quedamos a la misma hora en el mismo sitio de siempre, aun recuerdo que cuando nos encontramos no pudimos entrar en esos matorrales al haber gente en su interior también disfrutando, por lo que mi viejo amante me condujo a otro lugar… unos cañizos que se encontraba cerca.

Descubrimos en su interior que era un lugar donde dejaban ladrones pertenencia de otros que ya no le servían, restos de interior de maletas, bolsos y bolsas de manos… seguramente robadas a turistas, pudimos ver que la mayoría eran ropas de mujer y a este degenerado no se le ocurrió mayor idea de disfrazarme con aquellas ropas. Lógicamente me negué pero aun no sé cómo este acabo por convencerme, diciéndome…

  • "Mira vístete con estas ropas… veras que morbo, cuando te las pongas… te aseguro que disfrutaras", me dijo.

  • “Mira por donde en el día de tu cumpleaños vas a disfrutar como nunca”, me soltó… mientras me señalaba algunas prendas del suelo.

No quise desnudarme porque deseaba que fuera él quien lo hiciera… y no me equivoque… mmm, aun recuerdo cuando se me acerco y con cara de pocos amigos comenzó a desnudarme… ooohhh (ostias, obtuve un enorme orgasmo con solo desnudarme… jode, fue… mmm). Tras desnudarme me dio unas braguitas… creo recordar que eran un tanga de hilo, un sostén de encajes, unas medias de ligas con ligueros, una falda y un top… ropa que iba cogiendo de diversas maletas, una vez que me las puse… pude apreciar la enorme erección que marcaba bajo su pantalón… mmm, miro alrededor dándome unos zapatos y tras encontrar pinturas me las puso en la cara… poniendo fin a su obra de arte.

  • "Mira te he convertido en una puta… mi puta, mientras palmeaba fuertemente mis nalgas", me dijo, mientras me zarandeaba.

Me encontraba muy caliente, mojando las braguitas, me sentía extraña… pero muy excitada, José se acerco a mí con la intención de besarme… cosa que intente evitar cerrando mi boca, , besándome, cerré mi boca pero me forzaba a abrirla y lo consiguió. Buscando con su lengua la mía, coloco mis brazos alrededor de su cuello, sentía sus manos recorrer mi cuerpo, bajando para acariciar mis pechos… y mis nalgas.

Mis pezones se encontraban erectos y aun mas al sentirlo rozar con ese sujetador… mmm, acariciaba mis senos mientras restregaba su bulto contra mi vientre… ooohhh (coño, la excitación y la calentura era ya mutua). Aun ignoro como tuve el atrevimiento de poner mí mano sobre su miembro… ooohhh, baje su cremallera e introduje mi mano en el interior de su pantalón, bordeando su bragueta y por fin coger su miembro que daba la sensación que pedía a gritos “libertad”.

  • "Por favor… trágate mi polla”, me suplico.

y no como pero baje por su cuerpo dándole pequeños besos, hasta llegar a su miembro que primero cogí sus testículos con delicadeza y comencé a chupar, mi lengua empezó luego a recorrer el tronco, dibujando y sintiendo como se le hinchaba aun mas sus venas marcadas por cada lametón, tragaba y succionaba, pequeñas lamidas y besos su glande rebosando liquido presemilinar recogiéndolo y tragándomelo, cogí y me la traje completamente en mi boca hasta el fondo de mi garganta, la volvía a sacar y meter frenéticamente, sin dejar de acariciar sus testículos, sentía como se le hinchaban sus huevos y su polla se iba a correr, entonces acelere con mi mamada.

Pero José no me dejo seguir, separándose de mi me hizo levantarme y se coloco detrás de mí, volviendo a acariciar mi cuerpo pero esta vez desde atrás… notando como refregaba su miembro por mis nalgas… ooohhh, apartándolas y dirigirlas hasta mi top… el cual bajo junto al sujetador y poso sus manos sobre mis senos, comenzando a acariciándomelos al tiempo que pellizcaba mis endurecidos pezones… aaahhh.

-"Ooohhhh... sigue, uuummm... no pares que por favor”, emitía entre exclamaciones de placer al mismo tiempo que yo misma apretaba su cabeza contra mis pechos.

Me notaba muy femenina... muy sensual, reposada sobre mis brazos con mi trasero hacia atrás y el de rodilla ante mi culo, me fue acariciando mis piernas bajando por mis muslos poniendo toda mi piel de gallina, me daban temblores del gusto que me estaba proporcionando, siendo una chica de 17 años.

