Paranormal . Capítulo 28 : Sólo tuyo
Lo que sucede en esta parte de la historia seguro lo esperabais . Clement ¡¡¡ por fin se va a dejar hacer el amor por Miguel !!! Y es que nuestro humano desea sentirle de ese modo . Pero no todo es de color de rosa cuando te interrumpen el momento clave . ¡ Últimos capítulos !
Dos semanas después , finales de mayo de 2012 .
El horror había pasado de la misma forma en que había ocurrido . Pero todo aquello había sido tan aterrador y espeluznante , que nadie en Dama del Sol podría olvidarlo nunca , por más que con el tiempo se superase .
Miguel se hallaba entre los brazos de Clement , tumbados sobre la cama de su francés en aquella tarde sorpendentemente cálida y soleada , tal y como los partes meteorológicos indicaron . Sin hablarse , sintiéndose el uno al otro , expresando con el suave tacto de las caricias nada serias y las miradas penetrantes ese profundo amor que ambos se daban , descansando de sus estudios universitarios . Pero la mente del hijo de Blanca y Leandro retrocedió a hacía quince días , como si fuera morboso recordar todo eso .
Había tenido que ingresar en el hospital de Beltrán de Allende por segunda vez , a pesar de la atención recibida por el servicio médico del Ministerio de Asuntos Mágicos . Era obvio teniendo en cuenta la investigación policial en la estuvo trabajando su padre , paralela a la secreta del Ministerio . Le vendaron la cabeza , le pusieron un collarín y notó un deja vu , regresando a su memoria el momento en que Clement lo salvó de ser atropellado . A las pocas horas , llegaron sus padres . Blanca serena pero salida de la histeria que produce a una madre la noticia de que su hijo había sobrevivido al ataque de un asesino , y Leandro berreando con tanta fuerza que casi se le iban a salir los mocos .
En total estuvo allí cinco días , recuperándose del golpe que la puñetera de Lilith le había dado para raptarlo . Como era de esperarse , Clement fue a cuidarlo . Y le contó que la primera mujer demonio fue condenada a cadena perpetua en la cripta de una cárcel medieval para el resto de su eterna y ya tormentosa existencia .
No sigas pensando en eso , amor - una vez más , Clement le leyó la mente , pero a cambio ( gracias a Eneas ) había aprendido unos truquillos espirituales para bloquearla cuando quisiera .
No puedo evitarlo , Clement . Estuvimos a punto de morir . Hace días que fueron los funerales . No puedo desaparecer eso de un plumazo .
Lo sé . Y te quiero decir que . . .
Miguel le puso un dedo en sus labios para callarlo .
No sigas con la idea esa de mi humanidad cuando ya he tomado mi decisión , franchute . He escogido amarte , vivir mi vida a tu lado siendo como tú , y no me harás cambiar de opinión .
No quiero que pierdas una vida sin disfrutar lo que yo no pude - Clement le besó el dedo y Miguel recorrió con él el cuello de su chico .
Esta es la vida que quiero compartir y vivir contigo , Clement . Pero me falta algo en lo que tú no has pensado .
¿ El qué ?
Leelo en mi mente .
Miguel puso esa cara indicadora de la lujuria . Clement abrió los ojos y se aterró .
No - le dijo de inmediato .
Anda , baby , que quiero jugar contigo a los médicos . . .
¡ No , no y no !
El hombre lobo se apartó de su amado como si éste le fuera a medio violar .
No me vuelvas a pedir eso nunca más , Mikey .
¿ Y si me dejas demostrarte que yo no te haré daño en el sexo ?
Clement se relajó . Su novio no le haría sufrir jamás en ese tema .
Pero ve despacio .
Tu deseo es una orden , lobo mío .
Con un placaje digno de un jugador de rugby , Miguel se le vino encima . Empezó a besarlo lentamente por la frente , los párpados , las mejillas , los labios , haciendo que el amor de su vida se estremeciera entre sus brazos , olvidando esa noche tormentosa del siglo XVIII . Le quitó una a una , sin prisas , toda su ropa mientras su contrario lo observaba embelesado . Entonces Clement se dejó llevar , y casi le arrancó a su Mikey la ropa porque ardía en el deseo de dejarse poseer .
Estuvieron pronto iguales , anhelándose , tocándose sus pectorales , acariciándose sus muslos , besándose como si no hubiera mañana y llegase el fin del mundo en ese instante . Clement miró a Miguel con determinación .
Mikey . . . hazme tuyo . No te detengas . Te amo .
Te quiero - le respondió su amado humano .
Miguel profundizó dos de sus dedos en la entrada de Clement , afanándose en hacerlo gemir , consiguiéndolo . Reemplazó sus dedos por su ya doloroso miembro erecto , y entró lentamente en él . Clement se agarró con fuerza a su espalda , sin arañarle , y soltó un grito . Miguel se movió lentamente , con embestidas suaves pero intensas , hasta que su francés no pudo más y liberó un gemido muy intenso . Llegaron al clímax y entonces . . .
- ¡ Huy , lo siento ! - Dimitri abrió la puerta y al verles así , desapareció .
La pareja suspiró y se echó a reir .