Parking Supermercado
No es la primera vez que cuando vas a realizar tus compras en el supermercado que frecuentas normalmente en el parking te aborda una mujer extranjera pidiéndote que le des algo para comer, se valen de estar en el punto donde vas a dejar el carrito y si cuela le das el euro o los 50 céntimos de euro que has puesto en él, no?
Parking Supermercado
No es la primera vez que cuando vas a realizar tus compras en el supermercado que frecuentas normalmente en el parking te aborda una mujer extranjera pidiéndote que le des algo para comer, se valen de estar en el punto donde vas a dejar el carrito y si cuela le das el euro o los 50 céntimos de euro que has puesto en él, no?
A quien no le ha pasado esto muchas veces y has pensado en la pasta que pueden sacar con esto, pues bien a mi ya cansado de que me ocurriera tantas veces y siempre con la misma persona me atreví a dar un paso que nunca olvidaré, pues no es normal que me atreva a hacer este tipo de cosas, pero ese día estaba un poco cabreado por el día que había tocado vivir y quizás por ello actué de la forma que a continuación relato.
Llegué al parking del supermercado como solía hacer cada fin de semana como es normal para casi todo el mundo, aparque mi coche y me cogi un carrito para entrar el super, realicé mi compra como siempre y salí hacia mi coche, descargué la compra y me dirigí a lugar donde dejas el carrito para recuperar tu moneda, en ese momento es cuando se presento ella, era una mujer joven, morena y atractiva, vestía muy corriente
por no decir mal, es lógico porque si estas pidiendo no puedes ir de lujo, el caso es que aquella mujer tenia algo que me atraía y ya la conocía de otras veces anteriores por coincidir en el mismo sitio y siempre le había dado la moneda del carrito.
Como he comentado anteriormente me encontraba un poco contrariado, molesto o mas bien cabreado por situaciones que te ocurren en la vida, total que no era mi día, fue entonces cuando dirigiéndose a mi sonriendo me pidió que la ayudara para poder comer y que tenia hijos que alimentar ( el rollo de siempre), me quedé mirándola de arriba abajo con curiosidad y sin pensarlo le dije mirándole a los ojos que podía ganar mas dinero si se dedicaba a otra cosa en lugar de pedir, ella se quedo parada sin decir nada y a continuación le dije que podía hacer favores a la gente, que con eso ganaría mas dinero.
En un castellano un poco extraño entendí que me decía como si no podía trabajar por ser extranjera, entonces le contesté que si me hacia un favor le daría 20 por hacer lo que le pidiera, me dijo que por ese dinero haría lo que fuera, fue cuando se me pasó por la cabeza lo que había pensado en otras ocasiones con ella.Me acerque a ella dándole la moneda y le susurré al oído que me la chupara, cogio la moneda y se alejo sin decir nada dirigiéndose apresuradamente a otras personas que dejaban su carrito en ese momento.
Me di la vuelta y me dirigí hacia mi coche, pensaba que me había aprovechado de la situación y me sentía sucio por querer abusar de mi situación, y si era una mujer con principios morales y le era fiel a su marido, y si por circunstancias de la vida se vio obligada a pedir, a todos nos puede pasar alguna vez no?, me sentía mal.
Arranque mi coche y me aleje del lugar, pasé a su altura mirándola y ella se quedó mirándome también, la saludé con la mano y ella me contesto también, continué y mirando por el retrovisor trasero vi como levantaba la mano y corría detrás de mi.
Intentaba decir algo que no adivinaba, paré inmediatamente y esperé a que llegara a mi altura, baje la ventanilla y se acercó a mi, entonces fue cuando me dijo " 20"?, le que si que cuando ella pudiera, "ahora", me dijo, subes y vamos a otro sitio quieres?, se subió a mi lado y arranque rápidamente por si se arrepentía.
Una vez dentro y muy nervioso le pregunte como se llamaba, me dijo que Nadia, que era Rumana y que hacía 3 meses que estaba en España porque en su país no podían vivir, que su marido estaba en otro lugar trabajando en el campo y ella vivía con su hijo, su hermana y mas gente en un piso, también me contó que le habían propuesto dedicarse a la prostitución pero que ella no quería a no ser que no tuviera mas remedio.
Yo la escuchaba y mientras tanto sin pensar me dirigí hacia mi chalet que tengo en una urbanización cercana a la ciudad donde vivo en invierno, y en verano paso mis días de vacaciones en este lugar, estábamos a 5 minutos del súper, es por eso que cuando terminó de relatarme un poco su historia ya habíamos llegado a mi chalet, paré en la puerta y entonces ella me contesto que donde estábamos, le dije que en mi casa y que si no le importaba lo haríamos ahí, la noté un poco asustada por la situación y le pregunté que si no quería nos íbamos y que no pasaba nada, no dijo nada y entonces entre con el coche al garaje y paré el motor.