Sus manos subieron de nuevo por debajo de la falda agarrando mis braguitas y muy suavemente las fue bajando a la vez que me fue besando mis nalgas, me las saco por una pierna levantando la otra aprovechando este para pasar su lengua por mi orificio. Se me quedo mirando y acto seguido soltó el corchete de mi falda… cayendo esta a mis pies, dejándome ahora si… con tan solo las medias de liga y en zapatos de tacón.

Los labios de José no de chupar mis nalgas, hurgar entre mi tanga llegando a mi orificio el cual me introducía su lengua al compás de ir metiéndome sus dedos… aaahhh, mientras su otra mano no dejaba de acariciarme mis muslos… uuummm.

-"Ahora me la vas a chupar toda… quiero sentir tu lengua de puta", me decía… mientras me ofrecía su miembro en mano.

Empecé a chupar de nuevo su polla me lleve al menos 15 minutos, tragando y pasándole la lengua por todo su tronco, lamiendo sus testículos al tiempo que escuchaba sus gemidos y estremecimientos, pensando este no aguanta más y en cualquier momento se va a correr. Dicho y hecho… y sin avisarme lanzo unos chorros de semen caliente y agrios al fondo de mí garganta, mientras sus manos me sujetaban por mi nuca y ni tan siquiera separarme a modo de tomar aire.

-"Trágate mi leche… trágatela toda… aaahhh… aaahhh… aaahhh", me dijo mientras lanzaba toda su leche.

Joder… no me quedo mas remedio de tragarme todo su semen… y no me digáis que toda saben igual, que eso es tan mentira como… “que los niños vienen de parís”, su semen sabía a leche agria no me quedo mas remedio como os he mentado que tragármela a pesar de las arcadas que comencé a sentir, pero me tenia bien sujeta. Cuando por fin me soltó… algunos de sus chorros se estrellaron sobre mi rostro, diluyéndose por mi mejilla hasta mi barbilla y caer a mis pechos… mmm, mi viejo amante José… gemía y me soltaba obscenidades.

  • "Joder... ooohhh, como lo haces parece que lo has hecho antes, ji ji ji… te ha gustado eh... vamos zorrita, sigue chupándosela a papa", me exclamaba mientras jadeaba.

Trataba tragar toda lo que podía, no podía perder ni una sola gota de semen, empezaba a chorrearme por mis labios bajando por mi barbilla, por mi cuello, bajando por mi cuerpo hasta mi vientre. Seguí chupando notando como volvía a recuperar su erección… mmm, como su duro tronco volvía a hincharse dentro de mí boca… ooohhh.

-"¡Uuummm… sigue, uuuffff… sigue, aaahhh… que maravilla bien la chupas, ooohhh... para, para, que ya me ha venido... que quieres que me de un infarto”, me soltó.

Habíamos disfrutado mucho en el día de mi cumpleaños, aunque me dio mucho placer e igual que yo a él, nuestra relación duro algo más de dos años… aunque lo deje un tiempo de ver, mas tarde nos encontramos demostrándome que su virilidad aun puede durar algunos años más, pero lo que más disfruto es con ese miembro en mi boca y hacer que obtenga su corrida… mmm, disfruto con toda esa lechecita caliente y cremosa… aunque agria.

Aunque os debo de confesar que él no solo ha sido mi único viejo amante, pues también he mantenido mas relaciones con otros maduros, ya que necesitaba ser penetrada por ambos orificios y él nunca se atrevió a follarme, por lo que tuve la necesidad de buscarme otros sementales… otros machos maduros, sabía bien de sobra que el parque me los daría… mmm, pero bueno eso será otras confesiones.

Os debo confesar para aquellos que piense que lo debía de haber denunciado… os debo confesar que nunca lo denuncie, eso sí como os he mentado previamente nos hemos vuelto a ver y he disfrutado más de una vez del sexo con él aunque sea con su hoy día su flácido miembro… mmm, pero el paso de los años ya han dejado mella en él y sobre todo en su polla… mmm, bueno besis a todos.

Pero bueno mis queridos lectores y lectoras no me enrollo más, hasta aquí llego mi confesión, de esta ardiente Sevillana que debe de marcharse hasta otra nueva confesión... pero si queréis saber más de mí, ya sabéis mandarme vuestro emails a…

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Mirad como bien sabéis y para los que no… yo solo publico mis confesiones en

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aunque lo tengo abandonado pero no por eso lo he borrado… es el único sitio por donde me podréis ver más natural, me refiero a mí blogs personal

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