Pasamos de un correo electrónico a cojer en su ofi
Lo que parecía un simple gesto de ayuda, hizo que mi tanga terminará en la alfombra de su oficina y sus testículos chocando contra mis nalgas.
Hola, tuve un poco de tiempo libre y aproveche para contarles una pequeña experiencia.
Todo comenzó por un correo electrónico, note por su forma de escribir que era un hombre letrado ya que tenía un don para escribir, y lo comprobé cuando hable con el. Por casualidades de la vida ese hombre había estudiado lo mismo que yo, pero con la diferencia de que él ya ejercía y dirigir un despacho.
No era complicado hablar con él, sabía perfectamente cómo escribir para hacer que surgiera una cosquillita entre mis piernas, charlar con él me encanto sabia como tratarme y consentirme, obviamente yo no perdía oportunidad para calentarlo haciendo videollamadas, y grabando videos eroticos para que disfrutara verme y aumentará su deseo de conocerme.
Creo que complacerlo tanto tuvo efectos positivos jeje ya que se tenia muchas ganas de verme. Para su fortuna eso ocurrió cuando estaba en periodo de exámenes, yo tenia problemas con una materia y en medio de una platica le conté sobre lo que se me dificultaba.
El amablemente me ofreció su ayuda diciendo que tenía unos libros muy buenos de ese tema, quedo muy formal de pasar por mi a mi escuela, con la condición de que llevara puesto un cachetero que le había enseñado en un video y le había fascinado. Por el temor a reprobar la materia acepte su ayuda, obvio sabía que debía verme coqueta para el,asi que ese dia me puse de lo más linda y un poco sensual para agradecerle visualmente por su amabilidad, además de que llevaba puesto ese cachetero que hacía que mi culo se viera mas cogible.
Al terminar mi última clase le llame para avisarle que ya había salido, respondió diciendo que ya estaba en el estacionamiento, por lo que me dirigí hacia donde estaba el. En cuanto lo vi procure mover más las caderas para excitarlo un poco, pero no lo conseguí en absoluto, él estaba de lo más normal, incluso apenas y se acercó a mi mejilla para saludarme.
Esto me llevó a tomarlo casi casi como reto personal y me propuse excitarlo a costa de lo que fuera. muy caballerosamente me abrió la puerta del auto por lo que aproveché para levantarme un poco la falda al entrar al coche, realmente no se si lo haya notado pero esas cosas imagino que excitan a los hombres jeje.
ya en el trayecto hacia su oficina íbamos platicando, yo dulcemente tome su mano y la empecé a acariciar mientras él seguía hablando, mientras mi mano izquierda le hacia cariñitos, mi otra mano desabrocho 2 botones de mi blusa exhibiendo un poco mis senos.
fue en ese momento cuando logre captar su atención, incluso haciendo que cambiara el tema de conversación para decirme que le encantaban mis tetas, al ver que había logrado que fijara su atención en mí con un tono más sexual, lleve su mano hacia mi pierna y fui guiando poco a poco hacia mi coñito.
ya con más confianza su mano empezaba a subir cada vez más, cuando uno de sus dedos rozó mi vagina por encima de mi cachetero, me levante un poco del asiento y acercando mi boca a su oreja le susurré sensualmente “traigo el cachetero con el que te he excitado hasta hacerte terminar”.
Después de que le dije eso, pase la punta de mi lengua por su oído, jugando sensualmente con ella, solo pude notar como un cosquilleo lo invadía a causa de lo que le empezaba a provocar.
Ya sin pena empezaba a tocarme a su voluntad, sus manos alternaban entre mis senos y debajo de mi cachetero. En ese momento hubiera deseado que no fuera manejando para sentir sus 2 manos sobre mi, para motivarlo un poco más mi mano llego hasta su pantalón para bajar el cierre y meter mi mano palpando encima de su ropa interior su verga.
La calentura del momento se incrementó bastante, al ir circulando vimos a lo lejos un hotel, por lo que haciendo mi calzon a un lado logro meterme uno de sus dedos en mi vagina mientras me decia si queria entrar con él a ese hotel.
Eran muchas las ganas de cojer que tenía, pero siempre había tenido la fantasia de cojer en una oficina, incluso en algun tiempo pense trabajar como secretaria, me imaginaba envuelta en un vestido sastre caminando hacia la oficina del jefe para tomar recado sentada en sus piernas y terminar complaciendolo con lo que me pidiera.