Bajamos y descargando la compra del maletero entre los dos entramos en la casa dejamos la compra en la cocina y le comente que me ayudara a colocar las cosas en la nevera y despensas para relajarnos, una vez colocado todo estábamos sudados hacia mucho calor y le propuse que si quería ducharse, ella me contesto que hacia 2 días que se duchaba y que le apetecía mucho, entonces le dije que me acompañara al baño para que se tomara esa ducha, le di una toalla y entro en el baño cerrando la puerta.
Yo esperé bastante excitado por la situación y pensando en como sería su cuerpo que a través de sus ropas se adivinaba muy exuberante, pasarían unos 10 minutos hasta que la puerta de baño se abrió, cuando salio y la vi delante de mi con la tolla enrollada en su cuerpo y su cabello moreno, largo, húmedo y descalza, me sacudió una excitación que me hizo estremecer.
Con la ropa en la mano me dijo que si podía tenderla pues estaba sudada de estar todo el día al sol, le propuse lavarla y secarla, que en 30 minutos la tendría limpia y seca, accedió a mi propuesta y la puse a lavar inmediatamente.Ella se quedo sentada en el sofá de la sala mientras yo ponía en marcha la lavadora, le dije que si quería beber algo diciéndome que solo agua pues tenia mucha sed, después de ponerle la bebida y ponerme una cerveza para mi, me senté a su lado preguntándole como se encontraba, me dijo que muy bien, le había sentado estupendamente la ducha y estaba mas relajada.
Fue entonces cuando le dije que como la ropa iba a tardar unos 30 minutos mas o menos yo me iba a duchar también, asentó con la cabeza y me fui al baño; estando en la ducha pensaba en ella que hacía poco tiempo había estado allí mismo desnuda y me excitaba el pensarlo, tardé poco en ducharme, deseaba salir para verla y empezar nuestra aventura.
Cuando salí de la ducha y al dirigirme a la sala me la encontré tumbada en el sofá adormilada y acurrucada como una niña, me acerqué a ella con sigilo y contemplándola muy de cerca pude ver lo hermosa que era y lo a gusto que dormía, acerque mi boca a la suya besándola suavemente y no se dio cuenta, me atreví a mas, la toalla estaba ligeramente entreabierta entre sus muslos y lentamente la separé hasta observar su entrepierna que estaba cubierta de abundante pelo negro y rizado, era bastante velluda.
La seguí tocando por las piernas observando su piel morena y sus pies pequeños bien formados, sus muslos pretos y con algunas estrías debido seguramente a el embarazo que tuvo, seguí explorando debajo de la toalla poco a poco, subiendo desde el pubis logrando ver su ombligo bonito y profundo, continué hacia arriba hasta encontrarme con sus pechos, entonces como la toalla estaba sujeta a esa altura y al intentar quitarla ella abrió los ojos y me miró, no dijo nada y volvió a cerrar aquellos bonitos y grandes ojos verdes.
Y una vez abierta la sujeción de la toalla pude contemplas sus pechos desafiantes ante mi, sus pezones erectos de color marrón oscuro y la aureola grande mas suave del mismo color, los pechos eran grandes y bastante bien formados ligeramente caídos pero muy eróticos, toque sus pechos con suavidad para no hacerle daño y acaricie sus pezones notando que se ponían duros, cogí sus pechos con las dos manos apretándolos cada vez mas, pensaba que no podría seguir impasible con ese meneo que daba a sus pechos.
No quería demorar mas tiempo ese placer y destape completamente su cuerpo quedando desnuda ante mis ojos que dilatados de lujuria no dejaban de observar aquel cuerpo moreno y joven que tenia para mi, entonces ella me volvió a mirar sonriendo y me dijo que aquello no era lo convenido pero que no le importaba pues estaba cómoda y excitada, me extendió los brazos cogiéndome de la nuca y acercando mi cabeza hacia sus labios me besó son ternura hundiendo su lengua en mi boca con mucha suavidad, yo le respondí con la misma ternura y sin ninguna brusquedad por temor a asustarla.
Nos fundimos en un abrazo mucho mas efusivo y fui acariciando su cuerpo desde sus pechos hasta sus piernas lentamente, no quería llegar a tocar su entrepierna hasta estar seguro de que ella me lo pidiera, yo permanecía vestido sobre ella deseando liberar mi cuerpo de todo y quedar desnudo también, entonces me cogió de la camisa quitándomela con suavidad dejando mi torso desnudo y me deje caer sobre sus pechos notando su calidos pezones que tenia erectos, me beso con mas fuerza esta vez clavando sus uñas en mi espalda, estábamos muy excitados los dos y nuestra respiración iba en aumento calentando nuestros cuerpos y sudando a la vez.
Entonces me puse de pie sin apartar la mirada de su cuerpo y me quité el pantalón y los calzoncillos liberándome así de la presión que ejercía sobre mis genitales, quedé desnudo frente a ella y tocándome el pene le dije que me apetecía comerle el chocho que todavía no había visto de cerca y eso me excitaba mucho, en ese momento abrió sus piernas lentamente hasta que pude contemplar aquella maravilla que pedía ser lamida hasta la saciedad.La volví hacia mi y levantándole las piernas colocándolas sobre la mesilla centro que tenia entre los sofás me coloqué entre sus piernas de rodillas y comencé a darle pequeños besos en las ingles, muslos, ombligo y todo alrededor de su chocho sin tocarlo, notaba su excitación y su olor que llegaba hasta mi cada vez que levantaba su pelvis como queriendo que llegara al punto de encuentro que yo hacia demorar con mucho esfuerzo.
Teniendo mis labios cerca de su vagina y viendo como se abría cada vez que respiraba profundamente, besé en el centro de su excitación notando lo húmeda que estaba y pasando mi lengua entre sus labios menores degusté su sabor y su olor penetraba en mi como un manjar dispuesto a ser engullido, hundí mi lengua en su interior buscando el clítoris para darle el mayor placer que tanto deseaba, lamiéndola, besándola y mordisqueando su clítoris metí un dedo en su vagina notando lo mojada que estaba, metía y sacaba el dedo al mismo tiempo que se la chupaba toda mezclando mi saliva con sus jugos que cada vez eran mas abundantes y se convulsionaba cada vez mas hasta que alcanzo el orgasmo que noté por sus grititos de placer y sus piernas apretándolas sobre mi cabeza.
Se quedó un poco relajada y temblorosa, yo mientras tanto me quedé mirando como su vagina mojada se dilataba y contraía, acerqué mi boca a la suya besándola con pasión y presionando mi pene sobre su monte de venus para que notaré como me había puesto esa situación, me cogio del pene mientras la besaba y suavemente me lo acariciaba de arriba abajo, su mano resbalaba sobre mi pene que se encontraba muy mojado y deseando que llegar al final, me pidió que me levantara, y poniéndome de pie delante de ella comenzó a acariciarlo muy despacio mirándola con mucha atención como si fuera la primera vez que veía una, le pregunté si le gustaba, me dijo que le atraía como se ponía gorda y roja cuando la tocaba que pocas veces había tenido ocasión de tenerla tan cerca cuando estaba así de dura, me comentó que su marido se corría enseguida y no le daba tiempo a verla en ese estado, yo estaba encantado con la situación pero deseaba algo mas, le pedí que me la chupara y sin mediar palabra se la metió en la boca lentamente chupándola con avidez mientras me masajeaba los testículos.
Aquel momento era sublime y me encontraba en la gloria viendo como la lamía con ternura mientras me miraba a los ojos, aquellos ojos verdes tan bonitos que me excitaban cada vez mas, no podía resistir mas tiempo por temor a correrme en su boca y no poder penetrarla a continuación, así que le pedí que parara un momento y me fui a la habitación a por un preservativo, ella se levanto y me siguió entrando conmigo, mientras yo buscaba el condón ella se tumbo en la cama boca abajo, me puse detrás de ella mientras me lo colocaba y me tumbé encima buscando su culito con mi pene, enseguida note ese calor típico cuando penetras en un chocho caliente, con ritmo lento y continuo y cada vez mas rápido empecé a menearme mientras ella iba subiendo el culo con cada embestida que le propinaba.
Así estuvimos un ratito, pues yo no quería correrme tan pronto y alargar lo máximo ese momento, le di la vuelta sin sacarla quedándose abierta delante de mi viendo sus pechos y su sonrisa preciosa como pidiéndome mas, mas y mas.No me hice de rogar y continué sobre ella penetrándola con furia y con golpes cada vez mas bruscos, noté que se ponía colorada y entre grititos me decía, " ahorra ahora, ya,ya", fue entonces cuando me di cuenta que se corría y yo no pudiendo resistir la excitación me corrí al mismo tiempo que ella.
Nos quedamos un rato tumbados en la cama abrazados con las piernas entrelazadas mientras nos besábamos en la boca, estábamos extenuados de tanto ajetreo y la excitación que habíamos sentido los dos, nos levantamos y fuimos a la ducha sin pensarlo, teníamos calor y las gotas de sudor resbalaban por nuestros cuerpos, nos duchamos juntos, frotándonos el uno al otro, contemplé su desnudez por última vez cuando la sequé con la toalla, me quedé con su imagen para siempre.
Salí de la ducha para coger sus ropas que estaban en la lavadora secadora y se las di para que se vistiera, mirándola como lo hacía pude observar que no tenía muchas ganas de marcharse, se vistió y cogiendo el coche la acompañé de nuevo al Parking del super, no me olvidé de darle 50 por lo menos, ella me miró cogiendo el dinero y me dijo que lo necesitaba pero que si no fuera así no lo aceptaría después de haber disfrutado tanto conmigo.
Nos dimos un beso largo en la boca y salió del coche mirándome y sonriendo al mismo tiempo, no dejo de pensar en ella después de ese día, he vuelto al mismo lugar y hasta la fecha no la he vuelto a ver, no cesaré en mi empeño en volver a verla, si ocurre ya os lo contaré.