Desafortunadamente ese día no iba vestida como hubiera querido pero era mi oportunidad de cojer en una oficina y no la desaprovecharia.
Con su dedo dentro de mi provocandome pequeños gemidos, logre decirle que no quería entrar a ese hotel,que tenía una mejor idea y mejor siguiera manejando hacia su oficina, al parecer él entendió perfectamente a que me referia por que durante todo el camino me fue dedeando, incluso cuando baje del auto vi como gotas de mis fluidos estaban sobre el asiento de piel de su auto.
Ya en el edificio donde estaba su oficina, debíamos subir unas escaleras para poder llegar a ella. Creo que nunca lo había dicho pero esa es mi parte favorita de los hoteles/moteles, subir escaleras ya que puedes ir mostrando tu culo a quien te va a comer, para excitarlo más.
Lo hice tal como me gusta, al ir subiendo provocaba que mi falda se levantara para que el pudiera verme a su antojo, a mitad de las escaleras tomo mis nalgas con sus manos apretandolas muy placenteramente y abriendolas para acercar su nariz hacia mi rajita, al estar un poco más alta que él con una de mis manos sostuve su cabeza pegandola hacia mi cuerpo.
Ya no aguantaba mas, si por mi hubiera sido le sacaba la verga para que me cojiera en esas escaleras. Pero aun no llegaba el momento de disfrutar.
Seguimos subiendo y al entrar a su despacho tuvimos que ponernos serios y saludar a los que estaban ahí, no se si lo logramos por qué yo estaba muy sonrojada por lo prendida que estaba y él buscaba con qué cubrir su verga .
Ya en su despacho le dijo a su asistente que no lo molestara ni pasara llamadas ya que me daría una asesoría.
Tan pronto entramos a su oficina soltamos lo que teníamos en las manos y comenzamos a besarnos y tocarnos.
Después de un cálido reconocimiento corporal, empecé a desvestirlo poco poco, cual pareja de novios nos turnabamos para ir quitando una a una nuestras prendas, lo primero que me quito fue mi cachetero y después mi blusa.
Estando un poco más liberada y sin ropa lo fui conduciendo hasta su silla , y antes de que se sentara le desabroche el cinturón y desabotono su pantalón, después de eso lo aventé ligeramente para que se sentara y poder empezar a mamarle la verga, me esmere demasiado para darle la mejor mamada de su vida, succionaba suavemente su verga y mi lengua jugaba con cada milímetro de su piel, estuve un buen rato mamandosela, quería ser yo la que llevara el ritmo esta vez así que después de lubricar su verga con mi saliva me levante y dándole la espalda me fui clavando su verga poco a poco ya que mi vagina es muy estrecha y por mas lubricada que este a veces cuesta trabajo que me penetren de golpe.
Cuando tuve su verga dentro de mi, me agarre del escritorio y empecé a mover mis caderas en círculos alternando con pequeños saltos sobre su pene, en esa posición podía sentir como su verga se amoldaba perfectamente a mis paredes vaginales, y el no perdía oportunidad de darme pequeñas nalgadas que por cierto me excitan muchísimo.
Después de estar clavándome esa rica verga a mi antojo y apretarla con mis músculos vaginales a mi placer, me levante para seguir cogiendo pero ahora en un sillón que estaba en su oficina , me levante y tomándolo de la mano lo lleve hasta ahí, yo me puse a 4 en ese sillón ofreciéndole mi vagina para que la usara a su antojo, de inmediato el me penetro y me empezó a bombear de lo mas rico, uno de mis sonidos favoritos es cuando la verga sale y entra de la vagina.
Mientras el me penetraba mis dedos se dirigieron a mi clítoris, provocándome un orgasmo que hizo que contrajera mi vagina por algunos segundos, eso lo excitó más y pude sentir como su verga empezó a palpitar hasta que terminó dentro de mi , pude sentir como su leche salía y llenaba el condon.
Para recuperarnos un poco nos sentamos en ese sillón, pero quería terminar con algo.... Como traía mi falda aun, me puse mi blusa, tome un pequeño cuaderno que estaba en el escritorio y me senté sobre sus piernas, pregúntale qué pendientes tenía para más tarde, porque tenía ganas de que me invitara a beber... Unos chorros de su esperma.
Si llegaron hasta aquí les agradezco por haberlo hechos. Si quieren ponerse en contacto conmigo no duden en hacerlo. Besitos traviesos.